Mi cuñada y yo…

Espartero

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14 Oct 2023
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Una noche después de una larga jornada laboral al regresar la casa, me encuentro con mi cuñada Carla sentada en el sofá muy pensativa.
El piso lo compartimos mi esposa, mi cuñada y su marido.
Carla después de unas conversaciones banales, de trabajo, el clima caluroso que estábamos pasando, noto en su mirada algo de enfado y preocupación. Le pregunto qué le pasa, (siempre hemos tenido un buen trato y una excelente relación y sobre todo mucha confianza), le digo ‘vamos cuéntame chica’; voy cojo una cerveza en la nevera y le invito a que se desahogue conmigo:

Carla: Oye le que te cuente aquí no se lo digas a nadie ni a mi hermana por favor, que me da mucha vergüenza.

Obvio que le digo que no hay problema que cuente conmigo, toma un gran sorbo de cerveza y me pasa a contar su situación.

Carla: El problema es con mi marido, no sé qué le pasa, ya no me busca, siempre llega cansado, y en la cama bueno… Ya hasta me ha hecho varios desplantes, no sé qué hacer.

Me quedo mudo, hay que estar loco como para rechazar a semejante hembra que tenía enfrente, 1,70 de altura, caderas anchas seguida de un culo, que levanta a cualquier muerto de su tumba, unas nalgas redondas en una excelente proporción con su cadera, unas piernas de escándalo… sus tetas grandes…

Yo: Lo que tienes que hacer es convertirte en una fiera salvaje y provocar a ese hombre con el cuerpazo que te gastas no habrá que se resista.

Me vio a los ojos y me sonrió pícaramente.

Carla: Ya lo hice sin resultados, hice de todo hasta le baile, prácticamente lo intente follar pero sin éxito, ya que su amiguito de allá abajo (haciendo un gesto con sus labios hacia mi entrepierna) ni se movió, no se le paro, estoy desesperada.

La verdad lo que me decía viniendo del inútil de su marido no me sorprendía, un gordiflón bueno para nada que pasa sus ratos libres jugando videojuegos, en vez de estar dando y dándole caña al manjar que tiene como mujer.

Carla: De verdad que pensaba que a mi juventud (25 años) seria activa sexualmente hablando hasta más que ustedes jajaja. No creas que no les he escuchado por las noches mientras te follas a mi hermanita jajá que bien que se lo pasan y por los ruidos que hace mi hermana se ve que la atiendes muy bien jajaja aunque intente hablar bajito puedo escucharla perfectamente uyyy que rico así dame más jajaja no le cuentes a mi hermana que se muere de la vergüenza.

Yo: Jajaja o sea que te gusta escucharnos follar?

Carla: Vaya que si me gusta, a veces pienso que es a mí que están follando así de rico ufff y ni por eso mi marido se despierta y se anima.

Pensé vaya el alcohol está haciendo efecto, y será que mi cuñada se masturba pensando que la follan o que yo la estoy follando… al fin al cabo soy el que provoca los gemidos de su hermana que es lo que al final la excita. Ya empezaba a notarse un bulto en mi pantalón por lo caliente de la conversación y por lo ligera de ropa que iba mi cuñada, (blusa de algodón casi transparente que a través de la luz de la lámpara dejaba ver perfectamente sus pequeños y suculentos senos. Carla no pasó desapercibida mi pequeña erección miraba fijamente mi bulto y sonreía pícaramente, al parecer la ponía feliz ver mi erección.

Yo: Puedes probar con alguna vitamina un estimulante sexual no se a lo mejor no es su culpa el estrés puede bajar la libido.

Carla: Puede ser pero a ti no te pasa, sé que llegas cansado del trabajo porque lo veo en tu cara y de seguro hoy le pegas tremenda follada a mi hermanita jajaja.

