Dolor de Cuernos. (Las cosas no son como esperabas)

He estado leyendo este hilo y me parecen muy interesantes y reales las experiencias y reflexiones.

Yo llevo unos cuantos años también con el morbo y el deseo de que mi mujer tenga sexo con otro (llevamos juntos algo más de 10). Como la mayoría, esto comenzó simplemente como una fantasía mía propia y jamás pensé que podría pasar de ahí; de hecho, estuve varios años (he sido usuario del anterior foro y de otros similares) fantaseando solamente en mi mente con la idea de que otro hombre se la follaba, y durante años pensé que ahí se quedaría, a la vez que creía que dicho morbo sería algo pasajero; ni me planteaba siquiera poder llegar a contarle mis deseos, pues me daba miedo su reacción y creía que jamás lo entendería. Pero, con el paso del tiempo, ese morbo ha ido a más y me empecé a plantear seriamente contarle mis deseos.

Y así fue hasta que, poco a poco, me lancé y conseguí contarle mis fantasías. Comencé con la misma idea que muchos comentáis de contarle la fantasía como que había tenido un sueño donde la veía follando con otro y me excitaba con ello, y aunque al principio su reacción fue un poco de incredulidad, poco a poco fue entrando al morbo y actualmente fantaseamos muchísimo con esta idea cuando tenemos sexo, y he ido notando que cada vez entra más en el morbo e incluso es ella ahora la que ya a veces me busca para hacer este tipo de juegos, a la vez que ambos notamos que esto está mejorando nuestra vida sexual, que ya comenzaba a notarse algo estancada. Eso sí, ella siempre me había estado diciendo que todo esto solamente como fantasía y que ella nunca lo haría en la realidad... Pero últimamente estoy notando que esas barreras se están rompiendo poco a poco y que ella ya empieza a plantearse llegar a hacerlo realidad, pues hace como un par de meses, durante una de nuestras sesiones de sexo donde fantaseábamos con esto y ambos nos habíamos excitado hasta el extremo, ella me dijo que podría estar dispuesta a hacerlo realidad si se diera la ocasión y un candidato indicado y que nos diera confianza. Ella me dice que, si se diera ese caso, que lo haría solamente por satisfacer mis deseos, al ver lo mucho que me excita la idea... y como una especia de regalo.

Y aquí es donde me entran esos miedos e inquietudes que se cuentan en este hilo. Por un lado, nada más ella decirme esto, yo ya estaba pensando en mi mente: "tengo que buscar un candidato apropiado y ponerme a ello, que es lo que llevo deseando desde hace tiempo", pero por otro lado me asusta el momento de dar el paso y que todo sea un desastre y todo se vaya al garete. Pues, como aquí se comenta, en las fantasías todo es perfecto: el corneador es un tipo atractivo, educado, morboso y follador incansable y mi mujer una "actriz porno" que goza como una posesa con él, mientras yo lo presencio todo excitado, sin celos ni remordimientos....
Pero luego en la realidad posiblemente la cosa podría ser muy muy distinta.

En este punto, yo ahora mismo estoy por continuar con esto de momento solo como un fantasía; así nos está yendo bien y, como digo, le está dando una "vidilla nueva" a nuestras relaciones sexuales. Intentar llevarlo a la realidad tal vez suponga un paso del que quizás me arrepienta. Al menos, salvo que se pueda dar una ocasión muy propicia y demos con la persona adecuada (cosa que será difícil). Pues lo que me aterra sobre todo es entregar a mi mujer en manos de un tío que se las de de corneador experto y follador, y luego resulte un "piltrafilla" que solo buscaba un polvo fácil con una casada. O al revés, que el tipo la folle como nunca y a mi me entren las paranoias....

Como digo, es algo complicado y cuando se pueda acercar la hora de la verdad entran las dudas... luego puede ser tarde.


saludos!
 
