Sombras de Engaño

Corelli

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22 Jun 2023
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1.

Conocí a Johana (quien actualmente es mi esposa) en la universidad. Ambos teníamos 18 años en ese momento. Nos llevamos bien desde nuestro primer encuentro y en cuestión de semanas de comenzar a salir, nos decíamos “Te amo”. Ella fue la que empezó mostrando iniciativa y estoy muy orgulloso de que lo hiciera, pues a mí me cuesta dar el primer paso. Compartimos nuestras inseguridades más profundas y secretos el uno con el otro. Y cuando su padre falleció en su último año de universidad, estuve allí para ella durante todo el proceso. Su padre tenía cáncer de páncreas. Y cuando él fue hospitalizado, pasaba las noches en el hospital con ella para que no estuviera sola. Lo superamos juntos. Ese momento fortaleció nuestro vínculo. Ella me dijo que no sabía qué hubiera hecho si yo no hubiera estado allí para ella. Me llamaba su alma gemela. Sabía que iba a casarme con esta chica, y efectivamente, le hice la propuesta unos dos años después de graduarnos. En ese momento, la vida no podía ser mejor para mí; me casé con la chica de mis sueños, conseguí un trabajo bien remunerado inmediatamente después de graduarme, y ambas familias nos amaban.

Mi mejor amigo, David, él y yo teníamos lo que solo puedo describir como un lazo fraternal irrompible, o eso pensaba. Nos conocíamos desde el tercer grado y él era el hermano que nunca tuve. También estaba casado y se mudó con su esposa porque ella consiguió un trabajo lucrativo en un bufete de abogados importante. Hace aproximadamente un año, su esposa murió en un accidente automovilístico, y eso lo destrozó. Regresó a nuestra ciudad natal después, pero ya no era el mismo. Intenté estar allí para él, pero él no se abría con nadie. Nadie entendía el dolor que atravesaba. Así que pensé que mi esposa si podía hablar con él, considerando que ella también había perdido a un ser querido y tal vez David podría relacionarse mejor con alguien que había pasado por algo similar.

Es importante mencionar que David y Johana nunca se habían llevado bien. Esto se debía a que Johana pensaba que él era un imbécil. Antes de casarse con su esposa, David saltaba de relación en relación, e incluso después de estar con su difunta esposa, constantemente le era infiel. Como resultado, Johana sentía un profundo desprecio por él y siempre cuestionaba cómo podía ser amigo de alguien con tan bajos valores morales.

—Lamento mucho lo que le pasó a David, pero él y yo nunca fuimos cercanos. Sabes que nunca me agradó —se cruzaba de brazos mi esposa.

—Lo sé cariño. Es solo que me duele verlo así y pensé que quizás tu sabrías como ayudarlo a pasar por esto, ya qué tú… bueno, ya sabes por lo que has pasado.

—Lo pensaré, pero no prometo nada —terminó de decir Johana.

Entonces hicimos nuestra primera visita a mi mejor amigo. Su casa seguía siendo un desastre y David se la pasaba acostado. Mi esposa se ofreció a limpiar y hacer algo de buena comida. Al parecer David se había estado alimentando a base de pura comida chatarra al ver los cartones de pizzas y otros alimentos de comida rápida.

—Está peor de lo que pensé —dijo Johana compadeciéndose.

Y así, comenzamos a dar una vuelta por la casa de David cada fin de semana. Cada que nos íbamos, mi amigo nos rogaba que no nos fuéramos, que, al estar solo, empezaba a sentirse muy mal. Por las noches no podía dormir, sus pensamientos se apoderaban de él atormentándolo. Como yo no podía visitarlo entresemana, mi esposa se ofreció a ir checar como estaba entresemana. No puedo negar que me incomodo al principio la idea, pero era por el bien de mi mejor amigo.

Mi esposa pasaba horas en su casa estuviera yo o no. Salían de excursión juntos, veían películas y no me invitaban, almorzaban juntos, todas las cosas que hacen las parejas. Obviamente, esto fue una interacción mucho más intensa de lo que tenía previsto y me incomodaba, pero David estaba mejorando mucho gracias a ello. Me tranquilizaba un poco saber que Johana sabía que clase de hombre era David y el desprecio que le llegó a tener por haber sido un mujeriego.

Johana y David se volvieron inseparables, al punto de que ella lo invitaba a cosas que yo había planeado para nosotros como pareja. Mi esposa pasaba mucho tiempo viendo su teléfono, se volvía cada vez más distante, había poca o ninguna intimidad.

—Es el segundo día seguido que llegas tarde a casa —le recriminaba a Johana al verla llegar.

—Lo sé cariño, pero me es difícil dejar a David en ese estado. Ya sabes como se deprime cuando nos vamos.

—Sí Johana, pero tampoco es tu responsabilidad estar para él todo tiempo.

—No sé porque te molestas, tú fuiste la que me animó a ayudarlo, cuando lo veo a él me recuerda a mí, pasar por esa situación… bueno, ya no quiero hablar de eso.

Mi esposa se subió al cuarto y dimos por cerrada la conversación. Hablar de la muerte de su padre era un tema delicado, que hasta el día de hoy no ha podido superar.

Un día ella estaba enviando mensajes de texto y le pregunté con quién estaba hablando. Ella dijo que era una de sus amigas y cuando le pedí ver lo que estaban diciendo, se mostró muy irritada y me llamó posesivo. Cuando hablé con David sobre lo incómodo que me hacía su "amistad", me aseguró que no había nada e incluso me acusó de no confiar en él ni en mi propia esposa.

No sabía bien como sentirme. Por una parte, me alegraba que David comenzara a recuperarse, pero por otra, no podía evitar sentir celos. ¿Acaso eran mis inseguridades? Quizá le estaba dando muchas vueltas a todo esto, así que me puse a ver una película para distraerme mientras esperaba el regreso de mi mujer.

Cuando Johana llegó, tenía en mi mente los diálogos de las cosas que me gustaría discutir con ella, había tenido tiempo suficiente para repasarlos, pero cuando abrí la puerta, mi esposa se lanzó sobre mi besándome.

—Johana para… ¿qué es lo que te pasa?

—¿Qué? ahora no puedo besar a mi esposo —dijo sonriéndome.

—Sí… es solo que me parece raro. Quería hablar…

Johana interrumpió lo que iba a decir abalanzándose sobre mí. Se pegó a mi pecho y me encerró con sus piernas, buscando todo el tiempo el contacto con mis labios.

