ElConsentidor
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- 14 Ene 2024
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Yo siempre he sido de esos hombres que decía que jamás perdonaría una infidelidad, pero como se dice, nunca digas de este agua no beberé.
Me llamo David, tengo 39 años y llevo casado desde hace 6 años con Cristina. Ella tiene 33 años, es morena de piel, media melena, ojos oscuros y mide 1.62, pesa 56 kilos tiene unos pechos medianos duros y muy apetecibles, un trasero respingón y muy bien puesto, de cintura estrecha y vientre plano donde luce un piercing en su vientre por lo cual siempre que puede lo va enseñando, sus piernas van en sintonía con su cuerpo estilizado. Es un bombón.
Nuestra vida sexual es o era normal diría yo, practicábamos sexo siempre que podíamos y tenemos claro que aun no nos toca ser padres.
Yo trabajo en una empresa en la cual en ocasiones tengo que desplazarme a otros lugares con estancias cortas o largas dependiendo del trabajo en cuestión. Cris trabaja en la administración publica, tuvo la suerte de presentarse a unas oposiciones y las aprobó, así que su trabajo es mañanero y tiene todas las tardes libres por lo cual aprovecha cuando esta solas para ir al gimnasio, disfrutar de la compañia de sus padres o hermanas, o las amigas, ir de compras y cuando estoy yo se dedica por completo a mi. Mi jornada laboral cuando no estoy fuera es a turno partido por las mañanas y tardes.
Desde que nos casamos vivimos en un atico en una zona bastante privilegiada de nuestra ciudad, tiene tres dormitorios, dos baños y un aseo la cocina con su lavadero y una gran teraza que la tenemos decorada en plan chillout, la urbanizacion tiene zonas verdes, pistas de padel y una piscina comunitaria con su correspondiente club social y por el cual nos dejamos ver bastante, sobre todo en verano, yo los fines de semana y Cris es asidua todas las tardes de verano cuando no esta haciendo otras cosas, por lo que se da mas con el vecindario que yo, eso también se agradeció mucho durante el periodo de pandemia ya que ella tuvo que quedarse en casa durante el periodo duro de esta y aprovechaba para hacer sus ejercicios, yo por contra tuve mas trabajo del habitual.
Una vez pasada la pandemia cuando todo volvió a la normalidad tuve que realizar un viaje que en principio duraría varias semanas. El vuelo salia de madrugada , hacia trasbordo en Frankfurt y de alli partia a Indonesia, pero en Frankfurt mientras esperaba recibi una llamada desde la oficina de la empresa para decirme que el trabajo se habria pospuesto por problemas burocraticos y que regresara en el primer vuelo a España, ya desde la oficina lo habia arreglado todo y tenian el billete listo, pero el avion no saldria hasta pasadas unas horas. Se me paso por la cabeza de llamar a Cris para contarle lo ocurrido, pero estaba delante de un escaparate donde veia un conjunto de lenceria y pense mejor en darle una sorpresa. Entre y compre ese conjunto que habia visto, era color malva de encajes que dejaba poco a la imaginacion, el tanga era de hilo apenas apreciable, acompañado de su liguero y una bata de malla corta a juego. Solo imaginarmela con dicho conjunto puesto se me ponia dura.
Por fin despues de horas de espera y vuelo llegue a la puerta de casa, meti la llave y abri lentamente con la intencion de sorprender a Cris aunque no sabia si estaria en casa o en el gimnasio, pero pronto sali de dudas, oia ruidos desde la teraza, entre y deje mi macuto de viaje al lado de la puerta.
Contaros que cuando abres la puerta del atico te encuentras la cocina en la parte derecha y esta tiene una barra americana que da a lo que seria el salon que a su vez da a la terraza y gracias a sus grandes cristaleras le da mucha claridad a todo el conjunto y en la parte izquierda queda el pasillo que da a las habitaciones.
Cuando asome por el hueco de la puerta que da a la cocina y vi lo que ocurria en la terraza no daba credito, me quede de piedra, sin reaccionar. Cris estaba desnuda sobre unos de los sofas mientras un tipo al que no lograba identificar ya que me daba la espalda lateralmente se la estaba follando de forma salvaje mientras le magreaba uno de sus pechos, yo permanecia alli quieto observando el espectaculo y oyendo esos gemidos de placer que al principio pense que eran gemidos debido a ejercicios que estaba realizando Cris en la terraza, ejercicios deportivos, no sexuales, solo una cosa reacciono en mi y era esa extraña ereccion que se habia manifestado en mi pantalon futo de lo que estaba viendo, continue alli escondido tras el marco de la puerta observando como ambos follaban, cambiando de postura y por fin logre identificar al que se la estaba follando, era Adolfo, el vecino del primer piso y se estaba follando a Cris de forma dura, salvaje, la estaba perforando con su polla como si fuese una fulana, la usaba a su antojo, yo seguia con mi ereccion cuando Adolfo dijo algo y Cris se sento en el sofa y se metia la polla de este, que se le veia tremenda desde donde yo observaba, en su boca. Se esmeraba en chuparsela, en metersela hasta donde podia y de repente vi como Adolfo la cojia por la parte de atras de la cabeza y sin presionar pero sin permitirle que se retirase se empezo a correr en la boca de Cris y ella se esmeraba en tragarselo todo y dejarsela bien limpia.
