Bueno, os voy a contar mi breve experiencia con el findom. Se resumió en dos encuentros con un tipo hetero(de verdad)(si, si, hetero) que acabaron con un problema para el.
Durante los últimos años he estado leyendo a algunas personas que tenían experiencias findom, consiste básicamente en que un sumiso paga a un amo porque si, a cambio de recibir ordenes, de una foto... Consiste en pagar a un tipo por puro placer sexual, sin que explícitamente conlleve a tener sexo.
A mi me excita casi cualquier cosa y esto llevaba un tiempo rondándome la cabeza, solo faltaba la oportunidad perfecta.
Yo tengo un lado muy pasivo-sumiso, pero en el fondo me gusta tener cierto control y manejar por detrás la situación. También me gustan las humillaciones, cierto nivel de violencia consentida, etc
Después de esta pequeña introducción empezamos:
Yo tengo instalada la app grindr, y sin ser un adicto me gusta curiosear de vez en cuando. Un día estando en el trabajo me puse a echar un vistazo y vi un perfil que se llamaba FINDOM-HET(sin mas info). La curiosidad me inundó y vi una oportunidad de saciar mi curiosidad y tener una experiencia en esos juegos.
Hablé a ese perfil y me presenté: Hola! me llamo Luis(esto es figurado, que tampoco quiero quitarme la careta del todo), tengo 35 años, no tengo experiencia en el findom pero estoy interesado. Busco una persona más o menos de mi edad, o algo mayor, si pudiese ser hetero, masculino y disciplinado que sepa manejarme y someterme.
No recibí respuesta por el momento, pero horas después en casa si. Me dijo que era hetero, que tenía 38 años, que tenia novia y vivía con ella. Que era masculino, que iba al gimnasio y que era bastante guapo. Que estaba interesado en sacar el dinero a algún marica a cambio de nada, puesto que el no iba a follar con un tio.
Por supuesto le pedí una foto, pero me dijo que ni de coña, que era hetero con novia y que no pasaba. Yo si le pasé la mía y mostró su mayor indiferencia. -Yo busco un tipo que me de pasta, me da igual como seas.
En un principio fui con precaución, pensé que podía ser alguien vacilando, que el tipo no iba a entrar en mis gustos y por eso no se mostraba o cualquier cosa negativa entorno a la situación que tan cachondo me ponía. Así que poco a poco fui sacándole conversación y el tío iba entrando al trapo.
Estas conversaciones previas duraron algo más de una semana y fueron en enero de 2025. El hombre salía próximo a mi cuando estaba en el trabajo, pero muy alejado desde mi casa, sabía que en horario de curro lo tenia cerca y que ahí estaba mi oportunidad.
Durante las conversaciones yo le había dado todas las esperanzas de que podía sacar dinero de mi, y el me había ido explicando lo que quería mas en profundidad. Más que pasta el quería comprar cosas que no se cogía a diario, que su novia le ponía límites o que tenía el capricho.
Yo también le dejé claro lo que yo quería de el como dom aparte del físico, me gustaba un tipo con actitud masculina, que vistiese con elegancia y que tuviese algo de conversación aparte de lo que nos ocupaba. Si no podía ser tremendamente coñazo.
Cuando hacía casi dos semanas de estar hablando y ambos estábamos muy cerdos con la situación(yo manejaba la situación aunque el pensaba que era al revés) le pregunté donde trababa y le dije donde trabajaba yo. Me dijo el sitio aproximado y efectivamente comprobé que lo tenía bastante cerca.
HABIA LLEGADO EL MOMENTO DE PROPONERLE VERNOS
Le dije que antes que nada yo buscaba una interacción real, no hacer transferencias a un pajillero que estuviese en su habitación polla en mano. Por lo que debíamos vernos en persona en algún momento.
Pasaron un par de días más y al final accedió, me dijo que iba a estar tomando café en un bar cercano y me dijo como iba vestido. Me exigió eso si saber lo mismo de mi y que en ese primer vistazo no nos íbamos ni a saludar, solo veríamos si la cosa encajaba y si estábamos dispuestos a llegar a ejecutar este tema realmente.
(El ya tomaba posiciones más serias y se veía cierta dominancia que antes no tenia tan clara).
Llegó el momento y la hora de ir a la cafetería, y me dijo que llevaba un polo azul, un pantalón marrón y gafas de aviador.
