No sé si fui cornudo

Estoy de acuerdo con esa reflexión, pero creo que ese no fué el caso. Si no estoy equivocado, cuando sucedió eso hace 14 años, la pareja todavía no había comentado nada de jugar a estos roles de cornudo. A mi parecer fué una infidelidad en toda regla fueron cuernos sin consenso (de hecho el título del post me lo hace entender así "no sé si fuí cornudo").
Sí, sí, insisto, fueron cuernos, no había nada consensuado. Y es cierto, que el título del post ya se ha quedado un poco anticuado, ahora pegaría más "sé que fuí cornudo" jajajajaj
 
Es que esos pantalones son brutales, le hace culazo y, cuando se lo pone le queda tan apretadito,... y encima el tacto que tiene. Ahora no les pone tanto, pero cuando lo hace a la mínima me pongo a sobárselo.
A mi me pierden esos pantalones.

Soy el chico y la meto tal empotrada que termina al otro lado de la barra y pasa de ser clienta a camarera. Nos vean o no.
 
Efectivamente fue una infidelidad en toda regla, es más, de aquella si me hubiera enterado dudo mucho que la hubiera perdonado. Lo que pasa que han pasado 14 años, las personas evolucionamos, no tengo la misma mentalidad ahora que entonces. No ha sido duro saberlo, ha sido todo lo contrario muchísimo morbo.

De hecho, me pongo en su lugar y hasta la entiendo, yo hubiera hecho lo mismo, es más, habría follado mucho antes.

El tema cuernos, siempre es un poco como te lo tomes, en mi opinión, claro, ¿ella disfrutó? pues genial, ¿ha tenido consecuencias negativas para nuestro matrimonio? pues no. Por lo tanto, mira lo hecho hecho está y, ahora, toca disfrutar de ese morbo.
"No ha sido duro", dice. Eso diselo a tu polla, que fijo que nunca ha estado mas dura en la vida.

😉
 
Bueno, por petición popular, voy a poner la foto de ella, hecha un par de meses antes de los hechos que se cuentan
Menudo caramelito...a riesgo de recibir un no por respuesta...jejeje...quizás sería ilustrativo verla sin tanta ropa jejej en cualquier caso está muy buena tu mujer 😉
 
Es que esos pantalones son brutales, le hace culazo y, cuando se lo pone le queda tan apretadito,... y encima el tacto que tiene. Ahora no les pone tanto, pero cuando lo hace a la mínima me pongo a sobárselo.
A ver si nos compartes una foto de ella con ellos, seguro que más de uno (además de mi) lo está deseando
 
Menudo caramelito...a riesgo de recibir un no por respuesta...jejeje...quizás sería ilustrativo verla sin tanta ropa jejej en cualquier caso está muy buena tu mujer 😉
Buen intento. Tengo colgadas tres fotos de ella. Una en el hilo "enseñemos lo que tenemos en casa (parejas o no)" con un vestidito corto y otras dos en el hilo "culo de nuestras mujeres o novias o parejas". Y esas fotos son las únicas que estoy dispuesto a mostrar, por el momento.
 
Buen intento. Tengo colgadas tres fotos de ella. Una en el hilo "enseñemos lo que tenemos en casa (parejas o no)" con un vestidito corto y otras dos en el hilo "culo de nuestras mujeres o novias o parejas". Y esas fotos son las únicas que estoy dispuesto a mostrar, por el momento.
Y muchísimas gracias por compartir...no todo el mundo lo hace
 
Sin duda en este tipo de vivencias , es curioso el replanteamiento del modus vivendi, de la forma de replantearse el contrato de pareja . En donde uno piensa en la monogamia vivida
 
Buen intento. Tengo colgadas tres fotos de ella. Una en el hilo "enseñemos lo que tenemos en casa (parejas o no)" con un vestidito corto y otras dos en el hilo "culo de nuestras mujeres o novias o parejas". Y esas fotos son las únicas que estoy dispuesto a mostrar, por el momento.
Sin duda gracias por compartir, las buscaré jejejej, efectivamente ha sido un intento jejejeje
 
No creí que hoy iba a poder seguir escribiendo pero veo que sí, que voy a poder, así que, continúo.