—Me he dado cuenta de que he sido una tonta contigo —me desabrocha los botones de mi camisa— olvidé que tú también tienes tus necesidades.

No necesitaba mucho para encenderme, llevaba tiempo sin hacerlo, así que la tomé del culo y la llevé hacía la habitación. Mientras nos besamos le quité rápidamente su blusa y pantalón. No llevaba ropa interior y su coño estaba visiblemente chorreando, por lo que mi polla entró con suma facilidad. Tuvimos una buena noche de sexo, como en nuestros mejores años.

Pensé que las cosas volverían a la normalidad. Qué volveríamos a tener sexo con cierta regularidad y que pasaríamos más tiempo en pareja, pero no fue así. Ella seguía llegando tarde a casa, pasaba más tiempo con David que conmigo y las discusiones no se hicieron esperar.

Esto continuó hasta que un día Johana salió de nuevo. Dijo que iba a visitar a su hermana durante el fin de semana porque necesitaba espacio de mí, ya que la estaba volviendo loca con mis acusaciones. Aún desconfiaba mucho, por lo que llamé a su hermana para confirmar si realmente esperaba la visita de Johana. Ella confirmó que sí, pero que Johana aún no había llegado. Cabe mencionar que mi esposa se había ido alrededor de las 3 de la tarde y el lugar de su hermana está a unas 4 horas de distancia de donde vivimos. Ahora eran las 10 de la noche. Algo en mi interior me dijo que fuera a la casa de mi amigo, así que lo hice. Y efectivamente, el auto de mi esposa estaba estacionado a unos metros de la casa de mi amigo. En ese momento estaba claro como el día lo que estaba sucediendo. Lagrimas empezaban a salir de mis ojos, no sé si de tristeza o de rabia.

Después de unos minutos de respiración profunda, me armé de valor y decidí entrar a ver si lo que pensaba era lo que realmente estaba sucediendo. Entré por la puerta trasera, que sabía que estaría abierta. Entré sigilosamente y pude escuchar a mi esposa reír a lo lejos. Estaba temblando. Cuando llegué a la puerta de su habitación, pude ver a través de una rendija. Mi esposa, con la lencería de encaje negra que había usado en nuestro aniversario, sentada sobre el regazo de David, quien solo estaba en calzoncillos y con un bulto pronunciado. Se besaban como dos adolescentes buscando el contacto a todo momento. Las manos de mi amigo se paseaban por el culo de mi mujer para luego recorrer sus muslos. En ocasiones separaban sus bocas y podía ver la saliva que chorreaba de sus bocas.

Me sentía colapsado, las emociones me estaban desbordando. Estaba bloqueado, realmente bloqueado. David en una sola maniobra le quita el sujetador. Pasó su lengua por uno de los pezones de Johana, quien, al ser muy sensible en esa área, no pudo evitar mirar hacia arriba soltando un gemido de placer.

Mi esposa se aparta, mientras él se quita sus calzoncillos revelando su polla flácida meneándola con su mano. No ocupó hacerle una seña, Johana automáticamente se arrodilló y comenzó a mamarle la polla. Cuando estuvo completamente erecta, ambos se levantaron. Johana con sus tacones se inclinó sobre una mesita de noche entregándole el culo a David, quién simplemente apartó un poco su tanga, y sin quitársela, introdujo levente su polla.

— Ufff sí… —gemía mi esposa.

David se movía lentamente en círculos mientras la penetraba, con una mano en su cadera y otra en su cabello jalando la cabeza de mi mujer hacia atrás.

—Mmm sí… así… sigue lento… ahh

Así estuvieron en un ritmo lento, hasta que David empezó a embestirla rápidamente. Ya no eran gemidos sino gritos de placer lo que provenía de la boca de mi mujer. Jamás la había visto así conmigo. A mi rara vez me daba una mamada de polla, además nunca lo hacía después de haber pasado mi polla dentro de su coño, porque le parecía grotesco y sin embargo… ahí estaba, dándole una segunda mamada de campeonato a su amante para que se pudiera correr. Nunca olvidaré esa imagen.

Empujé la puerta de par en par y ambos se quedaron inmóviles, mirándome. Me costó mucho contenerme para no golpear a David hasta dejarlo sin vida. Simplemente me alejé y entré en mi auto. Podía escuchar cómo se apresuraban y mi esposa empezó a gritarme que me detuviera. No quería mirarla. No sé qué habría hecho, así que simplemente me fui conduciendo. Lloré durante todo el camino a casa y ambos me inundaron de llamadas. Apagué el celular y me dirigí rumbo a casa de uno de mis amigos de la universidad, donde he permanecido hasta ahora.

No he podido comer, dormir y no puedo pensar en nada más. Informé a mi trabajo sobre lo que está sucediendo y fueron lo suficientemente amables como para darme tiempo libre. He estado recibiendo llamadas telefónicas tanto de David como de Johana, así como de nuestras familias. Les informé a mi familia que estoy bien y que regresaré pronto, pero no he respondido a nadie más desde entonces. Esto duele. Mucho. Quiero morir. Quiero desaparecer de este mundo, pero soy demasiado cobarde para hacerlo yo mismo. Estoy tratando de ser fuerte, pero mi determinación está tambaleándose. ¿Cómo puede alguien a quien amé tan desinteresadamente hacer esto? No sé qué hacer.
 
Última edición:
Xuuuuuta, yo le habría sacado hasta el alma al amigo, ese desgraciado no es amigo de nadie y a la mujer chao de una, que recoja sus cosas de la casa y adios, muy bueno el relato de un engaño que no tiene nombre, con amigos así mejor son los perros. (y)(y)(y)
 
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Conocí a Johana (quien actualmente es mi esposa) en la universidad. Ambos teníamos 18 años en ese momento. Nos llevamos bien desde nuestro primer encuentro y en cuestión de semanas de comenzar a salir, nos decíamos “Te amo”. Ella fue la que empezó mostrando iniciativa y estoy muy orgulloso de que lo hiciera, pues a mí me cuesta dar el primer paso. Compartimos nuestras inseguridades más profundas y secretos el uno con el otro. Y cuando su padre falleció en su último año de universidad, estuve allí para ella durante todo el proceso. Su padre tenía cáncer de páncreas. Y cuando él fue hospitalizado, pasaba las noches en el hospital con ella para que no estuviera sola. Lo superamos juntos. Ese momento fortaleció nuestro vínculo. Ella me dijo que no sabía qué hubiera hecho si yo no hubiera estado allí para ella. Me llamaba su alma gemela. Sabía que iba a casarme con esta chica, y efectivamente, le hice la propuesta unos dos años después de graduarnos. En ese momento, la vida no podía ser mejor para mí; me casé con la chica de mis sueños, conseguí un trabajo bien remunerado inmediatamente después de graduarme, y ambas familias nos amaban.

