Masturbando a un hombre

Quien no lo ha hecho no sabe lo que se pierde .Yo creo que con la edad, por lo menos me pasa a mi,llevo ya hace unos años que me llaman la atención las pollas .La primera vez que pude probar una polla tuve la suerte del debutante, pille un pollon grandísimo,ademas con un aguante bestial.Despues con él volví a quedar varias veces,me convirtió en su "putilla"
 
Entras en este foro y dan unas ganas ................,que pena que estemos en Agosto. Él otro día al contaros mi pequeña historia, le empecé a dar vueltas a la cabeza,pero he visto que nadie pidió que la contase.
 
Entras en este foro y dan unas ganas ................,que pena que estemos en Agosto. Él otro día al contaros mi pequeña historia, le empecé a dar vueltas a la cabeza,pero he visto que nadie pidió que la contase.
Coño! Cuenta, cuenta!
 
Han pasado ya dos semanas, recuerdo cada momento de la paja que le hice a aquel hombre, es pensarlo y empalparme e inevitablemente termino masturbándome, exactamente como ahora que mientras escribo tengo la polla muy dura y se que cuando termine de publicarlo iré a correrme.

Decido pasarme otra vez por la zona, en realidad ya he estado otras veces antes de esta aunque no iba con la idea de tener un encuentro sino solo con la intención de ir reconociendo el lugar.

Aparco el coche y voy andando, miro hacia los dos lados mientras me acerco, en mi fuero interno deseo encontrarme otra vez con aquel hombre aunque se que las posibilidades son remotas, llego al lugar, no hay nadie, me meto por el camino por donde me llevó la vez anterior y paso por el lugar donde hice mi primera paja, como no hay nadie sigo adelante, voy andando haciéndome el distraído por si me cruzo con alguien que no sepa nada de esto.

He andado ya unos doscientos metros y nada, me he cruzado con una pareja que pasea un perro y nadie más, me doy la vuelta decepcionado, cuando salgo al camino principal veo al otro lado a un hombre parado, me suena su actitud, empiezo a tener un sexto sentido para estas cosas, comienzo a andar despacio buscando un gesto de complicidad de la otra persona, si lo detecto estoy listo para cruzar la calle e irme con el.

Miro hacia el como distraído y como sigue sin hacer nada, soy yo el que se acaricia la polla con disimulo, solo un leve toque pero que inmediatamente produce una reacción en el individuo del otro lado, se toca también pero al contrario que yo no retira la mano, considero que la señal es clara y me acerco cruzando el camino, nos saludamos con un hola y sin decir nada más, empezamos a andar a una zona más discreta.

Llegamos, me paro a observarle, es más joven que yo, va vestido con chándal, debe ser el uniforme estándar para esto, yo me resisto a llevar chándal y voy con mi vaquero y mi polo, el hombre me mira y me dice con tono apremiante “sácame la polla”, obedezco, me gusta que tomen la iniciativa, que manden.

Paso la mano por encima de su polla antes de meter la mano por dentro del pantalón, no la noto todavía dura, me decepciona algo pero sigo adelante, con una mano estiro del pantalón y meto la otra buscando su polla, llego a los calzoncillos, son tipo bóxer, me ayudo con la otra mano y por fin encuentro el tesoro, tiro hacia abajo del calzoncillo y del pantalón del chándal y agarro la polla con la otra mano, está morcillona, empiezo a menearla y noto como se endurece, me gusta, qué sensación de orgullo me invade cuando la polla se pone dura al tacto, sigo meneándosela hasta que alcanza un tamaño considerable.

¿Qué puedo decir de esta polla? Es mi segunda polla, más pequeña que la anterior, es más fina y está ligeramente curvada hacia arriba, aun así es más grande que la mía, curiosamente noto el olor que desprende, de la primera no lo recuerdo, es un olor fuerte, intenso, pero no me desagrada, huele a polla y me gusta.

Sigo con el vaivén, lo hago lentamente, me gusta disfrutar del momento, estiro de la piel hacia abajo y me quedo mirando ese capullo brillante, me tiene completamente hipnotizado, en ese momento me dice que se la chupe, le digo que no, que solo le hago una paja y que si quiere paro, me dice que continúe pero que vaya más deprisa. Esa orden si la obedezco y comienzo a masturbarle más rápido, creo que tiene ganas de acabar, yo en cambio seguiría así una hora, pero él manda y yo obedezco, me siento solo como un instrumento para darle placer y esa sensación de sumisión me excita mucho.

