Adoro lo ocurrido desde entonces

OlgaCross

Nuevo miembro
Desde
22 Dic 2025
Mensajes
2
Reputación
14
Ni siquiera sé como recalé en casa de Thomas aquel verano del 94. Era un inglés amigo de la familia y muy poco más joven que mis padres, profesor de arte en un instituto y dibujante/pintor por encargo al que un golpe de fortuna le dio lo suficiente para pagar las cuotas de la seguridad social para asegurarse una pensión y comprarse una casita en el sur donde vivía retirado y dedicado a la pintura pero sin agobiarse por las ventas. Nunca supe nada seguro pero recuerdo siendo un adolescente que en una merienda en la casa de verano en el pueblo de mis abuelos haber visto su mano revoloteando sobre el cuerpo de mi madre. No debió ir a más porque la amistad se mantuvo y a día de hoy, con mis padres divorciados ha seguido manteniendo hasta el punto de que a mis 19 años recién cumplidos aquel verano es en lo único que estuvieron de acuerdo decidiendo que pasaría un par de meses en el sur, en casa de Thomas, con el inglés como único lenguaje.
La casa de Thomas en la provincia gaditana tenia una pequeña huerta o jardín en la parte trasera con un pilón para el riego, lo suficientemente grande como para pasarse la mañana leyendo sentado dentro a remojo a la sombra de media docena de naranjos. A eso de las cinco, solía tumbarme una hora o poco más tomar el sol. Aunque a mi me parecía demasiado mayor Thomas tenía entonces cincuenta años, los mismos que yo ahora, y a los tres días de mi llegada ya me había presentado a algunas de sus amistades, casi todas femeninas e inglesas, y aunque reconocía que alguna de ellas era muy atractiva me resultaban mayores como para tener fantasías o algo más con ellas.
Por las noches tras la cena charlábamos y me hacía preguntas sobre lo que me parecían sus amistades y aprovechaba a decirme que tenía Información de que a alguna de ella yo la gustaba y bastaría con prestar un poco más de atención a sus insinuaciones si quería tener alguna aventura con alguna de ellas. A continuación y riendo, me dijo que bueno, dada mi edad podría tener una aventura con cada una de ellas si yo quisiera.
Llevaba unos días en su casa. Todos ellos me daba crema solar en los lugares más inaccesibles para mi y la extendía por mi espalda y pantorrillas. Uno de los días pensé que quizás se entretenía demasiado en las piernas pero no le di mayor importancia. Tampoco cuando para extenderla mejor metía sus manos entre las perneras de mi bañador dando crema en lugares donde difícilmente iba a quemarme el sol.... pero lo cierto es que en esos casos había momentos que comenzaba a excitarme. Era sábado y hacía siete días de mi llegada; estaba tumbado en una hamaca después de comer y Tatum, una amiga de Thomas y a la que conocí el día de mi llegada estaba en otra hamaca frente a mi tomando el sol completamente desnuda. Tatum tenía 61 años y entraba dentro del grupo que consideraba muy mayores (era bastante más que mi madre que todavía no había cumplido los cincuenta) y que no me atraían aunque hacía un par de días que comenzaba a ver en ella algunos atractivos. Me llamó la atención dos días antes en esa misma circunstancia observar que su sexo estaba totalmente depilado y oculto tras mis gafas de sol la había observado detenidamente.
Thomas inició el ritual de darme protección en la espalda y aquel viernes sus dedos se aventuraron un poco más entre los pliegues de mi bañador, fue entonces cuando Tatum apuntó la posibilidad de dejarme una de las bragas de sus bikinis; decía ella que cada día ponía el borde de mi bañador a una altura diferente y finalmente tendría varias marcas del sol en mis pantorrillas..... dicho y hecho, Thomas la preguntó donde estaban y sin consultarme dio por hecho que yo usaría esa prenda. Fueron unos minutos intensos, largos, y también un poco tensos. Yo no sabía qué decir, allí estaba Thomas al lado mío con una braga tanga evidentemente femenina por el tipo de "encaje" que llevaba en la parte frontal en su mano y yo sin atrever a moverme porque era consciente de que acaba de empalmarme como un burro.... Creo que Thomas entendió mi problema y dejando la braga sobre la hamaca pretextó entrar a la casa en busca de algo. Tatum se volvió para tomar el sol en la espalda y a toda prisa cambié mi bañador por aquella diminuta prenda.
