Recoger la cocina o poner el lavavajillas con una bala metida o un cubito de hielo dentro del tanga.
Que limpie con unas pinzas puestas en los pezones de las que tienen cadenitas o cascabeles para que suenen mientras quita el polvo. Así sabes si trabaja o no desde lejos.
Cuando esté con los espejos o los cristales puedes jugar a repartir el líquido con sus pechos, que los roce bien y cogerle por detrás. Si es una ventana aún mejor.
A la hora del aperitivo/cena que se ponga en el suelo de rodillas haciendo de reposapiés a ver lo que aguanta.
Mientras, la puedes azotar los cachetes con la mano o con el plumero y tocarle o meterle los dedos (o lo que pilles) aprovechando que los tendrás fríos y húmedos por la bebida.
También puedes sacar unos hielos del vaso y se los pones dentro del sujetador o por la espalda si va sin nada y jugar con ellos, sin poder moverse hasta que se deshagan del todo.
Por supuesto que te sirva la comida y todo lo demás para que no te tengas ni que mover del sillón.
Y ahí mismo puede terminar con un masaje, empezando con los pies y poniendo cremita cada vez más arriba, subiendo por las piernas mientras te vas relajando, te echas para atrás y te abres bien para que te pueda dar un besito negro...
Y una vez descargado a dormir la siesta o lo que sea como un bebé.