VirginiaXX-La portadora del diamante, el regreso [Verificada]

Niña buena o mala? Qué historia se os ocurre? O que historia pensáis que hay detrás de estas fotos?😈😈😈
¿Niña buena o Niña mala ....?
¡That's the question!
¿Por qué no una niña mala que esté muy buena ....?, pero en este caso son dos.
Dos mujeres impresionantes, ambas amantes de sensaciones fuertes, que disfrutan sirviendo a sus amos; una de ellas enfatiza su condición de sumisa, y con su cola de zorra su condiciones de tal.
Ambas sometidas a sus Amos, y como objetos sexuales, obedecen sus requerimientos, sean cuáles sean.
 
Niña buena revoltosa... me gusta cómo juegas con esa dualidad, moviéndote entre ser buena y ser indomable.
Pero dime, ¿es tu cuerpo quien se revela o es tu mente quien se resiste a ceder del todo?
Libertarte no sería una cuestión de romper cadenas, sino de entender qué parte de ti realmente quiere ser libre... y cuál quiere quedarse atrapada en este juego.
A veces, los nudos no son para sujetar, sino para resaltar aquello que, sin ellos, quedaría invisible.
Si me preguntas cómo te liberaría... creo que primero haría que desees tus cadenas tanto como desearías soltarlas. La clave no está en apresurarse, sino en alargar cada momento hasta que los límites desaparezcan por completo.

Ahora bien, niña buena revoltosa, ¿crees que soy el tipo de persona que jugaría según tus reglas... o alguien capaz de escribir un nuevo capítulo para este juego?
Tú decides si prefieres darme pistas... o dejarme adivinar.
Yo creo que tal y como escribes serías dominante y querrías explorar mis límites y escribir las reglas. Estamos en alineación planetaria así que a lo mejor tendrías suerte. Pero nunca se sabe cuando la niña rebelde , la yegua salvaje que habita en mi, rompería las cadenas invisibles o no y rompería todas tus reglas
 
Yo creo que tal y como escribes serías dominante y querrías explorar mis límites y escribir las reglas. Estamos en alineación planetaria así que a lo mejor tendrías suerte. Pero nunca se sabe cuando la niña rebelde , la yegua salvaje que habita en mi, rompería las cadenas invisibles o no y rompería todas tus reglas
Parece que detrás de esa alineación planetaria se esconde un reto cautivador....

¿Dominante? Quizás sí, pero no en el sentido común. Más que poner reglas prefiero crear la necesidad a través de la seducción y del conocimiento, que imagines como juego con esa dualidad disfrutando de ambas, porque las reglas a veces están para romperlas juntos, si el momento lo exige. Y me gustaría que la niña buena revoltosa imagine, que el verdadero arte no está en controlar a la yegua salvaje, sino en bailar con ella, en crear un ritmo que haga que ambas partes quieran jugar.

Dices que romperías mis reglas, pero... ¿y si las escribiera solo para que las rompas? No hay cadenas invisibles que tu espíritu no pueda desafiar, pero tal vez el verdadero desafío para ti sería alguien que te obligue a desear esas cadenas. No por necesidad, sino por elección.

¿Qué pasaría si la niña rebelde que llevas dentro se enfrentara a alguien que no teme su resistencia, que no huye de sus desafíos? ¿Crees que podrías romper las reglas más rápido de lo que yo sería capaz de escribirlas?

No te pediré pistas esta vez; prefiero descubrirlo. Pero cuidado, porque en este juego, lo que empieza con un '¿cómo me liberarías?' puede terminar siendo un '¿cómo me rendirías?' Sin prisa, sin pausa, siempre al filo del control.

Así que dime, VirginiaXX: ¿Que crees que desearía si te tuviera justo en frente de mi?
 
Última edición:
Buenos días preciosa 😘😘😘
Espero que hayáis tenido un magnífico finde y hayas podido ser mala ☺️☺️😘😘
También te deseo que tengáis un gran inicio de semana 😘😘😘
 
Parece que detrás de esa alineación planetaria se esconde un reto cautivador....

