Dos mejor que una.

Lord_R

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Está es una serie de 7 relatos que escribí hace tiempo. La historia tiene su morbo, puesto que la escribí a petición de una persona con quien hablaba (Fran).que tenía deseos cornudos con su esposa pero que nunca se consumaron. En estos relatos plasme esa fantasía mezclada con sexo familiar, algo de Dominación e infidelidad.

Espero que os guste.

Parte 1

Un verano más Alicia y Fran estaban pasando las vacaciones en el la playa en el apartamento de 2 habitaciones que tenían en primera línea.
Durante la semana ella se quedaba sola y aprovechaba a dormir, tomar el sol, la lectura y los baños en el mar, aunque más bien eran días aburridos de soledad mientras su marido se iba a casa y trabajaba esas semanas antes de vacaciones.
Era Domingo y ya tenía todo preparado para volver a casa esa tarde cuando una visita inesperada dio un vuelco a aquel verano que parecía que iba a ser uno más.
Buenos días tío. - se oyó al otro lado del teléfono.
- Hola. ¿Cuánto tiempo? ¿Qué tal todo? - Respondió Fran mientras Alicia le hacía señas preguntando quien era la persona que llamaba.
-Claro aquí estaremos. -Respondió mientras ella le miraba con cara de extrañeza.
- ¿Quién era? - Preguntó Alicia intrigada.
- Era Miguel, mi sobrino. Está de vacaciones y si estábamos por aquí pensaba pasar comer con nosotros ya que hace mucho que no nos vemos.
Era verdad, Alicia recordaba a su sobrino como un joven sonriente de ojos verdes, pero ya hacia al menos 3 años que no lo veía.
-Bien. Prepararé comida para uno más en ese caso. -dijo Alicia con actitud de total normalidad.
Alicia ya había cumplido los 50 y era de carácter afable. Siempre atenta, era la perfecta anfitriona. Se preocupaba para que las vistas se sintieran como en su propia casa, Era alta y de tipo fino, siempre elegante y con un toque sensual. Era una mujer que al pasar llamaba la atención. Sus piernas largas y unas curvas naturales, a pesar de sus 52 años daba una imagen de mujer sexi, aunque ella procuraba pasar desapercibida. Además, lo coronaba con una educación y un saber estar que cautivaba a la gente. Era lo que normalmente se llama una mujer de bandera.
Una hora más tarde sonaba el timbre.
-Hola tío. Hola tía que guapa- Saludo Miguel.
-Hola sobrino. Ha sido una sorpresa tu llamada. Que alegría verte -dijo Fran -Pasa y siéntate.
Fran le dio la mano. Alicia saludo a su sobrino con un par de besos. Desde la última vez Miguel tenía una mirada más profunda, más intensa. Había ensanchado de hombros, del muchacho que recordaba su tía solo quedaba la sonrisa.
Durante la comida Alicia parecía ausente mientras Fran preguntaba a su sobrino por los planes para ese verano.
- ¿Qué vas a hacer? ¿A dónde vas a ir estos días?
- Aún no lo sé tío. Cogeré el coche y conduciré sin rumbo. Ya veré donde me quedo - reía Miguel.
- ¿Y vas solo? -Se interesó Fran por su sobrino.
-Si. Este año solo......a ver dónde acabo. ja, ja, ja. Verano a la aventura.
- Yo vuelvo a Barcelona tengo que trabajar. No regresaré hasta el viernes. Podrías quedarte. ¿Verdad Alicia?
Así tu tía no se puede quejar de estar sola.
-Déjalo Fran que tendrá planes......se aburriría aquí ... con la de chicas y fiesta que habrá por las zonas turísticas.
-Que va tía, mucha joven borracha y desenfrenada …. Ya no hay mujeres como tú.
Alicia se sonrojo con el cumplido.
-Mira que eres mentiroso y adulador. Pero tiene razón tu tío, si quieres te puedes quedar unos días y cuando quieras te vas.
Tío Fran se levantó.
-Perfecto entonces. Instálate en la habitación de la derecha. Yo he de irme para llegar a Barcelona antes del atasco de todos los Domingos, pero me quedo más tranquilo sabiendo que no se queda sola tu tía Alicia.
- Bueno .... bien ... pero solo unos días. - Acepto Miguel
-Genial -dijo Fran. - Yo cariño me voy ya. Esta vez no te puedes quejar. Hasta el viernes que viene. - Se despidio.
Alicia le dio un cariñoso beso a su marido antes de salir por la puerta. Desde el balcón se quedó mirando como desaparecía el coche hasta girar al final de la calle.
-Que tal ha ido el viaje Miguel? -pregunto Alicia.
-Un poco cansado, pero bien. El calor es sofocante. -Le dijo Miguel a su tía.
-Deberías dormir un poco de siesta. Con este calor hasta que no baja el sol no se puede salir. - Alicia sacó la perfecta anfitriona que siempre era.
-Gracias tía. Me gustaría darme una ducha y después, haré lo que dices. Una siesta y te invito a tomar donde quieras. - Respondió Miguel agradeciendo la preocupación de su tía.
Alicia oía correr el agua en el baño.
- Perdona Miguel - Se disculpó - Toma una toalla, no me di cuenta que no había.
Alicia no podía dejar de mirar la polla de su sobrino. Sentía una mezcla de humedad y calor. Excitación y vergüenza.
Uffff!!! pensaba......no se parece a su tío.
-Aquí tienes sobrino- Dijo Alicia mientras la dejaba rápidamente y salía del baño.
Se sentó en el sofá de la sala de estar, estaba acalorada y aún turbada de lo que habla visto. Hacía mucho que su cuerpo no reaccionaba de esa manera tan intensa.
Siguió sentada, tratando de leer y recuperar la calma cuando su sobrino volvió de la ducha.
- Hola tía. ¿Dónde me acuesto? - Pregunto Miguel con el pelo mojado y la camiseta pegada por la humedad de su cuerpo tras la ducha
-Túmbate en nuestra habitación. Es más fresca y corre el aire. En la otra te costara más descansar. Hace demasiado calor.
Una vez más Alicia saco su lado más educado de anfitriona mientras trataba de recuperar la calma. Seguía sin quitarse de la cabeza la visión de la polla de su sobrino. Al fin pudo calmarse un poco y recuperar la normalidad, más relajada fue a dormir la siesta.
El calor era agobiante, opto por ir a su habitación, era la más fresca de la casa. Se tumbó, la cama era grande y se puso en la parte opuesta dejando en mayor hueco entre ella y Miguel. La estancia estaba en penumbra procurando mantener el fresco lo máximo posible. Solo llevaba unas braguitas negras de encaje y una camiseta de tirantes.
Se quedó dormida al lado de su sobrino.
Al despertar Miguel....estaba al lado de su tía, tenía su culo pegado a su polla ... Ummmm
Comenzó a moverse, restregándosela cada vez con más descaró. Notaba su polla durísima, su erección era brutal. .... apartó sus braguitas con cuidado de no despertarla, deslizando su miembro entre sus muslos ... empujó despacio y suave para que Alicia no se despertara. Un poco más y.... llego hasta su coño .... Poco a poco la penetro suave para evitar despertarla .... más y más. ...hasta el fondo. Lentamente penetraba su coño maduro .... caliente, húmedo. Apretó el culo un poco más para llenar el coño de su tía. Empujo una vez más, dos. tres, hasta el fondo. Su polla se estremecía mientras descargaba chorros espesos de semen a la vez que jadeaba en la nuca de su tía Alicia.
Alicia despertó descolocada no podía comprender por qué sus bragas estaban empapadas y su coño impregnado de un espeso "flujo" ... Se volvió a sonrojar.
Al despertar Miguel ... vio la cara de su tía. Era una mezcla de dudas y vergüenza pero a la vez tenía una mirada morbosa y lujuriosa sin saber por qué.
- ¿Has descansado sobrino? ¿Qué quieres hacer? ¿Quieres que salgamos a cenar o prefieres que pidamos y cenamos aquí?
Alicia intentaba disimular procurando poner normalidad al momento.
-Me encuentro cansado, tía ... mejor aquí. Si no te importa.
Alicia asintió accediendo.
-Como quieras sobrino. Voy a darme una ducha. Pide lo que quieras-Dijo Alicia de camino a la ducha.
Necesitaba una ducha que le calmase. El agua le ayudo a recomponerse volviendo a sentirse con la calma que siempre tenía.
- ¿Un vino tía? -Preguntó Miguel desde la cocina.
- En la nevera tiene tu tío. Coge el que quieras. - Respondió Alicia desde la ducha.
Se dejo de oír el agua de la ducha. Al rato apareció Alicia en la cocina…estaba preciosa con un fino vestido de tirantes.
- Toma tía. Brindemos. -
-Y ¿por qué brindamos? -preguntó Alicia.
- Por la familia y por una tía como tú - Respondió su sobrino mientras le alargaba la copa.
- Que adulador eres sobrino. - Alicia recogía la copa con una sonrisa.
- Que va tía. Lo que ya no hay mujeres como tú. - Dijo alargando la copa para bridar.
Alicia volvió a tomar otra copa. Sentía seca la garganta.
- La última, sobrino que después digo tonterías ... no le vayas a decir nada a tu tío ehhh???
La cena trascurrió entre risas y copas vino.
Me alegra que estes aquí sobrino, pero seguro que lo pasarías mejor por ahí... Estarán las mujeres que te rifan.
-Que cosas dices tía. Ya no hay mujeres como tú, con tu elegancia y saber estar.
Alicia se ponía colorada.
- Mira que te gusta regalarme los oídos. ¿Quieres que salgamos a tomar una copa Miguel? - Dijo Alicia tratando de desviar la atención.
-Estoy cansado del viaje. Prefiero que nos quedemos y tomar algo aquí en casa.
Sentados en el sofá la charla cada vez se hacía más amena y desenfadada.
-Que bien te trata mi tío ... estás igual que siempre, o mejor.
-Que va sobrino. Más arrugas, estrías y el pecho más caído.
-Tienes un pecho precioso. Aún me acuerdo de la vez que os visitamos cuando nació el primo y te vi dándole de mamar ... ¡¡¡que envidia!!!
Alicia estaba roja de la vergüenza, pero sentía un cosquilleo en su coño .... se humedecía. Tomo otra copa de vino.
La charla Miguel se recostó en sobre los muslos de Alicia mientras ella le acariciaba el pelo.
-¿De veras sentiste envidia?
-Ummmm siiii tía. Recuerdo el pezón duro y tus areolas grandes......
Poco a poco Alicia había perdido la vergüenza por el vino. Sentía su cabeza mareada y se notaba desinhibida.
Dejó caer un tirante, dejando un pecho al desnudo, agarrando un pezón entre sus dedos
- ¿Quieres sobrino? -
Acercándoselo entre sus dedos. Ofreciéndoselo. La boca de su sobrino lo succionó con fuerza, Alicia lo notaba cada vez más duro. Su coño se humedecía y notaba el deseo como hacía tiempo.
Desenfrenada, excitada, estaba fuera de sí. Su cuerpo mandaba sobre su cabeza.
Alicia agarró la polla de su sobrino