Yo hice lo acordado, llegué, me pedí el café y empecé a mirar al rededor. Tardó unos minutos en llegar pero lo hizo, y lo hizo para muy bien. El tipo era alto, más o menos 185cm, moreno y bien peinado, no estaba gordo pero tenía hechuras de macho ibérico, un culo decente y un paquete interesante en aquél pantalón chino.
Cuando llegó el me vio. Nos miramos discretamente e hicimos como si nada hasta irnos cada uno por nuestro lado, pero ambos sabíamos que habíamos pasado el examen mutuo.
Una vez pasada esta prueba teníamos que concretar si seguíamos y como íbamos a hacerlo, así que se lo planteé.
Yo le dije que en una primera experiencia estaba dispuesto a dejarle jugar con la mitad de mi sueldo(realmente no era así y yo le dije la cantidad que podía robarme 950€) y que por lo tanto lo haríamos después de cobrar, después del día 2. El me dijo que muy bien, que el como lo iba a decidir el.
Para entonces estaríamos en la tercera semana de enero y quedaba aún tiempo hasta el 2 de febrero. La verdad que en los días siguientes no hubo mucho interacción aparte de algún comentario y siempre por mi parte. Estaba claro que el realmente no tenía ningún interés sexual en mi.
El 30 de enero me habló y me dijo que el ya había decidido como me iba a sacar la pasta. Iríamos a un centro comercial juntos el día que el dijese, puesto que tenía novia y para el no era tan fácil, el iria eligiendo lo que le gustaba hasta la cantidad pactada y yo pagaría con mi tarjeta sin protestar ni cuestionar nada. Que el tendría una actitud amable pero discreta y que no iba a haber nada sexual en el encuentro.
A mi la idea me ponía muy cachondo, ir con un macho hetero(con pinta de ello) pagándole las cosas y llevándole las bolsas. Estaba que no podía más.
Pero como os he dicho yo soy sumiso pero con cierta dominancia y le dije que yo también tenia algunas peticiones para el, que yo tenía que obtener algún placer aparte de servir a semejante hombre.
Le dije que el día del encuentro el tenía que ir elegante, si podía ser con traje, mejor. Que en el centro comercial en algún momento iríamos juntos al baño y entraríamos en una cabina y que sin tener ningún contacto sexual me humillaría y me agrediría físicamente de la forma que el considerase, siempre que no dejase marcas evidente.
Aceptó el trato y me dijo que ya hablaríamos.
Los días pasaban y yo estaba más que impaciente, la supuesta mitad de mi sueldo que tenía para el me quemaba en la cuenta y el encuentro no acababa de llegar, llegue a pensar que todo había sido una coña, pero no. Llegó el viernes de la semana siguiente a cobrar y me dijo que había llegado el momento, que mañana(el sábado) íbamos a hacer lo que habíamos dicho.
Me citó a las 12 en un centro comercial y me dijo que una vez allí me diría donde estaba.
A mi me subió la adrenalina, la excitación y todo a la vez, el momento había llegado. Apenas pude dormir y me levante temprano para prepararme e ir al encuentro.
Llegué como un reloj, a las 11:45 estaba dando vueltas por el centro comercial y esperando a ese HOMBRE que me iba a someter y a quedarse con mi pasta.
Y llegó la hora y recibí el mensaje: -Estoy en la puerta, frente a la heladería. (A mi me faltaron piernas para ir super rápido a por el)
Llegué al lugar indicado y mientras me acercaba a el caí en la cuenta que ni siquiera sabía su nombre, pero la situación era tremendamente excitante y era lo que menos me importaba ahora. Había cumplido con el trato a medias, llevaba un pantalón chico azul marino una americana marrón claro y una camisa blanca con el cuello con botones, me ponía tremendamente cachondo.
El encuentro por su parte fue amable, me dio la mano como si fuese un colega y me dijo: -Bueno, tienes la pasta preparada, no zorra? Que habrá que fundirla.
Yo asentí sin decir mucho, estaba emocionado y muy cachondo(me iba a soplar 950€)
Empezamos a pasear y hablábamos de forma cordial, me dijo que quería algo de ropa formal para el curro y que necesitaba también cosas para hacer deporte, que me fuese preparando para gastar y para atenderle como merece.
