La madre vendedora

XXX2025XXX

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23 Ago 2023
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Este relato es completamente ficticio,

Se acercaba el cumpleaños de mi primo pequeño y quería regalarle un par de juguetes, navegando por Wallapop vi varios anuncios de una tal Laura.

Tenía varios juguetes a la venta y me comentó que tenía muchos más pero todavía no los había publicado por falta de tiempo, me invitó a ir a su casa (tengo muchas buenas valoraciones, soy fiable) y en su casa si me interesaban más productos me hacía un buen precio, (la mujer super amable).

No os mentiré, la situación me ponía algo nervioso, había comprado mucho por Wallapop, pero nunca había ido a ninguna casa de nadie sin ninguna valoración, era un perfil nuevo, creado el mismo día, pero me había dado su número y parecía una mujer bastante agradable y bastante atractiva, no os mentiré.

Me abrió la puerta, iba con una camiseta muy ancha, unos pantalones cortos apretados y descalza, me empezó a enseñar todo lo que quería vender, que no tenía tiempo para publicarlo todo y que su hijo ya se había hecho mayor y no jugaba.

Cada vez que se agachaba a enseñarme algo, la mirada se me iba totalmente, ya que se le veían los pechos, tenía unos pechos pequeños, pero muy bonitos y unos pezones realmente perfectos, por otra parte, también miraba mucho al suelo para fijarme en sus pies, bastante bonitos también.

En una de estas ocasiones viéndole los pies, me pilló totalmente in fraganti.

Laura: Por qué miras todo el rato el suelo? no será que está sucio?? o es que eres fetichista de pies? me encantaría que así fuese, me dijo esto entre risas.

Yo me puse rojo como un tomate, pero le fui sincero y bromee sobre el tema...

Pues un poco jajaja, si quieres te hago un masaje y te los acaricio si hace falta... aunque sinceramente, todo esto suena algo raro y a lo mejor tienes marido y todo, es rarísimo en general jajaja.

Laura: Hace 2 años que mi marido y yo lo dejamos, no éramos felices, estuvimos juntos 15 años, pero nos aburrimos el uno del otro, ahora a mis 40 años estoy sola, soy mucho más feliz y aceptaría ese masaje encantada, hace mucho que nadie me hace un buen masaje.

Iba cachondo perdido (la situación ponía cachondo a cualquiera y siempre me habían gustado las mujeres mayores que yo, yo ahí tenía 28 años) nos sentamos en el sofá, y puso sus pies encima mío, por otra parte, al estar sentada se le veían sus ricos pechos, aunque tenía que tirar mucho de imaginación, ya que no se apreciaban mucho, ella se daba cuenta de eso y le daba igual.

Yo seguía con el masaje de pies, y entre risas, me dijo: si quieres me los puedes chupar, yo encantada de la vida... le respondí: estaba que ya no podía más, me atreví a decirle, puedo tocarte los pechos?

Aceptó sin pensárselo un segundo y se acercó a mí... mientras le chupaba los pies, me decía que metiera la lengua entre los dedos, a la vez cogía sus pechos, y pezones, me decía que se los apretase, que le encantaba.

Nos tiramos un rato largo, y le pregunté, te puedo chupar los pechos?

Rápidamente Laura me volvió a responder: lo estaba deseando, se quitó la parte de arriba, y los pantalones, llevaba un tanguita negro, mientras le comía las tetas y le mordía los pezones (me lo insistía muchas veces) metía las manos por dentro del tanga, Laura estaba super mojada, cada vez nos estábamos poniendo más cachondos, la polla me iba a explotar.

Pero picaron al timbre... se puso muy nerviosa... mi hijo... ya está aquí mi hijo... me dijo que llegaría más tarde, se vistió lo más rápido que pudo.

Laura muy nerviosa: te tienes que ir ya, no quiero que mi hijo se entere de esto, es todo muy raro...

Me entraron los nervios, cogí la puerta y me fui como un cohete, sin juguetes ni nada, pero tenía la excusa perfecta para volver a quedar con Laura, una mujer perfecta, y al llegar a casa me hice una tremenda paja.



