LAs mejores imágenes. sin duda, eran las tías en bragas y sujetador con transparencias de los catálogos de venta... Cualquiera era bueno, desde el folleto con las ofertas del mes del pryca, o los de venta por correo como el Venca, que para mí siempre fue el mejor de todos jejejejej
¡Cuantos catálogos como los que mencionas nos han sacado de tantos apuros en aquellos años!
Ya te digo! y es que en mi caso... me valía cualquiera
SI, me pasaba igual, cualquier material que supusiera algo parecido a aquellos catálogos era material de pajas
Joder, ¡es verdad! menudas pajas con aquellos materiales, acababan llenos de lefa
Recuerdo cómo dejaba algunos de esos catálogos con las páginas pegadas después de las pajillas jejejejej
Muy cierto, y ademas no atinabamos a tener un minimo de control para, al menos, no dejar huellas
Yo con 15 alquilaba vhs de pelis x en el videoclub, que tiempos.
Pedazo de mitoGeorgina Lempkin. Eso sí es una mujer de verdad.Una de las primeras revistas porno que llegó a mi poder de adolescente, creo que era Climax, entre otras protagonistas estaba Georgina Lempkin, yo como buen adorador de las tetonas me quedé enamorado y le dedique cientos de pajas. De hecho hoy me la acabo de cascar con el video que adjunto, en versión extendida eso sí.
Yo también, pero solo cuando llegaron las máquinas a los videoclubs
Creo que no tenía máquinas. De todas formas sabia las horas buenas para no tener más gente y cruzarme nadie. Con el dueño buen rollo hasta me hacía comentarios, pero cuando estaba su mujer vaya caretos. Si internet cambio todo estas en lo cierto y de que manera.
Había que armarse de cierta valentia para ir al mostrador llevando la caja del video porno, al que ponis boca abajo com si eso ocultara el material que pretendías llevar
Si sobre todo las primeras veces. Pero valía la pena la recompensa.Había que armarse de cierta valentia para ir al mostrador llevando la caja del video porno, al que ponis boca abajo com si eso ocultara el material que pretendías llevar
¡Que precoz!
Pues en mi caso la llegada de las máquinas al videoclub fue mi salvación, porque jamás me atreví a pasear por el pasillo de adultos y mucho menos a poner encima del mostrador una carátula porno jejejeje
Es lo que habia no quedaba otra.El que algo quiere algo le cuesta.
Pues ni tan mal... Al final casi que agoté todo el repertorio de películas porno que había jajaja. Y como yo, diría que llegó una época en la que prácticamente todo el barrio solo alquilábamos las porno y apenas había disponibles...