Entramos en una tienda de caballero, fue ojeando y eligió 3 camisas y 2 pantalones de vestir. Íbamos hacia el probador y yo sabía que el no me ofrecía nada sexual, pero yo entre broma y verdad le dije... -Te desvisto?
y me contestó que no me pasase, que ya sabía a lo que iba, a pagar y a aguantar.
Me pidió que me quedase fuera de los probadores y tardó un poco en salir, mientras yo esperaba muy cachondo el momento de que ese hombre pudiese pedirme opinión y verle de cerca como le quedaba la ropa que yo le iba a comprar, pero no fue así. Salió y dijo... -Bueno, vamos a por lo primero.
Nos acercamos a la caja y todo fue natural, salvo para mi que pensaba que aquella dependienta estaba pensando que yo era un puto pringado que pagaba cosas a ese señor porque si. Pero nada más lejos, esa señora no sabía nada y eran cosas mías. Saqué la tarjeta y pagué y debo reconocer que una gota de precum me salió por la polla junto a una sensación de tremendo placer.
Esto se repitió en otra tienda, donde le compré un traje y 2 corbatas. En esta ocasión si que vi como le quedaba, salió del probador y me dijo...- Esto te va a costar un pastizal puta zorra, pero a que me sienta de lujo?
Yo que no podía estar mas metido en el papel y más cachondo le respondí con un: -Si señor, le sienta muy bien, señor.
Después de esto le dije que ya habíamos gastado mucha pasta, que sería buen momento para ir al baño y hacer lo que habíamos hablado.
Me dijo que era el trato y que me lo estaba ganando.
El camino al baño fue para mi interminable, notaba como el corazón me latía a 1000 y no sabía bien que iba a pasar... Iba a hacer algo? Me iba a humillar? a pegar= estaba tan cachondo como yo y al final iba a pasar algo?
Cuando llegamos entramos casi al tiempo y echó un vistazo rápido, no había nadie, y me indicó que entrase al baño de discapacitados en el que había más espacio.
Yo iba cargado con sus compras y me ordenó pasar primero, después pasó el y cerró la puerta. Me pidió que colgase las compras en la percha apostillando: -Cuélgalo que es un puto baño de centro comercial y estaría lleno de meados. No se van a manchar las cosas que me estas pagando.
Yo en ese momento estaba tremendamente sumiso, no pensaba en otra cosa que en obedecer a ese ser superior y recibir de el algo que mereciese la pena con el dinero que me estaba gastando, aunque hasta el momento me había merecido la pena.
-Ponte de rodillas mirando hacia abajo!
Yo obedecí, y mientras estaba en esa posición se agachó hasta estar cerca de mi oido y me dijo: -Eres una puta zorra que me está pagando los caprichos, eres una pringada de mierda.
Me empujó de la cabeza y yo me caí al suelo para atrás, sintiendo la fuerza de ese macho y pensando en lo que estaba por venir con deseo.
Estaba en el suelo y se agachó, me cogió con las dos manos de la camisa y me zarandeó mientras me seguía insultando, me pisó y me dio alguna patada y puñetazo.
Yo realmente no me lo podía creer, estaba super cachondo y sentía cada golpe como si fuese una caricia divina. Lo hizo todo controlando pero con la fuerza de un hombre como el. Esto no duró más de 3-4 minutos, pero a mi me supo muy bien, sentirme tan sumiso y tan pequeño debajo de ese hombre.
Realmente no hubo nada sexual, ni siquiera pude tocarle algo sin querer, me tuve que conformar con rozar su camisa bien planchada.
Una vez que concluyó se volvió a poner la chaqueta y me dijo: -Coge las bolsas y vamos a salir con precaución que no quiero que me vean salir de aquí con otro tío.
Seguimos con las compras y yo no podía estar más y más excitado, yo seguía pagando y el eligiendo lo que quería con un total desprecio hacia mi. Realmente no mostraba ningún interés aparte del pago, era evidente que era hetero y que no le interesaba nada.
El dinero se acabó y el concluyó con un: -Bueno, ha estado bien, verdad? Ahora me lo llevas al coche y te vas a lo tuyo.
Así fue, le acompañé al coche y se lo dejé en el maletero como el me fue indicando, se subió y cerró la puerta. Bajó la ventanilla y buscó chocarme la mano de nuevo mientras dijo: -Nos vemos en otra, tío. Vamos hablando.
Se marchó y yo me quedé mirando como se iba. Me dejó terriblemente cachondo, con el calzoncillo mojado de precum y con 950€ menos en la cuenta, pero realmente mereció la pena por el grado de excitación en el que me tuvo.