Espero que os haya gustado el relato, es mi primer relato, seguramente habrá alguna falta de ortografía y algunos fallos, pero estoy abierto a opiniones y siempre se puede mejorar en la vida, de eso no cabe duda.

Si os ha gustado, haré una segunda parte, ya que obviamente... hubo más encuentros con Laura.
 
Esta segunda parte es menos ficticia que la anterior,

Pasó una semana y Laura no me decía nada, yo estaba preocupado... porque yo pensaba que me hablaría a los pocos días (me daba mucha vergüenza decirle algo) pero aún así, yo me mataba a pajas pensando en ese momentazo que pasé con ella, hasta que llegó el día (un viernes) y por fin me mandó un mensaje:

Hola X, perdona por no decirte nada, pero he estado pensando en lo que pasó entre nosotros y reconozco que me encantó, mi hijo va a estar todo el fin de semana con su padre, si quieres te puedes venir a casa, terminamos la compra y lo que surja jajajaja. El cumpleaños de mi primo ya había sido, los juguetes me daban completamente igual, a quién quería ver era a Laura.

Me quería hacer el fuerte y tardar en responder, así me hacía el interesante un poco, pero no os mentiré lectores, tardé 34 segundos en responder... soy muy débil. Mi respuesta fue jodidamente clara, le dije que si quería me iba para allí ya de ya, esta situación me daba un morbazo de cojones, tenía el rabo como un extintor.

Laura tardó un poco más en responder, pero me dijo que su hijo se iba en un par de horas, me dijo que a las 21h estuviera en su casa, antes de salir de casa me hice un par de pajas, no quería correrme rápido, la última vez no hubo penetración, os recuerdo que solamente le chupé los pies, le comí las tetas y le masturbé el coño, llegó la hora y fui corriendo para su casa.

Me abrió la puerta, me fijé que iba con el pelo mojado, se acababa de duchar, nuevamente iba con una camiseta muy ancha aunque en esta ocasión iba marcando pezones (creo que Laura también tenía ganas de verme) también iba con unos pantalones cortos y descalza, literalmente igual que la otra vez... si funcionó una vez, lógicamente... volvería a funcionar y funcionó.

¿Qué tal ha ido todo? me preguntó Laura, le dije que todo muy bien, que la había echado un poco de menos (sinceridad ante todo) se alegró por mí y le hizo mucha gracia mi respuesta, me dijo que ella a mí también.

Laura: Sígueme, que vamos a ir a mí habitación... se tumbó en su cama y me dijo, vamos a jugar a un juego... por ahora, te voy a dar 2 minutos, en esos 2 minutos vas a poder hacer lo que quieras, luego me tocará a mí, así que por favor... sé bueno, querido X.

Joder, solamente tenía un minuto, era espectacular lo de esta mujer, era todo puro morbo... en el momento que se tumbó en la cama, empezó la cuenta atrás.

Quería chuparle los pies, siempre me gusta empezar poco a poco por ahí (siempre y cuando a la mujer le guste claramente) pero solamente tenía 2 minutos y no sabía como iba a evolucionar esto, así que como la última vez no le comí el coño, empecé por ahí, le quité los pantalones, el tanga de color amarillo (muy feo el tanga, pero el coño era jodidamente bonito y recién depilado).

Se lo empecé a chupar, mientras le metía los dedos lentamente, la lengua iba de un lado para otro constantemente, a ella le encantaba... metía toda mi boca y lengua en su clítoris, no paraba de gemir y pedirme que siguiera (no sé si soy el mejor comiendo coños, pero yo ganas le echo muchas) le quité la camiseta y empecé a acariciarle los pezones, los tenía durísimos, todo esto mientras le comía el coño lógicamente.

Los 2 minutos ya habían pasado hace un rato, yo estaba encantado de la vida, comiendo ese coño, pero quería que Laura me sorprendiera y que llegase su turno, así que paré y le dije que le tocaba a ella, me dijo que nunca le habían comido el coño tan bien, estaba muy mojada, pero que para la próxima vez me afeitase la barba, que le hacía cosquillas jajaja, encima era graciosa, lo tenía todo.

