XtremMan
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La pileta nos calentó
Lo que voy a narrar pasó hace varios años, una tarde de verano de mucho calor.
Resulta que había ido a rendir unos finales a la universidad pero finalizado el primero tenía que esperar 3 horas para rendir el segundo examen, ya que no llegaba tampoco a volver a mi casa ni tenía sentido. Así que comencé a dar unas vueltas, pero el sol del mediodía estaba terrible y el calor era inaguantable.
En un momento me cruzo con Marcos, un compañero de la materia que tenía que rendir. Si bien no lo consideraba "amigo" cursamos juntos todo el año y ya nos conocíamos bastante. El me comentó que su abuela vivía a un par de cuadras de la universidad, que porque no íbamos a tomar algo fresco a su casa y a esperar que se haga la hora de rendir, así que le dije que me parecía bien.
Llegamos a la casa y me ofreció una cerveza, pero como teníamos que rendir le dije que mejor una gaseosa y luego me pregunta que si quería meterme a la pile. La verdad que hacía mucho calor, estaba un poco transpirado y la pileta se veía perfecta, pero le digo que no, que estaba bien y que no tenia ropa con que meterme ya que luego teníamos que ir a rendir y tampoco estaba en su casa como para prestarme algún short. Pero él, rápidamente se desvistió delante de mí, sin ningún problema, quedando solo en bóxer y corrió directamente hacia la pileta metiéndose de un salto.
- Está linda el agua, metete. Hacé como yo, metete en bóxer, no te vé nadie. Mi abuela está acostada.
- Bueno está bien, le digo. Y comienzo a desvestirme con cierta timidez. Su mirada no ayudaba, ya que en vez de seguir nadando, se había quedado en la orilla esperándome y mirando atento como me desvestía hasta quedar en slip. A diferencia de él que usaba bóxer, yo siempre preferí usar slip, aunque en esa situación no ayudaba a ocultar nada y peor una vez mojado. Rápidamente me meto a la pileta, para intentar tapar un poco mi cuerpo con ayuda del agua. Comenzamos a nadar, salpicar y reír como chicos.
Marcos propone que juguemos a "Marco Polo", el típico juego donde uno con los ojos cerrados intentar atrapar al otro. Como estábamos un poco aburridos y aún faltaban más de 2 horas para rendir, nos pusimos a jugar. Comenzaba yo a buscarlo con los ojos cerrados. Luego de cerrar los ojos, él comenzó a darme vueltas para marearme y así complicar la búsqueda. Fue el primer momento donde comienzo a sentir sus manos agarrándome de los hombros, el abdomen y hasta de la cintura. Terminados los giros y luego de contar hasta diez, comienzo a moverme por la pileta con los brazos extendidos buscando a Marcos.
Él, cada tanto, gritaba "Polo" o incluso salpicaba agua o hacia ruidos cerca mío, para despistarme. En ocasiones lograba rozarlo mínimamente con la punta de mis dedos o pies pero rápidamente se escabullía. Incluso pasaba rozándome apropósito como burlándose que no podía atraparlo. Sentía sus manos rozando mi espalda, mis piernas y en alguna ocasión hasta mis nalgas, aunque suponía que era casualidad ya que los movimientos en el agua se complican.
En más de una ocasión logré agarrarlo de un pié o un brazo pero se me escapaba, diciendo que si no lo atrapaba del todo no valía. Ya estaba por darme por vencido hasta que en un movimiento rápido estiro mi mano y logro agarrarlo del bóxer y hago fuerza como para poder agarrarlo bien y no se me vuelva a escapar. Siento su intento de escapar mientras agarraba firmemente su prenda hasta que me doy cuenta que me quedo con su bóxer en la mano. El muy tramposo se había deshecho del mismo, con tal de que no lo atrape. Yo como venganza y a modo de broma, lancé su bóxer muy lejos de la pile, dejándolo desnudo y teniendo que salir, si quería recuperarlo, aunque él solo reía y no parecía haberse enojado.
