Con la resaca del sábado en el centro comercial, el domingo lo dedicamos a preparar maletas y descansar, porque el lunes queríamos salir temprano, para aprovechar la tarde en nuestro ansiado destino de vacaciones. Nos íbamos a pasar toda la semana en un resort de Cambrils, que no admitía niños. Queríamos tranquilidad en ese aspecto, disfrutar de las piscinas y zonas comunes entre adultos, sin enanos vociferando y chillando, mientras corren por todas partes. No me malinterpretéis, me gustan los niños, aunque no tenemos, pero ya que no tengo que aguantar los míos, tampoco quiero hacerlo con los de los demás, y menos en vacaciones.
Arrancamos a las 5 de la mañana desde Cartes, donde tenemos nuestra residencia. Unas horas después, paramos en Haro, a poner gasolina al X5, y tomar un café y un pincho. La intención era comer en Zaragoza para llegar sobre las 4 o así al complejo hotelero. Pasadas las 4:30, ya estábamos registrados y entrando en nuestro Bungalow. El sitio era espectacular, tal cual lo describían en la publicidad. Deshicimos las maletas, y nos dimos una ducha. Estaba un poco nublado, pero aún así nos pusimos los bañadores para ir a la piscina un poco, pues a pesar de ser Abril, la temperatura rondaba los 25 grados, muy lejos de los 12 que dejamos en Cantabria.
Alba estaba tremenda. Me deslumbró con el bikini que se había puesto, comprado el día antes, mientras yo miraba otras cosas. De color rosa muy vivo, casi fosforito, la parte baja era un minúsculo tanga, que se perdía entre sus torneadas y duras nalgas. Por delante, dejaba muy poco a la imaginación. La parte superior, dos pequeños triángulos de tela, tapaban los pezones, y poco más. Sus pequeñas y duras tetas, se intuían perfectamente, marcando un canalillo digno de modelo de pasarela. Bajo la tela, los pezones erguidos, duros, provocativos e insinuantes. Lucia un bonito bronceado integral, de varias sesiones de lámpara.
Despierta amor, parece que no me hayas visto antes en bikini!
Su comentario me trajo de vuelta de mi embobamiento
Si os apetece ir, por allí estaré mañana, si no, imagino que nos veremos por aquí, jeje. Y si queréis, cerquita de aquí, a unos 20 minutos caminando, hay una playita nudista, mola mucho también!!!!!Chao!! Y se fue a las hamacas con su grupo, sonriendo y contoneando su culo, al pasar junto a los hombres de la barra.
Alba y yo, nos miramos y reímos. Salimos del agua también, con intención de secar un poco, para irnos a duchar, cambiar y salir un poco por el pueblo, a picar algo, pues estábamos cansados del viaje y nos queríamos retirar temprano.
Alba eligió una minifalda vaquera y una blusa blanca, sin mangas, anudada a la cintura. No se puso sujetador, pues la verdad, no lo necesitaba. Unas sandalias y el pelo en coleta, completaron su look. Yo opte por unos pantalones cortos de lino y una camisa blanca, junto a unos náuticos de tela muy ligeros. Nos encaminamos al centro del pueblo. Había mucho ambiente estudiantil, y mucho inglés, de mediana edad, que a pesar de no ser ni las 8 de la tarde, ya estaban terminando de cenar. Nos paramos en una terraza y pedimos un par de vinos blancos y unas tostas para cenar. Paramos ya de vuelta al hotel, a tomar unas copas en un pub muy concurrido, con música de los 80 en español, que era la que nos gustaba a los dos. La luz negra del local, no hacía otra cosa, que resaltar aun más los atributos de mi bella mujer. Bailamos un rato, y 3 o 4 estudiantes, medio borrachos, revoloteaban cerca de nosotros. Lo cierto, e que nos incomodaron un poco, y nos fuimos a la barra. Fui un momento al baño, y al salir, los chavales de la pista, rodeaban a Alba. Me acerqué rápido, pero me quedé descolocado al ver como tenía la situación dominada.
Iván no es celoso, dijo mientras me guiñaba un ojo levemente. Solo busca mi placer, y si él no puede darme todo lo que necesito, me deja buscar fuera. Tu qué? Como lo ves, ahora mismo estoy muy cachonda, dijo, mientras se movía insinuante en el taburete y separaba un poco las piernas, encargándose la luz negativa de hacer brillar su blanco tanga bajo la corta falda. Me voy al baño con los tres, os veis hombres para follarme ahora mismo?