Me tumbé en la cama, me quitó la camiseta, los pantalones y los calzoncillos, solamente me dejó con los calcetines puestos (parece ser que ella no es fetichista de pies), empezó masturbándome muy lentamente, mientras me chupaba y tocaba los pezones... yo estaba como un rey.

Se dio media vuelta, puso su coño en mi cara y empezó a comerme la polla, antes de todo esto, me dijo que si le volvía a comer el coño tan bien, se dejaría hacer cualquier cosa en mi turno (pues al final si que voy a ser bueno comiendo coños), yo no iba a decirle que no a una mujer, y menos con esa pedazo de proposición, así que hicimos sin duda alguna, el mejor 69 que he hecho en mi vida.

Empezó a pasar su lengua por el glande, todo muy lentamente, lo que lo hacía todavía más morboso, cada vez se metía más y más mi rabo en su boca, todo cada vez más y más rápido, yo lógicamente estaba bien entretenido comiendo su dulce coño, todavía no había habido penetración y era mejor que cualquier polvo que había tenido anteriormente, era una barbaridad Laura, literalmente la perfección en persona.

Llevábamos como mínimo 10 minutos así, se dio la vuelta, me puso sus bonitos pechos en la boca y me dijo... muérdeme los pezones, yo se los mordía poco a poco sin hacerle mucho daño, y me dijo... ahora es tu turno X, hazme lo que quieras, lo que tú quieras, soy... tuya.


Veo que la primera parte recibió likes, así que si os gusta esta segunda parte, continuaré el relato, estoy abierto a opiniones y cosas que se puedan mejorar, un abrazo.
 
Esta tercera parte, es todavía menos ficticia que la anterior.

Era mi turno, me tocaba a mí elegir, recordemos que Laura y yo en nuestro segundo encuentro, nos inventamos un juego con tiempo, dónde podemos hacer lo que queramos en ese tiempo (siempre y cuando la otra persona esté de acuerdo).

Seguí comiéndole los pezones y mordiéndoselos (sabía que le encantaba) pero me tocaba a mí jugar, la verdad es que estaba deseando follármela, pero quería jugar un poco más.

Se tumbó boca arriba, y empecé a pasar mi lengua por su cuerpo, empezando por abajo, en esta ocasión todavía no le había chupado los pies, así que estuve un buen rato pasando mi lengua, por la planta de los pies, por los dedos... todo lentamente, si empiezas poco a poco, el morbo siempre se multiplica.

Le dije que me hiciera una paja, me escupió en la polla, se escupió en los pies, pero antes de hacerme la paja, me dijo que le escupiera yo en la boca, y obviamente le escupí en la boca, empezó a hacerme la paja con los pies... se notaba que era la primera paja que hacía Laura con los pies, pero intentaba dar lo mejor de ella y eso me encantó, me hacía cosquillas y a veces daño, pero a la vez estaba super cachondo y cada vez movía más y más rápido los pies, estaba a punto de correrme... de hecho me corrí un poco, así que le dije que parase... me chupó la polla y se trago el poco semen que se me escapó, ni se lo pensó.

Continué chupando parte de su cuerpo, subí por las piernas, poco a poco... Laura pensaba que le comería el coño una vez más, pero esa ya lo había hecho, así que le levante las piernas, y empecé a chuparle el culo, nunca había comido un culo, pero es que tenía un pedazo de culazo... Laura me dijo que fuese muy despacio, que era virgen de la puerta trasera, me reí bastante, la verdad, me hizo gracia (yo también era virgen chupando ojetes).

Le puse el dedo mequiñe en la boca para que me lo chupase y empecé a meter el dedo muy poco a poco por su ojete, al principio le dolía un poco, pero poco a poco se le abría más, cada vez me pedía que fuese más rápido, así que fui metiéndole cada vez más dedos y ahí fue también saqué mi lengua a pasear, de arriba abajo, cada vez más rápido, también se lo besaba, se lo comía, todo con unas ganas brutales.