Volvimos a quedar, pero eso os lo cuento en otro post.
Durante los últimos años he estado leyendo a algunas personas que tenían experiencias findom, consiste básicamente en que un sumiso paga a un amo porque si, a cambio de recibir ordenes, de una foto... Consiste en pagar a un tipo por puro placer sexual, sin que explícitamente conlleve a tener sexo.
A mi me excita casi cualquier cosa y esto llevaba un tiempo rondándome la cabeza, solo faltaba la oportunidad perfecta.
Yo tengo un lado muy pasivo-sumiso, pero en el fondo me gusta tener cierto control y manejar por detrás la situación. También me gustan las humillaciones, cierto nivel de violencia consentida, etc
Después de esta pequeña introducción empezamos:
Yo tengo instalada la app grindr, y sin ser un adicto me gusta curiosear de vez en cuando. Un día estando en el trabajo me puse a echar un vistazo y vi un perfil que se llamaba FINDOM-HET(sin mas info). La curiosidad me inundó y vi una oportunidad de saciar mi curiosidad y tener una experiencia en esos juegos.
Hablé a ese perfil y me presenté: Hola! me llamo Luis(esto es figurado, que tampoco quiero quitarme la careta del todo), tengo 35 años, no tengo experiencia en el findom pero estoy interesado. Busco una persona más o menos de mi edad, o algo mayor, si pudiese ser hetero, masculino y disciplinado que sepa manejarme y someterme.
No recibí respuesta por el momento, pero horas después en casa si. Me dijo que era hetero, que tenía 38 años, que tenia novia y vivía con ella. Que era masculino, que iba al gimnasio y que era bastante guapo. Que estaba interesado en sacar el dinero a algún marica a cambio de nada, puesto que el no iba a follar con un tio.
Por supuesto le pedí una foto, pero me dijo que ni de coña, que era hetero con novia y que no pasaba. Yo si le pasé la mía y mostró su mayor indiferencia. -Yo busco un tipo que me de pasta, me da igual como seas.
En un principio fui con precaución, pensé que podía ser alguien vacilando, que el tipo no iba a entrar en mis gustos y por eso no se mostraba o cualquier cosa negativa entorno a la situación que tan cachondo me ponía. Así que poco a poco fui sacándole conversación y el tío iba entrando al trapo.
Estas conversaciones previas duraron algo más de una semana y fueron en enero de 2025. El hombre salía próximo a mi cuando estaba en el trabajo, pero muy alejado desde mi casa, sabía que en horario de curro lo tenia cerca y que ahí estaba mi oportunidad.
Durante las conversaciones yo le había dado todas las esperanzas de que podía sacar dinero de mi, y el me había ido explicando lo que quería mas en profundidad. Más que pasta el quería comprar cosas que no se cogía a diario, que su novia le ponía límites o que tenía el capricho.
Yo también le dejé claro lo que yo quería de el como dom aparte del físico, me gustaba un tipo con actitud masculina, que vistiese con elegancia y que tuviese algo de conversación aparte de lo que nos ocupaba. Si no podía ser tremendamente coñazo.
Cuando hacía casi dos semanas de estar hablando y ambos estábamos muy cerdos con la situación(yo manejaba la situación aunque el pensaba que era al revés) le pregunté donde trababa y le dije donde trabajaba yo. Me dijo el sitio aproximado y efectivamente comprobé que lo tenía bastante cerca.
HABIA LLEGADO EL MOMENTO DE PROPONERLE VERNOS
Le dije que antes que nada yo buscaba una interacción real, no hacer transferencias a un pajillero que estuviese en su habitación polla en mano. Por lo que debíamos vernos en persona en algún momento.
Pasaron un par de días más y al final accedió, me dijo que iba a estar tomando café en un bar cercano y me dijo como iba vestido. Me exigió eso si saber lo mismo de mi y que en ese primer vistazo no nos íbamos ni a saludar, solo veríamos si la cosa encajaba y si estábamos dispuestos a llegar a ejecutar este tema realmente.
(El ya tomaba posiciones más serias y se veía cierta dominancia que antes no tenia tan clara).
Llegó el momento y la hora de ir a la cafetería, y me dijo que llevaba un polo azul, un pantalón marrón y gafas de aviador.