-Uffff sobrino. No sabes cuento hacía que no me sentía así. - Alicia hablaba entre jadeos.
Estaba colorada, el vino le ha hecho perder la vergüenza y la cabeza completamente.
De repente por un momento se sintió mal por lo que estaba haciendo ... se levantó y salió corriendo al baño
Miguel salió tras ella, agarrándola por detrás en el baño, contra el lavabo.
-Esto no está bien soy tu tía - Repetía Alicia mientras Miguel le sobaba las tetas., fuera del vestido con los tirantes bajados.
-Para!!!! Para!!! -Decía Alicia entre jadeos.
Apartó sus bragas desde atrás ....
-No, no, no, por favor sobrino. Ahhhh!!!! - Suspiraba Alicia - ¿Y tú tío??? No por favor.
Su sobrino empujo pasando su polla entre los muslos de Alicia, entrando sin dificultad en su coño, abierto, lubricado. Comenzó a moverse con rapidez,
Alicia gemía. Rendida. Moviendo su culo para que la penetrase más y más. Quería sentirla en lo más profundo de su coño.
-Sigue sobrino ..... Ufff cuanto tiempo hacía. Ahhhh masss por favor -Suplicaba- Métemela hasta el fondo.
Agarrada por las caderas Alicia veía su cara de vicio en el espejo, mientras gritaba de placer.
Sintió salir la polla de Miguel de su coño. Bajando sus bragas a los tobillos. Sus muslos chorreaban .... resbalaba el flujo por ellos .... sus piernas estaban resbaladizas.
-No pares, por favor .... hazme tuya. - Pedía.
De un golpe Miguel la penetro de nuevo, Con fuerza. Intensamente.... hasta el fondo
- ¿Te gusta tía? -
Alicia se avergonzada pero la excitación le podía.
-Sigue Miguel. Fóllame, por favor. - Pedía
Llámame sobrino. - Le ordenó Miguel
-Por favor eso no....
-Llámame sobrino, tía Alicia. - Repitió
-No, no, no ....- Suspiraba, mientras Miguel empujaba de golpe.
-Llámame sobrino .... joder
Alicia no podía parar, jadeando al final claudico -...sigue sobrino por favor suplica.
Miguel abrió su culo con un rápido movimiento y.......zas. Hasta el fondo...
Alicia lanzó un grito mitad dolor y placer.
Su culo cedió mientras Miguel empujaba duro, enculándola ..... hasta el fondo.
La polla de Miguel se estremecía corriéndose en el culo de su tía, llenándoselo.......
El orgasmo de ambos fue brutal. Al sacarla un hilo de semen salía de su culo resbalando por sus muslos.
Alicia se giró y me abrazándose a su sobrino.
- Uffff Miguel...
-Sobrino....le corrigió él.
-Ufff sobrino. Siempre seré tu tía para todo -le dice. Por favor .... quiero q me veas como tu tía ... pero también como mujer. No le digas nada a tu tío, guárdame el secreto.
Alicia le besó .... abrazándose a él. - Siempre tendrás a tu tía para lo que quieras sobrino
Tía Alicia se quedó en el baño limpiándose. Su coño estaba empapado, resbalaba por sus muslos la corrida...... Aun sentía su coño palpitando, dilatado húmedo por el flujo y los restos de semen.
Su sobrino esperaba recostado en el sofá. Se notaba en su cara relax tras haber descargado con toda la fuerza en el culo de Alicia.
Al volver del baño tía Alicia se sentó al lado de sobrino. Al notar su ano sobre sofá no pudo evitar dar un respingo.
-Joder sobrino .... que cabrón eres no me puedo ni sentar. Hacia años que no me sentía así. Noto el culo como si no se cerrase.
Le dio un abrazo a su sobrino y un dulce beso.
-Gracias Miguel, mi cuerpo se ha estremecido como hacía mucho.... Pero a tu tío. Por favor no le digas nada.
-Tranquila tía. Ya sabes que puedes confiar en mí. Deberíamos irnos a dormir ... ha sido un día largo.
Al llegar a la habitación Alicia se giró....
-Duerme conmigo por favor. No me dejes sola.
Alicia se acostó con un fino camisón de tirantes. Se veían sus muslos y las finas copas trasparentaran sus pezones duros.
Al ver acercarse a su sobrino solo en boxer volvió a sentir su coño chorreando.
De un tirón se sacó el camisón tumbándose en la cama abierta de piernas.
-FOLLAME- Pidio
De golpe encima de ella ..... Miguel empujando hasta el fondo. Noto de nuevo su polla dura por la excitación que le producía Alicia.
Ella esta desatada.
Agarraba las nalgas de su sobrino ... para q la penetrase mas
-Sigue sigue...... Jadeaba
Se arqueaba abriéndose más.....
- Muévete joder -Soltó su sobrino empujando mas
-Llámame Puta. Soy tu puta. -Gemía mientras se aferraba más....
Alicia se movía sin dejar que la polla saliese de su coño.......
Ahhhhh - gritaba al notar de nuevo su coño lleno. De nuevo los chorros de semen se esparcían por su coño.
Desnudos. Tumbados..........la noche siguió en calma
Era ya jueves y Alicia sabía que al día siguiente volvería Fran y que aquellos días de morbo y sexo llegarían a su fin.
Tumbada en la cama junto a su sobrino aún se humedecía al recordar los días anteriores.
-Qué te parece sobrino si salimos a cenar por ahí? Desde que has llegado hemos salido poco
-Me parece bien pero no conozco ningún sitio tía Alicia. ¿A dónde quieres ir?
Alicia escogió un lugar cerca del mar al que había ido con Fran. Era un lugar apartado y tranquilo al que se llegaba por una carretera estrecha y con curvas.
Se ducharon y Miguel espero en la puerta del apartamento. Alicia apareció tras la puerta de la habitación .... estaba sexi, espectacular.
Subida en unas sandalias de tacón alto y con un vestido ceñido de tirantes. Sus piernas parecían larguísimas y su escote era un imán para los ojos .... imposible no mirar.
-Estas guapísima tía-
-Siempre tan adulador, Querido sobrino. - Respondió ella
En el coche camino del restaurante el vestido de Alicia se subía hasta dejar casi ver su lencería ... sus piernas morenas y brillantes ... se veía hasta el final de ellas.
El restaurante era un lugar de mesas redondas y luz baja, que invitaba a la charla y las confidencias.
-Brindemos sobrino- Dijo Alicia alargando su copa. - Hacía muchos años que no me sentía así. Por favor no me digas nada a tu tío, y brindemos por estos días. -Pidió una vez más Alicia
La cena continuó con vino y risas....
- ¿Otra copa tía?
-Ufffff no sé .... A ver si voy a decir bobadas. Bueno ponme otra copa, pero ... promete que no dirás nada a nadie de esto.
Miguel sirvió una copa más a modo de respuesta.
Brindaron una vez más.
-La cuenta, por favor.
Alicia fue al baño antes de volver al coche. Sus pasos eran desacompasados...el vino le había hecho efecto, pero estaba preciosa.
Al volver se agarró al brazo de su sobrino como si fuera su pareja. Nadie pensaría que eran tía y sobrino al verlos caminar hacia el coche.
Al entrar al coche Alicia se giró hacia su sobrino acercándose a él besando con pasión.
-Gracias sobrino. Vamos a casa.
Miguel conducía por aquella y oscura carretera...solo se veía los árboles que flanqueaban la carretera. La luz del salpicadero iluminaba a Alicia.... El vestido subido hasta dejar ver sus bragas. Unas negras de encaje que trasparentaban dejando ver su coño. Un tirante caído dejando su escote al borde de su pecho. Iba con los ojos cerrados adormilada en estado de semiembriaguez.
Su sobrino subía la mano entre sus muslos hasta su coño .... que se empezaba a humedecer, mientras Alicia separaba las piernas dando facilidades. Poco a poco la mano de su sobrino se movía con más intensidad dentro de las bragas de su tía. Alicia jadeaba.
Tras una curva apareció un camino rural de tierra que se adentraba en una zona boscosa. Sin pensarlo giro el volante llevando el coche hasta una zona apartada y oscura.
Paró el motor y apago las luces.
Bajo los tirantes de Alicia sobando sus pechos y chupando con ansia sus pezones .... ella se dejaba y jadeaba ... gemía y deseaba más. Poco a poco el flujo humedecía más y más su coño….sin saber cómo las bragas de Alicia estaban sobre la alfombrilla.
Agarrada en volandas sentó a su tía encima mientras ella abría sus pantalones…. De golpe la sintió dentro.
Agarrada por el culo follando salvajemente se oían sus gemidos y jadeos en el silencio de la oscuridad.
La parte inferior del vestido subida hasta la cintura, la de arriba bajada ......
Alicia cabalgaba…mientras en cada embestida notaba como su sobrino apretaba su culo para penetrarla más dentro.
El morbo de follar en el coche como una adolescente le excitaba como no recordaba….a su mente venían los recuerdos de sus primeros polvos...se sentía joven. Jadeando noto los espasmos que descargaban chorros de semen su coño......gritaba de placer. Su orgasmo fue brutal.
Beso a su sobrino y se sentó en el asiento del copiloto.
-Vamos a casa. - Pidió con voz suave
Su sobrino arranco el coche. Alicia en el asiento del copiloto continúo adormilada hasta que aparco su sobrino.
-Hemos llegado tía.
Alicia salió del coche trastabillada. Su sobrino recogió las bragas del suelo y su bolso.. Abrazada la llevo hasta el portal.
En el ascensor Alicia se abrazaba a su sobrino para no caerse. Una vez en casa tras cerrar la puerta, Miguel sobrino cerro con llave la puerta y puso la cadenita, Alicia espero a que su sobrino cerrase para caminar agarrada de él hasta la habitación. Al llegar se dejó caer sobre la cama.
-Sera mejor que duermas sola tía.
El vino le había afectado, estaba mareada y todo le daba vueltas.
-Quédate por favor. - Musito Alicia
Alicia quedo tumbada sobre la cama. Vestida. Inmóvil. Dormida en un dulce sueño.
Su sobrino le quito el vestido ... el resto de su ropa, que había quedado esparcida por el coche estaba en su bolso.
Miguel se acostó junto a ella.
El vino y las altas horas a las que habían llegado les hicieron caer en un profundo sueño. Ya entraba sol por las rendijas de las persianas cuando oyeron la puerta abrirse. Fran había adelantado su regreso. Al abrir la puerta la cadenilla le impidió entrar. Desde la puerta llamaba a su mujer
-Alicia. Holaaaa. ¿Me puedes abrir?
Los 2 saltaron de la cama. Alicia aun desnuda se puso una fina bata mientras su sobrino se acostaba en la otra habitación.
Uffff que poco ha faltado pensó Alicia .....
Había pasado un par de horas de la llegada de Fran cuando se levantó Miguel de la cama.
-Buenos días tío. Pensé que llegabas mañana. - Saludo su sobrino
-Al final he podido adelantar el fin de semana. ¿Qué tal estos días aquí? Espero que tu tía te tratase bien.
