Emputecida por proteger su matrimonio (2)
Carlos se despertó entumecido en el sofá, hacía mucho tiempo que no dormía tan mal ni tan incomodo, se sentó y comenzó a escuchar unos sonidos que provenían de su habitación, al parecer las chicas también estaban despiertas, primero fueron unas risas cómplices le siguieron unos suspiros placenteros y luego los gemidos de su mujer que aumentaban de tono, se acerco a la habitación y se asomo a la puerta, ninguna de las dos notó su presencia, Rosa agarraba con sus manos la almohada mientras Karol le comía el coño.
- ¡Tú coñito me sabe tan dulce por la mañana! - le susurraba Karol.
- ¡Voy a perder el sentido! - balbuceaba Rosa - ¡Me voy a correr!
Carlos se dirigió a la cocina mientras escuchaba a su mujer gritar cuando se corría, preparo café, saco una bolsa de pan de molde y puso dos rebanadas en la tostadora y en aquel momento entró Karol en la cocina, abrió la nevera como si aquello fuera su casa y saco una botella de leche.
- ¡Me ha gustado tirarme a tu mujer! - le dedico Karol a Carlos quitándole una de las tostadas - ¡Enloqueció cuando la follé!
Carlos hizo un gesto despectivo y tuvo la misma sensación que la noche anterior, la ira lo consumía por dentro, en aquel momento Rosa entro en la cocina, salía de la ducha e iba tapada con una toalla, se acerco a su marido y le dio un beso en la mejilla, se cruzaron las miradas y él pudo observar cómo lo ojos de su mujer brillaban de una manera especial y que él conocía bien, los que ponía después de una noche de sexo y quedar bien satisfecha.
Almorzaron y luego Carlos se fue a arreglar unos papeles y preparó los sobres de pago de sus trabajadores, una reunión en la notaría con el dueño del solar, hizo el ansiado pago, por fin podría levantar su empresa, realizo unas llamadas para empezar a excavar en el solar a partir de la próxima semana.
Volvió a casa y recogió a su mujer y Karol y emprendieron el viaje a Madrid, pararon en un restaurante de carretera y comieron un buen menú, después continuaron viaje y llegaron a media tarde, la urbanización estaba bien señalizada y entraron en un chalet que era muy engañoso y llamo poderosamente la atención de Carlos.
Entraron con su vehículo en un parking muy modesto, pero su sorpresa fue que en su interior podía albergar más de 40 vehículos, la edificación era de dos plantas pero por su acceso solo podías ver una humilde edificación, por el otro lado estaba orientada a la sierra madrileña y era enorme, más tarde descubriría que tenía más de 18 habitaciones, una amplía cocina y un gran salón con una barra rectangular y un escenario y rodeada de amplios sillones, Carlos sabía que era toda una obra de arte, simulaba una pequeña edificación, pero en realidad ocultaba un lugar muy amplio y espacioso fuera de las miradas exteriores y aquello solo se podía hacer con mucho dinero o poder.
Karol les guio por el chalet y los dirigió a un sitio apartado, más tarde supieron que estaban en un ala apartada de las habitaciones donde las prostitutas llevaban a sus clientes, los llevo a una habitación que daba a la ladera de la montaña, disponía de un balcón en el que si te asomabas veías un amenazante vacio, disponía de una gran cama y otra cama pequeña en un rincón y unas sillas y un amplio sofá y una pequeña nevera llena de refrescos y agua, una puerta daba a un baño con una ducha enorme, karol los dejo solos durante un buen tiempo.
- ¡Te prometo que te sacare de aquí en cuanto pueda! - le dijo Carlos a su mujer abrazándola.
- ¡Estoy asustada! - le contestó Rosa con cara de preocupación.
La puerta se abrió y entro Karol acompañada de dos hombres, el primero de ellos era un tipo alto y delgado, de complexión fibrosa, una barba áspera y una mirada dominante, el segundo era un tipo de color, más bajito y muy corpulento, rudo y de aspecto matón, su nariz deforme le delataba como una especie de boxeador, karol los presento como Rony el mandamás de todo el cotarro y a el moreno le apodaban Lonas (le venía por sus años de boxeador, el que se enfrentaba a él iba a la lona), de seguridad por supuesto. Karol se llevo a Rosa a un lado mientras los dos tipos se quedaron desafiantes delante de Carlos.