Me dijo algo que me dejó flipando hasta a mí, X... fóllame el culo, no te lo pienses, estoy super mojada... se puso a cuatro patas, me escupí en la polla y empecé a metérsela, muy poco a poco... Laura tenía el culo bastante abierto, así que la polla entraba con mucha facilidad (y reconoceré que tampoco tengo una polla muy grande, más bien normalita), si es cierto que cuando iba algo más rápido, me decía que aflojase, pero a la vez estaba todo el rato gimiendo de placer, los 2 estábamos gimiendo una barbaridad (los vecinos tenían que flipar).

Yo nunca había estado tan cachondo follando, de hecho nunca había dado por el culo y ella no paraba de decirme: ahora sí que sí X, pon el turbo y fóllame el culo super rápido, cambiamos de postura, se puso encima mío y empezó a cabalgarme, yo cada vez iba más y más rápido, a la vez que le comía los pezones y se los mordía, ella cada vez estaba más cachonda, yo estaba apunto de correrme una vez más, era un no parar esto.

En una de estas ocasiones, me dijo que le follase el coño, que ella también estaba muy cerca del orgasmo, que quería que nos corriésemos a la vez (que bonito) saqué la polla de su culo, y se la metí por el coño, nuevamente gimió de placer, empezó a cabalgar, a saltar encima mío, cada vez más y más rápido, la cama echaba fuego (seguramente el vecino también se estaría pajeando, porque la cama chocaba una barbaridad contra la pared, y nosotros hacíamos mucho ruido).

Estaba apunto de correrme, tenía la polla que en cualquier momento iba a explotar, y llegó el momento, nos corrimos a la vez... lo de Laura era una barbaridad, sin duda alguna, el mejor polvazo que he tenido en mi vida, y ahí no había acabado todo, me chupó la polla y dijo anda mira si todavía queda un poquito de semen y se lo trago enteró.

Le dije que era una barbaridad de mujer, se empezó a reír y me dijo que yo también era una barbaridad y que no me enamorase, también me dijo que menos mal que se había duchado antes de quedar conmigo (todo esto entre risas) nos quedamos un rato callados, mirando el techo... le iba a decir de quedarme con ella, pero no me dijo nada, así que me vestí, le dije un hasta pronto, cogí la puerta y me fui.

¿Acabará aquí la historia? si os gusta, la continuaré.
 
Esta tercera parte, es todavía menos ficticia que la anterior.

Era mi turno, me tocaba a mí elegir, recordemos que Laura y yo en nuestro segundo encuentro, nos inventamos un juego con tiempo, dónde podemos hacer lo que queramos en ese tiempo (siempre y cuando la otra persona esté de acuerdo).

Seguí comiéndole los pezones y mordiéndoselos (sabía que le encantaba) pero me tocaba a mí jugar, la verdad es que estaba deseando follármela, pero quería jugar un poco más.

Se tumbó boca arriba, y empecé a pasar mi lengua por su cuerpo, empezando por abajo, en esta ocasión todavía no le había chupado los pies, así que estuve un buen rato pasando mi lengua, por la planta de los pies, por los dedos... todo lentamente, si empiezas poco a poco, el morbo siempre se multiplica.

Le dije que me hiciera una paja, me escupió en la polla, se escupió en los pies, pero antes de hacerme la paja, me dijo que le escupiera yo en la boca, y obviamente le escupí en la boca, empezó a hacerme la paja con los pies... se notaba que era la primera paja que hacía Laura con los pies, pero intentaba dar lo mejor de ella y eso me encantó, me hacía cosquillas y a veces daño, pero a la vez estaba super cachondo y cada vez movía más y más rápido los pies, estaba a punto de correrme... de hecho me corrí un poco, así que le dije que parase... me chupó la polla y se trago el poco semen que se me escapó, ni se lo pensó.