Y vuelve la mujer con el tema, definitivamente le gusta escucharme follar, debería de darle un espectáculo para que deleite sus oídos jajá esta noche mi chica no se salva. Carla miraba fijamente mi paquete y me lo acomode lentamente de forma descarada frente a ella, culpando a lo incomodo del bóxer y ella abrió los ojos sorprendida le gusto lo que vio.
Ella se levanta a tirar la botella de cerveza cuando se tropieza y deja caer unas revistas que estaban sobre la mesa, se dispone a recogerlas sin doblar las rodillas, la muy putilla le gusta provocarme. Cuando me percato y miro su redondo y perfecto culo, me doy cuenta de un pequeño detalle, el short muy cortito también es de algodón haciendo juego con la blusa cosa que lo hace también transparente a través de la luz, cual es mi sorpresa? no lleva pantys. La verdad siempre los usa así para dormir y siempre me había dado cuenta pero por la confianza que nos tenemos nunca ha habido ningún problema, pera esta vez la veía de forma diferente, como una gatita en celo.

No desvié la mirada, mire fijamente su culo y ella lo noto, luego la seguí a la cocina. Ella se dispuso a fregar unos trastes que había, me acerque por detrás pegue mi bulto a su culo, ella se sorprendió pero no se quejó, la abrace por la cintura y le dije:

Yo: Cuñadita espero hoy estés muy atenta, hoy tu hermanita y yo te daremos un espectáculo solo para ti, voy a dejar la puerta un poco abierta por si te animas a ver además de oírnos, que te parece.

Pensé para mis adentros, ya me la jugué o me suelta una hostia y le cuenta a la hermana que me sobre pase con ella o me sigue el juego.

Carla: Gracias cuñadito tu siempre pensando en ayudarme, siempre eres tan majo… que suerte tiene mi hermana a veces la envidio.


Y hasta aquí la primera parte…
 
Me temo que al cuñado le espera una buena gorra con mangas... :devilish::devilish::devilish::devilish: 🤘 🤘 🤘 🤘 🤘 🤘
 

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Una noche después de una larga jornada laboral al regresar la casa, me encuentro con mi cuñada Carla sentada en el sofá muy pensativa.
El piso lo compartimos mi esposa, mi cuñada y su marido.
Carla después de unas conversaciones banales, de trabajo, el clima caluroso que estábamos pasando, noto en su mirada algo de enfado y preocupación. Le pregunto qué le pasa, (siempre hemos tenido un buen trato y una excelente relación y sobre todo mucha confianza), le digo ‘vamos cuéntame chica’; voy cojo una cerveza en la nevera y le invito a que se desahogue conmigo:

Carla: Oye le que te cuente aquí no se lo digas a nadie ni a mi hermana por favor, que me da mucha vergüenza.

Obvio que le digo que no hay problema que cuente conmigo, toma un gran sorbo de cerveza y me pasa a contar su situación.

Carla: El problema es con mi marido, no sé qué le pasa, ya no me busca, siempre llega cansado, y en la cama bueno… Ya hasta me ha hecho varios desplantes, no sé qué hacer.

Me quedo mudo, hay que estar loco como para rechazar a semejante hembra que tenía enfrente, 1,70 de altura, caderas anchas seguida de un culo, que levanta a cualquier muerto de su tumba, unas nalgas redondas en una excelente proporción con su cadera, unas piernas de escándalo… sus tetas grandes…

Yo: Lo que tienes que hacer es convertirte en una fiera salvaje y provocar a ese hombre con el cuerpazo que te gastas no habrá que se resista.

Me vio a los ojos y me sonrió pícaramente.

Carla: Ya lo hice sin resultados, hice de todo hasta le baile, prácticamente lo intente follar pero sin éxito, ya que su amiguito de allá abajo (haciendo un gesto con sus labios hacia mi entrepierna) ni se movió, no se le paro, estoy desesperada.

La verdad lo que me decía viniendo del inútil de su marido no me sorprendía, un gordiflón bueno para nada que pasa sus ratos libres jugando videojuegos, en vez de estar dando y dándole caña al manjar que tiene como mujer.

