Experiencias Familiares

MARORI69

Miembro muy activo
Desde
12 Jul 2024
Mensajes
86
Reputación
747
Experiencias familiares

Procedo de una familia normal. Mis padres se casaron muy jóvenes, con 16 años mi madre, y se fueron a vivir a casa de mis abuelos paternos, porque la situación económica era precaria. En menos de una año de casados, ya tenían un hijo y estaba de nuevo embarazada de mí.

Nací con problemas físicos, que por un motivo u otro, donde vivían no me podían tratar, y me trajeron mis abuelos a su casa, para acudir al médico de familia de su ciudad. El tratamiento duró más de lo esperado, y mi madre, embarazada de nuevo. Por ello acabe criándome con ellos, por suerte para mí. Mis abuelos eran muy trabajadores, de clase media, emigrantes de Francia, y me criaron como hijo único, por lo que al contrario que a mis hermanos, nunca me faltó de nada. Yo sabía quién eran mis padres, mis hermanos, tenía contacto con ellos, y demás, pero mi familia, mis padres, eran mis abuelos.

Pasaron años, y cada uno hicimos nuestras vidas, en ciudades diferentes, y caminos diferentes. El azar, hizo que un tiempo después, mis padres biológicos, junto a mi hermana pequeña, vinieran a vivir a mi ciudad. Por aquel entonces la “peque”, ya tenía sus 24 años, muy bien puestos, en todos los sentidos. Era mi hermana, y la quería como tal, pero la falta de contacto diario, también me hacía verla como la mujer sexy que era, y eso me turbaba. Como buen hombre que soy, mis 30 años recién cumplidos, y con lo que me gusta el sexo, siempre pensé, que de haber nacido mujer, de haber sido yo mi hermana, que golfa iba a ser, jejeje

El tenerla cerca, y querer retomar el tiempo perdido de relación, hizo que pasáramos mucho tiempo juntos, y salíamos los fines de semana, con mi pareja y su novio, mas como amigos que hermanos.

Un fin de semana, de puente, nos fuimos los 4 a una casa rural en las afueras, cerca de una estación de sky, y para nuestra suerte, y a pesar de ser casi Abril, cayó una gran nevada, que nos hizo disfrutar de la casa, nieve, chimenea y juegos………..

La diferencia de edad, 6 años, con ella y su novio, se notaban, en la madurez, cuando después de unas cuantas cervezas y bastantes chupitos, y juegos de mesa, Miriam, mi hermana, sugirió jugar a “yo nunca”, pero incluyendo una prenda, cuando tocara beber. Con el calor del alcohol, todos aceptamos de buen grado.

Varios yo nunca, y varios chupitos después, nos tenían a los 4 medio desnudos ya, y el juego empezó a calentarse con las afirmaciones.

Yo nunca me he masturbado pensando en mi hermano-a, dijo Fran, el novio de mi hermana.

Mi novia, María, mi hermana y yo, tras mirarnos pícaramente, bebimos.

María, solo en tanga ya, dejaba ver sin pudor el esplendor de su cuerpo. Una generosas tetas, talla 95C, con unos pezones duros y erguidos, atravesados por sendos piercings, 1,65 de estatura y unos 48kg de peso. Unas piernas muy tonificadas, y un culo duro y respingon. La transparente tela, del minúsculo tanga rosa, que apenas tapaba nada, dejaba ver su totalmente depilado pubis, y el tatuaje de un duende que tenía en el lado derecho del mismo.

Fran, no le quitaba ojo, y vi en su calzoncillo, que le gustaba lo que veía. Era un chaval deportista, muy fibrado, de cerca de metro noventa de estatura. Y debia de tener un buen instrumento.

Miriam, era alta, casi 1,75, delgada, con unas buenas tetas también, más pequeñas que las de mi novia, una talla menos, calculé a través de su sujetador, pero con la turgencia de la juventud. Sus pezones parecían querer rasgar la tela y saltar fuera. El tanga, dejaba entrever un monte de Venus recortado, tipo brasileño, y su culo, redondo y perfecto. Estaba muy buena. Un tatuaje de unas flores en su brazo, y varios piercing en las orejas.

Toco el turno a María.