Acelero la paja, se que se va a correr pronto, lo noto, veo como se tensa, me gustaría arrodillarme para poder oler su polla más de cerca pero temo que lo interprete mal y que quiera que me la meta en la boca y no estoy preparado todavía para eso, así que sigo haciéndole una paja lo mejor que se, lo mejor que puedo darle.

Quiero que se corra y que me manche, siento la necesidad de notar brotar su semen, por fin lo hace, acelero más la paja, gime, me encanta. El primer chorro se escapa, para el segundo me pongo en medio y cae sobre mis vaqueros en el lugar donde está mi polla completamente dura, sigo hasta que le dejo completamente vacío, cuando ha terminado me ordena que se la meta en el pantalón y obedezco.

Se va, yo me quedo un rato con mi mano completamente empapada en semen, se ha corrido a lo bestia, estoy orgulloso, tengo el vaquero manchado de su semen, acerco mi mano para olerlo, saco un pañuelo y me limpio.

Me voy al coche, hago lo mismo que la otra vez, me voy a un lugar algo más lejos y apartado, paso a la parte de atrás del coche y empiezo a masturbarme, tengo la polla completamente dura y empapada de líquido preseminal, ni siquiera con una mujer me he puesto así nunca, pienso en como me he sentido, en lo que me pone obedecer a un macho, no sé qué es lo que más me gusta si hacer la paja o que me ordenen hacer la paja, me corro en menos de 30 segundos.
Tengo la polla chorreando de leer tus relatos, muy bien contados, espero leer muchos mas
 
Yo tengo un amigo que cuando mi novia se va y coincide que nos ponemos los dos un poco contentos quedamos,él es mayor que yo tiene casi 60 años,pero tiene un rabazo grande y gordo. Cuando se da el caso me espera en casa con el rabo bien duro, yo llego y le hago un buen pajote y ahí sentado según me levanto me hace una buena mamada hasta que descargo todo en su boca
 
Yo tengo un amigo que cuando mi novia se va y coincide que nos ponemos los dos un poco contentos quedamos,él es mayor que yo tiene casi 60 años,pero tiene un rabazo grande y gordo. Cuando se da el caso me espera en casa con el rabo bien duro, yo llego y le hago un buen pajote y ahí sentado según me levanto me hace una buena mamada hasta que descargo todo en su boca
mmm yo empece con uno mayor tambien jiji
 
Yo tengo un amigo que cuando mi novia se va y coincide que nos ponemos los dos un poco contentos quedamos,él es mayor que yo tiene casi 60 años,pero tiene un rabazo grande y gordo. Cuando se da el caso me espera en casa con el rabo bien duro, yo llego y le hago un buen pajote y ahí sentado según me levanto me hace una buena mamada hasta que descargo todo en su bocac
 
Yo tengo un amigo que cuando mi novia se va y coincide que nos ponemos los dos un poco contentos quedamos,él es mayor que yo tiene casi 60 años,pero tiene un rabazo grande y gordo. Cuando se da el caso me espera en casa con el rabo bien duro, yo llego y le hago un buen pajote y ahí sentado según me levanto me hace una buena mamada hasta que descargo todo en su boca
¿Puedo ser vuestro amigo? Jajajajaja
 
Mi primera vez fue con un casado. Yo conocía a su mujer. Sin decirle nada a ella nos vimos en un chalet de la costa que tienen. Allí puso una película porno gay que salía mucha leche en los actores. Eso nos puso calientes. Nos acostamos y yo se la chupe y el a mi. Después nos follamos mutuamente por turnos.el tiene un buena polla y yo una normal, se defiende. Lo bueno es que es de culo estrecho y mi polla ahí entra a matar. Su polla grande entra entera en mi culito sin problema y me hace gozar y gemir. Hemos ido muchas veces allí. Un día convenció a su mujer a venir con nosotros y al llegar alli ella empezó a chuparme la polla y los huevos mientras el la follaba , a continuación me puse detrás de el y lo penetre mientras el follaba a su mujer y así estuvimos un rato hasta que nos corrimos todos.
Seguimos viéndonos el y yo. Ella se divorcio. No por esto. Ya llevaban tiempo pensándolo. En la actualidad nos vemos y tenemos sexo el y yo o una vez hicimos un trio con otro tío. También nos envíos fotos de su chica actual y yo de mi mujer desnudas o semidesnudas y eso nos calienta mucho. El también me envía foto del coño y las tetas de sus hermanas bañados de su leche porque el se las está follando. A veces está con las dos juntas y les hace que se coman mutuamente el coño y la boca o el culo. También se las ha follado por el culo. Seguiré contando..
 
