Lo que pudo ser...

Sergio.

(Todos los implicados eramos mayores de 18)

Sobre Sergio seré rápida. Fue un chico de los típicos que se creen guaperas y que llevaba la fama, de haber estado con muchas chicas. Alto, delgado, guapito de cara (para mí no), ojos azules llamativos (para mi fríos, falsos).

Cuando coincidimos en el lugar de estudios, mis amigas me avisaron que me "seguía" con la mirada a todas partes donde fuera y no solo eso, me "seguía" en el tiempo de descanso, quedandose siempre a unos pocos metros junto a sus amigos, fumando.

Yo, a esas alturas ya había hecho mi trabajo de investigación y sabía todo lo que tenía que saber de él. Estaba claro.

Llegó un viernes y con él, el finde. Sergio y sus amigos habían hechos planes. Estaba recogiendo mis cosas, cuando Igor, uno de sus mejores amigos se me acercó a preguntar si quería salir con ellos. Sergio estaba cerca, con la oreja pegada.

- Tengo cosas mejores que hacer, que salir- fui un poco cortante, me supo mal por Igor, pero la respuesta no era para él.

Sergio era tan, tan previsible que a partir de ese momento, se convirtió en un tira y afloja. Me trataba de descalificar, de humillar. Y yo, acudía al día siguiente vestida igual que él. Un día, coincidimos ambos con vaquero color azul oscuro y camisa blanca. Ese día, estuvo molesto.

Y el resto de días también se molestó. Los amigos que lo sabían, en un día con más tiempo libre del normal y estando todos en la zona del césped, a uno de ellos se le ocurrió traer las esposas de un hermano suyo, que era policía.
Sin previo aviso me pusieron una de las esposas y la cerraron. La que quedaba libre, iba para Sergio.

Pero, mi mano fue más rápida y más escurridiza. La saque. Sergio se enfadó. Nos levantamos todos para abandonar el lugar y llamé a Igor. Tenía buenas espaldas. Estuve lenta y delicadamente quitándole la grama de la camiseta.
Sergio bufo y quedó como un bufón.

En una ocasión, tuve que realizar una consulta y se encontraba Sergio el guaperas y otro Sergio con el que yo tenía afinidad. Estaban los dos de espalda. Así que lo llamé :

- ¿Sergio?, - pregunté para llamar la atención.
-Si - me respondió Sergio el guaperas.
- No, tú no. El otro Sergio - respondí, mientras Sergio el que me era afín, se descojonaba.

Lo que no pudo ser, no fue por elección propia y por mi previa investigación. De la que me libre.

😎
 
No soy de contar mis intimidades en público, en privado y según a quien se me suelta un poco la lengua.
(Reconozco que si es interlocutora, a veces, al verme la lengua tan larga ,,me desliza una miradita de complicidad,,🤪, que por cierto me encanta 😍y nunca he sabido aprovechar 🥹)😭

Ana

Tendría yo unos treinta y cinco, (o sea anteayer) ella unos veintidós trabajábamos en la misma oficina con el mismo horario de trabajo. Ella, de cara muy atractiva, jovencilla y de cuerpo con curvas, que aunque sexy, si para controlar por su parte.
Pues aunque ya llevábamos meses trabajan juntos nunca había apreciado nada por parte de mi hacia ella o viceversa.
De hecho apenas habíamos cruzado más de diez frases en medio año que trabajaba ella en la empresa
Un día , una ocasión, no se en que circunstancia, coincidimos hablando, algo debió hacer clic en ambos pues a partir de entonces, aprovechábamos cualquier situación para cruzarnos miradas. Más de una vez me pilló a mi mirándola y también la pille yo haciendo lo mismo conmigo.
Como no podía ser de otra manera un día quedamos para tomar algo al salir de currar. A veces no venía en su coche al trabajo y yo la acercaba a su casa... No quedamos en muchas ocasiones,,, pero cierto día , nos acercamos demasiado, nuestras caras de tocaron, y hubo una tensión sexual demasiado fuerte, nos besamos,, hubo alguna caricia,, y quizás por su juventud,, o por mi edad,, no pasó de ahí, no quiso seguir. He de reconocer, que nos asaltaba la pasión, me decía que si continuábamos se le iba a salir el corazón por la boca de como le iba,,, Paramos, ante todo, hay que respetar a la otra persona y no obligar a algo que pudiéramos arrepentirnos ambos.

Estuvo un tiempo que ni me miraba, ni me hablaba , durante nuestra jornada de trabajo, yo no entendía por que ese cambio de actitud. Estuvo así durante un mes poco más o menos,,, y un día se acercó y me dijo que quería estar conmigo después del trabajo,, sin más,,, Pues ..salimos y estuvimos en mi casa, volvimos a estar a punto de.... pero fueron besos caricias y nada más,,, me dijo que no le renovaban y se iba a otro trabajo.
No fue enamoramiento,, era pasión.... brutal,, pero nada más

Con el paso del tiempo, se que se casó con su novio de muuuuchos años y al poco se separaron. Ya no he vuelto a saber nada de ella.