Mi mejor amigo, David, él y yo teníamos lo que solo puedo describir como un lazo fraternal irrompible, o eso pensaba. Nos conocíamos desde el tercer grado y él era el hermano que nunca tuve. También estaba casado y se mudó con su esposa porque ella consiguió un trabajo lucrativo en un bufete de abogados importante. Hace aproximadamente un año, su esposa murió en un accidente automovilístico, y eso lo destrozó. Regresó a nuestra ciudad natal después, pero ya no era el mismo. Intenté estar allí para él, pero él no se abría con nadie. Nadie entendía el dolor que atravesaba. Así que pensé que mi esposa si podía hablar con él, considerando que ella también había perdido a un ser querido y tal vez David podría relacionarse mejor con alguien que había pasado por algo similar.

Es importante mencionar que David y Johana nunca se habían llevado bien. Esto se debía a que Johana pensaba que él era un imbécil. Antes de casarse con su esposa, David saltaba de relación en relación, e incluso después de estar con su difunta esposa, constantemente le era infiel. Como resultado, Johana sentía un profundo desprecio por él y siempre cuestionaba cómo podía ser amigo de alguien con tan bajos valores morales.

—Lamento mucho lo que le pasó a David, pero él y yo nunca fuimos cercanos. Sabes que nunca me agradó —se cruzaba de brazos mi esposa.

—Lo sé cariño. Es solo que me duele verlo así y pensé que quizás tu sabrías como ayudarlo a pasar por esto, ya qué tú… bueno, ya sabes por lo que has pasado.

—Lo pensaré, pero no prometo nada —terminó de decir Johana.

Entonces hicimos nuestra primera visita a mi mejor amigo. Su casa seguía siendo un desastre y David se la pasaba acostado. Mi esposa se ofreció a limpiar y hacer algo de buena comida. Al parecer David se había estado alimentando a base de pura comida chatarra al ver los cartones de pizzas y otros alimentos de comida rápida.

—Está peor de lo que pensé —dijo Johana compadeciéndose.

Y así, comenzamos a dar una vuelta por la casa de David cada fin de semana. Cada que nos íbamos, mi amigo nos rogaba que no nos fuéramos, que, al estar solo, empezaba a sentirse muy mal. Por las noches no podía dormir, sus pensamientos se apoderaban de él atormentándolo. Como yo no podía visitarlo entresemana, mi esposa se ofreció a ir checar como estaba entresemana. No puedo negar que me incomodo al principio la idea, pero era por el bien de mi mejor amigo.

Mi esposa pasaba horas en su casa estuviera yo o no. Salían de excursión juntos, veían películas y no me invitaban, almorzaban juntos, todas las cosas que hacen las parejas. Obviamente, esto fue una interacción mucho más intensa de lo que tenía previsto y me incomodaba, pero David estaba mejorando mucho gracias a ello. Me tranquilizaba un poco saber que Johana sabía que clase de hombre era David y el desprecio que le llegó a tener por haber sido un mujeriego.

Johana y David se volvieron inseparables, al punto de que ella lo invitaba a cosas que yo había planeado para nosotros como pareja. Mi esposa pasaba mucho tiempo viendo su teléfono, se volvía cada vez más distante, había poca o ninguna intimidad.

—Es el segundo día seguido que llegas tarde a casa —le recriminaba a Johana al verla llegar.

—Lo sé cariño, pero me es difícil dejar a David en ese estado. Ya sabes como se deprime cuando nos vamos.

—Sí Johana, pero tampoco es tu responsabilidad estar para él todo tiempo.

—No sé porque te molestas, tú fuiste la que me animó a ayudarlo, cuando lo veo a él me recuerda a mí, pasar por esa situación… bueno, ya no quiero hablar de eso.

Mi esposa se subió al cuarto y dimos por cerrada la conversación. Hablar de la muerte de su padre era un tema delicado, que hasta el día de hoy no ha podido superar.

Un día ella estaba enviando mensajes de texto y le pregunté con quién estaba hablando. Ella dijo que era una de sus amigas y cuando le pedí ver lo que estaban diciendo, se mostró muy irritada y me llamó posesivo. Cuando hablé con David sobre lo incómodo que me hacía su "amistad", me aseguró que no había nada e incluso me acusó de no confiar en él ni en mi propia esposa.

No sabía bien como sentirme. Por una parte, me alegraba que David comenzara a recuperarse, pero por otra, no podía evitar sentir celos. ¿Acaso eran mis inseguridades? Quizá le estaba dando muchas vueltas a todo esto, así que me puse a ver una película para distraerme mientras esperaba el regreso de mi mujer.

Cuando Johana llegó, tenía en mi mente los diálogos de las cosas que me gustaría discutir con ella, había tenido tiempo suficiente para repasarlos, pero cuando abrí la puerta, mi esposa se lanzó sobre mi besándome.

—Johana para… ¿qué es lo que te pasa?

—¿Qué? ahora no puedo besar a mi esposo —dijo sonriéndome.

—Sí… es solo que me parece raro. Quería hablar…

Johana interrumpió lo que iba a decir abalanzándose sobre mí. Se pegó a mi pecho y me encerró con sus piernas, buscando todo el tiempo el contacto con mis labios.

—Me he dado cuenta de que he sido una tonta contigo —me desabrocha los botones de mi camisa— olvidé que tú también tienes tus necesidades.

No necesitaba mucho para encenderme, llevaba tiempo sin hacerlo, así que la tomé del culo y la llevé hacía la habitación. Mientras nos besamos le quité rápidamente su blusa y pantalón. No llevaba ropa interior y su coño estaba visiblemente chorreando, por lo que mi polla entró con suma facilidad. Tuvimos una buena noche de sexo, como en nuestros mejores años.

Pensé que las cosas volverían a la normalidad. Qué volveríamos a tener sexo con cierta regularidad y que pasaríamos más tiempo en pareja, pero no fue así. Ella seguía llegando tarde a casa, pasaba más tiempo con David que conmigo y las discusiones no se hicieron esperar.