-Bien tío, muy bien. (Si tú supieras pensaba su sobrino)
Tía Alicia estaba seria .... callada.
-Que te pasa Alicia? - pregunto Fran
-Será el calor - respondió mientras se retiraba.
-Pensaba ir a la playa a la tarde. Pero si no estas bien nos quedamos, aunque Miguel supongo que le aburrirá quedarse en casa.
-No, no. - Se apresuro a decir Alicia, sacrificándose a pesar de la falta de ganas- Iremos
Por la tarde en la playa Alicia estaba callada como nunca.
Miguel se fue a dar un baño, Mientras caminaba hacia el agua, Fran animaba a darse un chapuzón a su mujer.
-Deberías darte un baño a ver si te refrescas.
Alicia camino hasta el agua buscando a su sobrino para bañarse junto a él. El oleaje, aunque no intenso era lo suficientemente fuerte como para hacer perder el equilibrio. Al llegar donde su sobrino una ola le empujo contra él teniendo que abrazarse para no caerse.
- ¿Qué te pasa tía? Pareces nerviosa.
-Esto no puede seguir......tu tío puede darse cuenta y no está bien.
Miguel aprovecho que el agua les cubría para meter la mano en la parte inferior del bikini mientras Alicia se intentaba zafar. La agarró con fuerza separando sus labios con los dedos. Pellizcaba su clítoris. Bajo más la mano metiendo dos dedos en su coño.
-Para por dios .... que tu tío nos puede ver. -suplicaba entre jadeos.
Su sobrino metió los dedos hasta el fondo. Alicia apretaba sus piernas jadeando en un orgasmo que la estremeció.
Avergonzada y confundida salió del agua y se tumbó en la toalla.
-¿Estas mejor? -Pregunto Fran.
Alicia asintió y siguió tumbada mientras Fran continuaba leyendo.
El sol apretaba.
-¿Me ayudas con la crema? - Pidió Alicia.
-Estoy leyendo- Dijo Fran contrariado. - te ayuda Miguel. Respondió cuando su sobrino llegaba del agua.
Alicia estaba avergonzada pero no quiso contrariar a su marido. Le alargo la crema y Miguel comenzó a masajearla cubriendo su cuerpo de crema. Subía por sus muslos rozando su coño con disimulo aprovechando que su tío leía. Alicia volvía a estar empapada. Pasaba las manos por su espalda subiendo por los lados metiéndolas bajo ella hasta llegar a sus tetas…Alicia no aguantaba. Mordía su labio ...... Cuando sonó el móvil de Fran.
Miguel aparto las manos de su tía mientras Fran dejaba el libro y contestaba.
Al colgar Fran conto que eran unos amigos que veraneaban cerca. Habían reservado para cenar, pero se les había averiado el coche y querían invitarles y que así Fran los llevase a todos en coche. Fran les había hablado de que tenían visita así que irían en 2 coches.
-Puedes ir con Miguel en el coche y así le indicas el camino. Yo recogeré a estos y a su hija.
- Bien Fran. -Asintió Alicia
Fran salió a buscar a los demás un rato antes. Alicia se quedó esperando a su sobrino.
Al subir al coche recordó la noche anterior .... un calor recorrido su cuerpo.
-Para. Tenemos que hablar. -Dijo Alicia al llegar al camino rural.
Miguel entro y apago el motor y las luces.
-Dime. - Su voz sonó dura- ¿Qué ocurre?
-Soy tu tía. Estoy casada y aunque me ha gustado….esto no puede ser..... - Dijo Alicia en tono de súplica. -Por favor…. no digas nada y no intentes nada.
Estaba apenada y se abrazó a él. Miguel paso sus manos por sus hombros mientras besaba su cuello y bajaba los tirantes mientras con su boca recorría su escote hasta sus pezones.
-Para por dios- suplicaba
Por la carretera vieron pasar el coche de Fran.
-Vamonos .... han pasado ya. - Pedía Alicia
Su sobrino abrió su pantalón guiando a Alicia por el cuello hasta su polla.... Abrió la boca metiendosela hasta el fondo. Alicia chupaba con ansia. Quería que se corriera rápido para evitar sospechas...... Rápidamente sintió su boca llena de los chorros de semen de su sobrino...
Alicia tragó y se colocó el vestido. Al momento ya estaban en el restaurante.
Toda la cena Alicia sentía el sabor de la corrida en su boca.
Al acabar la cena Alicia se disculpó para ir al baño. Le acompaño la otra esposa.
-Que guapo es tu sobrino. Ya nos ha dicho Fran que ha pasado unos días contigo. Que suerte tienes.
Alicia quitó hierro. Sabia la fama de desenfreno que tenía ella. Sentía. celos de que pudiera intentar algo con Miguel.
- Han sido normales. Que es de la familia .... .no pensaras que......
- Pues yo me lo hubiera tirado. - Dijo su amiga.
Alicia sintió aún más celos.
Salieron del baño y se dispusieron q salir camino a casa.
En el parking se despidieron. Al despedirse de su sobrino su amiga había bajado la mano hasta su culo.
Alicia sintió una mezcla de celos y excitación. A su boca volvió el sabor del semen.
Para dijo Alicia al llegar al camino de nuevo.
-Eres un cabrón y ella una puta ...joder como te ha tocado el culo y tu dejándote.
Estaba muerta de celos.
Tía Alicia bajo del coche enfadada. Su sobrino la siguió ... .agarrándola por detrás. Subiendo la mano por sus caderas y elevando su vestido.
En un momento ya estaba de nuevo abierta y follada. Apoyada en el capo del coche con las piernas abiertas y jadeando en mitad de la noche.
Un fuerte empujón y Alicia cayo de bruces sobre el capo notando su coño lleno.
Alicia se giró y se abrazó a su sobrino.
-Esta será la última vez. - Dijo Alicia.
-Mañana me iré tía. ¿No te vas a despedir esta noche? - Pregunto Miguel con picardia
-Nooooo. Estás loco. Tu tío se enterar.
Alicia se vistió y continuaron hasta llegar a casa.
Al llegar a casa Fran pidió a su esposa una copa. -Nos la hemos ganado los conductores….- Dijo.
-Mañana me voy tío Fran. -Anuncio Miguel. -Esta noche será la de despedida.
Alicia fue a por hielo. Su sobrino la siguió.
-Esta noche te espero en mi habitación. - Dijo Miguel.
-Ni lo sueñes. Esta mi marido.
Miguel mostro su móvil a su tía.
-Eres un cabrón.
Alicia ofreció las copas a ambos y se disculpó para irse a dormir.
Tomaron la copa y Fran se despidió.
-Hace días que estoy fuera. Me voy a la cama. A ver qué tal esta tu tía.
Fran cerró la puerta.
-Hola cariño .... al fin a solas. -Dijo Fran
Alicia dijo que estaba cansada. Fran insistió.
-Vamos mujer que hace días que nada de nada.....- Dijo Fran bajándose los pantalones.
Alicia pensó que lo mejor acceder y que se durmiera cuanto antes. Empezó a mover su mano con rapidez. Fran jadeaba mientras bajaba metiendo la lengua entre las piernas de tía Alicia. Estaba más húmeda que de costumbre. Pasaba la lengua y notaba un flujo más espeso…. Alicia aceleró y en rápidamente Fran descargo en la mano de su esposa. Al poco tiempo acabo sumido en un profundo sueño. Alicia estaba confundida. Su esposo que había sido el único hombre en su vida y acababa de comer su coño que aún chorreaba semen de otro hombre....
Su móvil sonó avisando de la llegada de un mensaje.
"Te espero tía"..... y una foto clandestina que su sobrino había tomado en el coche mientras se la chupaba
Noto sus pezones duros y su coño palpitaba. En un instante estaba en la habitación.
- Eres un cabrón. Te dije que no mas y....
Su sobrino la giro poniéndola a 4 patas follandola desde atrás ....empujaba fuerte. Alicia gemía y la cama sonaba.
-Gime puta- Le ordenaba su sobrino mientras la penetraba azotando su culo.
Alicia gemía y suspiraba.
-Ummmm al final el cornudo de mi tío se va a enterar que lo es- Decia su sobrino.
-No. No. No se enterará. -Gemía Alicia.
Su sobrino empujaba con fuerza.
- ¿Por qué dices eso?
Entre gemidos tía Alicia confeso que había puesto una de sus pastillas para dormir en la copa de Fran.
Agarrada por las caderas ... notó la corrida en su coño una vez más.
- ¿borraras las fotos? Bórralas por favor. - suplico Alicia.
- No respondió su sobrino.
Alicia sabía que no las borraría y que aquellos días la habían puesto en manos de Miguel.
Por la mañana su sobrino cogió la maleta y se despidió.
Alicia tenía una mezcla de vacío y alivio. ¿Cuándo volvería a verle? No sabía en qué momento, pero era su sobrino y se encontrarían de nuevo de nuevo.
El verano continuo con la rutina de los anteriores, playa y siestas.
Durante los días sola Alicia no podía parar de pensar en lo que había ocurrido. Tenía una mezcla de alivio y de vacío.
Su estricta educación le hacía sentir alivio, pero a la vez vacío tras unos días tan intensos. Miraba el teléfono inquieta esperando noticias de su sobrino, pero a la vez aliviada de no saber nada.
Era sábado y Fran estaba allí. Era el último día antes de regresar a casa. El empezó a buscar excitarla, metiendo las manos en sus bragas. Empezó a masturbarla. Ella separó las piernas dejando vía libre a su marido. Tumbado encima la penetro. En posición de misionero su marido le hacia el amor. Alicia no paraba de pensar en la intensidad de los orgasmos de los días anteriores.
-Que te ocurre? Pregunto Fran notando la frialdad.
Alicia disimuló mostrándose más activa.
-Nada- Respondió ella mientras le agarraba empujando para que entrase más, gemía recordando como su sobrino la penetraba. Sintió como su marido la llenaba.
En la ducha sentía como salía de su coño los restos del polvo con su marido. Empezó a lavarse con más fuerza. Se frotaba. Abría los labios. Empezó a notar su cuerpo estremecerse …. empujo sus dedos …. metió 2, 3 ... revivió en su mente la manera en que la follaba su sobrino. Los metió con más intensidad…no tardo en correrse. Mientras el agua recorría su cuerpo su mente era un volcán de sensaciones. Contrastaba el éxtasis de su cuerpo con la vergüenza que sentía en su cabeza.
Se vistió y agarro su maleta. Al cerrar la puerta sintió desasosiego al poner el punto final a aquel verano tan intenso. Se subió al coche y durante el viaje solo recordó aquellos días ... se mantuvo callada todo el viaje.
Abrir la puerta del portal de su casa la devolvió a la realidad. Volvía a su hogar, su trabajo y su rutina. Abrió el buzón y recogió la correspondencia. Mientras subía en el ascensor la ojeaba. Una carta le hizo sentir una punzada en su estómago .... todo su cuerpo se erizo.
Era una invitación a un evento familiar. ¿Estaría su sobrino? No sabía si alegrarse o no. Tenía a miedo a su propia reacción......que se pondría? Dudaba de ir o no .... tantas dudas ... que debía hacer?????
 