He dejado el coche algo apartado, ahora voy andando con el corazón a mil por hora, esta vez estoy decidido a hacerlo, desde hace unas semanas no hago más que pensar en ello, previamente al día de hoy he estado mirando páginas por Internet, informándome, buscando los sitios apropiados. En varias ocasiones me he acercado al lugar para ver el ambiente, para familiarizarme pero sin atreverme nunca a dar el paso, hoy por fin estoy decidido a hacerlo.

Hace calor, voy vestido con ropa informal, unos vaqueros y un polo de manga corta, mientras ando voy mirando a un lado y a otro para ver si hay alguien cerca, por fin veo a una persona al final del camino de tierra, está casi de espaldas y se protege del sol a la sombra de unos arbustos, también parece que los usa para medio ocultarse.

Me acerco despacio, con cautela, según llego veo que se gira, es un hombre algo mayor que yo, debe rondar los 60 años, yo estoy en los 54, lleva un chándal y un polo, es exactamente lo que busco, parece que estoy de suerte. Ahora solo necesito una señal. Le miro y me paro, no estoy seguro de que esté por lo mismo que yo, por fin hace un gesto, se acaricia la polla por encima del pantalón y me mira, asiento y me acerco, saludo con un educado buenas tardes, tengo el corazón que se me va a salir por la boca, ahora mismo no me siento excitado, tengo miedo.

El hombre me contesta con un hola, sigue acariciándose la polla por encima del pantalón, me mira y me dice que le siga, se aparta un poco del camino y nos quedamos a resguardo entre unos arbustos, de repente se saca la polla y empieza a masturbarse muy despacio. Tiene una polla gruesa, poderosa, mientras se masturba retira la piel del prepucio, le brilla, yo miro sus movimientos, sus gestos, con un hilo de voz le pregunto si quiere que le haga una paja, debo parecer idiota.

El hombre me mira y asiente mientras confirma con un si, deja de masturbarse y espera a que lo haga yo, adelanto la mano y toco su polla, es la primera vez en mi vida que toco otra polla. Está dura, me gusta el tacto empiezo a mover la mano por todo el tronco, le descapullo en cada vaivén, me gusta la sensación. Ahora se ha pasado el miedo y solo queda la excitación, estoy completamente empalmado y disfruto de la suavidad del miembro de este hombre en mi mano.

El hombre hace un gesto para tocarme la polla pero le paro con un no, le digo que solo quiero hacerle una paja, el me dice que se la chupe, le vuelvo a contestar con uno no y le digo de nuevo que solo quiero hacerle una paja, el hombre asiente y se deja hacer.

Tiene la polla dura como una roca, es más grande que la mía y me gusta la sensación, voy acelerando el ritmo, se me ha mojado la mano con líquido preseminal, no me da asco, me gusta porque además facilita la paja que le estoy haciendo. De repente veo como se acelera su respiración, me dice que se va correr, que soy su puta y que no pare, obedezco. No, no voy a parar, para eso he venido hasta aquí, para hacer que este hombre se corra, para sentir su polla en mi mano y ver los chorros de esperma salir.

Acelero la paja, el me anima, me insulta y me gusta, me llama su puta, me llama maricón y me dice que la próxima vez no me voy a librar de mamársela. Empieza a correrse, el primer chorro me pilla por sorpresa pero no paro, no quiero parar, ahora me siento poderoso, un chorro cae en mi pierna izquierda, la palma de mi mano se mancha con el semen. Sigo pajeándole hasta que ya no sale más. Saco un pañuelo y me limpio la mano, él me da las gracias, se mete la polla por dentro del pantalón y se va.