- Bueno está bien ganaste vos, me dijo. Ahora me toca a mi atraparte. Y como si no importara que estaba desnudo comencé a girarlo para comenzar el juego. En cada vuelta él se movía acercándose a mí, no sé si de forma intencionada o por perder el equilibrio por el mareo, pero incluso sentí que me rozó con su pene en esos giros. No le dije nada porque era un juego y tampoco me molestó, aparte el estaba así por mi broma. Contamos hasta diez y comenzó a buscarme por la pileta. Marcos en ocasiones se metía por debajo del agua a intentar buscarme, cosa que no discutimos si estaba permitida, pero yo no podía controlar que no abriera sus ojos. El no solo me atrapó rápido sino que fue justamente a agarrarme de mi slip, tirando rápidamente hacia abajo con ambas manos. Intenté cerrar mis piernas, pero era tarde. Él reía fuertemente en una esquina de la pileta con mi slip en su mano, agitándolo victorioso como si fuera un trofeo para luego arrojarlo, incluso más lejos que donde se encontraba su bóxer, quedando así ambos desnudos en la pileta.
Un poco para cobrarme venganza y a modo también de broma voy a buscarlo amenazando que lo iba a hacer tragar agua. Y ambos "peleábamos" intentando hundirnos o ahogarnos entre nosotros, lo cual resultaba en dos cuerpos desnudos frotándose y manoseándose bajo el agua. Creo que sus movimientos tenían otra intención ya que varias veces me manoseaba el culo o las piernas, me daba la espalda o se me tiraba encima mío frotando nuestros penes por todas partes.
Nunca me había fijado en Marcos o en otro hombre, ya que me consideraba hetero. Pero no sé si fue la situación de los roces o qué, pero se me paró la pija quedando erecto y duro como pocas veces. Intenté disimular, incluso alejarme un poco o tirando mi cintura hacia atrás cuando Marcos se me tiraba encima para que no sintiera mi pene y se diera cuenta. Eso no fue suficiente y el terminó rozando su cola contra mi pija dura y como si fuera parte del juego, estiró su mano hasta agarrarme la pija diciendo:
-Epaa que pasó acá? jaja yo sentía algo duro...(hizo rápido dos movimientos como pajeandome y me soltó).
Yo totalmente avergonzado le digo que me disculpe y que mejor saliéramos a vestirnos. A lo cual él me dice:
-Tranquilo jaja no pasa nada, es completamente normal, mirá. Y agarrándome de la mano la guía hasta apoyarla sobre su pija también erecta. Se sentía enorme.
Yo no supe cómo reaccionar y él para romper esa tensión o momento incomodo siguió como queriéndome ahogar o pelear, solo que estaba vez sus roces eran más contundentes y menos disimulados, llegando a apretarme una nalga o agarrarme la pija y soltarla.
En un momento logro arrinconarlo contra el borde de la pileta abrazándolo desde atrás con fuerza y quedando sin darme cuenta, apoyando mi verga en su culo. El se movía como intentando salirse, pero prácticamente no hacia fuerza, sino que movía su cola hacia atrás y luego de arriba hacia abajo como masturbándome con sus nalgas.
Así estuvo un rato, hasta que con una mano me tomó de la pija y con la otra se abrió un poco una de las nalgas apuntado mi caliente y erguida verga directo a su hoyito. Yo no sabía qué hacer, estaba confundido, pensaba que todo se nos había ido de las manos, pero la verdad que la situación me tenía a punto de explotar y la calentura podía más, necesitaba algo más y me dejé llevar por la situación, comenzando a presionar lentamente la cabeza de mi pija en el culo de Marcos.
Él comenzó a llevar su cola hacia atrás hundiéndose centímetro a centímetro toda mi verga hasta quedarse quieto unos segundos para luego comenzar a moverse. Se movía lento para luego ir acelerando su ritmo hasta que sin poder aguantar más, terminé acabando dentro de él, inundando su cola de leche.
- Que calentito! .Me dice como bromeando.
Nos separamos como si nada hubiese pasado.
Nos pegamos un baño? Me pregunta mientras sale de la pileta desnudo hacia el baño con algo de semen escapando entre sus piernas.
Marcos entró en la ducha.
Qué esperás? vení bañémonos juntos que es más rápido o te da vergüenza que te vea desnudo? jajaja
Creo que ya no quedaba vergüenza entre nosotros después de lo que había pasado, así que entré a la ducha con él, pero enseguida le digo.
-Pará que me estoy meando y cuando estaba por salir me agarra del hombro.
-Hacé pis acá, ya fue, no importa.