El domingo se despertó tarde, con un montón de sensaciones en su cabeza, por un lado la había gustado mucho el polvo (o los polvos) que había echado, por otro, sentía que había hecho algo malo. Encima no podía hablarlo con nadie (las mujeres, al contrario que los hombres, necesitan sacar a fuera esas cosas).

Así que se levantó, se duchó y bajo a desayunar, me llamó un par de veces pero yo no contesté, es que me había levantado más tarde aún. Cuando la llamé estaba acabando de desayunar, hablamos un buen rato, ella tenía ganas de hablar. Lo relevante de la conversación fue que la pregunté que qué había hecho, y ella me dijo que salió a las casetas con el grupo ese y vio un poco a Rosario y se fue al hotel (una media verdad o una trola entera, el caso, es que era lógico que no me contara la verdad).

Ella no esperaba que Gonzalo la llamara, aunque la hubiera dicho que la iba a llamar al irse, pero la llamó cuando ella estaba esperando a que la pusieran un sandwich para comerse en la habitación. Le dijo que se iba a comer a casa de sus padres, pero que si quería podían quedar después a tomar café.

Le preguntó si no iba a quedar con su novia que era domingo (recordemos que era mentira que tuviera novia), pero él la dijo que ya había estado con su novia por la mañana, pero que, ahora, lo que le apetecía era quedar con ella.

La mezcla entre sentirse halagada por esa frase (prefería quedar con ella antes que con su novia) y no tener nada que hacer el domingo, más que pasarse la tarde en el hotel o por ahí dando vueltas ella sola le hizo decir que de acuerdo, él quedó en avisarla cuando fuera a salir de casa de sus padres pero que sobre las 4 y media de la tarde.

En esta ocasión también me interesó mucho que se puso para quedar con él, y fue una falda corta color crema (tuve que buscar en internet como era ese color, una camisa a juego y por encima una chaqueta de estas tipo cuero que es de un color parecido al de la falda (algo más oscura) y unas botas de esas altas blancas (lo de las botas me sorprendió, pero, como no, es lo que se llevaba de aquella). De ropa interior esta vez no llevó tanga, puso unas braguitas blancas de flores y sujetador a juego.

La recogió en la puerta del hotel y se fueron a tomar café, entraron en un bar que en la zona del fondo tenía como una especie de reservado con unas mesas bajas y estuvieron charlando y tomando café. Como no, al cabo de un rato, Gonzalo, empezó a comerle la boca. Pasaron un buen rato comiéndose la boca, él la tocaba los muslos y, por supuesto, la buscaba el cuello.

A mi mujer la estaba otra vez calentando y le dijo, para, porque me estás poniendo mala, él la dijo vamos al hotel, si quieres, pero ella le respondió que no, que no sabía a qué hora se iba a volver su compañera.

Entonces, él la dijo pues vamos a mi piso, y añadió es que aquí me pueden ver contigo y se puede enterar mi novia, entonces ella dijo que tenía mucha cara, pero que vale. Le dijo que iban en su coche, que le tenía aparcado. Tenía un Golf rojo.

Le llevó a su piso y, voy a pararme a describir lo que era. Parece, que su padre, le había puesto el piso, pero le debió decir que él tenía que amueblarlo. Pues bien, era un piso, que no tenía nada. La cocina era lo único que tenía amueblado, que cree mi mujer que era de obra, sólo tenía un frigorífico lleno de cervezas y poco más, una mesa con dos sillas y ya. En el resto de la casa no tenía ningún mueble. En uno de los baños un armarito, donde tenía cosas de higiene y un perchero con varias toallas. Y en una de las habitaciones tenía un colchón en el suelo (por lo visto el colchón era bueno), una tele en un mueble bastante sencillo y una mesita.