Termino de limpiarme la mano, tiro el pañuelo de papel y me voy hacia el coche, me monto, arranco, cuando ya me he alejado del lugar paro, salgo, me siento en la parte de atrás y me masturbo hasta correrme.
Me he visto tan reflejado en lo que cuentas que he visto reflejada mi vida en los últimos doce años. Estoy casado y no puedo definirme sexualmente, pero tengo muy claro que lo que más me gusta de todo el universo es un hombre con una buena polla.
Desde muy joven verle el pito a otro chico me ponía, nos juntábamos con otros más mayores que se la meneaban en grupo y nos llevaban para mirar, estaba deseando que ocurriera.
En todo esto empecé con lo que era más accesible, ahora os parecería extraño pero hace tantos años de esto que ver mear a alguien en algún rincón en la calle era bastante habitual, yo tenía algunos sitios controlados y sabía más o menos como hacerlo, si veía un tío mayor meando me acercaba para verle la polla, algunos se daban la vuelta y hacían amago de mearme encima. Un día le eché cara y me puse a mear al lado de uno, cuando saqué el pito me miro con una sonrisa, aún no me había bajado el prepucio y tenía el pito blanco, blanco, al lado de su polla color oscuro resultaba extraño; yo no le quitaba ojo y el pito se me puso duro, el se sacudió se quedó mirándome y me dijo si se la quería tocar, dije que si. Agarré aquello con mi mano y casi no la cogía del todo, sentí que latía y crecía, la punta era de color rosado y brillaba.
Me dijo si quería ir a su coche y accedí, nos alejamos un poco en un sitio apartado, me dijo que me bajase el pantalón, me daba un poco de vergüenza, accedí y quedo al descubierto mi polla tiesa sin descapullar, tuve un desarrollo tardío y tenía aún poco vello. Se sacó la polla con dos cojones llenos de pelos y me dijo que era para que aprendiese, se la empezó a menear y me dijo que me la metiese en la boca, me acerqué olía raro, con la mano hice lo mismo que él y empecé a masturbarlo, arriba abajo, arriba abajo, empecé a sentir cosas, no solo en mi pitó también en el culo...
Pd: seguiré, voy a contar especialmente el cómo me inicie, pero especialmente los últimos doce años que han sido la hostia.
 