Cuando la relación con el mismo hombre se prolonga en el tiempo por lo general acaba naciendo una mayor afinidad en gustos y demás que corre el peligro de convertirse en un sentimiento cercano a lo amoroso; no quizás enamoramiento como tal, pero si que puede llegar a poner en peligro el matrimonio a menos que el marido sea muy muy comprensivo. El riesgo siempre existe.
Puede ocurrir pero en la mayoría de los casos, permite que haya más confianza y menos timidez a la hora de saber lo que gusta o no al otro. Mi esposa tiene amantes regulares, uno desde casi 15 años y nos conocemos tanto que ya no hay que hablar las cosas, todo se hace de forma natural sin tener que preguntar. Es algo muy bueno. A parte de los encuentros, no tenemos casi contactos con ellos. Muchos son casados, tienen su vida, nosotros la nuestra y todo funciona bien así. Cuando entran sentimientos, es porque son dos que lo quieren.
 
Puede ocurrir pero en la mayoría de los casos, permite que haya más confianza y menos timidez a la hora de saber lo que gusta o no al otro. Mi esposa tiene amantes regulares, uno desde casi 15 años y nos conocemos tanto que ya no hay que hablar las cosas, todo se hace de forma natural sin tener que preguntar. Es algo muy bueno. A parte de los encuentros, no tenemos casi contactos con ellos. Muchos son casados, tienen su vida, nosotros la nuestra y todo funciona bien así. Cuando entran sentimientos, es porque son dos que lo quieren.
es evidente lo que dices, que si surge es porque lo quieren los dos, pero también es evidente que si echas, perdoname la expresión, dos polvos en dos meses, y ni ella ni el saben ni quien es el otro, el riesgo esta muy limitado. si en cambio empiezas a quedar todos los meses o cada quince días en casa, el tema cambia radicalmente. puede que al principio ella no quiera ni lo busque ni sienta nada, pero el roce hace el cariño. al final es como si vas con un rolex de oro enseñándolo por un mal barrio, puede que un día no te roben, pero si vas cada semana, ten claro que te van a acabar robando.
 
releyendo este foro, y vuestros mensajes, no creéis que con unas pequeñas medidas, como limitar a 2-3 encuentros máximo con la misma persona, espaciados 1-2 meses mínimo, el contacto siempre a través del marido, no queda el peligro de que se desarrollen otro tipo de relaciones mas allá del sexo, muy mitigado?
Hay personas que necesitan encuentros regulares, otros menos a menudo pero que lo van preparando con mucha ilusión. Si la pareja está bien y enamorados, no hay peligro. Si usan el libertinaje por la razón que les falta algo entre ellos, el flechazo puede salir a cualquier momento.
 
He estado leyendo este hilo y me parecen muy interesantes y reales las experiencias y reflexiones.

Yo llevo unos cuantos años también con el morbo y el deseo de que mi mujer tenga sexo con otro (llevamos juntos algo más de 10). Como la mayoría, esto comenzó simplemente como una fantasía mía propia y jamás pensé que podría pasar de ahí; de hecho, estuve varios años (he sido usuario del anterior foro y de otros similares) fantaseando solamente en mi mente con la idea de que otro hombre se la follaba, y durante años pensé que ahí se quedaría, a la vez que creía que dicho morbo sería algo pasajero; ni me planteaba siquiera poder llegar a contarle mis deseos, pues me daba miedo su reacción y creía que jamás lo entendería. Pero, con el paso del tiempo, ese morbo ha ido a más y me empecé a plantear seriamente contarle mis deseos.