Vamos lo que tenía era un picadero, eso mismo fue lo que le dijo mi mujer, pero él la contestó que es que lo iba amueblando poco a poco y que había empezado por lo más importante.

La invito a ponerse cómoda en el colchón, que se quitara la ropa y se quedaban los dos en ropa interior que así estarían más cómodos, le dijo una vez más, que tenía mucha cara, pero lo hizo.

Se sentaron en el colchón y no tardó en empezar a comerle la boca, la desnudó y empezó a comerla el cuello y fue bajando a sus tetas, de sus tetas fue bajando muy despacio, entreteniéndose mientras bajaba a su coño y se lo empezó a comer, la gustó mucho, dice que usaba muy bien la lengua, estuvo comiéndola el coño hasta que se corrió, es más, cuando ella se corrió, él aún mantuvo su boca en el coño de ella.

Después de hacerla llegar al orgasmo, él la dijo, ahora te toca eh, ella se rió y le dijo vale, pero déjame recobrar el aliento. Él se tumbó boca arriba y dijo espero todo lo que tu quieras, así que ella se levantó se arrodillo delante de su polla y empezó a comérsela. Utilizó mucha lengua (eso se lo enseñé yo, porque cuando nos conocimos y empezamos a follar, para mi gusto lo hacía demasiado deprisa y apenas usaba lengua, fui yo quien la enseñó, así que, de nada, Gonzalo) mientras le meneaba la polla. A él le encantó la mamada, porque no paraba de decísrelo: que pasaba, dios que gusto, que increible eres..., hasta que se fue a correr y la dijo me voy a correr, no te quites y ella le hizo caso y recibió la corrida en la boca.

Un inciso, mi mujer, no traga la corrida, me deja correrme en su boca pero siempre escupe (eso también se lo enseñé yo) intentamos una vez que tragara, pero no la gustó nada.

Ella dice que se corrió abundante y que incluso la atragantó. Después de recibir su corrida se levantó al baño a escupir y a enjuagarse la boca, volvió a la cama (o colchón) y se pusieron a ver la tele, pasaron la tarde charlando, viendo la tele y comiendo patatas fritas y bebiendo cervezas.

Pero después de un par de horas o así le volvió a dar el calentón y volvió a la carga a comerle la boca, a tocarle las tetas y a sobarle el coño, volvió a encender a mi mujer, entonces, se levantó por un condón y dijo dos o tres mierda seguidos, mi mujer le dijo que qué le pasaba, resulta que no había llevado condones, les tenía en el coche, y la dijo bajo de un momento por ellos y subo, pero mi mujer con todo el calentón que tenia le contestó, no hacen falta, tomo la píldora, si quieres, le dijo.

A él le faltó tiempo para clavársela y empezar a bombearla a saco mientras la decía que qué coño tenía, que qué caliente, que qué mojadito. Después de estar un rato bombeándola y de haberla sacado un orgasmo le dijo que se pusiera encima, así que mi mujer empezó a cabalgarle, él mientras le cabalgaba jugaba con sus pezones, cosa que la puso a mil, la vinieron dos orgasmos casi seguidos y el tercero coincidió con la corrida de él en el coño de mi mujer.

Estuvieron un rato más ahí tumbados y ya empezaron a vestirse, él la acercó al hotel y la despidió con un pico, hasta el lunes, que se verían en el trabajo.

Por la noche cenó con la compañera de habitación y le preguntó que qué tal con Gonzalo, ella le dijo que bien que seguían igual, que, bueno aún no había pasado nada más que besos. pero que se estaba dejando llevar un poco, la compañera le contestó que hacía bien porque ahora no tenía que dar explicaciones a nadie y que si le apetecía que hiciera lo que quisiese.

Al día siguiente era lunes y era la última semana de su estancia en Salamanca.

Bueno, como ya sabéis, continuará, pero no sé deciros cuando.
 