No se que hubiera podido suceder si nos hubiéramos acostado.
Hubiera sido sólo unos pocos encuentros o quizás hubiéramos acabado enamorados
 
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Lo que pudo ser...
Estar bañandonos en una piscina con una amiga y a punto de irnos, aún estabamos mojados, sin tener un sitio para cambiarnos, ella no tuvo problema en cambiarse el bikini alli delante mia, en un principio dandome la espalda y yo a su lado sin saber donde mirar, obvio que la vi desnuda entera y ella sin cortarse ni un pelo, cuando termino ella me dijo .... Y tú no te cambias??.... Le puse la excusa que mi bañador ya estaba seco, me dio verguenza cambiarme delante de ella, cuando ella lo hizo....Asi que me arrepiento de ese momento, de lo que pudo ser o pasar....
 
Lástima no tener el don del relato cosas a mí edad muchas ,buenas casi todas ,locas de juventud en los 80,me llevaban preso jaja os leo que es lo mío 😃
 
CayetanoBB dijo:
Cada persona se expresa y lo cuenta a su modo, lo mejor posible....animate.
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Si una vez en una fiesta de nochevieja, al pedir las copas, habia dos chicas bailando y tonteando, si hubiera seguido el rollo, quizás la historia hubiera terminado distinto, pero en fin asi es la vida, y asi le contamos las cosas ocurridas
 
Gamber dijo:
Lo que pudo ser y no fue, por fortuna. Y por, pies para que os quiero.

Quede con una pareja ... se habían follado a casi todo lo que se les había puesto a tiro, con alcohol y drogas de por medio y por faltarles, la cito textualmente : "nos ha faltado follarnos una cabra".
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Tal vez sea muy susceptible, pero me habría sentado muy molesto, y más siendo Aries.
Por cierto, que paciencia o que ánimo para estudiar psicología de la cutrez.
 
Después de una ruptura sentimental entré en una web de anuncios clasificados y contacté con una pareja.

Ella, 49 años buscaba ser vista por marido mientras realizaba felaciones a sus invitados. Solo sexo oral mientras su pareja observaba hasta explotar en su cara.

Después de varios correos con preguntas: Te puedes desplazar? Cómo eres físicamente ? Dotación? Me citó para ir a su casa una semana después.

Tal era mi curiosidad por saber más de las escenas que se vivían en su entorno que pregunté demasiado. Finalmente recibí un correo que decía:

" Deja de molestar ya"

Lo que pudo ser y no fue.... 😅
 
Olí francesa, pelirroja guapísima, divertida y loca como una cabra, aunque tuvimos nuestros más y nuestros menos, nunca fuimos pareja, me hubiera gustado pero no era el momento, ambos vivíamos la vida sin ataduras, aún recuerdo como me miraba al despedirse de mí en aquel puerto, sin saber que a la vuelta ya no la encontraría, hace unos años me la encontré en Torremolinos y sigue bellísima, la madurez le ha sentado de maravilla, pudo ser pero no fue…..
 
Bixlu dijo:
Olí francesa, pelirroja guapísima, divertida y loca como una cabra, aunque tuvimos nuestros más y nuestros menos, nunca fuimos pareja, me hubiera gustado pero no era el momento, ambos vivíamos la vida sin ataduras, aún recuerdo como me miraba al despedirse de mí en aquel puerto, sin saber que a la vuelta ya no la encontraría, hace unos años me la encontré en Torremolinos y sigue bellísima, la madurez le ha sentado de maravilla, pudo ser pero no fue…..
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Esto me recuerda algo. También con color rojo...
 