Volví a a mi posición inicial y también pretextando cierta incomodidad Tatum regresó a su posición al tiempo que regresaba Thomas. De nuevo inició el rito de la protección solar en mi espalda, tardó en llegar a las pantorrillas pero tras masajearlas lenta y concienzudamente extendió un poco de crema en mis nalgas.... me preocupaba que se diera cuenta pero me empalmé de inmediato y por primera vez en mi vida comencé a preguntarme si sería gay por lo que me estaba ocurriendo. El tiempo se me hacía eterno, no sabía cuanto llevaba así pero era consciente de que mi polla se había salido por un lateral de la tanga y mi preocupación consistía en si Thomas se habría dado cuenta.... Era yo quien parecía no haberse dado cuenta que uno de los dedos de Thomas estaba jugando alrededor de la aureola de. mi ano y yo comenzaba a dar signos de inquietud al mover involuntariamente mis nalgas; no sé en qué momento sentí la mano de Thomas meterse entre mis nalgas y agarrar suavemente mi polla acariciándola lentamente.... ayudándose de una mano me hizo volver lentamente, Tatum no estaba en su hamaca, se había sentado en una silla junto a nosotros y con las piernas separada se acariciaba el coño sin pudor mientras Thomas se inclinaba sobre mi y comenzaba a lamer y succionar mis pezones.... ¡Joder! a punto estuve de correrme, fue deslizando su lengua por mis pecho muy despacio y Tatum continuaba masturbándose y de vez en cuando se inclinaba junto a nosotros y pasaba entre mis labios sus dedos impregnados de sus jugos... algo húmedo rodeó mi polla, Thomas estaba comenzando a hacerme una mamada y en apenas dos minutos estallé en su boca, una corrida abundante como no recordaba haber tenido nunca.
Thomas continuó lamiendo mi polla e inició el camino inverso con sus labios para volver a lamer y succionar mis pezones, Tatum estaba tan cerca de nosotros y se frotaba con tal intensidad que gotas de sus jugos saltaban sobre mi cara y mi pecho. Thomas estaba cada segundo más caliente y yo comenzaba a empalmarme de nuevo y tan caliente que estaba dispuesto a todo y sucedió lo que tenía que suceder aunque no sé relatar exactamente cómo: Tatum estaba en cuclillas sobe mi cara y yo lamía su coño torpemente como podía mientras ella sujetaba mi cabeza y apretaba mi cara contra su coño, Thomas estaba otra vez lamiendo y succionando mi glande, a ratos ácido y a ratos amargo mi lengua estaba cada vez más ávida de los jugos de Tatum. Thomas apuntó que allí estábamos incómodos y nos fuimos a su dormitorio, en menos de quince minutos había vuelto a empalmarme; apenas sobre la cama Tatum se sentó sobre mi metiéndose mi polla hasta el fondo y llevando mis manos a sus nalgas indicándome con ello que la ayudase a cabalgarme. Mi experiencia se reducía a dos polvos que había echado con una amiga de la pandilla y que no habína resultado importantes para ninguno de los dos pero lo que estaba experimentando era diferente: sentía como algo dentro de coño de Tatum, quizá unos músculos internos se movían agarrando mi polla mientras ella danzaba sobre mi haciendo que mi polla entrara y saliera de ella a toda velocidad. Recuerdo oírla decirme: aguanta, no te vayas..... aguanta.... Thomas se había arrodillado junto a mi cabeza y moviendo su polla con la mano acercaba la punta de su glande a mis labios... fue un acto reflejo, no pude resistirme y la metí en mi boca y al igual que había hecho él antes comencé a lamer y succionar...... solo dejé de mamar un segundo para decir que no aguantaba más, el cuerpo de Tatum apenas se movía, solo lo hacían ligeramente sus nalgas pero era suficiente para tenerme a punto de estallar. Thomas dijo algo así como que la mamaba bien, sentí palpitar su polla en mi boca e inmediatamente sentía su "lefa" golpeando mi paladar, sin poder evitarlo aferré mis manos a las nalgas de Tatum y comencé a vaciarme dentro de ella.... era la primera vez en mi vida que había mamado una polla y el sentir como se vaciaba en mi boca me estaba excitando como nunca me había sentido y en apenas unos minutos acabó todo. Un inmenso estallido de placer que había hecho que una corriente eléctrica recorriese mi espina dorsal como un calambre, todavía estaba mamando la polla de Thomas y Tatum, ya habiéndome descabalgado limpiaba con su lengua sus jugos y los míos de mi polla, Thomas, había apartado su polla de mis labios e inclinado sobre mi me besaba en la boca y lamía mi cara. Fue Tatum quien sugirió de hacer una cena con amigos en casa esa misma noche, Thomas estaba encantado pero yo tras dos impresionantes corridas no sabía si estaría a la altura.... ahora sonrío, no sabía que era el inicio de unas excepcionales vacaciones.