- ¡Tomate cada día una de estas! - le dijo Karol a Rosa dándole una caja de pastillas - ¡Son anticonceptivos para que no te quedes preñada!
Rosa se tomo una pastilla dándole un trago a una botella de agua, Lonas se acerco a ella y empezó a desnudarse, ella lo miro atemorizada, aquel tipo la intimidaba y la hacía sentir muy incómoda.
- ¡Chúpamela guarra! - le dijo con voz áspera Lonas, al mismo tiempo que la obligaba a agacharla con fuerza al sujetarla por los hombros.
Rosa se quedo agachada delante de aquel hombre y miro de soslayo a su marido que hizo un gesto para acercarse, pero una mirada agresiva de Rony lo detuvieron en seco, Rosa puso la mano en el tronco de aquella polla negra y avanzó su cabeza y se metió el glande en la boca.
- ¡Menéamela y chúpala con ganas! - le ordeno Lonas agarrándola por el cuello.
Rosa agarró con la mano el tronco y empezó a moverlo mientras aumentaba la succión a la que le sometía el glande, el pene de Lonas aumento de tamaño y Rosa pudo adivinar que era un poco más grande que el de su marido, un poco más gruesa eso sí.
- ¡Esta guarra no sabe chupar pollas! - vocifero el negro que hizo que Rosa sintiese un escalofrío y aumentase el movimiento en la felación.
Lonas sujeto a Rosa por el cuello y fue él el que empezó a penetrarla con fuerza en la boca y meterle la polla hasta la campanilla, el rostro de Rosa se volvió muy enrojecido y sus ojos llorosos mientras sus manos hacían aspavientos, él negro le saco la polla de la boca y Rosa se derrumbo sobre el suelo apoyándose con las manos y tosiendo fuertemente.
- ¡Yo no soy el mierda de tu marido! - le vociferaba el negro mientras la agarraba violentamente por los pelos de la cabeza y le daba golpes con la polla en la cara - ¡Quiero que me comas la polla bien comida!
- ¡Trátala con respeto, es mi mujer! - vocifero Carlos intentando avanzar hacia su mujer y el negro, pero una mano lo sujeto fuertemente por la camisa y eso dio tiempo para que Lonas también se acercase y agarrase a Carlos por el cuello, lo arrastró por el suelo y lo llevo hasta la pared, su espalda y su cabeza golpearon la pared y la mano que le estrujaba el cuello lo levantó unos centímetros del suelo y así lo sostuvo por un instante.
- La guarra de tu mujer es nuestra - le dijo en tono amenazante Rony que se puso delante - la vamos a follar por la boquita y por donde nos dé la gana.
Carlos pataleaba sin que sus pies tocasen el suelo y su mujer Rosa acudió en su ayuda, agarró con las dos manos el poderoso brazo de Lonas, pero no consiguió moverlo tan solo un centímetro.
- ¡Soltadlo! - grito Rosa lloriqueando - ¡Hare lo que queráis!
Rony hizo un gesto y el negro soltó a Carlos que cayó como un saco y quedo sentado en el suelo mientras se masajeaba su dolorido cuello con la mano y aspiraba bocanadas de aire.
- Pones a tu mujer en el mercado y ahora vienes con escrúpulos morales - le murmullo Rony que se agacho para mirarlo a la cara y que lo escuchase bien - ¡Vaya mierda de marido estas hecho tú!
- ¿Quiero hablar con Jefe! - dijo Carlos con la voz ronca por la asfixia que persistía.
- ¡No hay nada de qué hablar! - le sentenció Rony - ¡Traes un sobre con 50.000€ más un 10% y te la llevas!.... si no ya sabes, de puta.
Rosa apartó Lonas de su marido y se agacho y comenzó a hacerle una mamada a conciencia, el cabrón del negro estaba excitado y mostraba una erección formidable, Rosa evidenciaba otra actitud y le masajeaba los testículos mientras le chupaba la polla con ímpetu, le daba lametazos al glande y le mordía los huevos.
- ¡Mira como tu mujer se la chupa! - le humilló Rony - ¡Le gusta hacerle una buena mamada a una polla negra!
Carlos observo como su mujer le estaba haciendo una mamada impresionante al negro y este la acariciaba la cabeza y levantaba la cabeza y bufaba en señal de satisfacción y su mujer notaba la excitación que le estaba produciendo y aumentaba los lametazos y las succiones de aquel pene negro, de vez en cuando miraba a su marido, cómo suplicándole comprensión por lo que estaba haciendo.