Carla: De verdad que pensaba que a mi juventud (25 años) seria activa sexualmente hablando hasta más que ustedes jajaja. No creas que no les he escuchado por las noches mientras te follas a mi hermanita jajá que bien que se lo pasan y por los ruidos que hace mi hermana se ve que la atiendes muy bien jajaja aunque intente hablar bajito puedo escucharla perfectamente uyyy que rico así dame más jajaja no le cuentes a mi hermana que se muere de la vergüenza.

Yo: Jajaja o sea que te gusta escucharnos follar?

Carla: Vaya que si me gusta, a veces pienso que es a mí que están follando así de rico ufff y ni por eso mi marido se despierta y se anima.

Pensé vaya el alcohol está haciendo efecto, y será que mi cuñada se masturba pensando que la follan o que yo la estoy follando… al fin al cabo soy el que provoca los gemidos de su hermana que es lo que al final la excita. Ya empezaba a notarse un bulto en mi pantalón por lo caliente de la conversación y por lo ligera de ropa que iba mi cuñada, (blusa de algodón casi transparente que a través de la luz de la lámpara dejaba ver perfectamente sus pequeños y suculentos senos. Carla no pasó desapercibida mi pequeña erección miraba fijamente mi bulto y sonreía pícaramente, al parecer la ponía feliz ver mi erección.

Yo: Puedes probar con alguna vitamina un estimulante sexual no se a lo mejor no es su culpa el estrés puede bajar la libido.

Carla: Puede ser pero a ti no te pasa, sé que llegas cansado del trabajo porque lo veo en tu cara y de seguro hoy le pegas tremenda follada a mi hermanita jajaja.

Y vuelve la mujer con el tema, definitivamente le gusta escucharme follar, debería de darle un espectáculo para que deleite sus oídos jajá esta noche mi chica no se salva. Carla miraba fijamente mi paquete y me lo acomode lentamente de forma descarada frente a ella, culpando a lo incomodo del bóxer y ella abrió los ojos sorprendida le gusto lo que vio.
Ella se levanta a tirar la botella de cerveza cuando se tropieza y deja caer unas revistas que estaban sobre la mesa, se dispone a recogerlas sin doblar las rodillas, la muy putilla le gusta provocarme. Cuando me percato y miro su redondo y perfecto culo, me doy cuenta de un pequeño detalle, el short muy cortito también es de algodón haciendo juego con la blusa cosa que lo hace también transparente a través de la luz, cual es mi sorpresa? no lleva pantys. La verdad siempre los usa así para dormir y siempre me había dado cuenta pero por la confianza que nos tenemos nunca ha habido ningún problema, pera esta vez la veía de forma diferente, como una gatita en celo.

No desvié la mirada, mire fijamente su culo y ella lo noto, luego la seguí a la cocina. Ella se dispuso a fregar unos trastes que había, me acerque por detrás pegue mi bulto a su culo, ella se sorprendió pero no se quejó, la abrace por la cintura y le dije:

Yo: Cuñadita espero hoy estés muy atenta, hoy tu hermanita y yo te daremos un espectáculo solo para ti, voy a dejar la puerta un poco abierta por si te animas a ver además de oírnos, que te parece.

Pensé para mis adentros, ya me la jugué o me suelta una hostia y le cuenta a la hermana que me sobre pase con ella o me sigue el juego.

Carla: Gracias cuñadito tu siempre pensando en ayudarme, siempre eres tan majo… que suerte tiene mi hermana a veces la envidio.


Y hasta aquí la primera parte…
Interesante ......;)
Saludos🍻
 
(II)

De solo pensar la idea de que mi cuñada nos iba a escuchar o tal vez hasta vernos, me excito de tal manera que enseguida tenía mi polla como un mástil. Entonces abrace a mi esposa por detrás, ella lo sintió,( eso le excita mucho, sentir mi polla en su culo), y empezó la función.

Julia: Ummm veo que tienes muchas ganas…

Yo; Siempre te tengo ganas tú lo sabes.