Yo nunca he hecho un trío, dijo. Fran, bebió y calzoncillo fuera, medio empalmado ya. Para mi asombro, Miriam Bebió y sujetador fuera. Mi chica y yo, quedamos perplejos, y eso que nos considerábamos abiertos en el sexo.

Yo nunca bese a alguien de mi sexo, dije. Mi chica y mi hermana, bebieron y quedaron desnudas completamente. A mi hermana, en ese momento pude verle el piercing que asomaba en su entrepierna, en el clítoris. Joder, que buena estaba y que morbazo, imaginándola encima comer la boca a otra tía!!

Fran ya estaba completamente empalmado, y no disimulaba nada mirando a María, incluso se tocaba la polla haciéndolo.

Has ganado brother, me dijo mi hermana. Pero no es justo que no quedes en bolas.

María se le acerco y le dijo algo al oído. Que sensualidad desprendían, desnudas y tan cerca una de la otra, con los pechos rozándose, me empalmé de golpe.

Una pregunta final, si acierto te despelotas, me dijo

Ok, dije yo

Yo nunca he practicado Sado, dijo riendo.

Eres una cabrona, dije mirando a María. Y me despojé de mi calzoncillo. Mi pene era mas pequeño que el de Fran, pero bastante más grueso. Mi cuerpo, no tan atlético como el suyo, esta muy trabajado de gimnasio, menos definido, pero también más voluminoso. Y voy totalmente depilado. Mi hermana miraba mi polla sin pudor.

Seguía muy pegada a María, y de repente, le tomo la cabeza por la nuca y empezó a besarle la boca. María le respondió, con una mano en la entrepierna, y Miriam se dejó hacer. Fran y yo nos miramos sin saber muy bien qué hacer. Se tumbaron cerca de la chimenea y nos mandaron acercarnos.

María se tumbo boca arriba, separó las piernas y con una mano, abrió sus húmedos labios, mirando a Fran, que aceptó la invitación sin titubear, tumbándose sobre ella, para empezar a comerle el coño. Mi hermana, a horcajadas sobre María, se dejaba comer también. Me acerque a ella, y le metí mi polla en la boca. Que placer, como la chupaba!! El piercing de la lengua, rozaba mi glande, y aportaba un plus de sensaciones. Estuvimos un buen rato así. Tomé la iniciativa. Puse a las 2 chicas haciendo un 69 sobre la mesa baja frente a la chimenea. Fran, empezó a alternar el coño de María con la boca de mi hermana. Yo empecé a follarmela desde detrás, mientras con un dedo empecé jugar en su culo. Escupí un par de veces para lubricarlo, hasta que conseguí meterlo entero. Jugueteé un rato, y lo intenté con un segundo. Ella pareció reticente, pero seguí igualmente. Le tenía el esfínter ya bien dilatado, por lo que saqué mi polla de su coño, empapada y brillante de los abundantes fluidos que de ella salían, y la apreté contra su ojete. Ofreció algo de resistencia, hasta que mi glande la penetró. Ella chilló un poco e intento apartarse, pero la polla de su novio le lleno la boca y le impidió la retirada. Aproveche para acabar de enterrársela por completo en el culo. La presión que sentía en toda mi vara, era una pasada. Me estaba costando no correrme. Estuve un poco sin moverme, hasta que la presión disminuyo. Empecé a meter y sacar poco a poco, y María acompaño el movimiento con la lengua en su clítoris. Deslicé una mano por un lado y le metí 2 dedos en la vagina. Mi hermana empezó a jadear y moverse acompasando el vaivén a mis envites.

Me corro, me corro ¡!! Empezó a decir. Y lo hizo. De que manera, sobre la cara de mi mujer, que hacia lo mismo, con la polla de Fran dentro de nuevo. Las contracciones del esfínter de mi hermana, hicieron que el placer en mí aumentara, y acabé descargando un buen chorro de semen dentro de su culo

Agh, Gruñó Fran, mientras salía de mi chica y se corría sobre ella y en la cara de mi hermana, que empezó a chuparle la verga mientras aún descargaba sus huevos. Yo saque la mía de culo de mi hermana, y un hilo de blanca leche se deslizó de su interior, por sus labios a la boca de María, que se afanaba en limpiar mi polla y lamer todo lo que de mi hermana salía.