 

Archivos adjuntos

  • Yo 11.jpg
Ni siquiera sé como recalé en casa de Thomas aquel verano del 94. Era un inglés amigo de la familia y muy poco más joven que mis padres, profesor de arte en un instituto y dibujante/pintor por encargo al que un golpe de fortuna le dio lo suficiente para pagar las cuotas de la seguridad social para asegurarse una pensión y comprarse una casita en el sur donde vivía retirado y dedicado a la pintura pero sin agobiarse por las ventas. Nunca supe nada seguro pero recuerdo siendo un adolescente que en una merienda en la casa de verano en el pueblo de mis abuelos haber visto su mano revoloteando sobre el cuerpo de mi madre. No debió ir a más porque la amistad se mantuvo y a día de hoy, con mis padres divorciados ha seguido manteniendo hasta el punto de que a mis 19 años recién cumplidos aquel verano es en lo único que estuvieron de acuerdo decidiendo que pasaría un par de meses en el sur, en casa de Thomas, con el inglés como único lenguaje.
La casa de Thomas en la provincia gaditana tenia una pequeña huerta o jardín en la parte trasera con un pilón para el riego, lo suficientemente grande como para pasarse la mañana leyendo sentado dentro a remojo a la sombra de media docena de naranjos. A eso de las cinco, solía tumbarme una hora o poco más tomar el sol. Aunque a mi me parecía demasiado mayor Thomas tenía entonces cincuenta años, los mismos que yo ahora, y a los tres días de mi llegada ya me había presentado a algunas de sus amistades, casi todas femeninas e inglesas, y aunque reconocía que alguna de ellas era muy atractiva me resultaban mayores como para tener fantasías o algo más con ellas.
Por las noches tras la cena charlábamos y me hacía preguntas sobre lo que me parecían sus amistades y aprovechaba a decirme que tenía Información de que a alguna de ella yo la gustaba y bastaría con prestar un poco más de atención a sus insinuaciones si quería tener alguna aventura con alguna de ellas. A continuación y riendo, me dijo que bueno, dada mi edad podría tener una aventura con cada una de ellas si yo quisiera.
Llevaba unos días en su casa. Todos ellos me daba crema solar en los lugares más inaccesibles para mi y la extendía por mi espalda y pantorrillas. Uno de los días pensé que quizás se entretenía demasiado en las piernas pero no le di mayor importancia. Tampoco cuando para extenderla mejor metía sus manos entre las perneras de mi bañador dando crema en lugares donde difícilmente iba a quemarme el sol.... pero lo cierto es que en esos casos había momentos que comenzaba a excitarme. Era sábado y hacía siete días de mi llegada; estaba tumbado en una hamaca después de comer y Tatum, una amiga de Thomas y a la que conocí el día de mi llegada estaba en otra hamaca frente a mi tomando el sol completamente desnuda. Tatum tenía 61 años y entraba dentro del grupo que consideraba muy mayores (era bastante más que mi madre que todavía no había cumplido los cincuenta) y que no me atraían aunque hacía un par de días que comenzaba a ver en ella algunos atractivos. Me llamó la atención dos días antes en esa misma circunstancia observar que su sexo estaba totalmente depilado y oculto tras mis gafas de sol la había observado detenidamente.
Thomas inició el ritual de darme protección en la espalda y aquel viernes sus dedos se aventuraron un poco más entre los pliegues de mi bañador, fue entonces cuando Tatum apuntó la posibilidad de dejarme una de las bragas de sus bikinis; decía ella que cada día ponía el borde de mi bañador a una altura diferente y finalmente tendría varias marcas del sol en mis pantorrillas..... dicho y hecho, Thomas la preguntó donde estaban y sin consultarme dio por hecho que yo usaría esa prenda. Fueron unos minutos intensos, largos, y también un poco tensos. Yo no sabía qué decir, allí estaba Thomas al lado mío con una braga tanga evidentemente femenina por el tipo de "encaje" que llevaba en la parte frontal en su mano y yo sin atrever a moverme porque era consciente de que acaba de empalmarme como un burro.... Creo que Thomas entendió mi problema y dejando la braga sobre la hamaca pretextó entrar a la casa en busca de algo. Tatum se volvió para tomar el sol en la espalda y a toda prisa cambié mi bañador por aquella diminuta prenda.