Los otros dos chavales, se miraron atónitos, y luego me miraron a mí, que permanecí con el semblante serio, mirándoles, mientras encogía un poco los hombros, en señal de “ a mí no me miréis”, pero con miedo a la vez de que dirección podía tomar esto
Serví unas copas mientras ellas iban al baño un momento. Ya de vuelta comenzamos a hablar y beber, hasta que en un determinado momento, Nata, pregunto a Alba si alguna vez había estado con una mujer. Alba dijo que no, que en la Uni, había tonteado con su compañera de cuarto, estando muy borrachas, se habían tocado las tetas y besado y poco más. Yo no conocía esa historia la verdad.
Los majestuosos pechos de Nata, lucían enormes frente a los pequeños y duros de mi mujer, que se entretuvo jugueteando con sus pezones, pellizcándolos y tirando de ellos, hasta conseguir erguirlos por completo. Mientras se fundían en profundo y húmedo beso, Nata apretaba a Alba contra si, cogiendo con una mano una de sus nalgas, amasándola, con fuerza, mientras su otra mano se perdía en su entrepierna. Mi erección no daba más de si, y liquido preseminal hacia brillar mi glande. Ellas seguían en su juego, lanzándome miradas juguetonas, entre sonrisas. Nata guió a Alba al sillón, y una vez sentada, asegurándose que queda bien expuesta ante mí, le separó las piernas y hundió su cabeza entre ellas. Alba empezó a contorsionarse, jadear y gemir, atrapando la cabeza de nueva amiga con las manos, y rodeándola con sus piernas.
Aaaaahhhhh!!!!! Uuuuuummmmm!!! Ssiiiiiii!! No pares!!! No pares!!!!! Aaaaaaaaahh!!
La vi relajarse, la muy cabrona acababa de correrse en la boca de una mujer que acababa de conocer, y que por edad, bien podía ser su hija.
Joderrrr!!!siiiiii!!!uuuffff!!!! me corroooo, me coorrrrooo!!!ahh!!
Cuando Alba liberó la presión en la base de mi pene, un potente chorro de esperma salió con fuerza, justo cuando las dos bocas, estaban rodeando mi glande. La boca de Alba recibió en exclusiva el segundo disparo, y el siguiente la pelirroja. Alba siguió exprimiendo mi hombría hasta que sentí aflojar mi erección. Las dos mujeres se aplicaron en limpiarme bien el miembro, y luego se volvieron a besar profundo, ansioso, escandalosamente sexy. Natalia se retiró un poco y se puso la ropa. Se acercó a mí y me beso suavemente los labios, susurrando un “gracias, lo necesitaba”, que no entendí muy bien. Alba, desnuda aún, la acompaño a la puerta y cerró, tras despedirse. Se sentó sobre mí, cogiéndome la polla, aun medio en forma, con la mano, y frotándola en su entre pierna, con suavidad, sentí como volvía a crecer. Sentí como me habría paso, dentro de mi mujer, húmeda, caliente, esa sensación sin igual de penetrar un coñito. Comenzó a moverse, muy lento sobre mí, cogida a mis hombros, hasta que sintió mi erección plena de nuevo. Incrementó la velocidad, entre jadeos, yo notaba como su interior, exprimía mi miembro, como si quisiera atraparlo para siempre dentro de ella. Una mano jugueteó con mis pezones, pellizcando y retorciendo, era una sensación que me encantaba experimentar, mezcla de dolor y placer a parte iguales.
Continuará………………………………………………..
Arrancamos a las 5 de la mañana desde Cartes, donde tenemos nuestra residencia. Unas horas después, paramos en Haro, a poner gasolina al X5, y tomar un café y un pincho. La intención era comer en Zaragoza para llegar sobre las 4 o así al complejo hotelero. Pasadas las 4:30, ya estábamos registrados y entrando en nuestro Bungalow. El sitio era espectacular, tal cual lo describían en la publicidad. Deshicimos las maletas, y nos dimos una ducha. Estaba un poco nublado, pero aún así nos pusimos los bañadores para ir a la piscina un poco, pues a pesar de ser Abril, la temperatura rondaba los 25 grados, muy lejos de los 12 que dejamos en Cantabria.
Alba estaba tremenda. Me deslumbró con el bikini que se había puesto, comprado el día antes, mientras yo miraba otras cosas. De color rosa muy vivo, casi fosforito, la parte baja era un minúsculo tanga, que se perdía entre sus torneadas y duras nalgas. Por delante, dejaba muy poco a la imaginación. La parte superior, dos pequeños triángulos de tela, tapaban los pezones, y poco más. Sus pequeñas y duras tetas, se intuían perfectamente, marcando un canalillo digno de modelo de pasarela. Bajo la tela, los pezones erguidos, duros, provocativos e insinuantes. Lucia un bonito bronceado integral, de varias sesiones de lámpara.
Despierta amor, parece que no me hayas visto antes en bikini!
Su comentario me trajo de vuelta de mi embobamiento
- Perdona cielo, es que estas increíble
- Tú crees?? No será demasiado?