Esto continuó hasta que un día Johana salió de nuevo. Dijo que iba a visitar a su hermana durante el fin de semana porque necesitaba espacio de mí, ya que la estaba volviendo loca con mis acusaciones. Aún desconfiaba mucho, por lo que llamé a su hermana para confirmar si realmente esperaba la visita de Sue. Ella confirmó que sí, pero que Johana aún no había llegado. Cabe mencionar que mi esposa se había ido alrededor de las 3 de la tarde y el lugar de su hermana está a unas 4 horas de distancia de donde vivimos. Ahora eran las 10 de la noche. Algo en mi interior me dijo que fuera a la casa de mi amigo, así que lo hice. Y efectivamente, el auto de mi esposa estaba estacionado a unos metros de la casa de mi amigo. En ese momento estaba claro como el día lo que estaba sucediendo. Lagrimas empezaban a salir de mis ojos, no sé si de tristeza o de rabia.

Después de unos minutos de respiración profunda, me armé de valor y decidí entrar a ver si lo que pensaba era lo que realmente estaba sucediendo. Entré por la puerta trasera, que sabía que estaría abierta. Entré sigilosamente y pude escuchar a mi esposa reír a lo lejos. Estaba temblando. Cuando llegué a la puerta de su habitación, pude ver a través de una rendija. Mi esposa, con la lencería de encaje negra que había usado en nuestro aniversario, sentada sobre el regazo de David, quien solo estaba en calzoncillos y con un bulto pronunciado. Se besaban como dos adolescentes buscando el contacto a todo momento. Las manos de mi amigo se paseaban por el culo de mi mujer para luego recorrer sus muslos. En ocasiones separaban sus bocas y podía ver la saliva que chorreaba de sus bocas.

Me sentía colapsado, las emociones me estaban desbordando. Estaba bloqueado, realmente bloqueado. David en una sola maniobra le quita el sujetador. Pasó su lengua por uno de los pezones de Johana, quien, al ser muy sensible en esa área, no pudo evitar mirar hacia arriba soltando un gemido de placer.

Mi esposa se aparta, mientras él se quita sus calzoncillos revelando su polla flácida meneándola con su mano. No ocupó hacerle una seña, Johana automáticamente se arrodilló y comenzó a mamarle la polla. Cuando estuvo completamente erecta, ambos se levantaron. Johana con sus tacones se inclinó sobre una mesita de noche entregándole el culo a David, quién simplemente apartó un poco su tanga, y sin quitársela, introdujo levente su polla.

— Ufff sí… —gemía mi esposa.

David se movía lentamente en círculos mientras la penetraba, con una mano en su cadera y otra en su cabello jalando la cabeza de mi mujer hacia atrás.

—Mmm sí… así… sigue lento… ahh

Así estuvieron en un ritmo lento, hasta que David empezó a embestirla rápidamente. Ya no eran gemidos sino gritos de placer lo que provenía de la boca de mi mujer. Jamás la había visto así conmigo. A mi rara vez me daba una mamada de polla, además nunca lo hacía después de tener mi polla dentro de su coño, porque le parecía grotesco y sin embargo… ahí estaba, dándole una mamada de campeonato a su amante para que pudiese correrse. Nunca olvidaré esa imagen.

Empujé la puerta de par en par y ambos se quedaron inmóviles, mirándome. Me costó mucho contenerme para no golpear a David hasta dejarlo sin vida. Simplemente me alejé y entré en mi auto. Podía escuchar cómo se apresuraban y mi esposa empezó a gritarme que me detuviera. No quería mirarla. No sé qué habría hecho, así que simplemente me fui conduciendo. Lloré durante todo el camino a casa y ambos me inundaron de llamadas. Apagué el celular y me dirigí rumbo a casa de uno de mis amigos de la universidad, donde he permanecido hasta ahora.

No he podido comer, dormir y no puedo pensar en nada más. Informé a mi trabajo sobre lo que está sucediendo y fueron lo suficientemente amables como para darme tiempo libre. He estado recibiendo llamadas telefónicas tanto de David como de Johana, así como de nuestras familias. Les informé a mi familia que estoy bien y que regresaré pronto, pero no he respondido a nadie más desde entonces. Esto duele. Mucho. Quiero morir. Quiero desaparecer de este mundo, pero soy demasiado cobarde para hacerlo yo mismo. Estoy tratando de ser fuerte, pero mi determinación está tambaleándose. ¿Cómo puede alguien a quien amé tan desinteresadamente hacer esto? No sé qué hacer.
Muy muy bueno el relato pero, si ahí termina, debo decirte que me desilusionaría, por que a esta historia aun le falta mucho jugo o eso pienso yo.

No sé puede perdonar algo así, en primera por que tu lo hiciste por su bien, en segunda, y la más importante, xq no fue solo 1 vez, ella te humillaba diariamente al hacer cosas como las que viste con el que contigo no, a ti te dejo de lado, me atrevo a decir que el día que ella llegó caliente y sin ropa interior y con la panocha mijoda, era por que ese día había cogido con el, pero no era ese el primero, me atrevo a sugerir qué fue por 2 razones, para dejarte tranquo un rato y dejaras de sospechar (aun así que baje y humillación, hacerlo contigo cusndo recién venía de hacerlo con otro) y la 2, esta embarazada de el y para poder blanquearlo se acosto contigo para que las fechas coincidieran.

En definitiva algo así no se perdona, es más nk siquiera vale la pena hablar con ella para que "se explique" es sensillo lo que pasó, el es alguien guapo y tanto tiempo paso con el que ese gusto escamo a deseo y al final en sexo, sexo qué no fue solo 1 vez y por lo tanto, no allí a la frase "fue un error" por que error hubiera sido solo 2 vez, pero por lo que viste esa no era la 1 vez y no iba a ser la última.


Espero puedas feponefer a mi siguiente pregunta, habrá 2 parte?

Excelente autor!
 
Se supone que la historia continuará,no?
Yo no es por ser negativo, pero esto demuestra que en este mundo no te puedes fiar de nadie.
Hay que ser miserable y ruin para, encima de ayudarte a superar una tragedia, como lo agradece?. Acostándose con su mujer. Y ella menuda sinvergüenza está hecha.
Evidentemente, esto debe darlo por finiquitado y pedirle el divorcio. Y nada de pensar en suicidarse. La vida sigue y hay más mujeres en este mundo.
El relato tiene más recorrido y así espero que tenga algún capítulo más.
 