Última edición:
Parte 2

No. No. No iré. Pensaba Alicia mientras el ascensor subía. Le asustaba su reacción al volver a encontrarse con Miguel.

Dejó la carta en la entrada y avanzó hasta su habitación con la maleta, aparcando aquel verano tan diferente.

Era lunes, Fran se había ido a trabajar, Alicia aún estaba de vacaciones, era un día para poner en orden la casa después del veraneo. Solo llevaba el fino camisón con el que había dormido.

Abrió la maleta y dejó la ropa sucia en el suelo formando un montón frente a la lavadora.

Sentada en la silla su mente no dejaba de dar vueltas a todo lo ocurrido esa semana en que su sobrino había despertado en ella toda lujuria que no sabía. Avergonzada daba vueltas al café mientras odiaba y deseaba a Miguel a partes iguales.

Durante toda la vida había sido una mujer tradicional y no había habido más hombre en su vida que Fran. Había tenido con él unas relaciones placenteras, pero ... nada comparable a Miguel. Daba vueltas al café, absorta, con la mirada perdida de un lado a otro. Sus ojos iban de un lado a otro, sintió una punzada en su vientre. Del montón de ropa emergían bajo una toalla las bragas que se había puesto la noche de la cena previa a la marcha de Miguel.

Su cuerpo sudaba. Dudo que hacer. Bebió el café de un trago y se acercó al montón de ropa. En cuclillas cogió las bragas en su mano. Eran negras. En el lugar que ocupaba su coño se encontraba la gran mancha blanca que había dejado la corrida de su sobrino y restos de su flujo. Notaba su coño humedecerse, se abría y lubricaba recordando esa noche. Se las acerco y aspiro su olor. El morbo se apodero se ella. Puso la mano entre sus muslos, los notaba calientes y resbaladizos.... por el flujo.

Camino hasta su habitación y saco sus brazos de los tirantes del camisón dejándolo caer al suelo. Desnuda se puso las bragas que habla cogido y se tumbó en su cama. Separo las piernas y metió su mano en ellas. Estaban empapadas, mezcla de su flujo y los restos de aquella noche desenfrenada. Introdujo los dedos en su coño. Su mano resbalaba mientras se penetraba hasta el fondo. Cerraba los ojos y gemía. En su cabeza una y otra vez se veía follada por Miguel contra el capo.

-Cabrón -Gemía Alicia.

Se follaba duro. Sentía rabia por lo que había ocurrido. Metia.3 dedos y se estremecía.

Empujo más apretando su coño. No tardo en correrse.

Sin saber cómo había vuelto a sentir aquella lujuria. Se quitó las bragas. Al pasar delante del espejo vio su cuerpo desnudo. Se sintió sucia.

Bajo el agua de la ducha. Alicia se lavaba y jabonaba enérgicamente. Deseaba dejar de sentir esa excitación y volver a ser la señora correcta de siempre. Sus manos resbalaban por sus tetas y su coño. Separo sus labios. Dudo por un momento, se penetró. Aún sentía la excitación por el orgasmo anterior. Apretaba sus pezones con una mano y rozaba sus nalgas con otra. Bajo la mano por su culo. Rozando la entrada. Cerró los ojos y lo penetró con un dedo, metió otro más. Mordía sus labios bajo el agua. Con la otra mano penetro su coño. Movía sus caderas. Era su primera vez doblemente penetrada. En cada movimiento notaba alternamente como su coño y su culo eran penetrados. La corrida brutal.

Al salir de casa vio de nuevo la invitación.

No, no, no-. Pensaba. -No iré.

Bajaba en el ascensor cuando su móvil sonó. Al ver el mensaje sintió ira y enfado.

Cabrón. Como era posible que le escribiera como si nada para saber si iría al evento. No, no iré. Pensó de nuevo.

Caminaba por la calle sonó el teléfono. Era Fran.

-Buenos días cariño. - Saludo Fran.

-Hola. ¿Va todo bien? -Respondió Alicia extrañada. No era habitual que su marido llamase a esas horas.

- Acuérdate de que tenemos la boda de mi sobrina. Cuando vayas a comprarte ropa cómprame una corbata.

-Pensé que no íbamos a ir- Respondió contrariada.

-Pero -¿Como no vamos a ir? Es mi sobrina. Además me ha llamado mi hermana para contigo. Te llamará. Te dejo cariño, me llaman.

Alicia se sentía enfadada, no había podido decir nada ni evitar ni la boda, ni quedar con su cuñada ... No le aparecía nada.

Al rato el teléfono sonó. Era Sonia su cuñada. A pesar estar cerca de los 60, se comportaba como adolescente. Vestuario ceñido y escotado. Una lengua osada capaz de decir cualquier cosa que le venía a la cabeza.

-Hola cuñada. Hay que ir de compras para la boda. Te recojo y comemos y compramos y compramos. Tenemos que ir espectaculares y que nos quiten ojo. Voy a quemar la Visa. Te recojo en tu casa en media hora. Chao.

Alicia no pudo ni decir palabra. Media hora después su cuñada la recogía en la puerta de su casa. Conducía por la ciudad a la velocidad que hablaba. Circulaba agresiva. En unos minutos había aparcado.

-Vamos a comer Alicia. Y después a comprar de todo, que pague tu cuñado- Rio Sonia.

Era conocido la mala relación de ambos. Juan el hermano de Fran era un hombre con un indiscutible exito laboral, pero había descuidado su matrimonio y en los eventos solía pasarse las horas en la barra y acababa borracho mientras Sonia flirteaba.

Comieron unos pinchos y empezaron a recorrer tiendas. Al final se decidieron por una conocida tienda en la que habían comprado otras veces.

Miraban el escaparate. Había un vestido ceñido y escotado. Negro de encaje corto.

-Me encanta. ¿Qué te parece Alicia?

Alicia solo asentía y decía a todo que si mientras Sonia reía y hablaba en alto mirando a todos lados. Le encantaba hacerse notar.

De repente agarro de la mano a Alicia llevándola a toda prisa cruzando el pasillo del centro comercial. Alicia la iba detrás de ella, aunque sin entender nada. Entraron en un bar donde un joven tomaba café sentado en un taburete alto de espaldas a la entrada.

-Hola sobrino. Invitaras a un café a tus tías ¿verdad?

-Hola tía Sonia. - Saludo Miguel dándole 2 besos

-Hola tía Alicia. - Miguel bajo la voz sulfurándole al oído el saludo, besando a su tía cerca de la comisura de los labios. No se habían visto desde la playa.

Miguel pidió 2 cafés más. Sonia reía. Alicia estaba muda.

-Que sorpresa veros juntas. ¿Qué hacéis por aquí?

-Estamos de compras para la boda de tu prima. Vamos a hacer que se os caiga la baba a todos. ¿Nos ayudas a elegir? Siempre será bueno la opinión de un hombretón guapo y no los sosos de tus tíos.

-Está bien tía.- Acepto Miguel.

Alicia estaba aterrada.

Salieron del bar. Sonia se agarró del brazo se su sobrino. Alicia sentía una mezcla de celos y odio. Deseaba que Miguel se esfumara y a la vez deseaba agarrarse de él. Odiaba a los 2.

Alicia cogió una blusa blanca de seda y una falda de tubo por debajo de las rodillas. Sonia, más atrevida se llevaba bajo el brazo varios vestidos, de seda, encaje, escotados, tirantes. Se probaba y reía divertida.

- ¿Que tal me sienta este Miguel?

Miguel le seguía el juego.