Yo hice lo acordado, llegué, me pedí el café y empecé a mirar al rededor. Tardó unos minutos en llegar pero lo hizo, y lo hizo para muy bien. El tipo era alto, más o menos 185cm, moreno y bien peinado, no estaba gordo pero tenía hechuras de macho ibérico, un culo decente y un paquete interesante en aquél pantalón chino.
Cuando llegó el me vio. Nos miramos discretamente e hicimos como si nada hasta irnos cada uno por nuestro lado, pero ambos sabíamos que habíamos pasado el examen mutuo.
Una vez pasada esta prueba teníamos que concretar si seguíamos y como íbamos a hacerlo, así que se lo planteé.
Yo le dije que en una primera experiencia estaba dispuesto a dejarle jugar con la mitad de mi sueldo(realmente no era así y yo le dije la cantidad que podía robarme 950€) y que por lo tanto lo haríamos después de cobrar, después del día 2. El me dijo que muy bien, que el como lo iba a decidir el.
Para entonces estaríamos en la tercera semana de enero y quedaba aún tiempo hasta el 2 de febrero. La verdad que en los días siguientes no hubo mucho interacción aparte de algún comentario y siempre por mi parte. Estaba claro que el realmente no tenía ningún interés sexual en mi.
El 30 de enero me habló y me dijo que el ya había decidido como me iba a sacar la pasta. Iríamos a un centro comercial juntos el día que el dijese, puesto que tenía novia y para el no era tan fácil, el iria eligiendo lo que le gustaba hasta la cantidad pactada y yo pagaría con mi tarjeta sin protestar ni cuestionar nada. Que el tendría una actitud amable pero discreta y que no iba a haber nada sexual en el encuentro.
A mi la idea me ponía muy cachondo, ir con un macho hetero(con pinta de ello) pagándole las cosas y llevándole las bolsas. Estaba que no podía más.
Pero como os he dicho yo soy sumiso pero con cierta dominancia y le dije que yo también tenia algunas peticiones para el, que yo tenía que obtener algún placer aparte de servir a semejante hombre.
Le dije que el día del encuentro el tenía que ir elegante, si podía ser con traje, mejor. Que en el centro comercial en algún momento iríamos juntos al baño y entraríamos en una cabina y que sin tener ningún contacto sexual me humillaría y me agrediría físicamente de la forma que el considerase, siempre que no dejase marcas evidente.
Aceptó el trato y me dijo que ya hablaríamos.
Los días pasaban y yo estaba más que impaciente, la supuesta mitad de mi sueldo que tenía para el me quemaba en la cuenta y el encuentro no acababa de llegar, llegue a pensar que todo había sido una coña, pero no. Llegó el viernes de la semana siguiente a cobrar y me dijo que había llegado el momento, que mañana(el sábado) íbamos a hacer lo que habíamos dicho.
Me citó a las 12 en un centro comercial y me dijo que una vez allí me diría donde estaba.
A mi me subió la adrenalina, la excitación y todo a la vez, el momento había llegado. Apenas pude dormir y me levante temprano para prepararme e ir al encuentro.
Llegué como un reloj, a las 11:45 estaba dando vueltas por el centro comercial y esperando a ese HOMBRE que me iba a someter y a quedarse con mi pasta.
Y llegó la hora y recibí el mensaje: -Estoy en la puerta, frente a la heladería. (A mi me faltaron piernas para ir super rápido a por el)
Llegué al lugar indicado y mientras me acercaba a el caí en la cuenta que ni siquiera sabía su nombre, pero la situación era tremendamente excitante y era lo que menos me importaba ahora. Había cumplido con el trato a medias, llevaba un pantalón chico azul marino una americana marrón claro y una camisa blanca con el cuello con botones, me ponía tremendamente cachondo.
El encuentro por su parte fue amable, me dio la mano como si fuese un colega y me dijo: -Bueno, tienes la pasta preparada, no zorra? Que habrá que fundirla.
Yo asentí sin decir mucho, estaba emocionado y muy cachondo(me iba a soplar 950€)
Empezamos a pasear y hablábamos de forma cordial, me dijo que quería algo de ropa formal para el curro y que necesitaba también cosas para hacer deporte, que me fuese preparando para gastar y para atenderle como merece.
Entramos en una tienda de caballero, fue ojeando y eligió 3 camisas y 2 pantalones de vestir. Íbamos hacia el probador y yo sabía que el no me ofrecía nada sexual, pero yo entre broma y verdad le dije... -Te desvisto?