¿Dominante? Quizás sí, pero no en el sentido común. Más que poner reglas prefiero crear la necesidad a través de la seducción y del conocimiento, que imagines como juego con esa dualidad disfrutando de ambas, porque las reglas a veces están para romperlas juntos, si el momento lo exige. Y me gustaría que la niña buena revoltosa imagine, que el verdadero arte no está en controlar a la yegua salvaje, sino en bailar con ella, en crear un ritmo que haga que ambas partes quieran jugar.

Dices que romperías mis reglas, pero... ¿y si las escribiera solo para que las rompas? No hay cadenas invisibles que tu espíritu no pueda desafiar, pero tal vez el verdadero desafío para ti sería alguien que te obligue a desear esas cadenas. No por necesidad, sino por elección.

¿Qué pasaría si la niña rebelde que llevas dentro se enfrentara a alguien que no teme su resistencia, que no huye de sus desafíos? ¿Crees que podrías romper las reglas más rápido de lo que yo sería capaz de escribirlas?

No te pediré pistas esta vez; prefiero descubrirlo. Pero cuidado, porque en este juego, lo que empieza con un '¿cómo me liberarías?' puede terminar siendo un '¿cómo me rendirías?' Sin prisa, sin pausa, siempre al filo del control.

Así que dime, VirginiaXX: ¿Que crees que desearía si te tuviera justo en frente de mi?
Bueno...parece que esperas que te describa el momento... A ver que te parece:

Podría ser un viernes por la noche. Yo había dejado atrás el día como quien cierra un capítulo lleno de responsabilidades. Llego puntual al lugar que habías elegido. Visto un sencillo pero elegante vestido negro. Al cruzar la puerta, mis ojos te buscan, ahí estás, de pie, observándome con una intensidad que desarma.

Sin palabras, me ofreces tu mano. La tomo, dejando en ese gesto toda mi voluntad. Camino tras de ti como si los minutos de esa noche te pertenecieran únicamente a ti. Subimos al ascensor, y el aire entre los dos se llena de tensión. No hay necesidad de preguntas ni de explicaciones. Ambos sabemos lo que yo busco: el descanso, la entrega, el placer de no decidir, aunque solo sea por unas horas.

Al entrar en la habitación, todo es diferente. La habitación está cuidadosamente iluminada por velas estratégicamente colocadas. El olor a madera y vainilla envuelve el ambiente. Te colocas detrás de mi, y con un movimiento lento deslizas tus dedos por mi espalda, acariciando la piel que quedaba al descubierto al bajar la cremallera de mi vestido.

—Hoy, olvídate de todo. Solo escucha. Solo siente. -Me susurras al oído.

Asiento, sin mediar palabra, y cierro los ojos. El peso de las decisiones se esfuma en el aire. Mi única tarea es obedecer, disfrutar, dejar que tú me guies. Cada caricia, cada susurro, cada gesto es una invitación a perderme en ese espacio donde no había prisas ni preocupaciones.

Me ordenas que no me mueva, que me quede quieta mientras tu das vueltas a mi alrededor observándome como un lobo hambriento. Me siento vulnerable, estoy expuesta ante ti, pero me da igual, hago lo que me dices sin dudar. Entonces, noto cómo tus manos exploran mi cuello, mis hombros, mi pecho, mis brazos, como si leyeras en mi piel los días de esfuerzo acumulados.

Tu boca comienza a dibujar líneas invisibles sobre mi cuerpo, y con cada beso, me siento más ligera, más libre, más viva.

Y entonces, en un instante de absoluta calma, me dices al oído:
—Eres mía esta noche, pero tú decides cómo termina.

Sonrío, con la tranquilidad de saber que el verdadero poder sigue siendo mio, pero con el delicioso placer de no usarlo.
Entonces, dejas caer el vestido al suelo con un movimiento suave y vuelves a observarme, sin prisa, como quien admira una obra de arte. No hay urgencia en tus movimientos.

Me guías hasta la cama con la delicadeza de quien sabe que lo importante no es el destino, sino el trayecto. Yo me dejó llevar. Me siento sobre el colchón con las piernas abiertas hacia tí. Arrodillándote frente a mí, no con sumisión, sino con una veneración que me hace sentir que, por una vez, ser vulnerable es mi mayor fortaleza, me quitas los tacones uno a uno.