Empiezo a bajar su pantys y toco su clitoris, (ya estaba muy lubricada), ella también tenía ganas de guerra. Entonces empiezo a morder su cuello, a chupar los pezones… mientras la voy tocando el clitoris suavemente. Después de un rato así, la voy penetro poco a poco, primero suave y después acelerando el ritmo. Mi esposa nunca ha tenido problemas para llegar al orgasmo, todo lo contrario. Así que mantengo el ritmo, penetraciones lentas, con fuerza y profundas, que entrara lo que más pudiera así le gusta a ella.
Ella solo respondía con ummm bajito después de cada penetración. Hasta que empieza el concierto para mi cuñada, mi esposa imagino yo que todavía un poco dormida olvida que nos pueden oír, y empezamos una faena plena de sexo salvaje.

Julia: Así dame así duro ummm me gusta ahhh que rico dame más duro quiero sentirme tuya, tu hembra ufff que rico sigue.

Veo hacia la puerta y veo a nuestra espectadora, en efecto, muy tímidamente asomada en la puerta desde ahí veía claramente sus ojos sorprendida y a la vez excitada.

Julia: SIII mi amor que rico, dame duro, follame duro como me encanta.

Cojo una de mis corbatas que estaba en la mesa de noche y vendo a Julia, por si acaso. Levanto su pierna y recuesto su peso hacia mí de modo que quede con las piernas abiertas y mi cuñada vea mejor como la cojo. Luego miro hacia la puerta y veo tímidamente a mi cuñada asomándose y saliendo, le indico con señas que Julia no puede ver que haga silencio y que entre, todo sin hacer ruido. Y ahora si empieza el verdadero show en honor a mi cuñada…

Mi esposa continuaba en su faceta de pornostar como hacía tiempo que no la veía, sin saber lo que estaba pasando.

Mi cuñada se mostraba indecisa de entrar, al final se decidió por no entrar se quedó solo mirando, se veía como hipnotizada como si no creyera lo que estaba viendo.

Julia: Cógeme de perrito mi amor.

Obedeciendo el pedido de mi esposa cambiamos de posición. Cogi a Julia de las caderas y la empiezo a penetrar duro y lo más rápido que puedo y ella responde con unos gemidos que me muestra lo súper excitada que esta, cojo a mi esposa con fuerza sin perder la visión de nuestra espectadora.

Para ponerle más morbo al asunto, empiezo a incitar a Julia a que sacara a la puta que lleva dentro.

Yo: Te gusta que te coja así como una perra? te gusta sentirte como una perra?

Julia: Si mi amor me encanta ahhh

Yo: Quien es mi perra?

Julia: Yo mi amor soy tu perra, tu puta siii mmm pero no pares de cogerme por favor

Yo: Dime quien es tu macho?

Julia: Tuuu tu eres mi macho, mi sueño mi amor

Yo: te gusta esta verga que te estas comiendo puta?

Julia: SIII me encanta tu verga, la verga de mi hombre.

Miro a la puerta y mi cuñada sigue ahí expectante, con los abiertos como platos. Ahora ya sentía a Julia en el clímax era hora de apresurarme para el cierre del show, la guinda del pastel. Miro a mi cuñada y sigue ahí parada, con una mano dentro de su short del pijama, se estaba tocando, a través de la tela se notan que sus pezones están erectos y muy duros, está demasiado excitada. Pienso ok cuñadita prepárate si no te creías ver a tu hermanita en esta faceta lo que veras ahora te dejara loca, halo a Julia por el cabello y le doy una sonora azotada en el culo. Acelero mis embestidas, yo ya tampoco aguanto más estoy que me corro también, ya no puedo aguantar más mis testículos se hinchan de la carga que están soportando.

Yo: Donde quieres tu leche puta.

Julia: En la boquita mi amor, deja que tu puta se bebe tu lechita caliente y espesa.

Se la saco rápidamente, ella se levanta y se da vuelta y se quita la venda buscando mi verga, mi cuñadita al ver que su hermana se quita la venda se sale de la habitación por miedo a ser descubierta por su hermana, pero continua expectante desde afuera a través de la puerta entre abierta.