-Ese negro tía Sonia. Te queda genial … vamos por que eres mi tía que si no...... Yo escogería ese.

-Vaya, vaya. ¿Le has oído Alicia? - Preguntaba desde el otro probador.

-Seguro que tío Juan presumirá de esposa en la boda.

-Calla anda.... Que ese ni se fija. Nos pondremos sexis a ver quién nos mira. ¿Verdad Alicia?

Alicia se acababa de probar y Miguel y Sonia miraban. Los dos negaban con la cabeza.

-Anda Miguel cariño. Búscale algo más sexi que con ese.......

Volvió Miguel con un vestido corto negro de tirantes finos que dejaba los hombros al desnudo y mostraba un escote sugerente que daba pie a miradas indiscretas

-¡¡Ese!!! Ese es perfecto. - Dijo Sonia.

-Estáis locos. Ni lo soñéis. - Protesto Alicia.

-Pruébatelo mujer. Y disfruta un poco de una tarde de compras.

-Me lo probaré, pero será que no. - Alicia cerró la cortina de probador.

- Te gusta este Miguel. - Tía Sonia buscaba el halago de su sobrino mientras se contoneaba camino de probador.

-Que tal te queda? -Pregunto a gritos desde el probador Sonia.

-No es mi estilo - Protesto Alicia.

Miguel se acercó a tía Alicia entrando en el probador. Abordándola por detrás. Pegándose a su culo mientras le decía al oído. Mientras subía las manos por sus caderas bajo el vestido.

-Llévate este.

-Cállate. Estás loco. - Le decía intentando zafarse.

Tía Sonia seguía con su show. Se acercaba por los probadores. Miguel se apartó al tiempo que Sonia abría la cortina.

-Es perfecto mujer. Llévate ese. Miguel cariño acércate al otro probador, se me atascado la cremallera.

Alicia negaba con la cabeza.

-Es muy atrevido Sonia. No.

-Vamos mujer. -intentó convencer Sonia.

-No. - Protestaba en el momento que sonaba su móvil.

Un escueto mensaje.

"Iras con ese. Tía Alicia" junto con un adjunto con una foto.

Cabrón....pensó Alicia al mismo tiempo que notaba su coño humedecerse.

-¿Ya te has decidido tía Alicia? - Pregunto Miguel desde el otro probador.

-Está bien vosotros ganáis. - Claudico Alicia.

-Genial - dijo Sonia caminando por el pasillo de lis probadores. - Y ahora a por lencería. Nos acompañaras ¿Verdad Miguel?

-Claro tía Sonia.

Alicia tembló de miedo, mientras su cuerpo se encendía más.

Con las bolsas en la mano avanzando por el centro comercial tía Sonia dirigió al trio hasta una tienda de lencería donde solía comprar. Era un establecimiento elegante y refinado. Los maniquíes parecían prácticamente humanos. Sonia buscaba los conjuntos más atrevidos, trasparencias, encajes y prendas minúsculas que a buen seguro no tapaban.

-¿Os gusta este? -Pregunto Sonia.

Era un conjunto granate de encaje con un tanga minúsculo que taparía la parte justa de su coño.

Alicia estaba colorada. Sentía vergüenza, pero aguantaba.

Sonia desapareció tras la cortina. Al abrir la cortina el conjunto tapaba aún menos de lo que parecía en la percha. Alicia estaba muda mientras Miguel le seguía el juego.

-Que guapa tía Sonia... Ummm ¿Y un camisón?

-Siiiii. -Sonia estaba encantada siendo el centro. - Escogedme uno.

Alicia y Miguel buscaban entre las perchas.

-¿Quieres parar ya? - Pensaba Alicia. Deseaba pararle los pies a su sobrino mientras intentaba ocultar su estado de nervios.

Se acercaron al probador. Alicia llevaba un par de camisones uno blanco, largo, de raso, sin mangas con los hombros de encaje, el otro por las rodillas en un color beige, con la parte superior desde las copas de encaje, sin trasparencias. Eran muy "formales"

-Que aburrida eres cuñada. Son de vieja. -Sonia estaba defraudada.

Miguel se reía a carcajadas.

-Pruébate este, tía Sonia.

Sonia lo miraba con cara de asombro. Le encantaba, Alicia no era capaz a mirar. Era un fucsia de raso, corto solo unos centímetros por debajo de su pubis, las copas eran de un encaje tan fijo que permitían ver todo el pecho.

- Ay sobrino. Gracias por traerme este, pero trae una talla más grande que tu tía ya tiene el mismo tipo delgado que cuando tenía 20 años. Tráeme una 105C para que entren estas 2. - Dijo Sonia agarrándose el pecho

En cuanto Miguel se lo acerco se lo puso y abrió la cortina pidiendo la opinión.



- ¿Que os parece?

Prácticamente no ocultaba nada.



- Estás perfecta tía Sonia. - Sonrió Miguel mirando a ambas- ¿y tú que vas a comprarte tía Alicia?

-No me compraré nada- Dijo Alicia.

-Bobadas. Respondió su cuñada. - Vamos a buscarle algo Miguel.



Alicia se quedó sentada, intentando hacerles desistir. Mientras tía y sobrino iban de un lado para otro debatiendo que llevarle a Alicia.



Venían riendo los 2.

-Que buen gusto tiene nuestro sobrino, cuñada. Vamos, pruébate.

Alicia se quedó de piedra al ver lo que habían tramado sabiendo que le gustaba pasar desapercibida. Era un sujetador negro sin tirantes, de seda, A buen seguro que prácticamente trasparentaría todo el pecho, la parte inferior era un tanga minúsculo de encaje. Permita ver entre el, el pubis.

-Estáis locos. - Protesto de nuevo Alicia.


-Talla 95c, ¿verdad tía? - Dijo Miguel con una sonrisa pícara.


-Vaya con Miguel menudo ojo que tiene ... Dijo tía Sonia. Sorprendida por el acierto de Miguel.



No sin poner 1000 excusas al final Alicia se probó.

Abrió la cortina mirando al suelo avergonzada. Miguel tuvo una erección tremenda. Verla así había despertado su polla.


-Es perfecto. Y ahora un camisón- Alicia se negó en rotundo mientras se cambiaba.

-Ven Miguel. Que se lo vamos a regalar a tu tía Alicia para que no se pueda negar.

Recorrieron la tienda hasta dar con la prenda perfecta. Fueron al mostrador y Sonia pidió que se lo envolvieran para regalo.

-Guárdalo tu Miguel. Que esta es capaz de no llevarlo al viaje.

Miguel asintió, mientras miraba con una sonrisa maliciosa a Alicia. Esta no sabía que habían tramado, pero suponía que sería un camisón de todo menos algo "decente"

Salieron de la tienda, cuando ya estaban a punto de cerrar. Ya se había hecho de noche.

-¿Qué os parece si cenamos los 3? - Sugirió Sonia. - Juan está de viaje. No vuelve hasta el viernes. Puedo preparar algo rápido en casa.

Miguel acepto encantado, Alicia tras 1000 excusas acepto.

A los pocos minutos habían aparcado en casa de tía Sonia y tío Juan. Vivian en un ático grande en una de las mejores zonas de la ciudad. Entraron hasta el parking. Miguel aparcó en la parcela que normalmente ocupaba Juan aprovechando que estaba de viaje de negocios.

Subieron los 3 en el ascensor. Al abrir la puerta se encontraba un salón grande que distribuía toda la casa. Sonia sirvió una copa, pidió cena para los 3 y se disculpó un momento para ponerse cómoda. Alicia estaba inmóvil, sentía su coño humedecerse con la presencia de Miguel.

La voz de Sonia se oía a lo lejos dándoles conversación mientras se cambiaba. Miguel puso la mano sobre los muslos de Alicia que cerraba las piernas. Tía Alicia sintió los labios de su sobrino en su cuello, y una mano en su escote. Separo las piernas, se sentía de nuevo excitada, deseando notar en su coño todo lo que había sentido durante el verano. La mano de su sobrino llego hasta su tanga empapado, apartándolo para rozar su clítoris, deslizando los dedos en su coño. Alicia se había abandonado al placer y dejaba hacer a su sobrino. Gemía suave. Su cuñada estaba cerca y no podía levantar sospechas. Se sentía al borde del orgasmo, su cuerpo se movía buscando sentirlos más y más. Notaba como resbalaban dos dedos en su sexo completamente lubricado.

-Méteme 3.- Gemía, mordiéndose los labios para ahogar los suspiros

Los pasos de Sonia cortaron en seco el momento. Alicia cerraba las piernas mientras notaba sus muslos resbaladizos.

-Disculpadme. Voy al baño. Se excusó Alicia.

Se limpiaba y mojaba la cara intentando recobrar la compostura. Minutos más tarde salió. Al llegar al salón ya estaba todo listo para cenar. Los platos y la comida puestos en una mesa redonda. Al lado Sonia había sacado una cubitera y puesto a enfriar un buen vino.

-Tienes mala cara. ¿estas bien? Alicia asintió.

-Tendrá hambre. - Dijo Miguel, sirviendo vino para todos.

Los 3 se sentaron a cenar. Sonia bajo un poco la luz para hacer que la cena fuese más agradable y como de costumbre, comenzó a hablar sin parar.

-¿Ya sabéis lo del viaje? - Pregunto Sonia.

Ambos negaron con la cabeza. Miguel bajo la mesa subía la mano por los muslos de Alicia.

-Pues hemos decidido salir el miércoles por la noche toda la familia en tren hotel y hacer el viaje 2 noches en tren en vez del soso viaje en avión, ¿a qué es buena idea?

-Estupendo. - Alabo Miguel la idea.

-Podremos comer, y estar toda la familia junta que no nos vemos.

Alicia estaba inmóvil ante la idea y nerviosa por si Sonia descubría la mano de Miguel entre sus muslos. Miguel subía más y más, mientras su tía notaba el flujo correr entre sus labios bajando por su perineo.

Los minutos le parecían horas

Eran las 00:00h y Sonia despidió a su cuñada y sobrino en la puerta. Llamaron el ascensor y comenzaron a descender hasta el garaje. Miguel agarrando por detrás a su tía comenzó a sobar sus pechos mientras su mano volvía meterla en su tanga mientras Alicia gemía. Pellizcaba su clítoris mientras abría con sus dedos sus labios. La otra mano en la copa de su sujetador apretaba y estiraba su pezón. Alicia se veía en el espejo, cerraba los ojos y jadeaba. El ascensor llego a garaje.

