Buenas madrugas amigo
Morfeo!
Veo que tiene poco trabajo repartiendo píldoras…
Ya sabía usted que este hilo no sería nada sencillo…
Las personas les cuesta abrir sus sentimientos…
Pero bueno son libres de expresar cada cual lo que quiera…
Le vengo a pedir una de sus pildoritas
Esta vez deme la…
AZUL
Me la tomo…
Y hago un viaje al pasado recordando…
Los finales de los
80…
Vuelvo a colegio, en esa clase donde nunca me sentí que encajaba…
Ya comente en otros de estos viajes “
pildoreros”
Que no tuve buenos "cimientos" con los profesores/as…
Pero ese no es el motivo de este viaje…
Es otro más bien...
Sentimental…
Por aquella época yo estaba en mi
“mundo”...
Bueno a decir verdad aun lo sigo estando…
Y en esto que años más tarde una amiga que teníamos en común esta persona que ahora presentare…
Me comento que si nunca me di cuenta, lo que esa persona sentía por mí…
Esa persona se llamaba
Cristina…
Una cría muy guapa de pelo largo entre rubio y mezcla de pelirrojo…
Recuerdo también que era muy tímida de ahí que no se atreviera
a decirme que sentía algo por mí…
Nunca fui muy popular en nada…
Quien me iba a decir que le iba a gustar a una chica…
Como ha pasado siempre y seguirá pasando, nos atraen las personas
que ya sabemos de ante mano que nunca seremos correspondidos/as…
(Vamos lo que yo llamo el síndrome Camilo Sesto)
Porque eso me pasó con la que a mí me gustaba…
Bueno en realidad nos gustaba a todos los chicos de la clase…
Era la empollona, pero no era la típica “sabionda”
aparte de ser muy guapa también, era alta de pelo largo morena, pero en realidad
lo que te enamoraba de ella....
Era su simpatía, pero claro todo lo demás era inalcanzable…
Nunca me atreví a decirle a
Laura, ese era su nombre, lo que sentía por ella…
Como al igual le pasaba a
Cristina conmigo…
Que complicado era todo y eso que éramos unos críos...
Fueron pasando los años y terminamos el colegio…
Y el destino por que todo es eso… Todo lo rige y juega con nosotros/as
a cada paso que damos en este “Tablero del ajedrez que es la
VIDA”
Me encontré una tarde en una tienda de disco a
Laura…
Estaba igual que en la época del colegio...
Bueno miento...
Estaba aún más guapa!!!
Fue ella la que se dio cuenta…
Y eso que yo había cambiado bastante físicamente…
Siempre habíamos tenido buena sintonía en clase…
Pero claro no la que me hubiera gustado a mí…
Después de salir de la tienda de discos nos fuimos a tomar un café
y empezamos hablar de nuestras vidas…
Éramos todavía muy jóvenes pero ella ya se había comprometido con su novio…
Yo pensando en esa misma conversación...
Que lo mismo no tenia pareja…
Que iluso eras cocodrilo…
En eso no cambie lo sigo siendo…
En fin…
Y no sé cómo llego a la conversación que salió el nombre de…
Cristina…
Esa misma tarde me confeso, que después haber acabado el colegio
volvió a coincidir con ella en clases de mecanografía...
Se hicieron muy amigas, cosas de la vida en el colegio no era del grupo de sus amigas,
y luego fuera del colegio, llego a ser una de sus mejores amigas.
Laura me soltó la “bomba…” Que
Cristina le confeso que en esa época del colegio estaba loquita por mi…
Que sabía el interés que yo tenía por la
poesía a ella también le gustaba…
De eso no tenía ni idea…
Y lo que me dejo a cuadros…
Llego a escribirme en su día una
poesía, dejando claro lo que sentía por mí…
Le dije a
Laura que esa poesía nunca llego a mis manos…
Ella me dijo que
Cristina me la había dejo debajo en un cuaderno mío,
precisamente el que utilizaba yo para hacer mis
poesías…
Está claro que esa hoja alguien la cogió en algún descuido mío…
Y claro lógicamente
Cristina pensaría que pasaba de ella…
Aunque en realidad la que me gusta era
Laura…
Pero quien sabe…
Si esa
poesía hubiera cambiando todo el ritmo escrito por el destino…
También me confeso
Laura que
Cristina a lo largo de los años había
tenido desengaños amorosos y que por fin había conocido a su “chico ideal”
Al final cocodrilo (ni con una ni con otra…) ):
A veces tenemos tan cerca a la persona adecuada que no nos damos cuenta…
En este viaje
reflexivo ahora lo percibo que hay que estar más atentos/as a la
señales…
Me hubiese encantado haber juntado mi pupitre al de Cristina
y poder haber hecho poesías juntos…
Quién sabe si nuestras VIDAS podrían haber sido distintas y en ese mismo CAMINO…
Solo espero que allá donde te encuentres
Cristinita seas muy feliz con quien estés…
Ya empieza a desvanecerse el efecto de la píldora…
AZUL
¿Y vuestra píldora cual será la
Azul o la
Roja?
Animaos a soñar…