Nosotros follamos poco y muy soso. Ha sido siempre así, aunque antes follábamos más porque yo insistía y siempre iniciaba el tema. Con el paso del tiempo, uno se cansa de insistir y de que le digan que no. Además, luego, al ser tan soso el tema, te quedas con una sensación rara y poco a poco se te van quitando las ganas de intentarlo. Eso sí, cachondo estoy todos los días. Paja va y paja viene. Ella lo sabe pero no hay cambios. Así que el panorama no es muy alentador. Cada vez le doy más vueltas a complementar el tema fuera, pero de momento nada.