Alicia estaba encendida, necesitaba correrse. Abrieron la puerta del ascensor, todo el garaje estaba a oscuras. , encendieron la luz caminando hasta el coche. El temporizador volvió a pagar las luces. En la oscuridad del garaje junto al coche de Miguel, con las manos apoyadas en el de Sonia. De un tirón las bragas de tía Alicia acabaron en el suelo, la falda en la cintura, Miguel solo abrió la bragueta sin bajarse los pantalones. Alicia separó los muslos. De una sola embestida sintió como su sobrino la llenaba entera, resbalando hasta tocar con el fondo de su vagina. Agarra por las caderas una tras otra penetración notaba su coño estremecerse. Miguel empujo más fuerte, a la vez que pellizcaba su clítoris. Alicia gemía mientras se corría.

La puerta del garaje se abrió.

-Abre el coche Miguel. - Pidió Alicia.

Aún excitados arrancaron el coche saliendo del garaje camino de casa de tío Fran, mientras Alicia se recomponía en el coche. Colocándose el sujetador y la camisa ... bajo la falda.

-Mis bragas. Exclamó Alicia.

Con la prisa habían quedado tiradas en el suelo del garaje. Alicia suspiró esperando que cuando Sonia cogiera el coche no estuvieran ya allí.

Al rato Miguel aparcó, y Alicia bajo del coche. Estaba callada.

Miguel abrió el maletero y su tía cogió las bolsas con la ropa, Al ver el paquete del camisón, sintió vergüenza y miedo. ¿Qué habrían comprado?

-Que buena idea lo del viaje en tren. - Sonrió Miguel.

Alicia dio 2 besos a su sobrino y entró en el portal Excitada, avergonzada, pero ante todo expectante por el viaje hasta Alemania para la boda de su sobrina. Esperaba que con su marido delante su sobrino no intentaría nada, aunque su cuerpo se estremecía de pensarlo.

¿Qué pasaría en el viaje? ¿y en la boda?
 
Parte 3


Pasaron las semanas sin que Alicia supiera nada ni de Miguel ni de Sonia hasta el miércoles en que todos saldrían en tren hasta Alemania camino de la boda. Su nerviosismo aumentaba a medida que se acercaban a la estación. En el andén ya estaba toda familia esperando. Juan y Sonia, sus hijos y parejas no habían podido asistir, y Carmen y Joaquín, que eran los padres de Miguel. Carmen era la hermana de tío Fran y tío Juan. Era la mediana de los 3.

Tía Sonia hacia señales con las manos a Tía Alicia a medida que se acercaban.

- Vamos Fran, Que perdemos el tren.

Se le notaba exaltada.

A Alicia temblaron las piernas a ver a Miguel. Sobre su maleta estaba la bolsa con el camisón que le había comprado Sonia. Sentía como el calor le subía a las mejillas.


-¿Estás bien Alicia? - pregunto Fran. -Estas colorada.

Alicia se avergonzó más aún.

-Hemos llegado a la carrera... casi lo perdemos. -Se justificó Alicia.

Uno tras otro empezaron a subir al tren. Carmen iba la primera abriendo la comitiva familiar mientras Juan, Fran y Joaquín iban a distancia, como siempre, al margen de todos. Unos metros por detrás de todos hablando de sus cosas. Sonia ayudaba a Alicia a subir al vagón. Sintió su coño inundarse al girarse para coger su maleta y ver la cabeza de su sobrino a la altura de sus muslos.

-Toma tía Alicia- Miguel sonrió con picardía mientras le ayudaba con su maleta.

Avanzando por el estrecho pasillo tía Sonia iba diciendo a cada uno que compartimento le correspondía. Tras Alicia, Miguel aprovechaba la estrechez del pasillo para rozarse contra el culo de su tía, que trataba de avanzar incomoda, excitada, intentando que nadie se diera cuenta.

El tren arrancó haciéndose tambalear a los viajeros con el primer tirón de la locomotora. Sonia y Alicia se tuvieron que apoyar en la pared del vagón mientras Miguel aprovechaba pegarse más aun a culo de su tía. A pesar de la tela Alicia notó el bulto de su polla clavado en sus nalgas.

-Este es vuestro departamento Alicia, este es el nuestro ... y este el tuyo Miguel.

Sonia indicaba a cada uno si sitio.

Alicia entró a su camarote, Fran continuo junto Juan, Carmen y Joaquín hasta el vagón restaurante. Se sintió aliviada de poder quedarse sola al fin. Cerró la puerta tras ella. Notaba el calor en su cuerpo, la presencia de su sobrino la alteraba. Temía que el resto de su familia pudiera sospechar algo. Los tres días en tren se le harían eternos teniendo tan cerca la tentación.

El sudor corría por su escote mientras empapaba su nuca y su cara con agua fría. Notaba el fresco y como sus pezones se endurecían, quedando erectos, contraídos y rugosos por el frio. Se marcaban exageradamente en su ropa. Notaba sus bragas empapadas pegadas a su coño tras el roce con Miguel.

-Alicia abre soy Sonia. - Se oía desde el pasillo.

Abrió la puerta un poco mientras su cuñada le indicaba que le esperaban los demás en el restaurante para cenar.

-Me cambio y voy. Necesito ponerme cómoda.

-Yo voy también a cambiarme y paso a buscarte. - Le dijo Sonia mientras se iba por estrecho pasillo camino de su departamento.

De la maleta Alicia sacó unos vaqueros y una camiseta, deseaba ir cómoda para la cena. Sobre la cama quedaron la falda y la blusa. Sus bragas estaban empapadas y el encaje se pegaba a su sexo transparentándose. Notaba su clítoris duro.... rozándose al ritmo del traqueteo del tren. Bajo las bragas por sus muslos dejándolas en el suelo mientras pasaba sus dedos por su pubis. Sintió deseos de masturbarse.

- ¿Estás lista? -Preguntó Sonia tocando la puerta.

- Ya salgo- Respondió Alicia mientras se vestía rápida. Respiró hondo tratando de recomponerse, mientras abría la puerta.

-¿Dónde está el vagón restaurante? - Pregunto Alicia mientras cerraba la puerta.

Siguiendo a su cuñada se dirigieron por los estrechos pasillos hasta el restaurante tras cruzar tres vagones.

Al abrir la puerta al final estaban Joaquín y Carmen, junto a Juan y Fran. Eran mesas para cuatro comensales. En la mesa anterior estaba Miguel solo. A su lado había una pareja joven que más tarde supieron que eran una pareja de recién casados. A cada paso que se acercaban a la mesa aumentaba la excitación y el nerviosismo de Alicia.

Tía Sonia estaba como siempre. Habladora y desenfadada, Alicia callada bajaba la cabeza, le asustaba su propia reacción al mirar a Miguel.

En la mesa de al lado la pareja joven no dejaba de buscarse. Las manos de él se movían buscando el cuerpo de su esposa sin importarle que alguien pudiera verles. Su mano bajo mesa se abria paso bajo su falda, mientras ella daba facilidades separando las piernas, mordía su labio inferior en clara muestra de excitación. Tía Alicia no pudo evitar excitarse observando la escena, notaba su coño humedecerse y empapar sus bragas.

-Disculpad - dijo Tía Alicia. -He de ir al baño.

-¿Estás bien? Parece q estas pálida. - Pregunto Sonia.

-Solo un poco mareada. Voy al baño.... No es nada.

-Acompaña a Alicia - Pidió Sonia a su sobrino.

Alicia trataba por todos los medios de que Miguel no fuese con ella, pero sabía que era imposible ante la insistencia de su cuñada. Caminando entre las mesas Alicia y Miguel salieron del vagón hasta el baño. Miguel caminaba pegado a Alicia por el estrecho pasillo. Podía sentir el roce de su sobrino entre sus nalgas mientras su excitación aumentaba en cada paso. Entrar en el estrecho habitáculo del baño y cerrar la puerta libero a tía Alicia de todas sus reticencias. Miguel la volteo quedando uno frente a otro. Alicia no pudo evitar lanzarse a la boca de su sobrino besándolo con ansia. Notando la lengua de Miguel en su boca, mientras sus manos dejaban sus pechos al desnudo. Los manoseaba, estiraba sus pezones, cada vez más duros y salidos. Las manos de Alicia buscan la entrepierna de su sobrino, hasta abrir su pantalón y dejar su polla fuera. Estaba húmeda, dura. Alicia la pajeaba con rapidez descapullándola mientras notaba la humedad en su mano.

Las manos de Miguel sobre los hombros guiaron a su tía hacia abajo hasta dejar su boca a la altura de polla, acercándola agarrada por la cabeza hasta meterla hasta el fondo de su boca.

-Chupa zorra- Ordenó mientras dirigía los movimientos agarrando su cabeza.

Alicia obediente abría la boca sintiendo como llenaba toda su boca rozando su paladar en cada embestida. Caía por la comisura de sus labios su saliva y los restos la lubricación de su sobrino.

Miguel aumento el ritmo sujetándola por el pelo, llegando hasta el fondo.

-Trágatelo

La voz de Miguel era firme mientras eyaculaba en el fondo de su boca. Alicia tragaba a duras penas los chorros. Notaba como se disparaban en su garganta, espesos y calientes mientras tragaba con dificultad.

-¿Estás bien Alicia? -Preguntaba Sonia al otro lado de la puerta. -¿Dónde está Miguel?

-Tranquila. Estoy bien. Le he dicho que puede irse. Si no ha ido al vagón restaurante supongo que habrá ido a su camarote- Se disculpó Alicia tratando de aparentar normalidad.

Sonia se encamino de nuevo a la mesa. Tras un momento de pausa abrió la puerta. Miro a un lado y al otro. El pasillo estaba vacío. Salieron uno tras otro en direcciones opuestas.

Alicia llego de nuevo a la mesa con aire de normalidad. Unos minutos después llego Miguel.

- Pero ¿dónde te has metido muchacho? -Pregunto tia Sonia.