- ¡Saca la lengua! - le ordeno Lonas - ¡Voy a llenarte de leche!
Carlos observo atónito como su mujer abrió la boca y esperó recibir la corrida de aquel tipo, a él tan solo lo había dejado hacerlo en contadas ocasiones, él negro se pajeaba delante de la lengua de Rosa y empezó a descargar por la boca y la cara de Rosa que recibió aquella caliente leche y se relamió los labios.
Karol pudo observar la actitud de Carlos y cómo mirando a su mujer aquello que estaba viendo le producía un tremendo rechazo y su rostro reflejaba un sentido de tensión y ira y lo saco de la habitación y lo llevo al salón, ya había empezado a funcionar el local, las luces eran muy tenues y una mulata con acento caribeño se acerco y karol le pidió un whisky, Carlos le lanzo un profundo trago y empezó a tranquilizarse.
- A primera hora viene mucha juventud - le dijo Karol a modo de explicación - es lo que más trabajo da a las putas y menos beneficio, luego más tarde la clientela cambia y se mueve gente de más edad, es donde ésta la pasta y tú mujer va a entrar mejor.
Carlos le dedico una mirada amplía al local y pudo ver a unas cuantas mujeres y unos chicos en algunos casos muy jóvenes, riéndose y hablando con las putas y cómo alguna de ellas le metían mano y magreaban las pollas de los chavales, a ver si alborotando el gallinero.
- ¡Ahora tenemos unas 15 chicas más o menos cada día y tu mujer nos va a venir muy bien! - le explico Karol.
Una mano le dio un golpecito en la espalda y Carlos se giro, era Lonas que le hacía un gesto para disculparse y de que no era nada personal.
- ¡Volved Rony os ésta esperando! - dijo el negro
Carlos le dio otro trago y Karol gesticulo y lo llevo por una puerta que daba a una escalera, subieron y una puerta con código de seguridad les impedía el paso, Karol la abrió poniendo un dedo en el lector de huellas, entraron en un pasillo donde estaba la puerta de la habitación, entraron y su mujer estaba acurrucada en la cama aún vestida y Rony les hizo un gesto para entrar.
Carlos se sentó en una silla y karol se puso al lado de Rosa y empezó a desnudarla y Rony hizo lo mismo, Carlos hizo un aspaviento cuando vio colgando la polla de Rony de su entrepierna, la puerta se abrió y entro la mulata que le había servido la copa, se descalzo y se subió a la cama, karol le hizo un gesto a Carlos y los dos se sentaron en el sofá, ella se puso de rodillas ante él y le desabrocho los pantalones y le saco la polla y empezó a descapullarla lentamente.
La mulata empezó a besar las tetas de Rosa y Rony se puso al lado de Rosa y le cogió la mano y la llevo a su polla y cuando Rosa notó aquella tranca lanzo un suspiro, era más larga y mucho más gruesa que la de su marido, Rony le abrió las piernas y le acaricio la raja mientras la mulata y Rosa se besaban y se daban la lengua.
- ¡Tú mujer tiene el coño muy estrecho y apretado! - le susurró Rony a Carlos que observaba la escena en silencio mientras Karol le hacía una lenta paja - ¡Voy a tener que abrirle bien el coño!
Rony le metía dos dedos en el coño de Rosa que ya se dejaba llevar por las caricias de la mulata y empezaba a gemir placenteramente, Carlos tuvo la impresión que en la forma que él exploraba y tocaba el coño de su mujer era como si estuviese examinando ganado.
Pronto se cambiaron de posición y la mulata se agacho delante de las piernas de Rosa y Rony delante de la cara de Rosa que supo lo que él quería y se llevo las manos a la polla y se la metió en la boca, casi no le cabía y empezó a lamerle el glande, al mismo tiempo la mulata le inició una comida de coño, Rosa gemía con fuerza, era la primera vez que estaba con dos personas y su excitación era evidente.
Su marido miraba mientras Karol le descapullaba la polla y él empezó a dar síntomas placenteros. Rosa sucumbió a la comida de coño de la mulata y se corrió por primera vez, el sexo lésbico le estaba dándole grandes placeres y siguió chupando y metiéndose aquella polla en la boca.
