Morbocornu
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Recuerdo el momento exacto en el que la fantasía cornuda llegó a mi vida sexual. Siempre he sido, cómo tantos otros antes, muy celoso, dominante y seguro en mis relaciones sexuales. Pero también muy abierto, siempre que no fuera la "novia oficial". Es decir, con amantes y amigas no tenía problema en hacer tríos, participar en sexo en grupo y cosas así, pero si había sentimientos de por medio, nada de compartir ni fantasear con esa idea. Pero un día...lo recuerdo y aún me empalmo. En los tiempos de los chat y las videollamadas de aquel famoso programa de mensajería de hace 20 años (empieza por M) conocí a un tío que me quería enseñar fotos de su novia si a cambio yo le contaba lo que hacía con la mía. A mí el trato me pareció bien, así que nos pasamos el correo y nos agregamos para iniciar la conversación
El empezó a mandarme fotos y yo le contaba cómo era mi novia y lo que hacía con ella. En un momento dado, sin saber porqué, ya que el tema era otro, enciende su cam y aparece empalmado (una polla bastante grande, por cierto). Iba a cortar la conversación cuando me preguntó "¿Te gustaría que tu novia me chupara la polla?". Y sin pararme a pensar ni entender mi respuesta le dije "Si". Y empecé a pajearme mientras él me describía como sería la mamada mientras se masturbaba. Tardé menos de un minuto en correrme y después de hacerlo corté sin despedirme y le bloqueé. Estaba enfadado, me sentía ridículo, sorprendido...pero tardé menos de 5 minutos en volverme pajear imaginando a mi novia chupando aquella polla.
A partir de ahí se ha convertido en mi principal motivación sexual a la hora de pajearme. No la única, pero si por encima de las demás. Y partir de ahí inicié un camino de juegos, de exhibicionismo y prácticas encaminadas a llevar a la realidad aquello con lo que me había hecho miles de pajas. Compartía sus fotos, pedía videocorridas, la animaba a hacer topless, luego nudismo, jugábamos con otras parejas por webcam, salía sin tanga a la calle, usábamos consoladores con forma de polla...hasta que empecé a ver claramente que llevarlo a la realidad podría ser más un problema que una solución. Poco a poco mi mujer se ha ido volviendo menos morbosa y más convencional (aunque estoy seguro de que habría hecho un trío con otro hombre encantada) y eso lo ha terminado de frenar todo. La fantasía sigue pero ya es algo que llevo a solas y no es lo mismo.
El empezó a mandarme fotos y yo le contaba cómo era mi novia y lo que hacía con ella. En un momento dado, sin saber porqué, ya que el tema era otro, enciende su cam y aparece empalmado (una polla bastante grande, por cierto). Iba a cortar la conversación cuando me preguntó "¿Te gustaría que tu novia me chupara la polla?". Y sin pararme a pensar ni entender mi respuesta le dije "Si". Y empecé a pajearme mientras él me describía como sería la mamada mientras se masturbaba. Tardé menos de un minuto en correrme y después de hacerlo corté sin despedirme y le bloqueé. Estaba enfadado, me sentía ridículo, sorprendido...pero tardé menos de 5 minutos en volverme pajear imaginando a mi novia chupando aquella polla.
A partir de ahí se ha convertido en mi principal motivación sexual a la hora de pajearme. No la única, pero si por encima de las demás. Y partir de ahí inicié un camino de juegos, de exhibicionismo y prácticas encaminadas a llevar a la realidad aquello con lo que me había hecho miles de pajas. Compartía sus fotos, pedía videocorridas, la animaba a hacer topless, luego nudismo, jugábamos con otras parejas por webcam, salía sin tanga a la calle, usábamos consoladores con forma de polla...hasta que empecé a ver claramente que llevarlo a la realidad podría ser más un problema que una solución. Poco a poco mi mujer se ha ido volviendo menos morbosa y más convencional (aunque estoy seguro de que habría hecho un trío con otro hombre encantada) y eso lo ha terminado de frenar todo. La fantasía sigue pero ya es algo que llevo a solas y no es lo mismo.
pero yo deseandolo