Y así fue hasta que, poco a poco, me lancé y conseguí contarle mis fantasías. Comencé con la misma idea que muchos comentáis de contarle la fantasía como que había tenido un sueño donde la veía follando con otro y me excitaba con ello, y aunque al principio su reacción fue un poco de incredulidad, poco a poco fue entrando al morbo y actualmente fantaseamos muchísimo con esta idea cuando tenemos sexo, y he ido notando que cada vez entra más en el morbo e incluso es ella ahora la que ya a veces me busca para hacer este tipo de juegos, a la vez que ambos notamos que esto está mejorando nuestra vida sexual, que ya comenzaba a notarse algo estancada. Eso sí, ella siempre me había estado diciendo que todo esto solamente como fantasía y que ella nunca lo haría en la realidad... Pero últimamente estoy notando que esas barreras se están rompiendo poco a poco y que ella ya empieza a plantearse llegar a hacerlo realidad, pues hace como un par de meses, durante una de nuestras sesiones de sexo donde fantaseábamos con esto y ambos nos habíamos excitado hasta el extremo, ella me dijo que podría estar dispuesta a hacerlo realidad si se diera la ocasión y un candidato indicado y que nos diera confianza. Ella me dice que, si se diera ese caso, que lo haría solamente por satisfacer mis deseos, al ver lo mucho que me excita la idea... y como una especia de regalo.

Y aquí es donde me entran esos miedos e inquietudes que se cuentan en este hilo. Por un lado, nada más ella decirme esto, yo ya estaba pensando en mi mente: "tengo que buscar un candidato apropiado y ponerme a ello, que es lo que llevo deseando desde hace tiempo", pero por otro lado me asusta el momento de dar el paso y que todo sea un desastre y todo se vaya al garete. Pues, como aquí se comenta, en las fantasías todo es perfecto: el corneador es un tipo atractivo, educado, morboso y follador incansable y mi mujer una "actriz porno" que goza como una posesa con él, mientras yo lo presencio todo excitado, sin celos ni remordimientos....
Pero luego en la realidad posiblemente la cosa podría ser muy muy distinta.

En este punto, yo ahora mismo estoy por continuar con esto de momento solo como un fantasía; así nos está yendo bien y, como digo, le está dando una "vidilla nueva" a nuestras relaciones sexuales. Intentar llevarlo a la realidad tal vez suponga un paso del que quizás me arrepienta. Al menos, salvo que se pueda dar una ocasión muy propicia y demos con la persona adecuada (cosa que será difícil). Pues lo que me aterra sobre todo es entregar a mi mujer en manos de un tío que se las de de corneador experto y follador, y luego resulte un "piltrafilla" que solo buscaba un polvo fácil con una casada. O al revés, que el tipo la folle como nunca y a mi me entren las paranoias....

Como digo, es algo complicado y cuando se pueda acercar la hora de la verdad entran las dudas... luego puede ser tarde.


saludos!
Compañero, si no estáis ambos 100% seguro no hagáis nada más allá de la fantasía.
Una vez se pasa la línea ya nada volverá a ser igual entre ambos.
 
He estado leyendo este hilo y me parecen muy interesantes y reales las experiencias y reflexiones.

Yo llevo unos cuantos años también con el morbo y el deseo de que mi mujer tenga sexo con otro (llevamos juntos algo más de 10). Como la mayoría, esto comenzó simplemente como una fantasía mía propia y jamás pensé que podría pasar de ahí; de hecho, estuve varios años (he sido usuario del anterior foro y de otros similares) fantaseando solamente en mi mente con la idea de que otro hombre se la follaba, y durante años pensé que ahí se quedaría, a la vez que creía que dicho morbo sería algo pasajero; ni me planteaba siquiera poder llegar a contarle mis deseos, pues me daba miedo su reacción y creía que jamás lo entendería. Pero, con el paso del tiempo, ese morbo ha ido a más y me empecé a plantear seriamente contarle mis deseos.