Continué chupando parte de su cuerpo, subí por las piernas, poco a poco... Laura pensaba que le comería el coño una vez más, pero esa ya lo había hecho, así que le levante las piernas, y empecé a chuparle el culo, nunca había comido un culo, pero es que tenía un pedazo de culazo... Laura me dijo que fuese muy despacio, que era virgen de la puerta trasera, me reí bastante, la verdad, me hizo gracia (yo también era virgen chupando ojetes).

Le puse el dedo mequiñe en la boca para que me lo chupase y empecé a meter el dedo muy poco a poco por su ojete, al principio le dolía un poco, pero poco a poco se le abría más, cada vez me pedía que fuese más rápido, así que fui metiéndole cada vez más dedos y ahí fue también saqué mi lengua a pasear, de arriba abajo, cada vez más rápido, también se lo besaba, se lo comía, todo con unas ganas brutales.

Me dijo algo que me dejó flipando hasta a mí, X... fóllame el culo, no te lo pienses, estoy super mojada... se puso a cuatro patas, me escupí en la polla y empecé a metérsela, muy poco a poco... Laura tenía el culo bastante abierto, así que la polla entraba con mucha facilidad (y reconoceré que tampoco tengo una polla muy grande, más bien normalita), si es cierto que cuando iba algo más rápido, me decía que aflojase, pero a la vez estaba todo el rato gimiendo de placer, los 2 estábamos gimiendo una barbaridad (los vecinos tenían que flipar).

Yo nunca había estado tan cachondo follando, de hecho nunca había dado por el culo y ella no paraba de decirme: ahora sí que sí X, pon el turbo y fóllame el culo super rápido, cambiamos de postura, se puso encima mío y empezó a cabalgarme, yo cada vez iba más y más rápido, a la vez que le comía los pezones y se los mordía, ella cada vez estaba más cachonda, yo estaba apunto de correrme una vez más, era un no parar esto.

En una de estas ocasiones, me dijo que le follase el coño, que ella también estaba muy cerca del orgasmo, que quería que nos corriésemos a la vez (que bonito) saqué la polla de su culo, y se la metí por el coño, nuevamente gimió de placer, empezó a cabalgar, a saltar encima mío, cada vez más y más rápido, la cama echaba fuego (seguramente el vecino también se estaría pajeando, porque la cama chocaba una barbaridad contra la pared, y nosotros hacíamos mucho ruido).

Estaba apunto de correrme, tenía la polla que en cualquier momento iba a explotar, y llegó el momento, nos corrimos a la vez... lo de Laura era una barbaridad, sin duda alguna, el mejor polvazo que he tenido en mi vida, y ahí no había acabado todo, me chupó la polla y dijo anda mira si todavía queda un poquito de semen y se lo trago enteró.

Le dije que era una barbaridad de mujer, se empezó a reír y me dijo que yo también era una barbaridad y que no me enamorase, también me dijo que menos mal que se había duchado antes de quedar conmigo (todo esto entre risas) nos quedamos un rato callados, mirando el techo... le iba a decir de quedarme con ella, pero no me dijo nada, así que me vestí, le dije un hasta pronto, cogí la puerta y me fui.

¿Acabará aquí la historia? si os gusta, la continuaré.
Brutal la tercera parte compañero, una gran mujer Laura, y como me gusta que disfrutes de sus pies…quizàs a mi también me deje…🦶🦶
 
Esta tercera parte, es todavía menos ficticia que la anterior.

Era mi turno, me tocaba a mí elegir, recordemos que Laura y yo en nuestro segundo encuentro, nos inventamos un juego con tiempo, dónde podemos hacer lo que queramos en ese tiempo (siempre y cuando la otra persona esté de acuerdo).

Seguí comiéndole los pezones y mordiéndoselos (sabía que le encantaba) pero me tocaba a mí jugar, la verdad es que estaba deseando follármela, pero quería jugar un poco más.

Se tumbó boca arriba, y empecé a pasar mi lengua por su cuerpo, empezando por abajo, en esta ocasión todavía no le había chupado los pies, así que estuve un buen rato pasando mi lengua, por la planta de los pies, por los dedos... todo lentamente, si empiezas poco a poco, el morbo siempre se multiplica.

