Pues a mi esas practicas de aprovechamiento de roles me desmultiplican mucho.
De hecho he renunciado a muchas insinuaciones en el medio laboral por disgustarme mas que excitarme
Depende de cómo sea, como en todo. Si la chica está en una mala situación o se siente humillada, pues completamente de acuerdo contigo. O si el tipo es un pobre ingenuo que cree que ella, la jovencita, anda enamoradísima de él. Pero hay casos ambiguos donde el interés laboral y económico se entremezclan con el morbo del rol de becaria/consentida/prostituta.
Muy, muy cercana a mi (en la familia, vaya ) hay una chica lesbiana (actualmente casada con otra mujer y todo, vamos) que trabajando de recepcionista en una inmobiliaria se hizo a más de un constructor mayor de sesenta o incluso setenta durante los años de la crisis del sector. Empezó diciendo "el tío viejo asqueroso ese como me mira"o sentirse agobiada, y entre copas e insinuaciones durante una epoca prácticamente acabo convirtiéndose en una profesional del ramo (era veinteañera y encima hasta podía pasar por más joven: cosa que una vez metida en harina llego a explotar de la firma más impudica)... Siempre dejándoles claro que era "bollera", para que no se hicieran ilusiones de casarse con jovencita, lo que además multiplicaba su morbo por follarsela y... curiosamente, su respeto por ella, al ser un mundo muy machista (paradójicamente, ya me explicaré, pero no toca).
No es que sacara gran cosa de ellos, materialmente hablando, pero se que le excitaba formar parte de ese mundillo un poco "mafiosillo", verse colmada de atenciones, invitada y a veces pagada, etcetc para entendernos. En lo laboral lo unico que sacó, diría, es mantenerse en el puesto (bueno, aunque eso no está claro, evidentemente iban a necesitar una chica guapa y joven recibiendo y atendiendo llamadas) hasta que la empresa quebró por chanchullos y la posibilidad de pintarse las uñas de los pies en la mesa de trabajo sin que le llamarán la atención