Yo: Toma leche puta bébela toda no dejes ni una gota.

Julia: mmm que rica lechita caliente como me gusta, llena de todas las vitaminas y minerales que necesito.

Yo: Ufff mi amor que rico

Julia: Divino mi amor, demasiado rico, hacia tiempo que no lo hacíamos así, tenemos que hacerlo así más seguido sabes que me encanta que me trates como una puta en la cama, bueno tu puta.

Miro a ver, mi cuñada ya se había ido. Ya no puedo esperar a quedar a solas con ella para saber qué tal le pareció el show que montamos (Julia sin saberlo) para ella.

CONTINUARÁ...
 
Me apunto el truco de la venda, quizás un día lo use para "invitar" a la mía como tú lo has hecho jejeje. Buena historia, muy morbosa.
 
Una noche después de una larga jornada laboral al regresar la casa, me encuentro con mi cuñada Carla sentada en el sofá muy pensativa.
El piso lo compartimos mi esposa, mi cuñada y su marido.
Carla después de unas conversaciones banales, de trabajo, el clima caluroso que estábamos pasando, noto en su mirada algo de enfado y preocupación. Le pregunto qué le pasa, (siempre hemos tenido un buen trato y una excelente relación y sobre todo mucha confianza), le digo ‘vamos cuéntame chica’; voy cojo una cerveza en la nevera y le invito a que se desahogue conmigo:

Carla: Oye le que te cuente aquí no se lo digas a nadie ni a mi hermana por favor, que me da mucha vergüenza.

Obvio que le digo que no hay problema que cuente conmigo, toma un gran sorbo de cerveza y me pasa a contar su situación.

Carla: El problema es con mi marido, no sé qué le pasa, ya no me busca, siempre llega cansado, y en la cama bueno… Ya hasta me ha hecho varios desplantes, no sé qué hacer.

Me quedo mudo, hay que estar loco como para rechazar a semejante hembra que tenía enfrente, 1,70 de altura, caderas anchas seguida de un culo, que levanta a cualquier muerto de su tumba, unas nalgas redondas en una excelente proporción con su cadera, unas piernas de escándalo… sus tetas grandes…

Yo: Lo que tienes que hacer es convertirte en una fiera salvaje y provocar a ese hombre con el cuerpazo que te gastas no habrá que se resista.

Me vio a los ojos y me sonrió pícaramente.

Carla: Ya lo hice sin resultados, hice de todo hasta le baile, prácticamente lo intente follar pero sin éxito, ya que su amiguito de allá abajo (haciendo un gesto con sus labios hacia mi entrepierna) ni se movió, no se le paro, estoy desesperada.

La verdad lo que me decía viniendo del inútil de su marido no me sorprendía, un gordiflón bueno para nada que pasa sus ratos libres jugando videojuegos, en vez de estar dando y dándole caña al manjar que tiene como mujer.

Carla: De verdad que pensaba que a mi juventud (25 años) seria activa sexualmente hablando hasta más que ustedes jajaja. No creas que no les he escuchado por las noches mientras te follas a mi hermanita jajá que bien que se lo pasan y por los ruidos que hace mi hermana se ve que la atiendes muy bien jajaja aunque intente hablar bajito puedo escucharla perfectamente uyyy que rico así dame más jajaja no le cuentes a mi hermana que se muere de la vergüenza.

Yo: Jajaja o sea que te gusta escucharnos follar?

Carla: Vaya que si me gusta, a veces pienso que es a mí que están follando así de rico ufff y ni por eso mi marido se despierta y se anima.