Sería desilusionante que fuera hasta ahí no más, pues da para más y como dice Tony esto no tiene perdón, esto si que no tiene perdón y es una traición de ambos, su amigo le baja a la mujer y esta se deja hacer de todo, por eso llegó candente y fue porque el marido fue a hablar con David y preguntarle si estaba pasando algo o no y este lo negó y en la tarde pasa que la mujer llega contenta y se le tira de inmediato a los brazos, eso fue porque David le contó lo que había pasado con el marido y debe haberle dicho que se dejara hacer por el marido para que no sospechara, yo, yo me iría donde David y le daría con todo hasta que me diera hipo y luego voy a casa y mando a la mujer a la mierda pero de una.
 
Muy muy bueno el relato pero, si ahí termina, debo decirte que me desilusionaría, por que a esta historia aun le falta mucho jugo o eso pienso yo.

No sé puede perdonar algo así, en primera por que tu lo hiciste por su bien, en segunda, y la más importante, xq no fue solo 1 vez, ella te humillaba diariamente al hacer cosas como las que viste con el que contigo no, a ti te dejo de lado, me atrevo a decir que el día que ella llegó caliente y sin ropa interior y con la panocha mijoda, era por que ese día había cogido con el, pero no era ese el primero, me atrevo a sugerir qué fue por 2 razones, para dejarte tranquo un rato y dejaras de sospechar (aun así que baje y humillación, hacerlo contigo cusndo recién venía de hacerlo con otro) y la 2, esta embarazada de el y para poder blanquearlo se acosto contigo para que las fechas coincidieran.

En definitiva algo así no se perdona, es más nk siquiera vale la pena hablar con ella para que "se explique" es sensillo lo que pasó, el es alguien guapo y tanto tiempo paso con el que ese gusto escamo a deseo y al final en sexo, sexo qué no fue solo 1 vez y por lo tanto, no allí a la frase "fue un error" por que error hubiera sido solo 2 vez, pero por lo que viste esa no era la 1 vez y no iba a ser la última.


Espero puedas feponefer a mi siguiente pregunta, habrá 2 parte?

Excelente autor!
Habrá segunda parte. Saludos
 
Es que tiene tela.
O sea el está con ella en sus peores momentos, le pide que ayude a su amigo, al cual detecta, y al final lo traiciona de la peor forma teniendo sexo con ese sinvergüenza, que vaya basura de amigo está hecho.
Lo mejor es que rompa su amistad con ese impresentable, se divorcie de ella y siga con su vida.
Le costará un tiempo superarlo, pero seguro que lo consigue.
 
Es que tiene tela.
O sea el está con ella en sus peores momentos, le pide que ayude a su amigo, al cual detecta, y al final lo traiciona de la peor forma teniendo sexo con ese sinvergüenza, que vaya basura de amigo está hecho.
Lo mejor es que rompa su amistad con ese impresentable, se divorcie de ella y siga con su vida.
Le costará un tiempo superarlo, pero seguro que lo consigue.
Es lo que pienso, además debe antes sacarle hasta el alma a su ex amigo y luego ir donde la mujer sacarle toda la ropa y tirársela a la calle por infeliz e infiel cuyo nombre no se lo va a sacar en todo la vida, cuando alguien es infiel
 
2.

Recibí un correo de Johana al día siguiente.

Sé que necesitas tu espacio ahora mismo y soy la ultima persona con la que quisieras hablar, pero no puedo evitarlo. Me estoy volviendo loca. Nunca quise que nada de esto sucediera. Eres la última persona a la que quisiese lastimar. Saber que te he causado todo ese dolor y sufrimiento ha sido un infierno para mí. Duele, pero sé que tú estás sufriendo más.

Mi relación con David comenzó de forma inocente. Nunca tuve intenciones de llegar tan lejos como lo hice. Simplemente pasó. No voy a mentirte y decirte que aquella vez fue la primera vez que pasó. Tuvimos relaciones varias veces, como estoy segura que ya sabes. Siempre lo supiste, o al menos, sospechaste. Eres un hombre muy listo y es una de las cosas que adoro de ti. Mi relación con David solo fue intima una semana antes de que te enteraras. El resto del tiempo solo fue emocional. Conectamos a un nivel más profundo del que hubiera esperado y las cosas solo escalaron desde ahí. Sé que nos acercaste con la mejor de las intenciones. Eres la persona más bondadosa que he conocido y no sé como empezar a describir cuanto siento lo que te he hecho. Nunca olvidaré el dolor que vi en tus ojos cuando nos encontraste y voy a vivir con esa culpa por el resto de mi vida. Tengo sentimientos por David que no voy a negar, pero esos sentimientos no son tan fuertes como los que tengo por ti. TE AMO DEMASIADO, TU ERES MI ALMA GEMELA, MI TODO. Sé que lo que hice dice otra cosa, pero es la verdad. No cuestiones mi amor por ti, es real. La parte de nuestra relación siempre ha sido real. No sé porque lo hice. Creo que fue la emoción de algo nuevo y el tabú de la situación, tan frio como suena. No estoy tratando de lastimarte cuando lo digo. Solo estoy tratando de ser honesta. Realmente no sé porque te haría algo así. Soy una vil y egoísta persona. No lo puedo negar. Hice algo imperdonable y solo puedo pedir por perdón. Así de egoísta soy. Soy una hipócrita y lo sé. Tienes toda la razón para odiarme y nadie te puede culpar por eso. Quería decir que lo que hice no tiene nada que ver contigo. No fue para nada tu culpa. David y yo sacamos ventaja de tu amabilidad y realmente lo siento. ENSERIO. él también lo está. Hay muchas cosas que quisiera decirte, pero tiene que ser en persona. Tomate el tiempo que quieras. Pero PORFAVOR. Te lo ruego Raúl. Dame la oportunidad de hacer esto bien, por favor, ven a casa.

TE AMO.


No sé qué pensar al respecto. Hay muchos más de ese tipo de correos electrónicos, pero este en particular me dejó confundido. Definitivamente no conozco a la persona con la que me casé.

En otro de sus correos electrónicos, ella dijo que nunca me iba a dejar por David. Tiene sentimientos por él, pero no lo ama. ¿Eh? Supuestamente, David se va pronto, pero al parecer está retrasando su partida hasta que hable conmigo en persona.