- ¿Quieres probarla en tu coño? - le preguntó Rony a Rosa.
- ¿Me vas a hacer daño? - exclamo Rosa
- Al principio hace daño - confeso abiertamente Rony - ¡pero luego me suplicaras que venga a follarte!
La mulata era una autentica experta y ya estaba poniéndole lubricante en el coño a Rosa, aquello no paso desapercibido a su marido y le provoco que su polla lanzase leche a chorros mientras Karol la estrujaba con la mano.
Rony atrajo a Rosa al borde de la cama y subió una de sus piernas a su hombro y la penetró en dos golpes, Rosa aulló dos gritos atronadores y se estremeció en la cama, notó como su coño se estiraba y que nadie la había penetrado tan profundamente, le puso las manos en el pecho a él y abrió los ojos como platos y cogió aire apresuradamente, su expresión dolorosa no detuvo a Rony que saco la polla y la volvió a clavar con fuerza en el coño de Rosa, que soltaba otro grito y sentía cómo algo le golpeaba el útero con la penetración.
- ¡Te lo suplico házmelo despacio! - sollozaba Rosa que subía la cabeza porque la mulata se había puesto detrás suyo y la cabeza de Rosa estaba entre sus piernas - ¡Siento el coño muy lleno!
Rony le clavo la polla un par de veces más y empezó a deslizarse entrando y saliendo de su coño, Rosa no pudo contenerse y sufrió una convulsión detrás de otra y su cuerpo sintió un placer nunca antes experimentado y lanzo un aullido.
-¡Mira como se ha corrido la guarra de tu mujer! - le dijo a Carlos la mulata mientras le giraba la cara a Rosa para que lo mirase - ¡Se va volver loca con este pollón!
Rosa busco la mirada de su marido y cuando se encontraron, la apartó avergonzada, su marido nunca consiguió que se corriese así. Carlos ya estaba otra vez empalmado y karol comenzó a hacerle otra paja.
Rony activo sus caderas y volvió a follar suavemente a Rosa que empezó a gimotear y lloriquear al sentir aquellas oleadas de placer y como su coño se estiraba y su vagina se dilataba engullendo aquella polla en su coño.
- ¡No te soporto más! - chillo Rosa estremeciéndose y intentando apartarse de Rony, pero la mulata la sujeto por los hombros y él le subió las caderas y la follo sin compasión, su polla le taladraba el coño cómo nunca lo habían hecho, sus gritos eran atronadores y su cara estaba totalmente desfigurada y sus pupilas desaparecian de su expresión - ¡Para ya, me he vuelto a correr!
- ¡Me gusta follarme casadas cómo tú! - le vociferaba Rony humillando tanto a ella cómo a Carlos - ¡Y cómo te corres cuando te follo por primera vez!
- ¡Para ya! - gimoteaba ella - ¡Ya he perdido el control y me voy a derretir!
Rony la siguió penetrando y Rosa se volvió a correr otra vez, era la primera vez que experimentaba ser multiorgásmica y aquello fue un descubrimiento para ella, Rony saco su polla del coño de Rosa y esta lanzo un grito a sentir salir aquel pollón y sus labios vaginales volviesen a su posición doloridos y estirados, se giro y se tapo el coño que empezó a chorrear fluidos con las manos con gestos de dolor.
Rony le metió la polla en la boca y empezó a follarla con suaves movimientos, Rosa abrió los ojos al sentir aquel pollón follándole la boca.
-¡Mira como le follo la boquita, después de romperle el coño! - le dijo Rony a Carlos que en aquel momento volvía a eyacular.
Rony se corrió encima de la cara de Rosa y le lleno la cara y el pelo de lefa, se levanto, se vistió y se fueron con la mulata, karol levanto a Rosa de la cama, aún con la cara llena de leche.
- Ahora te vas a duchar y en ese armario hay una fregona y sabanas limpias, las cambias y lo friegas todo y lo dejas todo bien limpio - le ordeno Karol enseñándole donde estaban las cosas - ¡Cada vez que termines de follar con alguien haces lo mismo, eso también es trabajo de una puta!
Rosa asintió con la cabeza y se dirigió a lavarse la cara, luego salió y con ayuda de su marido cambio las sabanas y fregó toda la habitación y se fue a duchar y luego tanto ella como su marido se quedaron dormidos.