Me pidió que me quedase fuera de los probadores y tardó un poco en salir, mientras yo esperaba muy cachondo el momento de que ese hombre pudiese pedirme opinión y verle de cerca como le quedaba la ropa que yo le iba a comprar, pero no fue así. Salió y dijo... -Bueno, vamos a por lo primero.
Nos acercamos a la caja y todo fue natural, salvo para mi que pensaba que aquella dependienta estaba pensando que yo era un puto pringado que pagaba cosas a ese señor porque si. Pero nada más lejos, esa señora no sabía nada y eran cosas mías. Saqué la tarjeta y pagué y debo reconocer que una gota de precum me salió por la polla junto a una sensación de tremendo placer.
Esto se repitió en otra tienda, donde le compré un traje y 2 corbatas. En esta ocasión si que vi como le quedaba, salió del probador y me dijo...- Esto te va a costar un pastizal puta zorra, pero a que me sienta de lujo?
Yo que no podía estar mas metido en el papel y más cachondo le respondí con un: -Si señor, le sienta muy bien, señor.
Después de esto le dije que ya habíamos gastado mucha pasta, que sería buen momento para ir al baño y hacer lo que habíamos hablado.
Me dijo que era el trato y que me lo estaba ganando.
El camino al baño fue para mi interminable, notaba como el corazón me latía a 1000 y no sabía bien que iba a pasar... Iba a hacer algo? Me iba a humillar? a pegar= estaba tan cachondo como yo y al final iba a pasar algo?
Cuando llegamos entramos casi al tiempo y echó un vistazo rápido, no había nadie, y me indicó que entrase al baño de discapacitados en el que había más espacio.
Yo iba cargado con sus compras y me ordenó pasar primero, después pasó el y cerró la puerta. Me pidió que colgase las compras en la percha apostillando: -Cuélgalo que es un puto baño de centro comercial y estaría lleno de meados. No se van a manchar las cosas que me estas pagando.
Yo en ese momento estaba tremendamente sumiso, no pensaba en otra cosa que en obedecer a ese ser superior y recibir de el algo que mereciese la pena con el dinero que me estaba gastando, aunque hasta el momento me había merecido la pena.
-Ponte de rodillas mirando hacia abajo!
Yo obedecí, y mientras estaba en esa posición se agachó hasta estar cerca de mi oido y me dijo: -Eres una puta zorra que me está pagando los caprichos, eres una pringada de mierda.
Me empujó de la cabeza y yo me caí al suelo para atrás, sintiendo la fuerza de ese macho y pensando en lo que estaba por venir con deseo.
Estaba en el suelo y se agachó, me cogió con las dos manos de la camisa y me zarandeó mientras me seguía insultando, me pisó y me dio alguna patada y puñetazo.
Yo realmente no me lo podía creer, estaba super cachondo y sentía cada golpe como si fuese una caricia divina. Lo hizo todo controlando pero con la fuerza de un hombre como el. Esto no duró más de 3-4 minutos, pero a mi me supo muy bien, sentirme tan sumiso y tan pequeño debajo de ese hombre.
Realmente no hubo nada sexual, ni siquiera pude tocarle algo sin querer, me tuve que conformar con rozar su camisa bien planchada.
Una vez que concluyó se volvió a poner la chaqueta y me dijo: -Coge las bolsas y vamos a salir con precaución que no quiero que me vean salir de aquí con otro tío.
Seguimos con las compras y yo no podía estar más y más excitado, yo seguía pagando y el eligiendo lo que quería con un total desprecio hacia mi. Realmente no mostraba ningún interés aparte del pago, era evidente que era hetero y que no le interesaba nada.
El dinero se acabó y el concluyó con un: -Bueno, ha estado bien, verdad? Ahora me lo llevas al coche y te vas a lo tuyo.
Así fue, le acompañé al coche y se lo dejé en el maletero como el me fue indicando, se subió y cerró la puerta. Bajó la ventanilla y buscó chocarme la mano de nuevo mientras dijo: -Nos vemos en otra, tío. Vamos hablando.
Se marchó y yo me quedé mirando como se iba. Me dejó terriblemente cachondo, con el calzoncillo mojado de precum y con 950€ menos en la cuenta, pero realmente mereció la pena por el grado de excitación en el que me tuvo.
Volvimos a quedar, pero eso os lo cuento en otro post.