Pensé vaya el alcohol está haciendo efecto, y será que mi cuñada se masturba pensando que la follan o que yo la estoy follando… al fin al cabo soy el que provoca los gemidos de su hermana que es lo que al final la excita. Ya empezaba a notarse un bulto en mi pantalón por lo caliente de la conversación y por lo ligera de ropa que iba mi cuñada, (blusa de algodón casi transparente que a través de la luz de la lámpara dejaba ver perfectamente sus pequeños y suculentos senos. Carla no pasó desapercibida mi pequeña erección miraba fijamente mi bulto y sonreía pícaramente, al parecer la ponía feliz ver mi erección.

Yo: Puedes probar con alguna vitamina un estimulante sexual no se a lo mejor no es su culpa el estrés puede bajar la libido.

Carla: Puede ser pero a ti no te pasa, sé que llegas cansado del trabajo porque lo veo en tu cara y de seguro hoy le pegas tremenda follada a mi hermanita jajaja.

Y vuelve la mujer con el tema, definitivamente le gusta escucharme follar, debería de darle un espectáculo para que deleite sus oídos jajá esta noche mi chica no se salva. Carla miraba fijamente mi paquete y me lo acomode lentamente de forma descarada frente a ella, culpando a lo incomodo del bóxer y ella abrió los ojos sorprendida le gusto lo que vio.
Ella se levanta a tirar la botella de cerveza cuando se tropieza y deja caer unas revistas que estaban sobre la mesa, se dispone a recogerlas sin doblar las rodillas, la muy putilla le gusta provocarme. Cuando me percato y miro su redondo y perfecto culo, me doy cuenta de un pequeño detalle, el short muy cortito también es de algodón haciendo juego con la blusa cosa que lo hace también transparente a través de la luz, cual es mi sorpresa? no lleva pantys. La verdad siempre los usa así para dormir y siempre me había dado cuenta pero por la confianza que nos tenemos nunca ha habido ningún problema, pera esta vez la veía de forma diferente, como una gatita en celo.

No desvié la mirada, mire fijamente su culo y ella lo noto, luego la seguí a la cocina. Ella se dispuso a fregar unos trastes que había, me acerque por detrás pegue mi bulto a su culo, ella se sorprendió pero no se quejó, la abrace por la cintura y le dije:

Yo: Cuñadita espero hoy estés muy atenta, hoy tu hermanita y yo te daremos un espectáculo solo para ti, voy a dejar la puerta un poco abierta por si te animas a ver además de oírnos, que te parece.

Pensé para mis adentros, ya me la jugué o me suelta una hostia y le cuenta a la hermana que me sobre pase con ella o me sigue el juego.

Carla: Gracias cuñadito tu siempre pensando en ayudarme, siempre eres tan majo… que suerte tiene mi hermana a veces la envidio.


Y hasta aquí la primera parte…
Esperando el segundo capítulo🤓
 
(II)

De solo pensar la idea de que mi cuñada nos iba a escuchar o tal vez hasta vernos, me excito de tal manera que enseguida tenía mi polla como un mástil. Entonces abrace a mi esposa por detrás, ella lo sintió,( eso le excita mucho, sentir mi polla en su culo), y empezó la función.

Julia: Ummm veo que tienes muchas ganas…

Yo; Siempre te tengo ganas tú lo sabes.

Empiezo a bajar su pantys y toco su clitoris, (ya estaba muy lubricada), ella también tenía ganas de guerra. Entonces empiezo a morder su cuello, a chupar los pezones… mientras la voy tocando el clitoris suavemente. Después de un rato así, la voy penetro poco a poco, primero suave y después acelerando el ritmo. Mi esposa nunca ha tenido problemas para llegar al orgasmo, todo lo contrario. Así que mantengo el ritmo, penetraciones lentas, con fuerza y profundas, que entrara lo que más pudiera así le gusta a ella.
Ella solo respondía con ummm bajito después de cada penetración. Hasta que empieza el concierto para mi cuñada, mi esposa imagino yo que todavía un poco dormida olvida que nos pueden oír, y empezamos una faena plena de sexo salvaje.

Julia: Así dame así duro ummm me gusta ahhh que rico dame más duro quiero sentirme tuya, tu hembra ufff que rico sigue.