Y así fue hasta que, poco a poco, me lancé y conseguí contarle mis fantasías. Comencé con la misma idea que muchos comentáis de contarle la fantasía como que había tenido un sueño donde la veía follando con otro y me excitaba con ello, y aunque al principio su reacción fue un poco de incredulidad, poco a poco fue entrando al morbo y actualmente fantaseamos muchísimo con esta idea cuando tenemos sexo, y he ido notando que cada vez entra más en el morbo e incluso es ella ahora la que ya a veces me busca para hacer este tipo de juegos, a la vez que ambos notamos que esto está mejorando nuestra vida sexual, que ya comenzaba a notarse algo estancada. Eso sí, ella siempre me había estado diciendo que todo esto solamente como fantasía y que ella nunca lo haría en la realidad... Pero últimamente estoy notando que esas barreras se están rompiendo poco a poco y que ella ya empieza a plantearse llegar a hacerlo realidad, pues hace como un par de meses, durante una de nuestras sesiones de sexo donde fantaseábamos con esto y ambos nos habíamos excitado hasta el extremo, ella me dijo que podría estar dispuesta a hacerlo realidad si se diera la ocasión y un candidato indicado y que nos diera confianza. Ella me dice que, si se diera ese caso, que lo haría solamente por satisfacer mis deseos, al ver lo mucho que me excita la idea... y como una especia de regalo.

Y aquí es donde me entran esos miedos e inquietudes que se cuentan en este hilo. Por un lado, nada más ella decirme esto, yo ya estaba pensando en mi mente: "tengo que buscar un candidato apropiado y ponerme a ello, que es lo que llevo deseando desde hace tiempo", pero por otro lado me asusta el momento de dar el paso y que todo sea un desastre y todo se vaya al garete. Pues, como aquí se comenta, en las fantasías todo es perfecto: el corneador es un tipo atractivo, educado, morboso y follador incansable y mi mujer una "actriz porno" que goza como una posesa con él, mientras yo lo presencio todo excitado, sin celos ni remordimientos....
Pero luego en la realidad posiblemente la cosa podría ser muy muy distinta.

En este punto, yo ahora mismo estoy por continuar con esto de momento solo como un fantasía; así nos está yendo bien y, como digo, le está dando una "vidilla nueva" a nuestras relaciones sexuales. Intentar llevarlo a la realidad tal vez suponga un paso del que quizás me arrepienta. Al menos, salvo que se pueda dar una ocasión muy propicia y demos con la persona adecuada (cosa que será difícil). Pues lo que me aterra sobre todo es entregar a mi mujer en manos de un tío que se las de de corneador experto y follador, y luego resulte un "piltrafilla" que solo buscaba un polvo fácil con una casada. O al revés, que el tipo la folle como nunca y a mi me entren las paranoias....

Como digo, es algo complicado y cuando se pueda acercar la hora de la verdad entran las dudas... luego puede ser tarde.


saludos!
Ante las dudas que tienes, yo en tu caso iría poco a poco. Si estuviese en vuestro caso, supongo que probaría a ir a un local de ambiente liberal, no para follar, sino simplemente a ir a tomar algo y ver el ambiente y ver si las dudas continúan o por lo contrario estáis decididos y si la cosa está bien, volver otro día y lo surja. Creo que si lo llegasteis a plantear, tenéis bastante confianza entre vosotros peo claro una cosa es la fantasía y otra ver la realidad.
 
Compañero, si no estáis ambos 100% seguro no hagáis nada más allá de la fantasía.
Una vez se pasa la línea ya nada volverá a ser igual entre ambos.
Sí, eso es lo que pienso yo, y leyendo el hilo y las experiencias me confirman mis dudas.

Pero claro, son ya unos cuantos años con esta fantasía en mi cabeza y cuando mi mujer me dice que podría estar dispuesta la tentación inmediatamente está ahí, pero está claro que hay que estar muy seguro para dar ese paso tan importante. De momento me conformaré con las fantasías que hacemos, que con ellas estamos disfrutando los dos una barbaridad.
 