Le dije que me hiciera una paja, me escupió en la polla, se escupió en los pies, pero antes de hacerme la paja, me dijo que le escupiera yo en la boca, y obviamente le escupí en la boca, empezó a hacerme la paja con los pies... se notaba que era la primera paja que hacía Laura con los pies, pero intentaba dar lo mejor de ella y eso me encantó, me hacía cosquillas y a veces daño, pero a la vez estaba super cachondo y cada vez movía más y más rápido los pies, estaba a punto de correrme... de hecho me corrí un poco, así que le dije que parase... me chupó la polla y se trago el poco semen que se me escapó, ni se lo pensó.

Continué chupando parte de su cuerpo, subí por las piernas, poco a poco... Laura pensaba que le comería el coño una vez más, pero esa ya lo había hecho, así que le levante las piernas, y empecé a chuparle el culo, nunca había comido un culo, pero es que tenía un pedazo de culazo... Laura me dijo que fuese muy despacio, que era virgen de la puerta trasera, me reí bastante, la verdad, me hizo gracia (yo también era virgen chupando ojetes).

Le puse el dedo mequiñe en la boca para que me lo chupase y empecé a meter el dedo muy poco a poco por su ojete, al principio le dolía un poco, pero poco a poco se le abría más, cada vez me pedía que fuese más rápido, así que fui metiéndole cada vez más dedos y ahí fue también saqué mi lengua a pasear, de arriba abajo, cada vez más rápido, también se lo besaba, se lo comía, todo con unas ganas brutales.

Me dijo algo que me dejó flipando hasta a mí, X... fóllame el culo, no te lo pienses, estoy super mojada... se puso a cuatro patas, me escupí en la polla y empecé a metérsela, muy poco a poco... Laura tenía el culo bastante abierto, así que la polla entraba con mucha facilidad (y reconoceré que tampoco tengo una polla muy grande, más bien normalita), si es cierto que cuando iba algo más rápido, me decía que aflojase, pero a la vez estaba todo el rato gimiendo de placer, los 2 estábamos gimiendo una barbaridad (los vecinos tenían que flipar).

Yo nunca había estado tan cachondo follando, de hecho nunca había dado por el culo y ella no paraba de decirme: ahora sí que sí X, pon el turbo y fóllame el culo super rápido, cambiamos de postura, se puso encima mío y empezó a cabalgarme, yo cada vez iba más y más rápido, a la vez que le comía los pezones y se los mordía, ella cada vez estaba más cachonda, yo estaba apunto de correrme una vez más, era un no parar esto.

En una de estas ocasiones, me dijo que le follase el coño, que ella también estaba muy cerca del orgasmo, que quería que nos corriésemos a la vez (que bonito) saqué la polla de su culo, y se la metí por el coño, nuevamente gimió de placer, empezó a cabalgar, a saltar encima mío, cada vez más y más rápido, la cama echaba fuego (seguramente el vecino también se estaría pajeando, porque la cama chocaba una barbaridad contra la pared, y nosotros hacíamos mucho ruido).

Estaba apunto de correrme, tenía la polla que en cualquier momento iba a explotar, y llegó el momento, nos corrimos a la vez... lo de Laura era una barbaridad, sin duda alguna, el mejor polvazo que he tenido en mi vida, y ahí no había acabado todo, me chupó la polla y dijo anda mira si todavía queda un poquito de semen y se lo trago enteró.

Le dije que era una barbaridad de mujer, se empezó a reír y me dijo que yo también era una barbaridad y que no me enamorase, también me dijo que menos mal que se había duchado antes de quedar conmigo (todo esto entre risas) nos quedamos un rato callados, mirando el techo... le iba a decir de quedarme con ella, pero no me dijo nada, así que me vestí, le dije un hasta pronto, cogí la puerta y me fui.

¿Acabará aquí la historia? si os gusta, la continuaré.
Continúa por favor y sobre todo dinos que es real y que no...es un morbazo leerte.
 

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