Última edición:
No creí que hoy iba a poder seguir escribiendo pero veo que sí, que voy a poder, así que, continúo.

El domingo se despertó tarde, con un montón de sensaciones en su cabeza, por un lado la había gustado mucho el polvo (o los polvos) que había echado, por otro, sentía que había hecho algo malo. Encima no podía hablarlo con nadie (las mujeres, al contrario que los hombres, necesitan sacar a fuera esas cosas).

Así que se levantó, se duchó y bajo a desayunar, me llamó un par de veces pero yo no contesté, es que me había levantado más tarde aún. Cuando la llamé estaba acabando de desayunar, hablamos un buen rato, ella tenía ganas de hablar. Lo relevante de la conversación fue que la pregunté que qué había hecho, y ella me dijo que salió a las casetas con el grupo ese y vio un poco a Rosario y se fue al hotel (una media verdad o una trola entera, el caso, es que era lógico que no me contara la verdad).

Ella no esperaba que Gonzalo la llamara, aunque la hubiera dicho que la iba a llamar al irse, pero la llamó cuando ella estaba esperando a que la pusieran un sandwich para comerse en la habitación. Le dijo que se iba a comer a casa de sus padres, pero que si quería podían quedar después a tomar café.

Le preguntó si no iba a quedar con su novia que era domingo (recordemos que era mentira que tuviera novia), pero él la dijo que ya había estado con su novia por la mañana, pero que, ahora, lo que le apetecía era quedar con ella.

La mezcla entre sentirse halagada por esa frase (prefería quedar con ella antes que con su novia) y no tener nada que hacer el domingo, más que pasarse la tarde en el hotel o por ahí dando vueltas ella sola le hizo decir que de acuerdo, él quedó en avisarla cuando fuera a salir de casa de sus padres pero que sobre las 4 y media de la tarde.

En esta ocasión también me interesó mucho que se puso para quedar con él, y fue una falda corta color crema (tuve que buscar en internet como era ese color, una camisa a juego y por encima una chaqueta de estas tipo cuero que es de un color parecido al de la falda (algo más oscura) y unas botas de esas altas blancas (lo de las botas me sorprendió, pero, como no, es lo que se llevaba de aquella). De ropa interior esta vez no llevó tanga, puso unas braguitas blancas de flores y sujetador a juego.

La recogió en la puerta del hotel y se fueron a tomar café, entraron en un bar que en la zona del fondo tenía como una especie de reservado con unas mesas bajas y estuvieron charlando y tomando café. Como no, al cabo de un rato, Gonzalo, empezó a comerle la boca. Pasaron un buen rato comiéndose la boca, él la tocaba los muslos y, por supuesto, la buscaba el cuello.

A mi mujer la estaba otra vez calentando y le dijo, para, porque me estás poniendo mala, él la dijo vamos al hotel, si quieres, pero ella le respondió que no, que no sabía a qué hora se iba a volver su compañera.

Entonces, él la dijo pues vamos a mi piso, y añadió es que aquí me pueden ver contigo y se puede enterar mi novia, entonces ella dijo que tenía mucha cara, pero que vale. Le dijo que iban en su coche, que le tenía aparcado. Tenía un Golf rojo.

Le llevó a su piso y, voy a pararme a describir lo que era. Parece, que su padre, le había puesto el piso, pero le debió decir que él tenía que amueblarlo. Pues bien, era un piso, que no tenía nada. La cocina era lo único que tenía amueblado, que cree mi mujer que era de obra, sólo tenía un frigorífico lleno de cervezas y poco más, una mesa con dos sillas y ya. En el resto de la casa no tenía ningún mueble. En uno de los baños un armarito, donde tenía cosas de higiene y un perchero con varias toallas. Y en una de las habitaciones tenía un colchón en el suelo (por lo visto el colchón era bueno), una tele en un mueble bastante sencillo y una mesita.

Vamos lo que tenía era un picadero, eso mismo fue lo que le dijo mi mujer, pero él la contestó que es que lo iba amueblando poco a poco y que había empezado por lo más importante.

