Esto que os cuento sucedió hace más de 11 años, la conocí a través de una página de tipo parejas, era de Barcelona y era la parte femenina de una pareja liberal.
Era 10 años mayor que yo, un día me dijo que iba a venir a una fiesta liberal a Madrid, que si no me importaba ir a recogerla al aeropuerto de Barajas, por supuesto le dije que iría. Venía en un vuelo de última hora, así que cuando llegó a Madrid era cerca de la 1:30 de la noche.
Pues allí estaba yo esperando en la T4, perdón no he dicho el nombre, bueno pues llegó Merche con otra amiga, había amigos suyos esperandolas. Saludé a Merche y a su amiga y también a las personas que las están esperando.
Merche les dijo a sus amigos que se venía conmigo en el coche y que los esperaba en el hotel. Yo iba nervioso, he de decir que me gustan las mujeres mayores que yo, Merche tiene 20 años más que yo, en es época yo tenía 37 años.
La situación se empezó a calentar ya en el parking del aeropuerto, para empezar me dio un morreo que ni me esperaba. Se abrió la blusa y me puso sus estupendos y grandes pecho en la cara, yo soy un obseso de las tetas grandes y me dijo:
-Ahi las tienes, son tuyas.
Pues me fui a ellas como un bebé, me metí los pezones en la boca y noté como se iban poniendo duros en mi boca, imaginaros como se me iba poniendo la polla...
Merche empezó a pasarme la mano por el pantalón, eso estaba para explotar.
La situación era un poco complicada en el parking, asi que nos pusimos en marcha camino de su hotel, todo el camino me iba tocando la polla por encima del pantalón, yo iba para reventar...
Cuando llegamos a su hotel, que os diré que estaba cerca del Pirulí, aparqué en una calle próxima al Palacio de los Deportes y Merche ni corta ni perezosa me bajó la cremallera del pantalón y se metió mi polla en su boca, me hizo una mamada como no recuerdo me hayan hecho nunca, acabe corriéndome en su boca, se tragó mi semen golosamente y me dijo:
-¿Te ha gustado?
Claro que me gustó, menuda tembladera de piernas tenía yo.
Me dió un morreo con sabor a mi semen.
La acompañé hasta le recepción de hotel y allí estaba su amiga y las otras personas que las esperaban en el aeropuerto, hubo las consiguiente risas por parte de los otros porque ya sabían del \'peligro\' de Merche.
Asi que allí me despedí de Merche y de sus amigos.
Fue una experiencia maravillosa.
Era 10 años mayor que yo, un día me dijo que iba a venir a una fiesta liberal a Madrid, que si no me importaba ir a recogerla al aeropuerto de Barajas, por supuesto le dije que iría. Venía en un vuelo de última hora, así que cuando llegó a Madrid era cerca de la 1:30 de la noche.
Pues allí estaba yo esperando en la T4, perdón no he dicho el nombre, bueno pues llegó Merche con otra amiga, había amigos suyos esperandolas. Saludé a Merche y a su amiga y también a las personas que las están esperando.
Merche les dijo a sus amigos que se venía conmigo en el coche y que los esperaba en el hotel. Yo iba nervioso, he de decir que me gustan las mujeres mayores que yo, Merche tiene 20 años más que yo, en es época yo tenía 37 años.
La situación se empezó a calentar ya en el parking del aeropuerto, para empezar me dio un morreo que ni me esperaba. Se abrió la blusa y me puso sus estupendos y grandes pecho en la cara, yo soy un obseso de las tetas grandes y me dijo:
-Ahi las tienes, son tuyas.
Pues me fui a ellas como un bebé, me metí los pezones en la boca y noté como se iban poniendo duros en mi boca, imaginaros como se me iba poniendo la polla...
Merche empezó a pasarme la mano por el pantalón, eso estaba para explotar.
La situación era un poco complicada en el parking, asi que nos pusimos en marcha camino de su hotel, todo el camino me iba tocando la polla por encima del pantalón, yo iba para reventar...
Cuando llegamos a su hotel, que os diré que estaba cerca del Pirulí, aparqué en una calle próxima al Palacio de los Deportes y Merche ni corta ni perezosa me bajó la cremallera del pantalón y se metió mi polla en su boca, me hizo una mamada como no recuerdo me hayan hecho nunca, acabe corriéndome en su boca, se tragó mi semen golosamente y me dijo:
-¿Te ha gustado?
Claro que me gustó, menuda tembladera de piernas tenía yo.
Me dió un morreo con sabor a mi semen.
La acompañé hasta le recepción de hotel y allí estaba su amiga y las otras personas que las esperaban en el aeropuerto, hubo las consiguiente risas por parte de los otros porque ya sabían del \'peligro\' de Merche.
Asi que allí me despedí de Merche y de sus amigos.
Fue una experiencia maravillosa.