Como muchos familiares y amigos me sugirieron, contacté a un abogado y me reuní con ella ayer. Le di todos los detalles y parece estar muy motivada para ayudarme a salir de esto lo más financieramente completo posible, dadas las circunstancias. Todavía amo profundamente a mi esposa, pero no sé si puedo superar esto. Recibí muchos mensajes de David también, pero no quiero leerlos. Cambio constantemente entre la tristeza y la rabia y no sé cómo sentirme en este momento.

¿Debería intentar ver si es posible la reconciliación o simplemente terminar este matrimonio ahora y ahorrarme más dolor? Mi familia sabe todo. Al parecer, Johana confesó lo que había hecho a todos. He estado alejado de todos durante más de dos semanas y todavía no sé qué hacer. El dolor sigue sintiéndose fresco. Cada vez que cierro los ojos, no puedo ver nada más que a Johana y David juntos, y el dolor parece no disminuir.

Muchos me dicen que simplemente me divorcie, y yo diría lo mismo también, pero las cosas no son tan simples cuando eres el que está en esta situación. Con toda esta nueva información. ¿Es siquiera posible superar esto?

Me dijeron tanto ella como familiares y amigos que Johana ha estado viviendo con su hermana en las últimas semanas. En uno de sus correos electrónicos, ella explicó que solo habló con David una vez desde que me enteré y cortó toda comunicación con él. Su madre me llamó y se disculpó por el comportamiento de su hija a través de un mensaje de texto. No contesté sus llamadas. Ella dijo que Johana está en terapia individual en este momento.

Hay muchas otras cosas que no he abordado y probablemente estoy dejando algunos detalles fuera, pero algunos de mis familiares y amigos están diciendo que simplemente debería hablar con ella y seguir adelante desde allí. Eso es en lo que estoy pensando ahora.

………………………..​

Así que me tomé un tiempo fuera para reflexionar sobre mi matrimonio y los pasos que iba a tomar en el futuro. Estaba recibiendo muchos consejos de familiares y amigos. Sin embargo, no estaba seguro de lo que realmente quería. Han sucedido muchas cosas desde entonces.

Cuando miré hacia atrás en el matrimonio, la mayoría de él estaba lleno de nada más que recuerdos felices, por eso estaba tratando tan duro de encontrar una razón para quedarme. Sin embargo, cuando empecé a pensar en cómo ella me engañó, cómo ella y David me hicieron dudar de mi cordura, lo único que sentí fue rabia. Cuanto más profundizaba, más enojado me ponía. Nunca olvidaré lo enojada que se ponía Johana cuando la cuestionaba sobre dónde había estado o cuando llegaba tarde a casa, o la mirada de asco que David me dio cuando le pregunté, de hombre a hombre, si había algo entre él y mi esposa. El engaño fue lo suficientemente malo, y aún peor fue que fue con mi mejor amigo. Nunca lo superaré. Está bien, me vieron la cara como el tonto que era, pero se necesita un tipo especial de persona para mentir tan fácilmente y tan bien. No sé cómo pudieron cambiar tan fácilmente.

Recuerdo la noche en la que ella llegó tarde a casa, aproximadamente 5 días antes de que me enterara de todo, y se abalanzó sobre mí besándome, diciendo lo tonta que había sido conmigo. Ahora estoy casi seguro de que ella venía de la casa de David, porque no llevaba ropa interior. Ella tuvo relaciones sexuales con ambos, uno después del otro. Maldita sea, la besé. Toda esta situación me hizo sentir como un cobarde. ¿Cómo pude permitir que me pisotearan de esa manera? Me siento tan desvalorizado. Cuanto más reflexiono, más siento la urgencia de ir a la casa de David. Pero no pude hacerlo. No hay justicia para mí, no con nuestro sistema de justicia. Ellos pueden atormentarme, agredirme mentalmente, pero si me defiendo, soy yo quien termina en la cárcel, no sé por cuánto tiempo.

Hablé con mi abogada sobre esto y me instó a no hacer nada estúpido. No solo terminaría en la cárcel, sino que también pondría en peligro mis posibilidades en el proceso de divorcio. Ella sugirió que viera a un terapeuta, pero no quiero. No veo la necesidad. Todavía estaba recibiendo montones de correos electrónicos de Johana, y solo me estaban enojando más. Ella seguía vomitando las mismas tonterías de siempre, y cómo sería miserable su vida sin mí. Incluso tuvo la audacia de enviarme versículos bíblicos sobre el perdón. Si significaba tanto para ella, ¿por qué lo hizo?

Empecé a trabajar de nuevo porque quería mantenerme ocupado. Estar distraído realmente me ha ayudado a enfrentarlo mejor y ya no bebo tanto como al principio. Un día, mientras estaba en el trabajo, recibí una carta de Johana. Quería simplemente tirarla, pero decidí leerla. En la carta, ella hablaba sobre su terapia individual y cómo le ayudó a descubrir algunos problemas subyacentes que tenía consigo misma. El más grande de todos era su baja autoestima. Explicó que la diferencia en nuestra apariencia física la hacía sentir muy insegura y que en el fondo deseaba sentirse deseada por alguien que no fuera yo. Según ella, su hermana siempre ha sido mucho más bonita que ella y eso contribuyó a su baja autoestima. Dijo que aunque sabía que yo me sentía atraído por ella y que yo la hacía sentir hermosa, buscaba esa validación en alguien más. Se disculpó nuevamente y dijo que no era una excusa, pero que estaba buscando una forma de asegurarse de que nunca vuelva a suceder si decido darle otra oportunidad. Luego sugirió si podríamos intentar la terapia matrimonial para resolver las cosas. En este punto, todavía no respondí a nada de lo que ella o su familia me enviaron, así que simplemente lo ignoré.