La juventud, en este caso, se hace ver, y Fran, aun empalmado, saco la polla de la boca de Miriam, ocupo mi lugar y mientras se la empezaba a meter por el culo, dijo:

Lo que llevo esperando este momento!! Y empezó a bombear con fuerza. María desde abajo empezó a lamerle los huevos, y el clítoris a Miriam

Yo me puse delante, y mi hermana se afanó en chupármela consiguiendo en mi una nueva erección. Se había ocupado en lamer todo el semen que Fran había soltado sobre María, me situé entre sus piernas, y se la metí de golpe. Empecé a follarmela mirando a la cara a mi hermana, que cerraba los ojos y abría la boca, con lujuria, empalada por el culo por segunda vez en su vida, mientras su clítoris era lamido y succionado por María. Las tetas colgando, rozando los pezones contra los de mi chica, con el vaivén de los empellones de Fran.

Miriam comenzó a jadear, y decir:

Me corro, me corro, me corro, ag, ag

presa de la enculada y la comida de coño, la lengua y la boca y manos de María hacían su magia en ella.

Fran se salió, con intención de correrse en su cara. Pero le detuve. Le mande sentarse en el sofá. Lleve a María y la senté sobre él, de frente, que inmediatamente la ensarto por el coño.

Yo por detrás, lubrique un poco su culo, y enterré mi polla en el. Al contrario que el de mi hermana, este ya tenía costumbre.

Empezamos a movernos, mientras mi hermana descansaba tendida en el suelo, destrozada, frente a la chimenea.

Fran tardo muy poco en correrse dentro de María, que lo hizo casi a la vez que el, entre gritos, jadeos y espasmos, que hacían que su esfínter se contrajera, atrapando con fuerza mi polla dentro de ella, y haciendo que me corriera de nuevo, esta vez, completamente dentro de ella. Estuvimos un rato quietos. Me salí, para ayudar a María a descabalgar de Fran. La acompañe donde mi hermana, y la tumbe al lado. De su culo y coño, salía abundante esperma, y Miriam, como hechizada por el olor, se colocó entre sus piernas lamiendo todo lo que de ella salía.





El despertador sonó, eran las 11 de la mañana. Me costó recordar que era domingo. A mi lado, en la cama, dormía María, completamente desnuda, como le gustaba hacerlo. Yo tenía una erección de caballo. Busqué a mí alrededor a Fran y Miriam. No estaban. María y yo, estábamos solos en su apartamento. Todo había sido un sueño. Qué diablos????

Aparté la sabana dejando el tremendo culo de María expuesto. Comencé a lamerle la raja del culo y meter mi lengua en su ojete, como queriendo follarmela con ella. Empezó a gemir y moverse. Cogí el lubricante de la mesilla, le puse una generosa cantidad y se lo restregué con la polla. Poco a poco fue entrando, mientras ella elevaba la cadera para facilitar la maniobra. Comencé a moverme mientras la pajeaba con una mano. Nos corrimos a la vez a los pocos minutos.

Joder, que despertares, me dijo. Sueños calientes? Me preguntó

Ni lo imaginas, le respondí, mientras la sacaba y se la acercaba a la boca, para que me la chupara

Que te parecería pasar un finde con mi hermana y su novio? Le pregunte mientras lo hacia







Pasé varios días preparando el siguiente puente. A mi chica, le dije de primeras, que hacía mucho que no pasaba tiempo con mi hermana, y a mi hermana, que la echaba de menos y un puente los cuatro juntos, era ideal para confraternizar. El tema es que lo conseguí preparar todo.

De todos modos, una tarde, después de echar un polvo con María, en el énfasis del post-calentón/orgasmo, le conté mi sueño porno, y que me gustaría hacerlo realidad. Quería tantear el terreno. Nunca me gustaron las relaciones abiertas, mi chica es mía, y punto, pero me llevé una grata sorpresa, cuando me confiesa:

La verdad, que tuve algún rollo con chicas, en el instituto, y lo echo un poco de menos. Por otro lado, follar con 2 tíos y una tía… uhmmm, me pone muy perra la idea.

De verdad? Me tomas el pelo? Le pregunte.

