baskerville
Miembro
- Desde
- 23 May 2025
- Mensajes
- 5
- Reputación
- 26
No es un relato erótico habitual. Es la pequeña historia de mi relación con mi mujer y mi anterior novia. La historia es totalmente real, pero voy a cambiar los nombres. Quienes estudiaran aquellos años en la misma Universidad que nosotros seguro que reconocerán la historia y saben quiénes somos.
Como todo el mundo sabe, los años de Universidad son para pasárselo bien, follar lo que se pueda e intentar sacar la carrera..
Como todos en esa situación, fui muy afortunado y tuve bastantes encuentros sexuales durante los años de Universidad. Los dos últimos años, cuando las carreras eran de 5 años, Estuve saliendo con una chica preciosa. Guapísima con un cuerpo precioso, simpatiquísima. Un encanto de mujer.....
Ambos íbamos de fiesta continuamente y follábamos en cualquier sitio. En su piso, en el mío, en casa de los colegas, en el coche, en los viajes. Todo apuntaba a que nuestra relación iba va a ser duradera. Se diría que para siempre.
Es más, ya conocía a sus padres. Incluso estuve pasando unos días con su hija y con ellos en su casa de la playa en el penúltimo verano de carrera,
Como sabéis, durante los años de Universidad las fiestas son habituales, día sí y día también. La mayoría de las veces terminaba como todo deseábamos, liándonos y follando con compañeras, y desconocidas de otras carreras.
Mis compañeros de piso que eran cuatro, y otros amigos de otros pisos, me hablaban de una tía fantástica, guapísima, grandísima folladora, que no tenía problemas en follar y enrollarse y en hacer de todo lo que hubiera que hacer para pasárselo bien.
Fueron muchas las veces que mis compañeros follaban con ella. Unas veces uno a uno y otras con más de uno. Casi toda la universidad hablaba de ella.
En una fiesta en la que acudí con mis colegas de piso ella estaba allí. Me la presentaron. Ella me sonrió e hizo un gesto como si me conociera, (no tenía ni idea de quien era) Era muy guapa, simpática, un cuerpazo, no grandes tetas (las de mi novia eran más bonitas y algo más grandes), y elegante, llevaba un vestido sencillo que le quedaba precioso. Mis compañeros le "entraron", tomaron alguna copa con ella y al rato, mi colega Arturo, se fue con ella a follar (claro).
Nosotros seguimos con la fiesta tomando copas y bailando, buscando a quien "seducir"... mi colega Arturo y ella aparecieron al rato, y después de bailar y ponernos a 100, nos invitó a mi colega José y a mi a irnos con ella a "dar una vuelta".
A la salida del local nos dijo de ir a nuestro piso. Jose y yo nos miramos y dijimos que Sí, al segundo.
Como os podéis imaginar estuvimos follando los tres, Jose, ella y yo todo lo que pudimos hasta caer dormidos.
Casi al amanecer empezaron a llegar mis otros compañeros de piso. Al vernos allí, en bolas, tumbados en la cama de Jose se ofrecieron a meterse en la cama con nosotros, (amontonados, no cabíamos). Preguntó si podía follar y Jose y yo le dijimos que le preguntara a ella, a lo que respondió que sí, que vale. Manu si que le entró pero mi otro colega iba muy perjudicado por el alcohol y no se le empinaba, por lo que se fue a dormir la mona a su habitación.
Me encantó verlos follar. Ver cómo ella llevaba la iniciativa y ver cómo se movían esas tetitas cuando Manu de daba por detrás.
Me encantó ella. Tenía una conversación fantástica, muy inteligente. Más tarde supe que era una eminencia. Estaba haciendo el doctorado. Era dos años mayor que yo.
En ese momento que supe más de ella, averigüé quien era. Era la hermana de mi novia.
Casi se me cae el mundo. Me había follado a la hermana de mi novia. Le había puesto los cuernos a mi novia. No sabía si ella se lo iba a contar.