De todos modos, inicié el proceso de divorcio y el primer asunto a tratar fue dividir nuestras finanzas, desafortunadamente, no pude desvincularme de ella sin su consentimiento. Tenemos cuentas separadas, así como una cuenta conjunta de ahorros, y lamentablemente no puedo tomar lo que me corresponde de esa cuenta sin su aprobación. Aunque gano significativamente más que ella y he contribuido más al dinero en esa cuenta, probablemente tendré que dividirla con ella a partes iguales. Así que simplemente seguí con el proceso de presentar los papeles de divorcio. Ella fue notificada hace unas semanas y entonces comenzó el drama. El mismo día que fue notificada, apareció en mi apartamento con la petición de divorcio en sus manos. No sé cómo descubrió dónde estaba. Nos quedamos mirándonos durante lo que pareció una eternidad, y todo el dolor de aquella noche regresó. Todas las emociones que sentí volvieron con renovada fuerza. Casi volví a llorar, pero no lo hice. Ella parecía haber estado llorando y se acercó rápidamente para darme un abrazo. La aparté suavemente, lo que la puso histérica. Comenzó a gritar, preguntando por qué estaba renunciando a nosotros tan fácilmente y si podíamos simplemente hablarlo. En ese momento, solo quería alejarme de ella. Mirarla me provocaba una oleada de emociones diferentes, así que quería alejarme antes de hacer o decir algo de lo que me arrepentiría. Intenté volver a mi coche y ella se tiró sobre el capó. Le pregunté qué quería y ella dijo que solo quería hablar las cosas, que no podíamos terminar nuestro matrimonio de esa manera sin al menos aclarar las cosas. Cedí porque claramente no estaba aceptando un "no" por respuesta y estaba armando un escándalo.

Entramos a mi apartamento y simplemente me senté y escuché lo que ella tenía que decir. Nuevamente, dijo que haría cualquier cosa para salvar nuestro matrimonio, que no ama a David, que lo siente mucho. Dijo que investigó cómo podríamos seguir adelante y sugirió una separación de prueba. En esta separación, dijo que yo podría salir con quien quisiera, pero que debería detener el divorcio y al menos darle la oportunidad de reparar nuestra amistad, y luego nuestra relación como esposo y esposa. Sugirió muchas otras cosas locas, como un matrimonio abierto unilateral a mi favor, trató de mostrarme historias de otras parejas que han superado la infidelidad, e incluso sugirió que nos mudáramos a otro estado o incluso a otro país, solo nosotros dos. Esa parte me dolió porque habíamos hablado de mudarnos y comenzar nuestra familia no mucho antes de que sucediera todo este lío.

Cuando terminó de hablar, simplemente nos quedamos allí en silencio, nuevamente mirándonos el uno al otro. Y luego le pregunté por qué. ¿Por qué él? ¿Por qué engañarme con él y luego volver solo después de que te descubrí? Empezó a sollozar muy fuerte cuando le hice estas preguntas. Dijo que se sentía realmente culpable incluso durante los actos, pero que no sabía cómo detenerse. Que estaba tan metida en la aventura que no pensó en las consecuencias y en lo que iba a perder. Dijo que la terapia la hizo darse cuenta de que probablemente me hubiera engañado en algún momento, si no con David, entonces con alguien más. Supuestamente, esto se debía a los mismos problemas subyacentes de los que no era consciente. Le pregunté si amaba a David, y me prometió que no lo amaba. Que no han hablado desde que me fui y que ni siquiera sabe dónde está él ahora. Que solo me amaba a mí y haría cualquier cosa para enmendar lo que nos ha hecho. Le pregunté si alguna vez me había engañado antes de todo esto, y juró por la memoria de su padre fallecido que esta fue la primera y última vez. Le pregunté quién más sabía sobre ella y David. Dudó y dijo que solo su hermana, pero que solo se enteró unos días antes de que yo lo supiera, y que la suplicó que terminara con eso y me lo confesara. Los que sugirieron que la hermana lo sabía acertaron. También le pregunté por qué estaba rogando. ¿Por qué no simplemente se fue para estar con David? Le pregunté si lo estaba haciendo solo porque sentía que era lo correcto, y no porque realmente quisiera estar conmigo. Respondió diciendo que lo estaba haciendo porque me ama y porque sabe que tomó decisiones horribles. Hablamos durante mucho tiempo. Ella lloró mucho, pero no por mí. Yo ya había llorado lo suficiente cuando me enteré por primera vez y no tenía más lágrimas que derramar por esto.

Luego le pregunté si había algo más que quisiera decirme: si había algo más que estaba ocultando. Empezó a sollozar de nuevo y me pidió que no me enojara. Me puse realmente nervioso cuando dijo eso. Lloró un poco antes de que la instara a simplemente decirlo porque me estaba poniendo nervioso. Entonces salió. Dijo que se enteró de que estaba embarazada poco después de que yo me fui y que se hizo un aborto porque no estaba segura de quién era el padre. Dijo que pensó que si resultaba ser de David, no habría lugar para la reconciliación, y sintió que tenía que hacerlo. No podía creer lo que estaba escuchando. Estaba en shock y ella seguía rogando para que esto no fuera el fin de nuestra relación. Simplemente me quedé entumecido. Le pedí que se fuera y ella me suplicó que me quedara. Que aún necesitábamos hablar. Toda esta suplicación me enfureció, además de la noticia que acaba de dar. Le pregunté cuánto tiempo tenía de embarazo cuando se enteró y dijo que algunas semanas. Entonces me di cuenta. "¡Espera! Dijiste en un correo electrónico que empezaste a tener relaciones sexuales con David solo una semana antes de que yo me enterara. ¿Eso fue mentira?" Asintió. Asintió maldita sea. Explicó que solo dijo eso porque no quería lastimarme con los detalles y estaba tratando de minimizarlo. Confesó que tuvieron relaciones durante menos de un mes. Intentó consolarme, pero la aparté. Le pedí que se fuera y que nunca volviera.

Ella intentó decir algo, pero simplemente empecé a gritarle que se fuera. Pidió que pudiéramos hablar de nuevo una vez que haya procesado todo y me negué. Le dije que había encontrado un trabajo en otro estado y que me mudaría tan pronto como el proceso de divorcio comenzara (en nuestro estado, hay un período de dos meses de reflexión después de presentar los papeles). Ya había planeado hacer esto y solo estaba finalizando todo antes de renunciar a mi trabajo actual. Ya le había dado un aviso a mi jefe en ese momento. Cuando ella escuchó esto, fue más de lo mismo, llorando y suplicando como antes. Le dije que se fuera o llamaría a la policía. A regañadientes, ella se fue, y yo simplemente me quedé en el suelo preguntándome dónde me equivoqué. ¿Cómo llegó mi matrimonio a este punto en tan poco tiempo? Simplemente no podía entenderlo. Ya estaba algo seguro del divorcio antes, pero después de hablar con ella, ahora estaba más seguro de mi decisión que nunca.