Veo hacia la puerta y veo a nuestra espectadora, en efecto, muy tímidamente asomada en la puerta desde ahí veía claramente sus ojos sorprendida y a la vez excitada.

Julia: SIII mi amor que rico, dame duro, follame duro como me encanta.

Cojo una de mis corbatas que estaba en la mesa de noche y vendo a Julia, por si acaso. Levanto su pierna y recuesto su peso hacia mí de modo que quede con las piernas abiertas y mi cuñada vea mejor como la cojo. Luego miro hacia la puerta y veo tímidamente a mi cuñada asomándose y saliendo, le indico con señas que Julia no puede ver que haga silencio y que entre, todo sin hacer ruido. Y ahora si empieza el verdadero show en honor a mi cuñada…

Mi esposa continuaba en su faceta de pornostar como hacía tiempo que no la veía, sin saber lo que estaba pasando.

Mi cuñada se mostraba indecisa de entrar, al final se decidió por no entrar se quedó solo mirando, se veía como hipnotizada como si no creyera lo que estaba viendo.

Julia: Cógeme de perrito mi amor.

Obedeciendo el pedido de mi esposa cambiamos de posición. Cogi a Julia de las caderas y la empiezo a penetrar duro y lo más rápido que puedo y ella responde con unos gemidos que me muestra lo súper excitada que esta, cojo a mi esposa con fuerza sin perder la visión de nuestra espectadora.

Para ponerle más morbo al asunto, empiezo a incitar a Julia a que sacara a la puta que lleva dentro.

Yo: Te gusta que te coja así como una perra? te gusta sentirte como una perra?

Julia: Si mi amor me encanta ahhh

Yo: Quien es mi perra?

Julia: Yo mi amor soy tu perra, tu puta siii mmm pero no pares de cogerme por favor

Yo: Dime quien es tu macho?

Julia: Tuuu tu eres mi macho, mi sueño mi amor

Yo: te gusta esta verga que te estas comiendo puta?

Julia: SIII me encanta tu verga, la verga de mi hombre.

Miro a la puerta y mi cuñada sigue ahí expectante, con los abiertos como platos. Ahora ya sentía a Julia en el clímax era hora de apresurarme para el cierre del show, la guinda del pastel. Miro a mi cuñada y sigue ahí parada, con una mano dentro de su short del pijama, se estaba tocando, a través de la tela se notan que sus pezones están erectos y muy duros, está demasiado excitada. Pienso ok cuñadita prepárate si no te creías ver a tu hermanita en esta faceta lo que veras ahora te dejara loca, halo a Julia por el cabello y le doy una sonora azotada en el culo. Acelero mis embestidas, yo ya tampoco aguanto más estoy que me corro también, ya no puedo aguantar más mis testículos se hinchan de la carga que están soportando.

Yo: Donde quieres tu leche puta.

Julia: En la boquita mi amor, deja que tu puta se bebe tu lechita caliente y espesa.

Se la saco rápidamente, ella se levanta y se da vuelta y se quita la venda buscando mi verga, mi cuñadita al ver que su hermana se quita la venda se sale de la habitación por miedo a ser descubierta por su hermana, pero continua expectante desde afuera a través de la puerta entre abierta.

Yo: Toma leche puta bébela toda no dejes ni una gota.

Julia: mmm que rica lechita caliente como me gusta, llena de todas las vitaminas y minerales que necesito.

Yo: Ufff mi amor que rico

Julia: Divino mi amor, demasiado rico, hacia tiempo que no lo hacíamos así, tenemos que hacerlo así más seguido sabes que me encanta que me trates como una puta en la cama, bueno tu puta.

Miro a ver, mi cuñada ya se había ido. Ya no puedo esperar a quedar a solas con ella para saber qué tal le pareció el show que montamos (Julia sin saberlo) para ella.

CONTINUARÁ...
Madre mía que morbazo.... imagino que el que estuviera alli tu cuñada hizo que te excitaras más y que tuvieras que controlarte para no correrte rápido.... Sigue contanto por favor
 
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