Estaba hecho un lío. Pero yo quería seguir viéndola, y follar más con ella.
En el siguiente mes follamos varias veces más en su piso. Imagino que ella follaría con más gente. Estaba totalmente enamorado de ella. Lo tenía todo. Inteligencia, belleza, simpatía, sexo fantástico...
Solo había un problema, su hermana, mi novia. Le dije que era "su cuñado" y me respondió que ya lo sabía desde el primer día que me vio.
Que ella no tenía problema en eso. Que mi infidelidad era tema mío y de su hermana. Yo, dijo ella, follo con quien me da la gana. Con quien me apetece.
Seguimos viéndonos y mi relación con su hermana la tuve que terminar. Le dije que había conocido a otra chica -no dije quien- y que le había sido infiel.
No le importó mucho, a decir verdad. Lo cual me relajó bastante y seguí viendo a esa maravillad e mujer, su hermana: Alicia.
Alicia y yo comenzamos a vernos (y follar) con más frecuencia. No era mi novia ni ella quería ningún tipo de exclusividad.
La relación amorosa y sexual fue creciendo. Ambos éramos libres para hacer lo que quisiéramos con quienes quisiéramos.
Llegó un momento en que ambos estábamos profundamente enamorados y decidimos que nuestra relación sería para siempre.
Pactamos que ambos seguiríamos libres para ligar sexualmente con quienes quisiéramos hasta acabar la universidad, en que terminaría esa libertad.
Ambos oíamos de nuestros amigos las "fiestas" que nos dábamos, tanto ella como yo por separado., y les sorprendía que estuviésemos saliendo y permitiendo eso.
Así fue. Terminó la universidad y terminó "esa libertad".
Llevamos 20 años felizmente casados. Mi colega Jose se casó con su hermana (mi antigua novia). Todos felices.
Los más escépticos y no llegan a entenderlo son los padres de ellas: Esa promiscuidad y ese cambio de parejas... Eso de que ha habido relaciones cruzadas e "intensas" como dicen ellos, no les "cuadra".
Recientemente, Alicia y yo hemos decidido hacer intercambio de parejas. Me apetece ver cómo se le mueven las tetas cuando otro le da por detrás.
Como todo el mundo sabe, los años de Universidad son para pasárselo bien, follar lo que se pueda e intentar sacar la carrera..
Como todos en esa situación, fui muy afortunado y tuve bastantes encuentros sexuales durante los años de Universidad. Los dos últimos años, cuando las carreras eran de 5 años, Estuve saliendo con una chica preciosa. Guapísima con un cuerpo precioso, simpatiquísima. Un encanto de mujer.....
Ambos íbamos de fiesta continuamente y follábamos en cualquier sitio. En su piso, en el mío, en casa de los colegas, en el coche, en los viajes. Todo apuntaba a que nuestra relación iba va a ser duradera. Se diría que para siempre.
Es más, ya conocía a sus padres. Incluso estuve pasando unos días con su hija y con ellos en su casa de la playa en el penúltimo verano de carrera,
Como sabéis, durante los años de Universidad las fiestas son habituales, día sí y día también. La mayoría de las veces terminaba como todo deseábamos, liándonos y follando con compañeras, y desconocidas de otras carreras.
Mis compañeros de piso que eran cuatro, y otros amigos de otros pisos, me hablaban de una tía fantástica, guapísima, grandísima folladora, que no tenía problemas en follar y enrollarse y en hacer de todo lo que hubiera que hacer para pasárselo bien.
Fueron muchas las veces que mis compañeros follaban con ella. Unas veces uno a uno y otras con más de uno. Casi toda la universidad hablaba de ella.
En una fiesta en la que acudí con mis colegas de piso ella estaba allí. Me la presentaron. Ella me sonrió e hizo un gesto como si me conociera, (no tenía ni idea de quien era) Era muy guapa, simpática, un cuerpazo, no grandes tetas (las de mi novia eran más bonitas y algo más grandes), y elegante, llevaba un vestido sencillo que le quedaba precioso. Mis compañeros le "entraron", tomaron alguna copa con ella y al rato, mi colega Arturo, se fue con ella a follar (claro).
