Ideas: Le dices que has preparado una noche especial un sábado de cena de pareja, con vino o el alcohol que tome y luego hotel( fuera de tu pueblo por ser un lugar más anónimo y sin niños ). Y que has reservado una sorpresa, una clase con un masajista que os va a enseñar a ambos a daros masajes tántricos o sensuales ( que se lleve ropa sexi y que se ponga un tanga para el masaje).
Primero el masajista te va dando el masaje a ti y luego prueba ella a dártelo a ti con las indicaciones del masajista. De menos sexual a más, terminando el masajista iniciando a ti una masturbacion y que luego la termine ella con final feliz.
Ella ya debería de estar super caliente y es su turno que se acueste en la camilla, con tanga en topless o sin ropa , empieza el fisio a explicarte sobre ella como se da el masaje de forma light (cabeza, cuello,orejas, espalda, glúteo, muslos , etc) sin ser explícito y luego lo haces tú tocándola poco a poco de menos explícito a más explícito por sus zonas sexuales según te vaya explicando el fisio . Según vaya ella estando caliente y dejándose tocar por ti, de forma más explícita le puedes ir preguntando al fisio cómo se hace en las zonas más sexuales (pecho, vulva, clitoris, punto g) y le dices que te lo vaya mostrando el sobre ella. Primero el masajista acompañando tu mano y luego tocando el como para dar la explicación ( ahí deberías ser cautos y que el masajista vaya poco a poco ). Por último si procede termina tú haciéndole un dedo a ella y ya como veas la situación de deseo de ella le vas dando más posibilidades al masajista. Desde que le permitas al masajista masturbarse delante de ella, a que le toque los pechos , o que ella masturbe al masajista mientras tú le haces un dedo o la penetras a ella. Por lo que me cuentas no creo que la primera vez se deje penetrar ella por el masajista. Lo dicho, tiene que ser algo que ella lo vaya tomando poco a poco para disfrutar y no como un atraco. Más vale que se quede ella con hambre para una próxima vez, que no un empacho.
Suerte y cualquier duda puedes preguntarme