Carlos se despertó entumecido en el sofá, hacía mucho tiempo que no dormía tan mal ni tan incomodo, se sentó y comenzó a escuchar unos sonidos que provenían de su habitación, al parecer las chicas también estaban despiertas, primero fueron unas risas cómplices le siguieron unos suspiros placenteros y luego los gemidos de su mujer que aumentaban de tono, se acerco a la habitación y se asomo a la puerta, ninguna de las dos notó su presencia, Rosa agarraba con sus manos la almohada mientras Karol le comía el coño.
- ¡Tú coñito me sabe tan dulce por la mañana! - le susurraba Karol.
- ¡Voy a perder el sentido! - balbuceaba Rosa - ¡Me voy a correr!
Carlos se dirigió a la cocina mientras escuchaba a su mujer gritar cuando se corría, preparo café, saco una bolsa de pan de molde y puso dos rebanadas en la tostadora y en aquel momento entró Karol en la cocina, abrió la nevera como si aquello fuera su casa y saco una botella de leche.
- ¡Me ha gustado tirarme a tu mujer! - le dedico Karol a Carlos quitándole una de las tostadas - ¡Enloqueció cuando la follé!
Carlos hizo un gesto despectivo y tuvo la misma sensación que la noche anterior, la ira lo consumía por dentro, en aquel momento Rosa entro en la cocina, salía de la ducha e iba tapada con una toalla, se acerco a su marido y le dio un beso en la mejilla, se cruzaron las miradas y él pudo observar cómo lo ojos de su mujer brillaban de una manera especial y que él conocía bien, los que ponía después de una noche de sexo y quedar bien satisfecha.
Almorzaron y luego Carlos se fue a arreglar unos papeles y preparó los sobres de pago de sus trabajadores, una reunión en la notaría con el dueño del solar, hizo el ansiado pago, por fin podría levantar su empresa, realizo unas llamadas para empezar a excavar en el solar a partir de la próxima semana.
Volvió a casa y recogió a su mujer y Karol y emprendieron el viaje a Madrid, pararon en un restaurante de carretera y comieron un buen menú, después continuaron viaje y llegaron a media tarde, la urbanización estaba bien señalizada y entraron en un chalet que era muy engañoso y llamo poderosamente la atención de Carlos.
Entraron con su vehículo en un parking muy modesto, pero su sorpresa fue que en su interior podía albergar más de 40 vehículos, la edificación era de dos plantas pero por su acceso solo podías ver una humilde edificación, por el otro lado estaba orientada a la sierra madrileña y era enorme, más tarde descubriría que tenía más de 18 habitaciones, una amplía cocina y un gran salón con una barra rectangular y un escenario y rodeada de amplios sillones, Carlos sabía que era toda una obra de arte, simulaba una pequeña edificación, pero en realidad ocultaba un lugar muy amplio y espacioso fuera de las miradas exteriores y aquello solo se podía hacer con mucho dinero o poder.
Karol les guio por el chalet y los dirigió a un sitio apartado, más tarde supieron que estaban en un ala apartada de las habitaciones donde las prostitutas llevaban a sus clientes, los llevo a una habitación que daba a la ladera de la montaña, disponía de un balcón en el que si te asomabas veías un amenazante vacio, disponía de una gran cama y otra cama pequeña en un rincón y unas sillas y un amplio sofá y una pequeña nevera llena de refrescos y agua, una puerta daba a un baño con una ducha enorme, karol los dejo solos durante un buen tiempo.
- ¡Te prometo que te sacare de aquí en cuanto pueda! - le dijo Carlos a su mujer abrazándola.
- ¡Estoy asustada! - le contestó Rosa con cara de preocupación.
La puerta se abrió y entro Karol acompañada de dos hombres, el primero de ellos era un tipo alto y delgado, de complexión fibrosa, una barba áspera y una mirada dominante, el segundo era un tipo de color, más bajito y muy corpulento, rudo y de aspecto matón, su nariz deforme le delataba como una especie de boxeador, karol los presento como Rony el mandamás de todo el cotarro y a el moreno le apodaban Lonas (le venía por sus años de boxeador, el que se enfrentaba a él iba a la lona), de seguridad por supuesto. Karol se llevo a Rosa a un lado mientras los dos tipos se quedaron desafiantes delante de Carlos.