Ignoré todos los intentos de Johana de volver a contactarme. Sin embargo, hace unos días, el jueves pasado, recibí una llamada telefónica de mi mamá diciéndome que Johana estaba en el hospital. Aparentemente, fue hospitalizada por una sobredosis de drogas. Todo esto se sintió como una pesadilla. Aún no sé cómo procesar todo esto. ¿Por qué está sucediendo todo esto? Visité a Johana en el hospital y parecía estar bien, pero la ingresaron en una unidad psiquiátrica. Así están las cosas ahora. Todavía no tengo idea de por qué lo haría, y cuando la visité, ella estaba dormida. Duele porque aún la amo y en este momento solo estoy contento de que esté bien. No he estado pensando en el divorcio dada la situación actual. ¿Cómo debo proceder ahora? Probablemente esté dejando fuera muchos detalles importantes, pero agregarlos solo hará esto insoportablemente largo.

3.

Han pasado aproximadamente 8 meses desde que mi vida se convirtió en un desastre y desafortunadamente para mí, las cosas solo siguen empeorando.

La última vez, Johana estaba en un estado mental bastante malo y afortunadamente, mejoró después de algunas terapias. Me sentí muy mal por ella, pero sabía que no podía quedarme. Sé que mucha gente ha superado este tipo de cosas, pero me conozco a mí mismo. Si me hubiera quedado, solo nos habría hecho más daño a ambos. Nunca lo superaré y probablemente guardaré cierto resentimiento incluso dentro de unos años. Acordamos divorciarnos, pero ella quería que siguiéramos en contacto, aunque fuera mínimo. El proceso de divorcio fue bastante tranquilo y nos divorciamos hace aproximadamente un mes. Me mudé a la Costa Oeste para comenzar de nuevo y finalmente las cosas empezaban a verse bien para mí.

Pero luego recibí otra llamada telefónica sobre Johana, esta vez de su hermana. Y resumiendo la historia, Johana sufrió un derrame cerebral. Casi no tiene movilidad en el lado izquierdo de su cuerpo y apenas puede hablar. Ni siquiera puedo expresar con palabras lo jodidamente devastador que fue escuchar eso, y mucho menos lo aplastado que me sentí cuando fui a visitarla. No se parecía en nada a la persona que conocía y siempre lloraba cuando me veía.

Una de las peores partes de todo esto es que no puedo evitar sentir que es mi culpa lo que le sucedió a ella. La gente me dice que no lo es, pero siento que sí. Aunque su familia más cercana dice que no es mi culpa, puedo percibir cierta hostilidad de ellos cada vez que hablo con ellos. Su tía me insultó delante de todos cuando me vio y todos se quedaron en silencio. Solo me pidieron que lo dejara ir y siguiera con mi vida.

Por mucho que deseara seguir adelante, todavía duele saber cómo terminó todo este desastre. No he hablado con Johana desde que sufrió el derrame cerebral y su familia no me deja verla porque, aparentemente, le causo estrés. Ni siquiera sé todos los detalles porque ya no tengo derecho a saberlos. Simplemente parece que no puedo encontrar un respiro. No sé si tendré las fuerzas para volver a amar o siquiera confiar en alguien. Dicen que el tiempo sana todas las heridas, pero a menudo solo deja cicatrices dolorosas y recuerdos que nunca se borran por completo.

FIN.
 
Última edición:
Los finales tristes para el mundo real. A mí me gusta leer relatos que me dejen buen sabor de boca. Lo siento, no ha sido el caso y por eso no me ha gustado este relato, donde solo hay dolor.
 
0ot eso me gustan tus histórias, en primera por que no son de esos estupi2 consentidores sin sangre en las venas, que les gusta ser humillados y por que tu história es coherente.

En cusnto a la história, simplemente diré que ella se enamoró de David, ojo! El enamoramiento no es igual a amar a alguien, el amor es lo que el siente por ella a pesar de rodo el dolor que ella le causó, el enamoramiento es lo que la hizo acostarsecok David.


Le atine cusndo dije del embarazo, y aunque el autor no se detiene mucho en ese punto, yo sospecho qué ella ya lo sabía desde antes, ella dice que se entero días después de que el la descubriera y abandonara, pero yo creo que lo sabia dese antes, y por eso ese día ella decide acostarse con el, pars blanquear el embarazo, ya que el autor dice que lleva semanas de no tenían intimidad, ya poco le creo que fue poco menos de un mes que se estuvo acostando con David, yo creo que fue poco tiempo después de que ella lo visitará, sobre todo en esas "salidas" qué tenia con el, como también cusndo iban a "ver películas" juntos y a el no lo invitaban, por que creen ustedes que no lo invitaban? Ppr qué no iban a ver películas precisamente.

Y si le creemos, que se entero días después del abandono, también estoy seguro que si el no lo hubiera descubierto, ella le hubiera metido el embarazo como suyo, y es que vemos qué a tal punto era su descaro qué el mismo día tuvo sexo con los2 (no se como el no se dio cuenta que la tipa venía ya cogida) eso se sabe, y también digo, que no iba a terminar su relación con David, por que en ningún momento lo menciona, cusndo da sus explicaciones de que "ya lo pensaba dejar".

Por último, la familia tiene razón, el ya no tiene derecho a saber nada de ella, y para el lo mejor es no volver a verla,eso y el tiempo, son lo único que lo ayudarán a superarlo.

Lo malo, es que al menos ella si paga por sus actos, eso del derrame no es nada bonito, pero y David? El es el único que se fue limpio.

Gracias por tu tiempo y por compartir tus historias autor, ojalá no tarde mucho en publicar otra excelente história como esta.
 
Los finales tristes para el mundo real. A mí me gusta leer relatos que me dejen buen sabor de boca. Lo siento, no ha sido el caso y por eso no me ha gustado este relato, donde solo hay dolor.
En esta cuenta solo público relatos en los que tomo de base confesiones de otras personas, así que, es un final del mundo real. Entiendo que no te haya gustado, pero si logré transmitirte un poco de ese dolor, estoy satisfecho.
 
Los finales tristes para el mundo real. A mí me gusta leer relatos que me dejen buen sabor de boca. Lo siento, no ha sido el caso y por eso no me ha gustado este relato, donde solo hay dolor.
Estoy de acuerdo. Los relatos de Corelli son buenos, pero este tiene un final muy triste. Quizás lo mejor es que la hubiera perdonado y a ver qué pasaba. Y si lo volvía a hacer ya si definitivamente dejarlo.
De todas formas Ella es la unica culpable, hasta el punto que se quedó embarazada del impresentable ese.
 

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