No, para nada, además tu hermana, me pone, y creo que tu a ella. La he pillado mirándote embobada más de una vez, me dijo. El problema será planteárselo a Fran

Fran? Dije, viendo cómo te mira el culo y las tetas cada vez que tiene ocasión, no creo que sea difícil de tentar, jejeje

Al final, con la complicidad de María, planeamos el fin de semana.

Y llegó. Recogimos a Miriam y Fran y viajamos dos horas al apartamento de playa elegido. Estaba en una urbanización de 1ª. Era último piso, lejos de miradas indiscretas, con 2 habitaciones amplias, y una terraza con un gran Jacuzzi, con vistas al mar. Estaba genial para nuestro plan. Nos encargamos de que hubiera bastante bebida, y sobre todo, champán, la criptonita de mi hermana.

Pasamos media tarde en la playa, hablando y riendo, nos duchamos y salimos a cenar. Mi nena, llevaba un vestido muy ajustado, largo, pero con una gran abertura lateral, que dejaba poca pierna a la imaginación. El escote, bastante pronunciado también, dejaba bastante pecho a la vista, realzados por el sujetador push-up, que realmente, no le hacía mucha falta.

Miriam, opto por una corta minifalda y una ajustada camiseta de tirantes bajo una cazadora vaquera muy entallada, que al quitarse en la mesa, dejo claramente ver que no llevaba sujetador, sus pezones marcados a través de la licra, la delataron. María se sentó frente a Fran, que paso toda la noche mirándole el escote, ya después de una botella de vino, sin cortarse. Yo, con Miriam enfrente, solo tenía ojos para las suyas, y aquellos pezones amenazando rasgar la tela que los cubría.

Terminamos la cena y fuimos al apartamento, con la idea de probar el jacuzzi.

María, tomó la iniciativa.

Chicos, que, un jacuzzi y champan???

SIII dijo Miriam, ya algo chispa. Champan!!!!!

María dijo pícaramente:

Una sola regla, y dejo caer el vestido, dejando su ropa interior a la vista. El sujetador a juego con el minúsculo tanga, dejo a Fran embobado

Y cuando se lo quitó todo, este ya no sabía lo que hacer. María, totalmente depilada, morena, con solo una minúscula marca del bikini, y aquellas tetas que me volvían loco, era como una diosa.

Vaya! Dijo Miriam, sin quitarle ojo tampoco. Estas tremenda, cuñada

Tu hermano, que me tiene bien servida y en forma. No veas lo que me hace sudar, dijo María con una picara sonrisa, mientras le guiñaba un ojo

Todos en bolas al agua, os espero. Y se metió dentro

Fran ya iba con los calzoncillos en los tobillos detrás de Maria.

Miriam, me miro mientras se quitaba la camiseta y dejaba caer su falda.

Más pecho que María, pezones erguidos como piedras, piercing en el ombligo y vello púbico muy rasurado, con un pequeño hilo estilo brasileño.

Ya puedes ver lo que llevas imaginado toda la noche, me dijo, mientras la seguía a la terraza.

Dentro del agua, Miriam, para mi asombro, se a cerco a María diciendo:

Puedo tocarte las tetas? Se ven tan duras y redondas…

Claro, respondió María

Miriam comenzó a tocárselas, pellizcando los pezones

UHMM suspiró Maria, fundiéndose en un beso en la boca de mi hermana, que la pillo por sorpresa, pero se dejó hacer.

Fran me miró, como pidiendo mi aprobación, a lo que asentí con la cabeza

Automáticamente se puso al lado de María, y empezó a tocarle tímidamente una teta, el pezón, hasta que se fue envalentonando, y deslizó una mano por su vientre, bajo el agua.

María echó la cabeza hacia atrás y jadeo con más fuerza. Le estaban metiendo mano, y masturbando el clítoris. Me acerque a mi hermana, y atrape sus tetas en mis manos, mientras mordía sus pezones alternativamente. Se dejo hace sin reparo. Salimos del Jacuzzi a nuestro dormitorio, que tenía cama con dintel.

La polla de Fran, totalmente erecta, era de un buen tamaño, pero algo menos gruesa que la mía, que en cambio, era un poco más corta. Estaba muy definido muscularmente, hacia mucho deporte, pero bastante delgado. Sus 24 años, se notaban. Yo en cambio, tenía bastante volumen muscular, pero algo de grasa no me dejaba definir bien. Me encanta comer y no me corto con nada, pero voy al gimnasio 2 horas todos los días. Así, puedo llevar mis 35 años, sin aparentarlos.