- Para nada, esto es solo de adultos, vas a provocar más de una erección hoy, no lo dudes
- Jajaja que bobo eres, más quisiera yo, dijo pícaramente
- Mírame a mí, como voy ya
- Tu no cuentas, me quieres demasiado, me dijo antes de fundirse conmigo en calido beso.
- Hola, soy Nata, acabáis de llegar?
- Hola Nata, si llegamos hace un rato. Yo soy Alba, y él es Iván, mi marido.
Si os apetece ir, por allí estaré mañana, si no, imagino que nos veremos por aquí, jeje. Y si queréis, cerquita de aquí, a unos 20 minutos caminando, hay una playita nudista, mola mucho también!!!!!Chao!! Y se fue a las hamacas con su grupo, sonriendo y contoneando su culo, al pasar junto a los hombres de la barra.
Alba y yo, nos miramos y reímos. Salimos del agua también, con intención de secar un poco, para irnos a duchar, cambiar y salir un poco por el pueblo, a picar algo, pues estábamos cansados del viaje y nos queríamos retirar temprano.
Alba eligió una minifalda vaquera y una blusa blanca, sin mangas, anudada a la cintura. No se puso sujetador, pues la verdad, no lo necesitaba. Unas sandalias y el pelo en coleta, completaron su look. Yo opte por unos pantalones cortos de lino y una camisa blanca, junto a unos náuticos de tela muy ligeros. Nos encaminamos al centro del pueblo. Había mucho ambiente estudiantil, y mucho inglés, de mediana edad, que a pesar de no ser ni las 8 de la tarde, ya estaban terminando de cenar. Nos paramos en una terraza y pedimos un par de vinos blancos y unas tostas para cenar. Paramos ya de vuelta al hotel, a tomar unas copas en un pub muy concurrido, con música de los 80 en español, que era la que nos gustaba a los dos. La luz negra del local, no hacía otra cosa, que resaltar aun más los atributos de mi bella mujer. Bailamos un rato, y 3 o 4 estudiantes, medio borrachos, revoloteaban cerca de nosotros. Lo cierto, e que nos incomodaron un poco, y nos fuimos a la barra. Fui un momento al baño, y al salir, los chavales de la pista, rodeaban a Alba. Me acerqué rápido, pero me quedé descolocado al ver como tenía la situación dominada.
- Va todo bien por aquí? Dije a llegar
- Si cielo, estos jóvenes, alababan mi cuerpo, y la suerte que tienes de tenerme, decían, verdad chicos?
- Si,si, respondió el más alto, que parecía también el más avispado de los 3. Está buenísima, si yo tuviera una pareja así no la dejaba salir de casa, me la estaría follando todo el día, dijo mirando a sus amigos, que se reían con la ocurrencia del chaval, pero se habían cortado un poco con mi presencia. Tienes suerte de tener este monumento, tío. No deberías de dejarla exhibirse así, te la pueden volar, jejeje
Iván no es celoso, dijo mientras me guiñaba un ojo levemente. Solo busca mi placer, y si él no puede darme todo lo que necesito, me deja buscar fuera. Tu qué? Como lo ves, ahora mismo estoy muy cachonda, dijo, mientras se movía insinuante en el taburete y separaba un poco las piernas, encargándose la luz negativa de hacer brillar su blanco tanga bajo la corta falda. Me voy al baño con los tres, os veis hombres para follarme ahora mismo?
Los otros dos chavales, se miraron atónitos, y luego me miraron a mí, que permanecí con el semblante serio, mirándoles, mientras encogía un poco los hombros, en señal de “ a mí no me miréis”, pero con miedo a la vez de que dirección podía tomar esto
- Qué pasa?, siguió Alba bajándose del taburete y acercándose al avispado, que ahora permanecía impávido, mirándola a ella y a sus amigos. ¿os ha comido la lengua el gato? ¿os veis capaces de follarme los tres o qué? Dijo a la vez que pasaba la mano por el paquete del chaval, que dio un paso atrás, diciendo mientras se alejaba:
- Yo no voy con viejas zorras, vámonos, gritó a los amigos, que huyeron de nuestro lado, como almas que lleva el diablo.
- Como te pasas cariño. ¿qué hubiera pasado si te dicen que si?
- Me los llevo al baño, les digo que me pone mucho que se besen y se toque entre ellos antes de follarme, y ahí se hubiera terminado, jajajaja dijo mientras llamaba a la camarera para pedir otra copa. Yo estaba un poco atónito, pero me gustaba esta versión nueva de mi mujer. Una hora después, nos fuimos al hotel.
Serví unas copas mientras ellas iban al baño un momento. Ya de vuelta comenzamos a hablar y beber, hasta que en un determinado momento, Nata, pregunto a Alba si alguna vez había estado con una mujer. Alba dijo que no, que en la Uni, había tonteado con su compañera de cuarto, estando muy borrachas, se habían tocado las tetas y besado y poco más. Yo no conocía esa historia la verdad.