Ante las dudas que tienes, yo en tu caso iría poco a poco. Si estuviese en vuestro caso, supongo que probaría a ir a un local de ambiente liberal, no para follar, sino simplemente a ir a tomar algo y ver el ambiente y ver si las dudas continúan o por lo contrario estáis decididos y si la cosa está bien, volver otro día y lo surja. Creo que si lo llegasteis a plantear, tenéis bastante confianza entre vosotros peo claro una cosa es la fantasía y otra ver la realidad.
Sí, esa precisamente es una de las ideas que hemos hablado, ir un día a un local liberal y ver cómo nos sentimos ambos. Tal vez ese sea seguramente el próximo paso que demos antes de lanzarnos a buscar un candidato que se la folle.
 
es evidente lo que dices, que si surge es porque lo quieren los dos, pero también es evidente que si echas, perdoname la expresión, dos polvos en dos meses, y ni ella ni el saben ni quien es el otro, el riesgo esta muy limitado. si en cambio empiezas a quedar todos los meses o cada quince días en casa, el tema cambia radicalmente. puede que al principio ella no quiera ni lo busque ni sienta nada, pero el roce hace el cariño. al final es como si vas con un rolex de oro enseñándolo por un mal barrio, puede que un día no te roben, pero si vas cada semana, ten claro que te van a acabar robando.
En una relación seguida, se conoce la gente... Se conocen sus virtudes y sus defectos.
 
Compañero, si no estáis ambos 100% seguro no hagáis nada más allá de la fantasía.
Una vez se pasa la línea ya nada volverá a ser igual entre ambos.
Opino lo mismo. Por lo que dice... ambos tienen dudas (de hecho ella no quiere y lo probaría solo para complacerle a él). Si dice él que así están todo bien, pues listo. La fantasia ya les está sirviendo para aumentar el morbo entre los 2. Yo no buscaría más "problemas"
 
Sí, esa precisamente es una de las ideas que hemos hablado, ir un día a un local liberal y ver cómo nos sentimos ambos. Tal vez ese sea seguramente el próximo paso que demos antes de lanzarnos a buscar un candidato que se la folle.
Una suerte que tú mujer se haya decidido. En nuestro, algunas veces, cuando follamos, mi mujer fantasea o fantaseamos que está follando con su amante. Pero de llevarlo a la realidad de momento nada
 
Hay personas que necesitan encuentros regulares, otros menos a menudo pero que lo van preparando con mucha ilusión. Si la pareja está bien y enamorados, no hay peligro. Si usan el libertinaje por la razón que les falta algo entre ellos, el flechazo puede salir a cualquier momento.
En principio estoy de acuerdo con tu reflexión acerca de la continuidad con un amante; pero no me negarás que según suele decirse 'el roce hace el cariño' y las posibilidades de que surja un algo más que puro sexo es una realidad. Cierto que si la pareja esté compenetrada y es sólida el riesgo disminuye pero, aun así, pueden surgir verdaderos cuernos y llegar a la infidelidad con cierto ocultismo ante el marido cornudo consentidor.
 
En principio estoy de acuerdo con tu reflexión acerca de la continuidad con un amante; pero no me negarás que según suele decirse 'el roce hace el cariño' y las posibilidades de que surja un algo más que puro sexo es una realidad. Cierto que si la pareja esté compenetrada y es sólida el riesgo disminuye pero, aun así, pueden surgir verdaderos cuernos y llegar a la infidelidad con cierto ocultismo ante el marido cornudo consentidor.
Hay màs complicidad, màs intimidad, se convierten en amigos con la diferencia que se la follan. Mismo ella reconoce que tiene sus preferidos pero tenemos siempre claro que no puede haber relaciones 'ocultas', es nuestra forma de funcionar en este tema. Hasta hace poco, yo estaba siempre presente. Ahora, de vez en cuando, ella se queda sola con algunos. Son conocidos y no es algo que salio de ella, al principio no estaba muy de acuerdo pero las pocas experiencias que ha tenido asi fueron muy positivas para ella.
 