Cuando me di cuenta y sin querer note como mi entrepierna estaba mojada, me habia corrido sin tocarme ante semejante espectaculo que mi mujer me habia proporcionado con otro.
Sali sin mas de alli y me fui al garaje con el desastre en mi pantalon, me sente en el coche y alli estuve intentando asimilar todo aquello, pero sobre todo intente comprender como alguien que siempre habia dicho que jamas perdonaria una infidelidad se corrio encima sorprendiendo a su mujer siendo follada por otro.
Alli en el coche estaba cuando se encendio la luz del garaje, era Adolfo que iba a su coche, se monto en el y se marcho, yo seguia en el coche busque pañielos para intentar arreglar el desavio que me habia provocado mientras algun que otro vecino pasaba por el garaje.
Minutos mas tarde me entro un Whatsapp de Cris en el que me decia que por favor volviese, que me habia visto en la entrada y que parecia que lo estaba disfrutando y por ello decidio no parar.
Esto ocurrio hace tres años y a dia de hoy lo sigo asimilando, llevo varios meses aqui pero nunca me he atrevido a escribir mi historia, mi experiencia, por temor a lo que se pueda decir u opinar de mi, pero hablando hace poco con alguien del foro me dio buenos consejos y lo estoy siguiendo, lo hago porque fue el primero al que se lo conte todo y eso me ayudo a aclararme y verlo desde otro punto de vista muy distinto.
Mi intencion con esto no es que disfruten los lectores, ni presumir de que a mi mujer se la folla otro o de lo cornudo que soy.
Es una terapia propia porque pensaba algo que no he cumplido, y no lo he cumplido por que estoy enamorado de mi mujer y quiero estar con ella, convivir y disfrutar juntos auque ella tenga sexo con otro hombre que a dia de hoy se la sigue follando mientras yo estoy fuera y lo tomo como si estuviese en compañia de sus amigas, en el gimnasio o con su familia y eso me ayuda.
Es una actividad mas que ella tiene pero que es solo sexo.
Yo por otro lado tengo el permiso de ella para poder hacer lo mismo, pero de momento no he encontrado nada igualable a Cris.
Espero que me comprendais.
Me llamo David, tengo 39 años y llevo casado desde hace 6 años con Cristina. Ella tiene 33 años, es morena de piel, media melena, ojos oscuros y mide 1.62, pesa 56 kilos tiene unos pechos medianos duros y muy apetecibles, un trasero respingón y muy bien puesto, de cintura estrecha y vientre plano donde luce un piercing en su vientre por lo cual siempre que puede lo va enseñando, sus piernas van en sintonía con su cuerpo estilizado. Es un bombón.
Nuestra vida sexual es o era normal diría yo, practicábamos sexo siempre que podíamos y tenemos claro que aun no nos toca ser padres.
Yo trabajo en una empresa en la cual en ocasiones tengo que desplazarme a otros lugares con estancias cortas o largas dependiendo del trabajo en cuestión. Cris trabaja en la administración publica, tuvo la suerte de presentarse a unas oposiciones y las aprobó, así que su trabajo es mañanero y tiene todas las tardes libres por lo cual aprovecha cuando esta solas para ir al gimnasio, disfrutar de la compañia de sus padres o hermanas, o las amigas, ir de compras y cuando estoy yo se dedica por completo a mi. Mi jornada laboral cuando no estoy fuera es a turno partido por las mañanas y tardes.
Desde que nos casamos vivimos en un atico en una zona bastante privilegiada de nuestra ciudad, tiene tres dormitorios, dos baños y un aseo la cocina con su lavadero y una gran teraza que la tenemos decorada en plan chillout, la urbanizacion tiene zonas verdes, pistas de padel y una piscina comunitaria con su correspondiente club social y por el cual nos dejamos ver bastante, sobre todo en verano, yo los fines de semana y Cris es asidua todas las tardes de verano cuando no esta haciendo otras cosas, por lo que se da mas con el vecindario que yo, eso también se agradeció mucho durante el periodo de pandemia ya que ella tuvo que quedarse en casa durante el periodo duro de esta y aprovechaba para hacer sus ejercicios, yo por contra tuve mas trabajo del habitual.