Lo que pudo ser y no fue.
Se llamaba Silvia, pelirroja, melena larga, con rizos, piel blanca, figura divina. Llevábamos tiempo hablando y había tanta tensión sexual que un simple "buenos días" nos hacía arder.
Un fin de semana de julio decidí ir a verla.
Había que poner remedio a tanta tensión.
Fui a recogerla a su casa. Cuando la vi aparecer, casi me da algo. Estaba espectacular, con una minifalda de infarto(sabía que me encantaban sus piernas) escotazo y su melena rizada roja suelta.
- Ho oo ola - dije como un pardillo y le di dos besos. Al sentir su perfume, me empalmé al instante.
- Donde vamos? - dije
- Vamos a cenar, conozco un sitio con una terraza al aire libre donde se come fenomenal. - Me dijo mirándome.
- Me guías o pongo el GPS?
- Yo te guío, tranquilo. Y me cogió la mano que la tenía en la palanca de cambios.
- Siempre me han puesto cachonda tus manos.
- No empieces que no conozco esto y vamos a acabar estrellados!!
- Parece que tu amiguito se alegra de verme.
- Qué amiguito? Qué dices? - dije
- Este. Y puso su mano sobre mi paquete acariciándolo un poco.
- Joder, Silvia. Que nos vamos a estrellar!! Estate quieta y guíame, coño.
-Vale, vale. Aburrido
Por fin llegamos al dichoso sitio.
- Vas a bajar así?
- Así cómo, le dije.
- Con esa empalmada jajaja.
- Voy a ir cogiendo mesa, tu mientras quédate en el coche, y relájate, no puedes salir así.
Al cabo de un rato, salí del coche y me dirigí al sitio que había reservado.
Por abreviar un poco. Diré que la cena se me hizo eterna, fue sentarme y volver a sentir como me apretaba el vaquero, justo ahí, sí.
No pedí ni postre y ella hizo lo mismo. Fuimos directos a mi hotel.
Se tumbó boca arriba en la cama. Abierta de piernas. Ofreciéndome lo que tantas veces le había pedido. Recuerdo perfectamente sus braguitas semitransparentes celestes. Las tenía empapadas. Al quitárselas despacio, me recree en el perfume a diosa que desprendía. Notaba como me palpitaba la polla al sentirlo. Le comí el coño con calma, disfrutando con cada lamida. Agarrándome la cabeza derramó todo su néctar en mi boca. No dejé ni una gota. Me lo bebí todo. Jamás he vuelto a probar nada igual. Todavía me empalmo al recordarlo.
Luego fue su turno. Me arranco los boxer y comprobó que estaba totalmente duro de degustar su coño.
- Parece que te gusta mi coño, sí.
Y comenzó a darme un mamadon de locura. Sin ningún tipo de tregua. En unos minutos estaba a punto de estallar. La avisé pero hizo como si no me oyese. Insistí. Aumentó el ritmo. Me derramé descarga tras descarga como un animal en celo en su boca. No dejó nada.
Tras este asalto inicial, unos minutos de relax, pero al poco yo ya estaba de nuevo firme. Quise probar si su coño y mi amiguito hacían buenas migas pero, aquí empieza la sorpresa. No quiere. Yo me quedo rayado, no entiendo qué pasa.
Dormimos juntos esa noche pero sin hacer nada más.
Me marcho al día siguiente tras desayunar.

En los siguientes días continuamos hablando pero ya no era igual.
Cada vez hablábamos menos hasta que un día no sé cómo, volvimos a engancharnos en una de esas conversaciones calientes que teníamos.
Y aquí, a uno de sus mensajes yo dije
- Uffff María
No hubo tiempo para corregir. Me puse rojo como un tomate maduro. Cagada monumental. No supe qué decir y desconecté.
Al día siguiente, traté de disculparme.
- Perdóname no sé por qué dije eso.
Su respuesta fue tajante.
- Marías hay muchas, Silvia solo una.
No pude responderla.
Tenía razón. La hubiese aplaudido.
 
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Lo que pudo ser y no fue.

Sobre la mampara. Hasta el plato. Sí, otra vez. Exploté, me derramé, me corrí, eyaculé, lefé sin remedio.
Imaginando besar su cuello, recorrer toda su espalda. En besar sus infinitas piernas creando un camino transparente. En ese instante justo antes del éxtasis, un pensamiento. Su olor.

Pude contenerme pero no fue posible.
 
Conocí a un chico en un chat y durante un mes estuvimos hablando todos los días, y un día me dio su teléfono, tarde un mes en llamarle y cuando me animé hacerlo oculte mi número (soy bastante desconfiada), el caso es que al oírle me dio mucha tranquilidad tenía una voz muy dulce de esas voces que te dan paz cuando estás muy acelerada.

Quedamos en que le llamaría 2 o 3 veces a la semana y al cabo de 2 meses le envié un mensaje enseguida supo que era yo y tras ese mensaje todo fue muy rápido.

El vivía en Mallorca y tenía posibilidad de trabajar en mi ciudad ya que su empresa tenía aquí oficinas, así que pidió el traslado y en menos de un mes lo tenía aquí buscando piso de alquiler. A mí me parecía todo muy precipitado ya que solo nos habíamos visto una vez aunque hablábamos todos los dias y él decía que estando cerca todo sería más fácil.

Los primeros meses fueron muy bonitos (lo típico) pero poco a poco fui viendo que tenía muchas manías y la verdad que empeze a agobiarme y al final acabe dejándole, nos vimos un par de veces en plan amigos, hasta que acabamos perdiendo el contacto.
Lo que pudo ser....y no fue porque así lo decidí 🙂
 
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