En la cama, Miriam se tumbó, boca arriba. María se dispuso entre sus piernas, de rodillas y empezó a jugar con la lengua en su clítoris y sus labios. Fran se acerco a María por detrás y tras lamerle un poco su ya empapada rajita, y humedecer bien la entrada del ano, acerco su polla a la vagina de mi mujer y poco a poco la fue introduciendo entera dentro de ella. María se tenso y se dejo hacer, acompasando rítmicamente los empellones que Fran le daba desde atrás, mientras sus manos sobaban y pellizcaban sus erguidos y duros pezones. María se corrió como una loca, estaba fuera de si. En su frenesí, había dejado descuidada a mi hermana, por lo que como pude, la gire en la cama, para ponerle frente a María, a 4 patas también, y penetrarla por detrás mientras las dos se comían la boca. Me estaba follando a mi hermana!! La visión de ella sometida a mi, besando a mi novia, mientras era salvajemente tomada por detrás por mi cuñado, era embriagadora. Deje caer un buen chorro de saliva en el prieto culo de Miriam, y con uno de mis dedos comencé a repartirlo por todo el, introduciéndolo poco a poco dentro de ella. Poco a poco la resistencia de su esfínter fue cediendo, por lo que metí otro dedo. Cuando su culo se adaptó a ellos, saque mi polla de su coño, y la dirigí al culo. Presioné poco a poco, y el glande desapareció dentro, mientras Miriam tensaba su cuerpo. Cuando se relajo continué empujando hasta tenerla toda dentro. Muy despacio empecé a bombearle el culo, y masturbarla con una mano, mientras la otra atrapaba uno de sus pezones y lo pellizcaba fuerte.

Sigue, sigue, me corro, me corro, no pares, mas fuerte!! AGGGG, AGGG, gimió mi hermana

Fran, dijo María, enculame a mi también, como hacen a tu mujer!!

Fran no se hizo de rogar y tras relajarla con un par de dedos, se la metió entera

Buuuuf!!! Me vas a reventar!!! Dijo María, Que grande se siente por ahí! Aaaaaaa

Fran no tardó un minuto en correrse dentro de ella, y yo, detrás dentro de mi hermana. Era una situación demasiado excitante para contenerse. Rápidamente la saque, para ponerla entre las bocas de las dos, que seguían comiéndose a besos, y Fran hizo lo mismo. Nos dejaron limpios y casi listos para otro asalto.

Mi sueño caliente, mi mayor perversión, se estaba cumpliendo. 2 parejas follando juntas, 2 pedazo de mujeres, dando y dándose placer mutuamente, mi chica usada por otro delante de mi, y yo follando con MI HERMANA! Delante de mi novia y su marido! Estábamos locos? Esto iba a cambiar nuestras vidas para siempre, y lo sabíamos, pero estaba ocurriendo, y de momento nadie parecía arrepentirse.

María parecía tener ganas de más. Se tumbo en la cama boca arriba, y llevo su mano a la entrepierna, separando los labios y descubriendo su clítoris; que actuó como un imán para la lengua de Fran, que se tiro a lamerlo y chuparlo inmediatamente. Mientras lo hacía, me acerque a la boca de María e introduje mi polla en su boca, que inmediatamente se puso de nuevo dura como una piedra. Debo confesar, que quería estar a la altura, y una hora antes, me había tomado una pastillita azul milagrosa. Jamás las había tomado, pero una situación como la que habíamos planeado, necesitaba que yo estuviera a la altura, no quería perderme ni un segundo de todo aquello. Miriam nos miraba hacer, pero no intervino. Cuando yo estaba listo de nuevo, mande a Fran tumbarse, ayude a María a acomodarse sobre el, y se metió el pollon de mi cuñado dentro. La incliné sobre el, dejando su abierto culo expuesto y saliendo un hilo de la corrida anterior de Fran. Sin miramientos, se la metí de golpe. Al contrario que el culo de mi hermana, este ya estaba acostumbrado a ser usado. Agarre a María por el pelo y comencé a follarle el culo con fuerza mientras miraba a los ojos a Miriam. Fran debajo, se dejaba hacer todo el trabajo. Mis empujones hacían que fuera ella quien se lo estaba tirando esta vez. Maria empezó a jadear y gritar:

Me corro, ahahah, me corro!!!! Sigue, sigue, no pares!!