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Me he visto tan reflejado en lo que cuentas que he visto reflejada mi vida en los últimos doce años. Estoy casado y no puedo definirme sexualmente, pero tengo muy claro que lo que más me gusta de todo el universo es un hombre con una buena polla.
Desde muy joven verle el pito a otro chico me ponía, nos juntábamos con otros más mayores que se la meneaban en grupo y nos llevaban para mirar, estaba deseando que ocurriera.
En todo esto empecé con lo que era más accesible, ahora os parecería extraño pero hace tantos años de esto que ver mear a alguien en algún rincón en la calle era bastante habitual, yo tenía algunos sitios controlados y sabía más o menos como hacerlo, si veía un tío mayor meando me acercaba para verle la polla, algunos se daban la vuelta y hacían amago de mearme encima. Un día le eché cara y me puse a mear al lado de uno, cuando saqué el pito me miro con una sonrisa, aún no me había bajado el prepucio y tenía el pito blanco, blanco, al lado de su polla color oscuro resultaba extraño; yo no le quitaba ojo y el pito se me puso duro, el se sacudió se quedó mirándome y me dijo si se la quería tocar, dije que si. Agarré aquello con mi mano y casi no la cogía del todo, sentí que latía y crecía, la punta era de color rosado y brillaba.
Me dijo si quería ir a su coche y accedí, nos alejamos un poco en un sitio apartado, me dijo que me bajase el pantalón, me daba un poco de vergüenza, accedí y quedo al descubierto mi polla tiesa sin descapullar, tuve un desarrollo tardío y tenía aún poco vello. Se sacó la polla con dos cojones llenos de pelos y me dijo que era para que aprendiese, se la empezó a menear y me dijo que me la metiese en la boca, me acerqué olía raro, con la mano hice lo mismo que él y empecé a masturbarlo, arriba abajo, arriba abajo, empecé a sentir cosas, no solo en mi pitó también en el culo...
Pd: seguiré, voy a contar especialmente el cómo me inicie, pero especialmente los últimos doce años que han sido la hostia.
Llevo toda la vida ocultando mis gustos, siempre a escondidas y en lugares lejos de mi entorno ya estando casado, escapadas esporádicas de varios días con alguna excusa, pero esos días no eran suficientes para satisfacerme en plenitud y encontrar machos no era tan fácil, así que mis gustos los traté de desviar hacia el voyerismo y el exhibicionismo (de esta época no puedo contar nada (solo privado) pero ya me gustaría), me dio muchas satisfacciones y otro número de inclinaciónes que desconocía, digamos que me fui formando en menesteres que me produjesen placer. Decidí ampliar mi zona de trabajo y cada vez pasaba más tiempo fuera de casa, eso me empezó a permitir tener relaciones con otros hombres cada vez más frecuentes y las relaciones con mi mujer más infrecuentes.
Pero el culmen de todo esto llego de forma que no esperaba. Por causas que no voy a contar aquí, me traslade a una ciudad que reunía todo lo que esperaba de ella, tres meses sin hacer nada me llevaron a buscar más profundamente en mi mismo. Empecé a utilizar cositas de mujer; braguitas y medias me había puesto muchas veces, pero nunca en público, bueno si, en alguna playa, así que me dije que tenía que probar, empecé a observar donde algunas chicas de vida alegre se buscaban la vida y decidí hacer lo mismo, pero primero tenía que ponerme a prueba, me compre unas braguitas, unas medias y un pantaloncito negro corto que llevaba una puntillita negra casi imperceptible, una faldita corta y una blusita, sin sujetador.
Esa ciudad tiene un enorme río donde te puedes pasear por sus orillas, que se sitúan debajo de los puentes y a la hora del mediodía solo te puedes encontrar algún pescador y escasos paseantes. Lugar idóneo para ponerme el pantaloncito y la blusa con un pañuelo pirata en la cabeza, aquello me excitó de enorme manera, desconocía el resultado de aquella travestizacion y sentía un poco de miedo, un bolso unisex en bandolera y empecé a caminar, era verano y hacía muchísimo calor, la blusa por fuera y abierta, no tengo vello en el pecho y al ser muy delgado casi pasaba desapercibido, me encontré con algunos pasantes que apenas se fijaron en mi indumentaria. Subí las escaleras hasta la parte superior del río para acceder a uno de los puentes, me cruce con bastante gente que iba y venía, llevaba unas gafas de sol y no percibí ni una sola mirada de extrañeza; me sentía bien y pensaba en mi mujer, qué diría si pudiese verme, aquel pensamiento me excitó.
Cruce el puente y me senté en la primera terraza que encontré, tratando de dejar clara mi orientación sexual sin exceso; dos chicas no dejaban de observarme, mi lado exhibicionista se dejó entrever, el pantalón de un tejido finísimo muy similar al de las enaguas dejó ver mi pene en ereccion, lo cual le produjo una sonrisa y a mi una enorme excitacion, que me viesen así me ponía muchísimo.
Ya en el piso preparé todo para salir aquella noche, medias con liguero, braguita, faldita y una peluca corta de media melena, me sentía la reina de la noche, en aquel momento desconocía lo que vendría después, me pinté los labios, un poco de maquillaje y de noche nadie me tomaría en cuenta.
Me fui sobre las once de la noche a una plaza donde había una rotonda con un arco en medio, todo el entorno era como una especie de parque. Había alguna mujer sentada en los bancos, presumiblemente prostitutas que iban a lo suyo, yo me quedé de pie esperando ver que sucedía, transcurrió una media hora y un coche se paró a mi altura, soy muy delgada pero se ve que no soy una chica; bajó la ventanilla y me pidió que subiese, al sentarme, la faldita apenas tapaba mis braguita, dejando ver el ligero y por ende mi pene, no apartaba los ojos de la entrepierna, me preguntó cuanto cobraba. Aquello me descolocó, di una cifra y arrancó el coche, me llevo hasta un hostal cercano y subimos a una habitación. Nada más entrar se puso de rodillas, metió su cabeza en mi entrepierna y comenzó a besarme, se metió en la boca toda mi polla besándome los testículo, me empujó hacia la cama y caí con las piernas abiertas, me arranco las bragas de un tiron metiendome la lengua en el culo, después me penetró de manera salvaje llenandome el coño de leche.
Durante dos meses estuve yendo a aquella rotonda, noche por noche, me hicieron de todo, no se con los que me pude a acostar pero fueron muchos, todos tíos por los que cualquiera hubiese puesto la mano en el fuego.
Nunca más pude volver atrás, aquel juego era mi vida para sentirme bien.



 
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Yo tengo tres amigos y los voy viendo según tenga tiempo. Hay uno que nos follamos mutuamente y le gusta acabar en mi boca y echa mucha leche y me la trago toda. Otro amigo nos chupamos las pollas y luego me folla y el otro es solo pasivo y cuando me lo he follado como quiero polla en mi culo me mete un consolador y me lo mueve gasta que me corro de gusto.
 
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