- Fui a mi camarote. Se me había olvidado una cosa.

- Es verdad. El regalo de Alicia - dijo Sonia con una sonrisa maliciosa.

-Si, si. Eso- Disimulo Miguel.

Tía Alicia volvió a notar sus bragas húmedas.

La cena continuó con normalidad. Carmen, Joaquín, Fran y Juan estaban en la mesa de al lado charlando de temas aburridos. La pareja de recién casados buscándose. Alicia pensaba en lo ocurrido la noche tras la tarde compras. Sonia hablaba sobre la boda... Miguel controlaba la situación mientras deslizaba la mano bajo la mesa subiendo por los muslos de tía Alicia.

La pareja de recién casados se retiró a su camarote. Los demás, como era típico en las reuniones familiares organizaron una partida de cartas tras la cena. Tía Alicia se retiró con la excusa del cansancio. Deseaba estar sola, su cuñada la siguió.

Caminaban por el pasillo, oyendo cada vez más altos los gemidos que provenían del camarote de al lado. No era duda que la noche de la pareja de recién casados iba a ser intensa.

Alicia oía desde su camarote perfectamente cada gemido y cada embestida. Escuchando las palabras de excitación.

-Ohhh más duro. No pares. - Pedía ella entre jadeos

Alicia no se pudo reprimir. Se deshizo de la ropa dejándose solo las bragas, separando las piernas mientras buscaba su coño. Lo abría y se masturbaba al ritmo de las folladas, mientras estiraba sus pezones. Cada vez aumentaba más y más la intensidad de sus dedos dentro de su coño. Sus jadeos se camuflaban con los de su vecina... sentía acercarse su orgasmo cuando llamaron a la puerta.

-Abre, tía Alicia-

Miguel entro cerrando la puerta tras de sí.

Alicia sin mediar palabra abrió su pantalón sacando la polla de su sobrino. Los gemidos del camarote de al lado se oían perfectamente.

De un empujón Miguel penetró a su tía. Alicia abría sus piernas, entregada. Sentía como entraba y salía de ella con vigor.

-Ábrete mas -

Alicia gemía cada vez más alto mientras se giraba quedando a 4 patas. Agarrándola por las caderas volvió a follarla cada vez más duro. Dejando su cara frente a la ventana. Las luces pasaban delante de ella mientras sentía cada golpe de la polla de Miguel en su coño.

-Mas, mas. - Pedía Alicia.

Desde el camarote de al lado se pudo oír perfectamente como se corría la joven esposa. Alicia seguía jadeando mientras su sobrino la follaba aumentando el ritmo.

-No pares me corro. - Suplicaba Alicia

Jadeando en silencio se corrió.

El tiempo había pasado rápido.

-Vete cariño, en breve estará aquí tío Fran.

Desnuda se despidió de su sobrino con un rápido beso en la puerta Por el pasillo se oían pasos. Miguel fue a su camarote velozmente. Alicia se puso el camisón y metiéndose en la cama justo en el momento en que entraba su esposo.

Disimulaba haciéndose la dormida. Las copas habían hecho efecto en Fran. Excitado por el alcohol buscaba a su esposa. Pegándose a ella frotaba su polla contra su culo. Estaba cada vez con una erección mayor. Alicia comenzó a masturbarle tratando de que acabase rápido y evitar que se diera cuenta de la humedad que había en su coño recién follado. Alicia aumento la velocidad, moviendo su mano arriba y abajo cada vez con más intensidad ... rápidamente sintió el semen de su marido en su mano. Fran deslizo su mano entre los muslos de Alicia. Sintio su "lubricación" en sus dedos. Sin dudarlo se agacho metiendo la cabeza entre sus muslos. Comenzando a lamer con ansia.

-Ummm hoy estas más húmeda. ¿Te da morbo hacerlo en el tren? - pregunto Fran.

-Si. - Gimió Alicia disimulando.

Tío Fran seguía lamiendo con ansia, mientras recogía cada gota que salía de Alicia.

Alicia no tardo en correrse. Mientras Fran saboreaba.

-Nunca te había notado tan húmeda- dijo Fran mientras se levantaba.

Si tu supieras pensaba tía Alicia mientras se giraba.

El tren continuaba rumbo a Munich. Aun les quedaban 2 días hasta llegar.
 
Última edición:
A la mañana siguiente Alicia despertó con el traqueteo del tren. Sentía su cuerpo dolorido y su coño pegajoso. Recordó el día anterior mientras se estremecía al imaginar cada penetración. En silencio se levanto hasta el baño para ducharse y evitar que su marido se diese cuenta de su estado.

El sonido del agua despertó a Fran. Aún sentía en su boca el sabor a sexo de la noche anterior, se despertaba en él el morbo y la excitación. Alicia apareció en el compartimento, solamente llevaba con la toalla arededor del cuerpo. Fran instintivamente comenzó a sobar a su esposa agarrándola por detrás.

-¿Qué haces Fran? - Alicia se mostraba sorprendida e incomoda a la vez.

Fran continuaba pasando sus manos por su cuerpo. Acariciaba sus pechos y bajaba la mano, buscando su sexo entre sus muslos. Exploraba bajo su toalla en busc su coño mientras su erección iba en aumento.

-Pará Fran. He quedado con Sonia en el vagón restaurante y llegare tarde. - Intentó zafarse Alicia

Alicia trataba de frenar a su marido, pero Fran no se detenía ciego de excitación. Insistía presa de la excitación. Era inútil tratar de pararlo. Alicia alargo su mano bajo el pijama de su marido. Su polla estaba dura. Bajó su pantalón mientras se agachaba llevándosela a la boca. Cerró los ojos y comenzó a mamar intentando que Fran se corriese rápido. Mientras realizaba la felación, recordó la polla de su sobrino en su boca, mas grande y dura que la de su esposo, entrando con firmeza en su boca. Sentía decepción y deseo a la vez por disfrutarla de nuevo. Fran intentaba alargar el momento, Alicia con su mano aumento el ritmo para que se corriese. Fran gemía y jadeaba, estaba a punto de correrse cuando llamaron a la puerta.

-Estas lista cuñada? - Era Sonia.

-Te lo dije. -Susurro a su marido aliviada.

-Ahora salgo. - Respondió a su cuñada,

Alicia fue al lavabo para limpiar sus manos y salió del baño directamente hacia el pasillo.

-Voy a desayunar.- se despidió saliendo del camarote.

Fran aun caliente se fue a la ducha tratando de calmarse.

Uno tras otro fueron llegando a desayunar menos Miguel. Cada minuto que pasaba aumentaba la impaciencia de Alicia aunque no decía nada, no paraba de mirar a ver si aparecía en el vagón.

-¡¡¡Vaya con Miguel.!!! Se le han pegado las sabanas.- comento Sonia.

Era casi la 1 y aun no habla ido a desayunar. Ya se oían los platos en la cocina y seguía sin aparecer. Alicia se impacientaba recordando lo que había ocurrido el día anterior.

-Igual ha ligado y esta ocupado - Rió Sonia

-No digas bobadas Sonia. Estos jóvenes no madrugan nunca. - Cortó Alicia.

Sintió una punzada de celos con el estomago, no se imaginaba a su sobrino con otra después de lo que había pasado entre ellos.

-Disculpa Sonia. Voy a mi camarote antes de comer. - se excuso Alicia.

Al pasar delante de la puerta de su sobrino no pudo reprimir llamar.

-¿Si? ¿Quién es? Respondió Miguel al otro lado de la puerta.

-Abre Miguel, soy Alicia.- Dijo su tía bajando la voz para evitar ser escuchada.

Alicia entró rápidamente en cuanto se abrió la puerta abalanzándose con ansia hacia Miguel.

Noto la tremenda erección mañanera de su sobrino al meter la mano en su boxer, mientras se arrodillaba y empezaba a mamar su polla dura. Movía su mano arriba y abajo mientras la sentía crecer en su boca. Alicia chupaba con ansia y deseo, tratando de producirle el máximo placer, mientras su sobrino jadeaba bombeando en su boca.

Mientras tanto Sonia, que se había quedado sola, avanzaba por el pasillo camino de su camarote mientras. En cada paso oia mas y mas los gemidos de su sobrino.

Vaya con Miguel pensó mientras se acercaba. Al mismo tiempo Alicia movía su boca adelante y atrás fuera de sí. Deseaba sentir de nuevo a su sobrino, dentro de su coño, follándola duro.

-Fóllame cabrón.- pidió mientras se bajaba los pantalones.

Sonia no se lo podía creer....era Alicia. Su educada y correcta cuñada follandose a sobrino. La imagen le produzco una excitación inmensa. Entró en su camarote oyendo los jadeos y gemidos mientras desnudaba tumbandose en la cama. Abrió sus piernas y comenzó a frotar su clítoris con ansia mientras apretaba sus pezones. Rugosos, duros, sensibles y muy marcados. A su edad sus tetas ya caídas se movían al vaivén del tren y de las penetraciones que se regalaba con sus dedos, llevándolos al fondo de su coño. Entraban con facilidad deslizándose lubricados por el flujo. Metió 2, necesitaba más ... introdujo un tercero.

Al otro lado de la pared, Alicia se deshacía de su tanga solo deseaba sentir a Miguel de nuevo dentro en el preciso momento en que su móvil sonaba. Era tío Fran.

-Dime. -Respondió Alicia disimulando su excitación.

-¿Donde estas cariño? Voy al camarote. ¿Acabamos lo de esta mañana?

-En un momento estoy ahí- Se resignó Alicia.

Sabía que Fran desde la mañana la deseaba. Tenía que irse.

-He de irme cariño- Dijo Alicia mientras se vestía y salía por la puerta. Al llegar a su camarote tío Fran la esperaba excitado. Lejos de bajar su estado había ido en aumento desde la mañana. Alicia se desnudo lentamente y se tumbó en la cama separando las piernas. Fran entre ellas comenzó a penetrarla lentamente y con delicadeza. Alicia cerraba los ojos recordando la intensidad con que su sobrino follaba.

Mientras tanto Miguel seguía tumbado en la cama. La interrupción le había dejado con una tremenda erección. Cerró los ojos y comenzó a masturbarse. Se pajeaba absorto hasta que llamaron a la puerta.