Nosotros seguimos con la fiesta tomando copas y bailando, buscando a quien "seducir"... mi colega Arturo y ella aparecieron al rato, y después de bailar y ponernos a 100, nos invitó a mi colega José y a mi a irnos con ella a "dar una vuelta".
A la salida del local nos dijo de ir a nuestro piso. Jose y yo nos miramos y dijimos que Sí, al segundo.
Como os podéis imaginar estuvimos follando los tres, Jose, ella y yo todo lo que pudimos hasta caer dormidos.
Casi al amanecer empezaron a llegar mis otros compañeros de piso. Al vernos allí, en bolas, tumbados en la cama de Jose se ofrecieron a meterse en la cama con nosotros, (amontonados, no cabíamos). Preguntó si podía follar y Jose y yo le dijimos que le preguntara a ella, a lo que respondió que sí, que vale. Manu si que le entró pero mi otro colega iba muy perjudicado por el alcohol y no se le empinaba, por lo que se fue a dormir la mona a su habitación.
Me encantó verlos follar. Ver cómo ella llevaba la iniciativa y ver cómo se movían esas tetitas cuando Manu de daba por detrás.
Me encantó ella. Tenía una conversación fantástica, muy inteligente. Más tarde supe que era una eminencia. Estaba haciendo el doctorado. Era dos años mayor que yo.
En ese momento que supe más de ella, averigüé quien era. Era la hermana de mi novia.
Casi se me cae el mundo. Me había follado a la hermana de mi novia. Le había puesto los cuernos a mi novia. No sabía si ella se lo iba a contar.
Estaba hecho un lío. Pero yo quería seguir viéndola, y follar más con ella.
En el siguiente mes follamos varias veces más en su piso. Imagino que ella follaría con más gente. Estaba totalmente enamorado de ella. Lo tenía todo. Inteligencia, belleza, simpatía, sexo fantástico...
Solo había un problema, su hermana, mi novia. Le dije que era "su cuñado" y me respondió que ya lo sabía desde el primer día que me vio.
Que ella no tenía problema en eso. Que mi infidelidad era tema mío y de su hermana. Yo, dijo ella, follo con quien me da la gana. Con quien me apetece.
Seguimos viéndonos y mi relación con su hermana la tuve que terminar. Le dije que había conocido a otra chica -no dije quien- y que le había sido infiel.
No le importó mucho, a decir verdad. Lo cual me relajó bastante y seguí viendo a esa maravillad e mujer, su hermana: Alicia.
Alicia y yo comenzamos a vernos (y follar) con más frecuencia. No era mi novia ni ella quería ningún tipo de exclusividad.
La relación amorosa y sexual fue creciendo. Ambos éramos libres para hacer lo que quisiéramos con quienes quisiéramos.
Llegó un momento en que ambos estábamos profundamente enamorados y decidimos que nuestra relación sería para siempre.
Pactamos que ambos seguiríamos libres para ligar sexualmente con quienes quisiéramos hasta acabar la universidad, en que terminaría esa libertad.
Ambos oíamos de nuestros amigos las "fiestas" que nos dábamos, tanto ella como yo por separado., y les sorprendía que estuviésemos saliendo y permitiendo eso.
Así fue. Terminó la universidad y terminó "esa libertad".
Llevamos 20 años felizmente casados. Mi colega Jose se casó con su hermana (mi antigua novia). Todos felices.
Los más escépticos y no llegan a entenderlo son los padres de ellas: Esa promiscuidad y ese cambio de parejas... Eso de que ha habido relaciones cruzadas e "intensas" como dicen ellos, no les "cuadra".
Recientemente, Alicia y yo hemos decidido hacer intercambio de parejas. Me apetece ver cómo se le mueven las tetas cuando otro le da por detrás.
Última edición: