Me encanta la belleza femenina, pero me cuesta encontrar alguien con quien tener similitud de gustos y complicidad virtual. Entiendo que, a veces, se busca más lo inmediato o lo evidente, pero a mí me encanta mucho más el análisis reposado de grupos de chicas corrientes en imágenes normales, sin aparente erotismo de ningún tipo; encuentro de lo más excitante observar cada detalle de aquellas que tienen, como todos, sus virtudes y defectos. Y lo que más me gusta es comparar a unas con otras, deducir posibles jerarquías entre ellas e ir visualizando cada parte sin prisa.