- ¡Tomate cada día una de estas! - le dijo Karol a Rosa dándole una caja de pastillas - ¡Son anticonceptivos para que no te quedes preñada!
Rosa se tomo una pastilla dándole un trago a una botella de agua, Lonas se acerco a ella y empezó a desnudarse, ella lo miro atemorizada, aquel tipo la intimidaba y la hacía sentir muy incómoda.
- ¡Chúpamela guarra! - le dijo con voz áspera Lonas, al mismo tiempo que la obligaba a agacharla con fuerza al sujetarla por los hombros.
Rosa se quedo agachada delante de aquel hombre y miro de soslayo a su marido que hizo un gesto para acercarse, pero una mirada agresiva de Rony lo detuvieron en seco, Rosa puso la mano en el tronco de aquella polla negra y avanzó su cabeza y se metió el glande en la boca.
- ¡Menéamela y chúpala con ganas! - le ordeno Lonas agarrándola por el cuello.
Rosa agarró con la mano el tronco y empezó a moverlo mientras aumentaba la succión a la que le sometía el glande, el pene de Lonas aumento de tamaño y Rosa pudo adivinar que era un poco más grande que el de su marido, un poco más gruesa eso sí.
- ¡Esta guarra no sabe chupar pollas! - vocifero el negro que hizo que Rosa sintiese un escalofrío y aumentase el movimiento en la felación.
Lonas sujeto a Rosa por el cuello y fue él el que empezó a penetrarla con fuerza en la boca y meterle la polla hasta la campanilla, el rostro de Rosa se volvió muy enrojecido y sus ojos llorosos mientras sus manos hacían aspavientos, él negro le saco la polla de la boca y Rosa se derrumbo sobre el suelo apoyándose con las manos y tosiendo fuertemente.
- ¡Yo no soy el mierda de tu marido! - le vociferaba el negro mientras la agarraba violentamente por los pelos de la cabeza y le daba golpes con la polla en la cara - ¡Quiero que me comas la polla bien comida!
- ¡Trátala con respeto, es mi mujer! - vocifero Carlos intentando avanzar hacia su mujer y el negro, pero una mano lo sujeto fuertemente por la camisa y eso dio tiempo para que Lonas también se acercase y agarrase a Carlos por el cuello, lo arrastró por el suelo y lo llevo hasta la pared, su espalda y su cabeza golpearon la pared y la mano que le estrujaba el cuello lo levantó unos centímetros del suelo y así lo sostuvo por un instante.
- La guarra de tu mujer es nuestra - le dijo en tono amenazante Rony que se puso delante - la vamos a follar por la boquita y por donde nos dé la gana.
Carlos pataleaba sin que sus pies tocasen el suelo y su mujer Rosa acudió en su ayuda, agarró con las dos manos el poderoso brazo de Lonas, pero no consiguió moverlo tan solo un centímetro.
- ¡Soltadlo! - grito Rosa lloriqueando - ¡Hare lo que queráis!
Rony hizo un gesto y el negro soltó a Carlos que cayó como un saco y quedo sentado en el suelo mientras se masajeaba su dolorido cuello con la mano y aspiraba bocanadas de aire.
- Pones a tu mujer en el mercado y ahora vienes con escrúpulos morales - le murmullo Rony que se agacho para mirarlo a la cara y que lo escuchase bien - ¡Vaya mierda de marido estas hecho tú!
- ¿Quiero hablar con Jefe! - dijo Carlos con la voz ronca por la asfixia que persistía.
- ¡No hay nada de qué hablar! - le sentenció Rony - ¡Traes un sobre con 50.000€ más un 10% y te la llevas!.... si no ya sabes, de puta.
Rosa apartó Lonas de su marido y se agacho y comenzó a hacerle una mamada a conciencia, el cabrón del negro estaba excitado y mostraba una erección formidable, Rosa evidenciaba otra actitud y le masajeaba los testículos mientras le chupaba la polla con ímpetu, le daba lametazos al glande y le mordía los huevos.
- ¡Mira como tu mujer se la chupa! - le humilló Rony - ¡Le gusta hacerle una buena mamada a una polla negra!
Carlos observo como su mujer le estaba haciendo una mamada impresionante al negro y este la acariciaba la cabeza y levantaba la cabeza y bufaba en señal de satisfacción y su mujer notaba la excitación que le estaba produciendo y aumentaba los lametazos y las succiones de aquel pene negro, de vez en cuando miraba a su marido, cómo suplicándole comprensión por lo que estaba haciendo.