Hay màs complicidad, màs intimidad, se convierten en amigos con la diferencia que se la follan. Mismo ella reconoce que tiene sus preferidos pero tenemos siempre claro que no puede haber relaciones 'ocultas', es nuestra forma de funcionar en este tema. Hasta hace poco, yo estaba siempre presente. Ahora, de vez en cuando, ella se queda sola con algunos. Son conocidos y no es algo que salio de ella, al principio no estaba muy de acuerdo pero las pocas experiencias que ha tenido asi fueron muy positivas para ella.
Fundamental eso de que no haya relaciones "ocultas", la cosa es que disfrutéis los tres y para eso es fundamental que no haya secretos.
 
Hay màs complicidad, màs intimidad, se convierten en amigos con la diferencia que se la follan. Mismo ella reconoce que tiene sus preferidos pero tenemos siempre claro que no puede haber relaciones 'ocultas', es nuestra forma de funcionar en este tema. Hasta hace poco, yo estaba siempre presente. Ahora, de vez en cuando, ella se queda sola con algunos. Son conocidos y no es algo que salio de ella, al principio no estaba muy de acuerdo pero las pocas experiencias que ha tenido asi fueron muy positivas para ella.
El problema es que se esta abordando todo desde algo racional, y el corazón no es algo que se pueda controlar. Por mucho que se haya hablado, por mucho que se entienda, como surja algo, nada logico lo va a parar. Quien evita la ocasión evita el peligro. Es como cualquier droga. Cuando llevas x tiempo, para mantener el mismo efecto vas a tener que aumentar la intensidad o la frecuencia. Y eso puede hacer que la persona haga clac algo en su interior.
 
He estado leyendo este hilo y me parecen muy interesantes y reales las experiencias y reflexiones.

Yo llevo unos cuantos años también con el morbo y el deseo de que mi mujer tenga sexo con otro (llevamos juntos algo más de 10). Como la mayoría, esto comenzó simplemente como una fantasía mía propia y jamás pensé que podría pasar de ahí; de hecho, estuve varios años (he sido usuario del anterior foro y de otros similares) fantaseando solamente en mi mente con la idea de que otro hombre se la follaba, y durante años pensé que ahí se quedaría, a la vez que creía que dicho morbo sería algo pasajero; ni me planteaba siquiera poder llegar a contarle mis deseos, pues me daba miedo su reacción y creía que jamás lo entendería. Pero, con el paso del tiempo, ese morbo ha ido a más y me empecé a plantear seriamente contarle mis deseos.

Y así fue hasta que, poco a poco, me lancé y conseguí contarle mis fantasías. Comencé con la misma idea que muchos comentáis de contarle la fantasía como que había tenido un sueño donde la veía follando con otro y me excitaba con ello, y aunque al principio su reacción fue un poco de incredulidad, poco a poco fue entrando al morbo y actualmente fantaseamos muchísimo con esta idea cuando tenemos sexo, y he ido notando que cada vez entra más en el morbo e incluso es ella ahora la que ya a veces me busca para hacer este tipo de juegos, a la vez que ambos notamos que esto está mejorando nuestra vida sexual, que ya comenzaba a notarse algo estancada. Eso sí, ella siempre me había estado diciendo que todo esto solamente como fantasía y que ella nunca lo haría en la realidad... Pero últimamente estoy notando que esas barreras se están rompiendo poco a poco y que ella ya empieza a plantearse llegar a hacerlo realidad, pues hace como un par de meses, durante una de nuestras sesiones de sexo donde fantaseábamos con esto y ambos nos habíamos excitado hasta el extremo, ella me dijo que podría estar dispuesta a hacerlo realidad si se diera la ocasión y un candidato indicado y que nos diera confianza. Ella me dice que, si se diera ese caso, que lo haría solamente por satisfacer mis deseos, al ver lo mucho que me excita la idea... y como una especia de regalo.

