Pedromiguel
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Viendo mi consentimiento me agarró la cola desnuda con toda la mano y la apretó suavemente. 
Lo dejé y a la vez, busqué su polla bajo la ropa. La encontré ya en erección, se notaba de buen tamaño y firmeza.
Me tomó de la mano y me señaló la puerta con la cabeza. Asentí y lo seguí.
Salió al corredor y se dirigió a una de las salas individuales, que tienen 3 sillones, jajaja.
Entre atrás de él y cerré la puerta, poniendo la traba. Para más seguridad corrió uno de los sillones y lo apoyó en la puerta.
Me bajé los pantalones, pero cuando iba a hacer lo mismo con la tanguita no me dejó, me sostuvo la mano e hizo que no con la cabeza, sonriendo.
El se bajó todo. Quedó a la vista una linda verga, blanca, venosa, con la cabeza medio cubierta, con líquido transparente que la mojaba. Ni grande ni chica. Buena!
Me dio vuelta, dándole la espalda . Sentí que frotaba su verga húmeda en la piel que desnudaba la poca tela de la tanga en mi cola.
Metio los dedos, corriendo la tela para buscar el agujero. Lo encontró lubricado y blando. Sentí que apoyaba la punta de la pija y buscaba ya penetrarme. Fue raro, nada previo, ni paja ni chupada. Directo al folle!
				
			Lo dejé y a la vez, busqué su polla bajo la ropa. La encontré ya en erección, se notaba de buen tamaño y firmeza.
Me tomó de la mano y me señaló la puerta con la cabeza. Asentí y lo seguí.
Salió al corredor y se dirigió a una de las salas individuales, que tienen 3 sillones, jajaja.
Entre atrás de él y cerré la puerta, poniendo la traba. Para más seguridad corrió uno de los sillones y lo apoyó en la puerta.
Me bajé los pantalones, pero cuando iba a hacer lo mismo con la tanguita no me dejó, me sostuvo la mano e hizo que no con la cabeza, sonriendo.
El se bajó todo. Quedó a la vista una linda verga, blanca, venosa, con la cabeza medio cubierta, con líquido transparente que la mojaba. Ni grande ni chica. Buena!
Me dio vuelta, dándole la espalda . Sentí que frotaba su verga húmeda en la piel que desnudaba la poca tela de la tanga en mi cola.
Metio los dedos, corriendo la tela para buscar el agujero. Lo encontró lubricado y blando. Sentí que apoyaba la punta de la pija y buscaba ya penetrarme. Fue raro, nada previo, ni paja ni chupada. Directo al folle!