Volví a a mi posición inicial y también pretextando cierta incomodidad Tatum regresó a su posición al tiempo que regresaba Thomas. De nuevo inició el rito de la protección solar en mi espalda, tardó en llegar a las pantorrillas pero tras masajearlas lenta y concienzudamente extendió un poco de crema en mis nalgas.... me preocupaba que se diera cuenta pero me empalmé de inmediato y por primera vez en mi vida comencé a preguntarme si sería gay por lo que me estaba ocurriendo. El tiempo se me hacía eterno, no sabía cuanto llevaba así pero era consciente de que mi polla se había salido por un lateral de la tanga y mi preocupación consistía en si Thomas se habría dado cuenta.... Era yo quien parecía no haberse dado cuenta que uno de los dedos de Thomas estaba jugando alrededor de la aureola de. mi ano y yo comenzaba a dar signos de inquietud al mover involuntariamente mis nalgas; no sé en qué momento sentí la mano de Thomas meterse entre mis nalgas y agarrar suavemente mi polla acariciándola lentamente.... ayudándose de una mano me hizo volver lentamente, Tatum no estaba en su hamaca, se había sentado en una silla junto a nosotros y con las piernas separada se acariciaba el coño sin pudor mientras Thomas se inclinaba sobre mi y comenzaba a lamer y succionar mis pezones.... ¡Joder! a punto estuve de correrme, fue deslizando su lengua por mis pecho muy despacio y Tatum continuaba masturbándose y de vez en cuando se inclinaba junto a nosotros y pasaba entre mis labios sus dedos impregnados de sus jugos... algo húmedo rodeó mi polla, Thomas estaba comenzando a hacerme una mamada y en apenas dos minutos estallé en su boca, una corrida abundante como no recordaba haber tenido nunca.
Thomas continuó lamiendo mi polla e inició el camino inverso con sus labios para volver a lamer y succionar mis pezones, Tatum estaba tan cerca de nosotros y se frotaba con tal intensidad que gotas de sus jugos saltaban sobre mi cara y mi pecho. Thomas estaba cada segundo más caliente y yo comenzaba a empalmarme de nuevo y tan caliente que estaba dispuesto a todo y sucedió lo que tenía que suceder aunque no sé relatar exactamente cómo: Tatum estaba en cuclillas sobe mi cara y yo lamía su coño torpemente como podía mientras ella sujetaba mi cabeza y apretaba mi cara contra su coño, Thomas estaba otra vez lamiendo y succionando mi glande, a ratos ácido y a ratos amargo mi lengua estaba cada vez más ávida de los jugos de Tatum. Thomas apuntó que allí estábamos incómodos y nos fuimos a su dormitorio, en menos de quince minutos había vuelto a empalmarme; apenas sobre la cama Tatum se sentó sobre mi metiéndose mi polla hasta el fondo y llevando mis manos a sus nalgas indicándome con ello que la ayudase a cabalgarme. Mi experiencia se reducía a dos polvos que había echado con una amiga de la pandilla y que no habína resultado importantes para ninguno de los dos pero lo que estaba experimentando era diferente: sentía como algo dentro de coño de Tatum, quizá unos músculos internos se movían agarrando mi polla mientras ella danzaba sobre mi haciendo que mi polla entrara y saliera de ella a toda velocidad. Recuerdo oírla decirme: aguanta, no te vayas..... aguanta.... Thomas se había arrodillado junto a mi cabeza y moviendo su polla con la mano acercaba la punta de su glande a mis labios... fue un acto reflejo, no pude resistirme y la metí en mi boca y al igual que había hecho él antes comencé a lamer y succionar...... solo dejé de mamar un segundo para decir que no aguantaba más, el cuerpo de Tatum apenas se movía, solo lo hacían ligeramente sus nalgas pero era suficiente para tenerme a punto de estallar. Thomas dijo algo así como que la mamaba bien, sentí palpitar su polla en mi boca e inmediatamente sentía su "lefa" golpeando mi paladar, sin poder evitarlo aferré mis manos a las nalgas de Tatum y comencé a vaciarme dentro de ella.... era la primera vez en mi vida que había mamado una polla y el sentir como se vaciaba en mi boca me estaba excitando como nunca me había sentido y en apenas unos minutos acabó todo. Un inmenso estallido de placer que había hecho que una corriente eléctrica recorriese mi espina dorsal como un calambre, todavía estaba mamando la polla de Thomas y Tatum, ya habiéndome descabalgado limpiaba con su lengua sus jugos y los míos de mi polla, Thomas, había apartado su polla de mis labios e inclinado sobre mi me besaba en la boca y lamía mi cara. Fue Tatum quien sugirió de hacer una cena con amigos en casa esa misma noche, Thomas estaba encantado pero yo tras dos impresionantes corridas no sabía si estaría a la altura.... ahora sonrío, no sabía que era el inicio de unas excepcionales vacaciones.
Inglés no practicarias, pero ingles probaste mas de una seguro!! 😉
 
Atrás
Top Abajo