La invito a ponerse cómoda en el colchón, que se quitara la ropa y se quedaban los dos en ropa interior que así estarían más cómodos, le dijo una vez más, que tenía mucha cara, pero lo hizo.

Se sentaron en el colchón y no tardó en empezar a comerle la boca, la desnudó y empezó a comerla el cuello y fue bajando a sus tetas, de sus tetas fue bajando muy despacio, entreteniéndose mientras bajaba a su coño y se lo empezó a comer, la gustó mucho, dice que usaba muy bien la lengua, estuvo comiéndola el coño hasta que se corrió, es más, cuando ella se corrió, él aún mantuvo su boca en el coño de ella.

Después de hacerla llegar al orgasmo, él la dijo, ahora te toca eh, ella se rió y le dijo vale, pero déjame recobrar el aliento. Él se tumbó boca arriba y dijo espero todo lo que tu quieras, así que ella se levantó se arrodillo delante de su polla y empezó a comérsela. Utilizó mucha lengua (eso se lo enseñé yo, porque cuando nos conocimos y empezamos a follar, para mi gusto lo hacía demasiado deprisa y apenas usaba lengua, fui yo quien la enseñó, así que, de nada, Gonzalo) mientras le meneaba la polla. A él le encantó la mamada, porque no paraba de decísrelo: que pasaba, dios que gusto, que increible eres..., hasta que se fue a correr y la dijo me voy a correr, no te quites y ella le hizo caso y recibió la corrida en la boca.

Un inciso, mi mujer, no traga la corrida, me deja correrme en su boca pero siempre escupe (eso también se lo enseñé yo) intentamos una vez que tragara, pero no la gustó nada.

Ella dice que se corrió abundante y que incluso la atragantó. Después de recibir su corrida se levantó al baño a escupir y a enjuagarse la boca, volvió a la cama (o colchón) y se pusieron a ver la tele, pasaron la tarde charlando, viendo la tele y comiendo patatas fritas y bebiendo cervezas.

Pero después de un par de horas o así le volvió a dar el calentón y volvió a la carga a comerle la boca, a tocarle las tetas y a sobarle el coño, volvió a encender a mi mujer, entonces, se levantó por un condón y dijo dos o tres mierda seguidos, mi mujer le dijo que qué le pasaba, resulta que no había llevado condones, les tenía en el coche, y la dijo bajo de un momento por ellos y subo, pero mi mujer con todo el calentón que tenia le contestó, no hacen falta, tomo la píldora, si quieres, le dijo.

A él le faltó tiempo para clavársela y empezar a bombearla a saco mientras la decía que qué coño tenía, que qué caliente, que qué mojadito. Después de estar un rato bombeándola y de haberla sacado un orgasmo le dijo que se pusiera encima, así que mi mujer empezó a cabalgarle, él mientras le cabalgaba jugaba con sus pezones, cosa que la puso a mil, la vinieron dos orgasmos casi seguidos y el tercero coincidió con la corrida de él en el coño de mi mujer.

Estuvieron un rato más ahí tumbados y ya empezaron a vestirse, él la acercó al hotel y la despidió con un pico, hasta el lunes, que se verían en el trabajo.

Por la noche cenó con la compañera de habitación y le preguntó que qué tal con Gonzalo, ella le dijo que bien que seguían igual, que, bueno aún no había pasado nada más que besos. pero que se estaba dejando llevar un poco, la compañera le contestó que hacía bien porque ahora no tenía que dar explicaciones a nadie y que si le apetecía que hiciera lo que quisiese.

Al día siguiente era lunes y era la última semana de su estancia en Salamanca.

Bueno, como ya sabéis, continuará, pero no sé deciros cuando.
Mmmmmmmmmm q morbazooooo q se corriera dentro mmmmmm
 

📢 Webcam con más espectadores ahora 🔥

Atrás
Top Abajo