- Y no te gustaría hacerlo? Seguro que a Iván le pondría muy cachondo verdad? Dijo mientras me miraba
- Ya lo estoy de solo pensarlo, dije riendo
- Te gustaría? Dijo Alba, de verdad?
- Si claro, con una tía, no serian cuernos, dije
- O sea que ver esto te gusta? Y si ahora nos desnudamos y nos liamos delante de ti, no te importará? Me preguntó con malicia, mientras su mano acariciaba uno de los grandes pechos de Nata
- En absoluto
- Siéntate en esa silla, me dijo
Los majestuosos pechos de Nata, lucían enormes frente a los pequeños y duros de mi mujer, que se entretuvo jugueteando con sus pezones, pellizcándolos y tirando de ellos, hasta conseguir erguirlos por completo. Mientras se fundían en profundo y húmedo beso, Nata apretaba a Alba contra si, cogiendo con una mano una de sus nalgas, amasándola, con fuerza, mientras su otra mano se perdía en su entrepierna. Mi erección no daba más de si, y liquido preseminal hacia brillar mi glande. Ellas seguían en su juego, lanzándome miradas juguetonas, entre sonrisas. Nata guió a Alba al sillón, y una vez sentada, asegurándose que queda bien expuesta ante mí, le separó las piernas y hundió su cabeza entre ellas. Alba empezó a contorsionarse, jadear y gemir, atrapando la cabeza de nueva amiga con las manos, y rodeándola con sus piernas.
Aaaaahhhhh!!!!! Uuuuuummmmm!!! Ssiiiiiii!! No pares!!! No pares!!!!! Aaaaaaaaahh!!
La vi relajarse, la muy cabrona acababa de correrse en la boca de una mujer que acababa de conocer, y que por edad, bien podía ser su hija.
- Te toca, dijo Alba, a ver si se hacerlo, dijo sonriendo
- Seguro guapa, venga, que estoy a mil, dijo Natalia tumbándose en el suelo, muy cerca de mi, con su coño abierto y sonrosado, totalmente expuesto, Mi mujer se acomodo sobre ella, con el suyo en su cara, de nuevo, parecía que no había tenido suficiente. Le separó los labios un poco con los dedos, y recorrió toda su rajita con la lengua para terminar mirándome a los ojos. Después, introdujo un par de dedos en ella. Jugueteó un poco, y acabó enterrando su cabeza entre sus piernas. Nata comenzó a jadear y maldecir, elevando su pelvis hacia arriba.
- Joder, joder, joder!!! Que hija de puta! Que bien lo haces!!! Aaaahhhhh!!! Aaahhhhh!!! Sigue, sigue ahhhhh!! No te pares!! Aaaaaahhhhhhh!!!!
Joderrrr!!!siiiiii!!!uuuffff!!!! me corroooo, me coorrrrooo!!!ahh!!
Cuando Alba liberó la presión en la base de mi pene, un potente chorro de esperma salió con fuerza, justo cuando las dos bocas, estaban rodeando mi glande. La boca de Alba recibió en exclusiva el segundo disparo, y el siguiente la pelirroja. Alba siguió exprimiendo mi hombría hasta que sentí aflojar mi erección. Las dos mujeres se aplicaron en limpiarme bien el miembro, y luego se volvieron a besar profundo, ansioso, escandalosamente sexy. Natalia se retiró un poco y se puso la ropa. Se acercó a mí y me beso suavemente los labios, susurrando un “gracias, lo necesitaba”, que no entendí muy bien. Alba, desnuda aún, la acompaño a la puerta y cerró, tras despedirse. Se sentó sobre mí, cogiéndome la polla, aun medio en forma, con la mano, y frotándola en su entre pierna, con suavidad, sentí como volvía a crecer. Sentí como me habría paso, dentro de mi mujer, húmeda, caliente, esa sensación sin igual de penetrar un coñito. Comenzó a moverse, muy lento sobre mí, cogida a mis hombros, hasta que sintió mi erección plena de nuevo. Incrementó la velocidad, entre jadeos, yo notaba como su interior, exprimía mi miembro, como si quisiera atraparlo para siempre dentro de ella. Una mano jugueteó con mis pezones, pellizcando y retorciendo, era una sensación que me encantaba experimentar, mezcla de dolor y placer a parte iguales.
- Quiero correrme contigo, juntos,uuummmhh!!! No aguanto mas!!
- Vamos, respondí, sigue asiii!!! Sii!!! No pares!!!
- Aaaaaahh!!!!! Aaaaahhhhh!!!!!
- SSSiiiiii ¡!!!! Joder!!joder!!!
Continuará………………………………………………..