Y aquí es donde me entran esos miedos e inquietudes que se cuentan en este hilo. Por un lado, nada más ella decirme esto, yo ya estaba pensando en mi mente: "tengo que buscar un candidato apropiado y ponerme a ello, que es lo que llevo deseando desde hace tiempo", pero por otro lado me asusta el momento de dar el paso y que todo sea un desastre y todo se vaya al garete. Pues, como aquí se comenta, en las fantasías todo es perfecto: el corneador es un tipo atractivo, educado, morboso y follador incansable y mi mujer una "actriz porno" que goza como una posesa con él, mientras yo lo presencio todo excitado, sin celos ni remordimientos....
Pero luego en la realidad posiblemente la cosa podría ser muy muy distinta.

En este punto, yo ahora mismo estoy por continuar con esto de momento solo como un fantasía; así nos está yendo bien y, como digo, le está dando una "vidilla nueva" a nuestras relaciones sexuales. Intentar llevarlo a la realidad tal vez suponga un paso del que quizás me arrepienta. Al menos, salvo que se pueda dar una ocasión muy propicia y demos con la persona adecuada (cosa que será difícil). Pues lo que me aterra sobre todo es entregar a mi mujer en manos de un tío que se las de de corneador experto y follador, y luego resulte un "piltrafilla" que solo buscaba un polvo fácil con una casada. O al revés, que el tipo la folle como nunca y a mi me entren las paranoias....

Como digo, es algo complicado y cuando se pueda acercar la hora de la verdad entran las dudas... luego puede ser tarde.


saludos!
Gracia por compartir tu experiencia.

Evidentemente, ella tiene ya plantada en la mente la idea de poder hacerlo y está en ese punto en el que posiblemente si le das un empujoncito más se lanza a hacerlo.

Ten por seguro que ella no ha dejado de darle vueltas al asunto, valorando todas las posibilidades y si has visto que está más receptiva es que lo tiene quizás más claro de lo que tú piensas, lo que sí es cierto es que no te lo va a decir claramente y tendrás que ser tú en que la lleve a dar el paso definitivo.

En mi caso ella me dio el ok, pero todo lo demás va a depende de uno mismo y del entusiasmo que demuestres.

Si estás seguro creo que ella lo va a estar aunque lógicamente siempre va a haber dudas.

Ya todo empieza a depender todo de tí y de que le des la confianza que necesita.

El resto, que es mucho, va a depender de la intuición y la suerte, si terminas buscando el candidato ideal.

Un saludo. 🤘🏻
 
El problema es que se esta abordando todo desde algo racional, y el corazón no es algo que se pueda controlar. Por mucho que se haya hablado, por mucho que se entienda, como surja algo, nada logico lo va a parar. Quien evita la ocasión evita el peligro. Es como cualquier droga. Cuando llevas x tiempo, para mantener el mismo efecto vas a tener que aumentar la intensidad o la frecuencia. Y eso puede hacer que la persona haga clac algo en su interior.
Una droga ? No. Llevamos màs de 3 decadas, y a no contamos los que la follaron y cada aventura es un mundo diferente. Ahora, si que puede sujir algo pero puede pasar haciendo las compras, visitando un museo o haciendo deporte. La verdad es que no es algo que me preocupa, no me ha preocupado nunca, a pesar que vi que ocuria en parejas conocidas. La gente que nos ve, que nos conoce dicen que seguimos enamorados como adolescentes.
 
Una droga ? No. Llevamos màs de 3 decadas, y a no contamos los que la follaron y cada aventura es un mundo diferente. Ahora, si que puede sujir algo pero puede pasar haciendo las compras, visitando un museo o haciendo deporte. La verdad es que no es algo que me preocupa, no me ha preocupado nunca, a pesar que vi que ocuria en parejas conocidas. La gente que nos ve, que nos conoce dicen que seguimos enamorados como adolescentes.
Una situación idílica sin duda. 👏🏻
 
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