- ¡Saca la lengua! - le ordeno Lonas - ¡Voy a llenarte de leche!
Carlos observo atónito como su mujer abrió la boca y esperó recibir la corrida de aquel tipo, a él tan solo lo había dejado hacerlo en contadas ocasiones, él negro se pajeaba delante de la lengua de Rosa y empezó a descargar por la boca y la cara de Rosa que recibió aquella caliente leche y se relamió los labios.
Karol pudo observar la actitud de Carlos y cómo mirando a su mujer aquello que estaba viendo le producía un tremendo rechazo y su rostro reflejaba un sentido de tensión y ira y lo saco de la habitación y lo llevo al salón, ya había empezado a funcionar el local, las luces eran muy tenues y una mulata con acento caribeño se acerco y karol le pidió un whisky, Carlos le lanzo un profundo trago y empezó a tranquilizarse.
- A primera hora viene mucha juventud - le dijo Karol a modo de explicación - es lo que más trabajo da a las putas y menos beneficio, luego más tarde la clientela cambia y se mueve gente de más edad, es donde ésta la pasta y tú mujer va a entrar mejor.
Carlos le dedico una mirada amplía al local y pudo ver a unas cuantas mujeres y unos chicos en algunos casos muy jóvenes, riéndose y hablando con las putas y cómo alguna de ellas le metían mano y magreaban las pollas de los chavales, a ver si alborotando el gallinero.
- ¡Ahora tenemos unas 15 chicas más o menos cada día y tu mujer nos va a venir muy bien! - le explico Karol.
Una mano le dio un golpecito en la espalda y Carlos se giro, era Lonas que le hacía un gesto para disculparse y de que no era nada personal.
- ¡Volved Rony os ésta esperando! - dijo el negro
Carlos le dio otro trago y Karol gesticulo y lo llevo por una puerta que daba a una escalera, subieron y una puerta con código de seguridad les impedía el paso, Karol la abrió poniendo un dedo en el lector de huellas, entraron en un pasillo donde estaba la puerta de la habitación, entraron y su mujer estaba acurrucada en la cama aún vestida y Rony les hizo un gesto para entrar.
Carlos se sentó en una silla y karol se puso al lado de Rosa y empezó a desnudarla y Rony hizo lo mismo, Carlos hizo un aspaviento cuando vio colgando la polla de Rony de su entrepierna, la puerta se abrió y entro la mulata que le había servido la copa, se descalzo y se subió a la cama, karol le hizo un gesto a Carlos y los dos se sentaron en el sofá, ella se puso de rodillas ante él y le desabrocho los pantalones y le saco la polla y empezó a descapullarla lentamente.
La mulata empezó a besar las tetas de Rosa y Rony se puso al lado de Rosa y le cogió la mano y la llevo a su polla y cuando Rosa notó aquella tranca lanzo un suspiro, era más larga y mucho más gruesa que la de su marido, Rony le abrió las piernas y le acaricio la raja mientras la mulata y Rosa se besaban y se daban la lengua.
- ¡Tú mujer tiene el coño muy estrecho y apretado! - le susurró Rony a Carlos que observaba la escena en silencio mientras Karol le hacía una lenta paja - ¡Voy a tener que abrirle bien el coño!
Rony le metía dos dedos en el coño de Rosa que ya se dejaba llevar por las caricias de la mulata y empezaba a gemir placenteramente, Carlos tuvo la impresión que en la forma que él exploraba y tocaba el coño de su mujer era como si estuviese examinando ganado.
Pronto se cambiaron de posición y la mulata se agacho delante de las piernas de Rosa y Rony delante de la cara de Rosa que supo lo que él quería y se llevo las manos a la polla y se la metió en la boca, casi no le cabía y empezó a lamerle el glande, al mismo tiempo la mulata le inició una comida de coño, Rosa gemía con fuerza, era la primera vez que estaba con dos personas y su excitación era evidente.
Su marido miraba mientras Karol le descapullaba la polla y él empezó a dar síntomas placenteros. Rosa sucumbió a la comida de coño de la mulata y se corrió por primera vez, el sexo lésbico le estaba dándole grandes placeres y siguió chupando y metiéndose aquella polla en la boca.