-Abre Miguel, soy tia Sonia.

Miguel abrió sorprendido y volvió a tumbarse. Sonia pasó adentro rápidamente cerrando la puerta para evitar ser vista. Se sentó al lado de su sobrino buscando su cercanía.

-No has venido a desayunar ¿estás bien?- dijo Sonia tratando de romper el hielo, mientras pensaba. Claro que estas bien follandote a tu tia cabrón.

Miguel continuaba tumbado aún con la polla dura tras la visita de Alicia. Sonia no evitar quitar los ojos del bulto que se adivinaba bajo las sabana, mientras notaba como su flujo volvía a inundar su coño.

-Puedes confiar en mí- Empezó diciendo Sonia mientras ponía la mano en el la pierna de su sobrino.

-No sabía que tenía un sobrino tan golfo.- Le soltó de repente subiendo la mano por su pierna hasta su polla.

-Ni yo una tia tan golfa- rio Miguel.

Sonia separó la sabana sacando la polla erecta de su sobrino.

-¡¡¡Uffff!!! Normal que Alicia se volviera loca.

-¿La oíste? - preguntó Miguel

-Si- Respondio Sonia mirando la polla de su sobrino mientras la pajeaba con deseo. Se mordía el.labio mientras sus pezones se marcaban en su camisa.

-Ya veo que te gusta- dijo Miguel con voz maliciosa mientras agarraba la cabeza de su tía bajandola hasta meterla en su boca. Sonia comenzó a mamarla. Aspiraba y succionaba apretándola contra el paladar. No había duda que tenía experiencia chupando pollas.

-Deja que tu tía haga- jadeo Sonia mientras aumentaba el ritmo.

Bajaba y subía el prepucio apretandolo con la boca metiendo la lengua por los pliegues del prepucio y lamiendo el capullo con su lengua mientras apretaba con los labios al sacarla. Babeaba y por la comisura le caían restos de su sobrino y mezclándose con su propia saliva.

-¡¡¡Vaya, vaya!!! Joder como chupas tía Sonia. Menuda zorra estás hecha.-

Sonia jadeaba sacando su lado más guarro mientras su sobrino la agarraba por el pelo incorporándola. Comenzó a sobar sus tetas abriendo su camisa. Sonia se dejaba hacer entregada al placer. Miguel soltó el sujetador de su tía dejando caer sus tetas. Eran grandes y caídas con unos pezones marcados y duros. Sus areolas eran enormes. Pellizco uno mientras Sonia volvía a masturbarle. No deseaba soltar la polla de su sobrino.

-Ummmm vaya tetas tia Sonia.

-¿De veras te gustan cariño?

Miguel comenzó a chupar los pezones con fuerza mientras sentía como se contraían y endurecían en su boca. Mamaba con ganas mientras su tía acercaba la cabeza de Miguel apretandola contra sus enormes tetas.

Bajando la mano noto el coño de su tía húmedo. El clítoris sobresalía de sus labios. Los flujos de su tía empapaban su mano, al pasar sus dedos entre sus labios.

La giro poniéndola a 4 patas. Desde atras se veia su raja con el vello arreglado pero no rasurada. Agarró su culo carnoso clavando los dedos y la atrajo hacia él. De golpe apuntando a su coño entro hasta el fondo de golpe. Sonia no pudo evitar un gemido de placer que se oyó en el camarote de al lado. Alicia comprendió que su sobrino estaba calmando el calentón con el que le había dejado. Sintió una punzada en el estómago de rabia y celos. Fran seguia haciendole el amor con delicadeza, todo lo contrario que Miguel. Tumbada y abierta oía los movimientos al otro lado de la pared.

Miguel continuaba follando a su tia.....a su tía Sonia sin miramientos. Sonia sentía un placer como no había disfrutado en años. Sus tetas se balanceaban mientras Miguel la penetraba con dureza. Su coño chorreaba y de su boca salió un gemido en el momento que se corría en una explosión de placer. Su sobrino siguió bombeando hasta llenar el gran coño de su tía. Sonia se dejó caer bruces agotada. Tumbada sobre la cama de aquel tren exhausta. Notaba que los años pasaban se había vuelto a sentir de nuevo joven.

Mientras la rabia de Alicia había aumentado. Subida en Fran cabalgándolo con rabia para hacer que se corriera rápidamente. Fran no tardó en eyacular, quedándose tumbado relajado, mientas ella iba al baño. Aguidizó el oído tratando de adivinar que pasaba al lado.

-Vaya con tía Sonia no sabía que eras tan caliente.

-Gracias cariño. Eres un amor sobrino.

Alicia no podía creerlo....era Sonia a quien se estaba follado su sobrino. Su cuñada y su sobrino. Se sentía traicionada.

Sonia salió del camarote de su sobrino y fue al suyo antes de ir a comer.

La tensión durante la comida se podía cortar. Como siempre Carmen, Joaquin, Fran y Juan en una mesa. Sonia sonreía, Alicia miraba furiosa y Miguel miraba a ambas.

-Sois 2 cabrones - dijo al fin Alicia.

Miguel la mandó callar. Ya hablaremos dijo seriamente. Alicia vio su tono dominante y cerró la boca inmediatamente.

La tarde transcurrió en silencio. Miguel miraba su móvil mientras tía Alicia miraba por la ventana. Sonia leía mientras pasaba la mano bajo la mesa buscando el cuerpo se Miguel.

-Estate quieta joder- ordenó Miguel.- Se mas cuidadosa.

A la hora de la cena la tensión aún era mayor. Tras la cena Sonia pidió unas copas para todos. Era la ultima noche en el tren y propuso a todos brindar. Alicia se negó.

-Ayúdame y sigue el juego-dijo Sonia a su cuñada.- Hay que hacer que Fran y Juan beban más de la cuenta para poder hablar sin ellos delante.

Una copa tras otra todos brindaban. Juan como era habitual después de un rato no se tenía en pie. Carmen y Joaquín se habían retirado ya hacía más de una hora. Sonia se llevó a Juan a dormir y lo tumbó en la cama . Uno menos. Al volver Fran estaba ya borracho pero aún no caía rendido.

-Vamos cuñado, La última- Animó Sonia. Fran no se pudo negar. Esa copa le sobrepasó.

-No aguanto mas. Voy a dormir - Se disculpó

En el vagón restaurante solo quedaban los 3. Alicia y Sonia se acercaron a sus camarote, tanto Fran como Juan dormían. Camino del restaurante se cruzaron con Miguel.

-Venid - les dijo camino de su camarote

Entraron y cerraron la puerta. Era la primera vez q estaban solos después de lo ocurrido.

-¿Que ocurre tía Alicia- rompió el hielo Miguel.

Alicia estaba furiosa.

-Eres un cabron. No tienes freno......¿Con las 2?

Miguel rio con superioridad y comenzó a besarla con ansia. Manoseaba sus tetas mientras besaba su cuello y su escote. Alicia trato de apartarlo....Miguel bajo la mano bajo su falda. Noto su tanga húmedo....al apartarlo Alicia claudico jadeaba dejándose hacer. Sonia mientras tanto sobaba el paquete de su sobrino.

-Túmbate sobrino- pidió tía Sonia- Ayudame Alicia.



Alicia y Sonia desnudaron a su sobrino. Miguel disfrutaba de tener a ambas para él solo. Sonia más activa comenzó a masturbar a su sobrino. En su mano sentía como se endurecía. Miguel volvió a besar a Alicia. Poco a poco la guio hasta su polla ... Sonia acercó su mano mientras la agarraba a la boca de su cuñada. Alicia sin dudarlo empezó a chupar la polla de su sobrino. Miguel jadeaba mientras sobaba las grandes tetas de Sonia. Ella abrió su camisa dando facilidades. Se desnudó de cintura para arriba. Miguel sobaba sus pezones mientras Alicia subía y bajaba su boca.

-Acércate tía Sonia-

Sonia acercó sus pechos mientras su sobrino gozaba de ellos mamando.

Sonia bajó su boca....

-Deja algo para las demás se quejó-

Alicia cedió el sitio a su cuñada y se desnudo mientras Miguel comenzaba a rozar su coño rasurado. Alicia separaba las piernas mientras mientras su sobrino la follaba con sus dedos. Jadeaba.

-Sigue no pares- suplicaba

Agarrandola la sentó encima clavándose en la polla de su sobrino. Alicia cabalgaba jadeando mientras tanto Sonia se desnuda completamente acercando sus tetas a la boca de su sobrino.

-Ven- Ordenó a Sonia.

Esta vez fue Sonia quien se clavó en la polla de su sobrino. Comenzó a cabalgar mientras Alicia besaba a Miguel. Miguel deseaba gozar de las 2. Acercó las tetas de ambas a su cara. Mamaba y manoseaba alternante los pechos de Sonia y Alicia, tan diferentes y a la vez tan deseables. Alicia se clavaba jadeando, Miguel agarro su culo, llegando hasta el fondo de su coño. Alicia soltando un grito de placer se corrió. Se apartó y mientras Sonia 4 patas esperaba las embestidas de su sobrino. Ver a su cuñada excitada mientras la follaba su sobrino la había hecho casi correrse. Sus tetas se bamboleaban mientras la penetraba. Agarrada por las caderas Sonia se corrió.

Miguel salió de Sonia.

-Agacharos chicas. - Dijo Miguel, mientras ellas complacientes ponían sus bocas frente a su polla. Se la pasaba de una a otra. Mamaban con ansia. Alicia empezó a pajearlo, mientras Sonia se la metia en la boca y acariaba sus huevos. Miguel sacó polla dura de la boca de su tía en el momento en que se corría. Chorros de semen se dispararon en sus caras.

Miguel se tumbó en la cama mientras sus tias desnudas se abrazaban a él, una a cada lado de la cama. Sonia y Alicia se sentían felices, rejuvenecidas. No pensaban renunciar al placer.

-Hay Miguel para las 2- Rió mientras besaba a sus tías.

-Ya buscaremos la oportunidad de gozar los 3. ¿verdad cuñadita?- Dijo Sonia.

Tía Sonia y Tia Alicia se vistieron y se despidieron de Miguel con un beso en los labios.

A la mañana siguiente el tren llegaría a Múnich para la boda.
 
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