Yo también me corro!! Gritó Fran

La escena era turbadora. Tanto que me acabé corriendo casi a la vez que ellos dos. Fue nuestro primer trío, y María estaba fuera de si. Me separe un poco y ella a su vez de Fran, para tumbarse al lado de mi hermana. Salía semen de sus dos agujeros, y estaba empapada de sudor. Su visión me excitaba sobre manera. Miriam se puso a chupar la polla de su marido un rato, después se abrazó a mi novia y las dos se quedaron dormidas.

Después de un baño y comer y beber algo, mi hermana dijo:

Veros a los 2 a la vez follando con María me puso muy perra, quiero probarlo

Estábamos completamente desnudos, y limpios, y el efecto de la Viagra aun estaba presente, porque solo oír a mi hermana, mi polla cobró vida de repente. Me empalmé de inmediato, y María comenzó a masturbarme muy despacio. Fran acompaño a Miriam a la cama y comenzó a comerle el coñito muy despacio, en un 69, mientras ella lo ponía a punto para la batalla. Después de un rato, fue María quien dirigió la maniobra.

Esta vez. Lo haremos los 4 a la vez., Túmbate, me dijo

Obedecí de inmediato.. María comenzó a lubricar el ano de mi hermana y la ayudo a meterse mi verga por el culo, sentada sobre mi, de espaldas. Enseguida adivine la postura, por lo que cogí sus tetas y pezones entre mis manos, pellizcando y estirando estos, y la atraje hacia atrás sobre mí, mientras acaba de hundir mi polla entera dentro suyo. Estaba arrodilla y bastante abierta, por lo que su coño quedaba expuesto a la enorme verga de mi cuñado, que inmediatamente comenzó a follarla, sin miramientos. En esa postura, yo casi no me podía mover, pero los envites de Fran, movían a mi hermana lo suficiente para que ella me cabalgara profundamente. María se puso de pie en la cama, y ofreció su almeja abierta a la boca de mi hermana que golosamente, comenzó a lamer y chupar. Miriam se corrió como una loca entre jadeos y suspiros, muy rápido, y provocó un gran orgasmo a mi chica, con la boca, casi a la vez. Fran continuó bombeando con fuerza hasta correrse dentro del culo de su mujer abundantemente, y apartarse, para atraer a María, tumbarla y metérsela a ella y terminar de correrse dentro. Yo di la vuelta mi hermana, para meterla en su chorreante coñito, y correrme dentro de ella también, mientras esta disfrutaba de un segundo orgasmo, y al igual que mi cuñado, sustituirla por Maria, y terminar la faena en ella, que a su vez también se corrió por segunda vez.

Estábamos completamente muertos, pero felices y embriagados de tanta pasión, lujuria, y a la vez respeto. Nos duchamos de nuevo y nos fuimos a dormir, los 4 en la misma habitación.

Habíamos alcanzado tal grado de intimidad, de complicidad, que nuestras vidas no volverían a ser lo mismo nunca más. A ojos de los demás, estaría muy mal visto, sería nuestro gran secreto. Pero nuestras relaciones, ya no podían tener sentido en pareja, nunca más seríamos completos ninguno de nosotros, sin la compañía de los otros tres. O al menos, yo era lo que pensaba. Jamás había pensado en compartir a mi pareja y mucho menos ver como otro se la follaba delante de mi, pero esto era distinto, los 4 éramos familia, nos conocíamos, lo que aportaba un grado de confianza enorme, pero también podía ser un gran problema. Pero eso ya se vería. Ahora tocaba disfrutar de nuestra recién descubierta sexualidad en grupo, y ver como discurrían los acontecimientos





Continuara………………………
 
hola, yo tambien vengo de una familia normal y practico el incesto, desde hace años con mi tia, hermana de mi madre, y ultimamente tmb con mi madre, no mi madre y yo a solas pero si en trio mi madre, mi tia y yo.
 
Atrás
Top Abajo