Una vez pasada la pandemia cuando todo volvió a la normalidad tuve que realizar un viaje que en principio duraría varias semanas. El vuelo salia de madrugada , hacia trasbordo en Frankfurt y de alli partia a Indonesia, pero en Frankfurt mientras esperaba recibi una llamada desde la oficina de la empresa para decirme que el trabajo se habria pospuesto por problemas burocraticos y que regresara en el primer vuelo a España, ya desde la oficina lo habia arreglado todo y tenian el billete listo, pero el avion no saldria hasta pasadas unas horas. Se me paso por la cabeza de llamar a Cris para contarle lo ocurrido, pero estaba delante de un escaparate donde veia un conjunto de lenceria y pense mejor en darle una sorpresa. Entre y compre ese conjunto que habia visto, era color malva de encajes que dejaba poco a la imaginacion, el tanga era de hilo apenas apreciable, acompañado de su liguero y una bata de malla corta a juego. Solo imaginarmela con dicho conjunto puesto se me ponia dura.
Por fin despues de horas de espera y vuelo llegue a la puerta de casa, meti la llave y abri lentamente con la intencion de sorprender a Cris aunque no sabia si estaria en casa o en el gimnasio, pero pronto sali de dudas, oia ruidos desde la teraza, entre y deje mi macuto de viaje al lado de la puerta.
Contaros que cuando abres la puerta del atico te encuentras la cocina en la parte derecha y esta tiene una barra americana que da a lo que seria el salon que a su vez da a la terraza y gracias a sus grandes cristaleras le da mucha claridad a todo el conjunto y en la parte izquierda queda el pasillo que da a las habitaciones.
Cuando asome por el hueco de la puerta que da a la cocina y vi lo que ocurria en la terraza no daba credito, me quede de piedra, sin reaccionar. Cris estaba desnuda sobre unos de los sofas mientras un tipo al que no lograba identificar ya que me daba la espalda lateralmente se la estaba follando de forma salvaje mientras le magreaba uno de sus pechos, yo permanecia alli quieto observando el espectaculo y oyendo esos gemidos de placer que al principio pense que eran gemidos debido a ejercicios que estaba realizando Cris en la terraza, ejercicios deportivos, no sexuales, solo una cosa reacciono en mi y era esa extraña ereccion que se habia manifestado en mi pantalon futo de lo que estaba viendo, continue alli escondido tras el marco de la puerta observando como ambos follaban, cambiando de postura y por fin logre identificar al que se la estaba follando, era Adolfo, el vecino del primer piso y se estaba follando a Cris de forma dura, salvaje, la estaba perforando con su polla como si fuese una fulana, la usaba a su antojo, yo seguia con mi ereccion cuando Adolfo dijo algo y Cris se sento en el sofa y se metia la polla de este, que se le veia tremenda desde donde yo observaba, en su boca. Se esmeraba en chuparsela, en metersela hasta donde podia y de repente vi como Adolfo la cojia por la parte de atras de la cabeza y sin presionar pero sin permitirle que se retirase se empezo a correr en la boca de Cris y ella se esmeraba en tragarselo todo y dejarsela bien limpia.
Cuando me di cuenta y sin querer note como mi entrepierna estaba mojada, me habia corrido sin tocarme ante semejante espectaculo que mi mujer me habia proporcionado con otro.
Sali sin mas de alli y me fui al garaje con el desastre en mi pantalon, me sente en el coche y alli estuve intentando asimilar todo aquello, pero sobre todo intente comprender como alguien que siempre habia dicho que jamas perdonaria una infidelidad se corrio encima sorprendiendo a su mujer siendo follada por otro.
Alli en el coche estaba cuando se encendio la luz del garaje, era Adolfo que iba a su coche, se monto en el y se marcho, yo seguia en el coche busque pañielos para intentar arreglar el desavio que me habia provocado mientras algun que otro vecino pasaba por el garaje.
Minutos mas tarde me entro un Whatsapp de Cris en el que me decia que por favor volviese, que me habia visto en la entrada y que parecia que lo estaba disfrutando y por ello decidio no parar.
Esto ocurrio hace tres años y a dia de hoy lo sigo asimilando, llevo varios meses aqui pero nunca me he atrevido a escribir mi historia, mi experiencia, por temor a lo que se pueda decir u opinar de mi, pero hablando hace poco con alguien del foro me dio buenos consejos y lo estoy siguiendo, lo hago porque fue el primero al que se lo conte todo y eso me ayudo a aclararme y verlo desde otro punto de vista muy distinto.
Mi intencion con esto no es que disfruten los lectores, ni presumir de que a mi mujer se la folla otro o de lo cornudo que soy.
Es una terapia propia porque pensaba algo que no he cumplido, y no lo he cumplido por que estoy enamorado de mi mujer y quiero estar con ella, convivir y disfrutar juntos auque ella tenga sexo con otro hombre que a dia de hoy se la sigue follando mientras yo estoy fuera y lo tomo como si estuviese en compañia de sus amigas, en el gimnasio o con su familia y eso me ayuda.
Es una actividad mas que ella tiene pero que es solo sexo.
Yo por otro lado tengo el permiso de ella para poder hacer lo mismo, pero de momento no he encontrado nada igualable a Cris.
Espero que me comprendais.