Me costó hacer pis con el ahí viéndome hasta que salió un chorro fuerte y por no mojar la cortina de baño me giré rápidamente y sin querer le meo toda la pierna a Marcos. El riéndose dice:
-ahhhh que calentito! tenia frio! E inmediatamente como venganza me dice:
-Ahora me toca a mí y apuntándome con su pija y sin darme tiempo a nada, comienza a mearme todo el cuerpo, desde casi mi pecho hasta los pies. Esa sensación calentita sobre mi cuerpo frio me gustó y contrario a darme asco, incluso me calentó.
Marcos se dio cuenta y se acercó, uniendo nuestros cuerpos y comenzando a frotarnos sin siquiera llegar a enjuagarnos. Se agachó frente a mí y de un movimiento se metió mi pija en su boca sin importarle que no esté limpia. Su boca me estaba matando de placer, mientras que sus manos comenzaron a masajear y tocar mi cola. Empujaba con ambas manos mis nalgas hacia él, como para tragarse más profundo mi verga. Luego comenzó a jugar de a poco con mi culito y con algún dedo travieso que iba más allá, hasta que consiguió introducirme un poco su dedo sin sentir ningún dolor.
Mientras jugaba con él dentro mío dando círculos, continuaba chupándome la pija. Para cuando me di cuenta ya estaba jugando con 2 dedos en mi culito y yo solo me dejaba llevar del placer.
Marcos sin dejarme acabar se levantó y ubicándose detrás mío comenzó a frotar su pija por todo mi culito. Jugaba como lo hacía con sus dedos, solo que esta vez era algo más grande.
Una parte mía quería saber cómo se sentía una verga en mi cola aunque también sentía algo de pudor y miedo a que me fuera a doler. El placer era más fuerte que la duda, ya ni pensaba si lo que hacíamos era correcto o no. Casi por instinto me agaché un poco, levantando mi cola cuando sin control suelto un leve gemido al sentir su glande ubicado justo en la entrada de mi culito. Sin aguantar un segundo más, comienzo a empujar, tirando mi cola hacia atrás lentamente sintiendo como comienza a entrar aquella verga dura y caliente centímetro a centímetro dentro mío. Pensé que iba a ser algo doloroso debido al tamaño de su miembro pero la calentura y el juego previo de sus dedos habían ayudado.
Una vez sentí que toda esa verga había entrado completamente y sintiendo el cuerpo de Marcos contra el mío, nos quedamos unos segundos inmóviles. Podía sentir dentro mío el calor de esa verga y como palpitaba. Ya no corría el agua que Marcos había cerrado, el silencio era casi absoluto, solo se escuchaban nuestras respiraciones y jadeos.
Comencé lentamente a moverme, moviendo la colita hacia delante suavemente para luego volver a meterme la pija nuevamente hasta el fondo.
-Ahh si! que rico.... mmmm cogeme!
Eran las palabras que salían de mi sin pensarlas, era increíble como entré como un macho hetero y a pocos minutos me sentía toda mujer en celo, queriendo sentir aquella gruesa verga abriendo todo mi culito. Era tal mi calentura que ni siquiera quería tocarme la pija porque sabía que iba a acabar inmediatamente, incluso en más de una ocasión le saque la mano a Marcos quien buscaba mi pija para pajearme.
Comencé a moverme cada vez más rápido y más fuerte, clavándome esa pija lo más que podía y volviéndola a sacar casi por completo, era yo quien embestía con mi culo, yo me estaba cogiendo a Marcos literalmente. Cuando estaba por acabar me agarró de la cintura y comenzó ahora él a embestirme fuertemente.
-Tomá pija putita! te gusta? Mientras empujaba más y más fuerte.
Sentía como sus huevos chocaban contra mí.
-Me encanta! rompeme la cola. Quiero sentir toda esa pija bien dentro mío.
-Sii que rico, asiii. Respondió una parte de mi que no sabía que existía.
Comencé a sentir como descargaba toda su leche calentita dentro mío y fue en ese instante que sin siquiera tocarme comencé a acabar como nunca mientras sentía sus embestidas profundas inundando mi interior. Nos quedamos en esa posición un rato, aún con la pija de Marcos dentro mío, mientras recuperábamos el aire mientras aún podía sentir palpitar su verga la cual fue disminuyendo su tamaño saliendo de mi cola y dejando fluir por mis piernas toda la leche que había descargado en mi.
Luego nos terminamos de bañar rápidamente y nos cambiamos ya que no queríamos llegar tarde al examen. Hicimos como si nada hubiera pasado y no volvimos a tocar el tema, al menos por un tiempo.
Fin