- ¿Quieres probarla en tu coño? - le preguntó Rony a Rosa.
- ¿Me vas a hacer daño? - exclamo Rosa
- Al principio hace daño - confeso abiertamente Rony - ¡pero luego me suplicaras que venga a follarte!
La mulata era una autentica experta y ya estaba poniéndole lubricante en el coño a Rosa, aquello no paso desapercibido a su marido y le provoco que su polla lanzase leche a chorros mientras Karol la estrujaba con la mano.
Rony atrajo a Rosa al borde de la cama y subió una de sus piernas a su hombro y la penetró en dos golpes, Rosa aulló dos gritos atronadores y se estremeció en la cama, notó como su coño se estiraba y que nadie la había penetrado tan profundamente, le puso las manos en el pecho a él y abrió los ojos como platos y cogió aire apresuradamente, su expresión dolorosa no detuvo a Rony que saco la polla y la volvió a clavar con fuerza en el coño de Rosa, que soltaba otro grito y sentía cómo algo le golpeaba el útero con la penetración.
- ¡Te lo suplico házmelo despacio! - sollozaba Rosa que subía la cabeza porque la mulata se había puesto detrás suyo y la cabeza de Rosa estaba entre sus piernas - ¡Siento el coño muy lleno!
Rony le clavo la polla un par de veces más y empezó a deslizarse entrando y saliendo de su coño, Rosa no pudo contenerse y sufrió una convulsión detrás de otra y su cuerpo sintió un placer nunca antes experimentado y lanzo un aullido.
-¡Mira como se ha corrido la guarra de tu mujer! - le dijo a Carlos la mulata mientras le giraba la cara a Rosa para que lo mirase - ¡Se va volver loca con este pollón!
Rosa busco la mirada de su marido y cuando se encontraron, la apartó avergonzada, su marido nunca consiguió que se corriese así. Carlos ya estaba otra vez empalmado y karol comenzó a hacerle otra paja.
Rony activo sus caderas y volvió a follar suavemente a Rosa que empezó a gimotear y lloriquear al sentir aquellas oleadas de placer y como su coño se estiraba y su vagina se dilataba engullendo aquella polla en su coño.
- ¡No te soporto más! - chillo Rosa estremeciéndose y intentando apartarse de Rony, pero la mulata la sujeto por los hombros y él le subió las caderas y la follo sin compasión, su polla le taladraba el coño cómo nunca lo habían hecho, sus gritos eran atronadores y su cara estaba totalmente desfigurada y sus pupilas desaparecian de su expresión - ¡Para ya, me he vuelto a correr!
- ¡Me gusta follarme casadas cómo tú! - le vociferaba Rony humillando tanto a ella cómo a Carlos - ¡Y cómo te corres cuando te follo por primera vez!
- ¡Para ya! - gimoteaba ella - ¡Ya he perdido el control y me voy a derretir!
Rony la siguió penetrando y Rosa se volvió a correr otra vez, era la primera vez que experimentaba ser multiorgásmica y aquello fue un descubrimiento para ella, Rony saco su polla del coño de Rosa y esta lanzo un grito a sentir salir aquel pollón y sus labios vaginales volviesen a su posición doloridos y estirados, se giro y se tapo el coño que empezó a chorrear fluidos con las manos con gestos de dolor.
Rony le metió la polla en la boca y empezó a follarla con suaves movimientos, Rosa abrió los ojos al sentir aquel pollón follándole la boca.
-¡Mira como le follo la boquita, después de romperle el coño! - le dijo Rony a Carlos que en aquel momento volvía a eyacular.
Rony se corrió encima de la cara de Rosa y le lleno la cara y el pelo de lefa, se levanto, se vistió y se fueron con la mulata, karol levanto a Rosa de la cama, aún con la cara llena de leche.
- Ahora te vas a duchar y en ese armario hay una fregona y sabanas limpias, las cambias y lo friegas todo y lo dejas todo bien limpio - le ordeno Karol enseñándole donde estaban las cosas - ¡Cada vez que termines de follar con alguien haces lo mismo, eso también es trabajo de una puta!
Rosa asintió con la cabeza y se dirigió a lavarse la cara, luego salió y con ayuda de su marido cambio las sabanas y fregó toda la habitación y se fue a duchar y luego tanto ella como su marido se quedaron dormidos.