Aun arrodillado, en un momento tan íntimo, levantas la vista, entierras tu cara entre mis piernas y aspiras el aroma de mi sexo a través del tanga que aun llevo puesto.
Ese gesto me hace estremecer, estoy totalmente expuesta ante ti y ahora sé que a tu merced. Mi respiración se acelera y mi sexo se contrae por lo sensual del momento, por la expectación de lo que va a seguir….
 
Bueno...parece que esperas que te describa el momento... A ver que te parece:

Podría ser un viernes por la noche. Yo había dejado atrás el día como quien cierra un capítulo lleno de responsabilidades. Llego puntual al lugar que habías elegido. Visto un sencillo pero elegante vestido negro. Al cruzar la puerta, mis ojos te buscan, ahí estás, de pie, observándome con una intensidad que desarma.

Sin palabras, me ofreces tu mano. La tomo, dejando en ese gesto toda mi voluntad. Camino tras de ti como si los minutos de esa noche te pertenecieran únicamente a ti. Subimos al ascensor, y el aire entre los dos se llena de tensión. No hay necesidad de preguntas ni de explicaciones. Ambos sabemos lo que yo busco: el descanso, la entrega, el placer de no decidir, aunque solo sea por unas horas.

Al entrar en la habitación, todo es diferente. La habitación está cuidadosamente iluminada por velas estratégicamente colocadas. El olor a madera y vainilla envuelve el ambiente. Te colocas detrás de mi, y con un movimiento lento deslizas tus dedos por mi espalda, acariciando la piel que quedaba al descubierto al bajar la cremallera de mi vestido.

—Hoy, olvídate de todo. Solo escucha. Solo siente. -Me susurras al oído.

Asiento, sin mediar palabra, y cierro los ojos. El peso de las decisiones se esfuma en el aire. Mi única tarea es obedecer, disfrutar, dejar que tú me guies. Cada caricia, cada susurro, cada gesto es una invitación a perderme en ese espacio donde no había prisas ni preocupaciones.

Me ordenas que no me mueva, que me quede quieta mientras tu das vueltas a mi alrededor observándome como un lobo hambriento. Me siento vulnerable, estoy expuesta ante ti, pero me da igual, hago lo que me dices sin dudar. Entonces, noto cómo tus manos exploran mi cuello, mis hombros, mi pecho, mis brazos, como si leyeras en mi piel los días de esfuerzo acumulados.

Tu boca comienza a dibujar líneas invisibles sobre mi cuerpo, y con cada beso, me siento más ligera, más libre, más viva.

Y entonces, en un instante de absoluta calma, me dices al oído:
—Eres mía esta noche, pero tú decides cómo termina.

Sonrío, con la tranquilidad de saber que el verdadero poder sigue siendo mio, pero con el delicioso placer de no usarlo.
Entonces, dejas caer el vestido al suelo con un movimiento suave y vuelves a observarme, sin prisa, como quien admira una obra de arte. No hay urgencia en tus movimientos.

Me guías hasta la cama con la delicadeza de quien sabe que lo importante no es el destino, sino el trayecto. Yo me dejó llevar. Me siento sobre el colchón con las piernas abiertas hacia tí. Arrodillándote frente a mí, no con sumisión, sino con una veneración que me hace sentir que, por una vez, ser vulnerable es mi mayor fortaleza, me quitas los tacones uno a uno.

Aun arrodillado, en un momento tan íntimo, levantas la vista, entierras tu cara entre mis piernas y aspiras el aroma de mi sexo a través del tanga que aun llevo puesto.
Ese gesto me hace estremecer, estoy totalmente expuesta ante ti y ahora sé que a tu merced. Mi respiración se acelera y mi sexo se contrae por lo sensual del momento, por la expectación de lo que va a seguir….
Buenas tardes ViginiaXX,
Antes de nada, quiero agradecerte que hayas compartido todas estas emociones, tu relato no solo es sensual, si no, que además es profundamente humano. Logras plasmar la emociones que hacen que parezca que este justo en frente de ti.
Me gusta como muestras que la entrega no es una perdida de poder si no una decisión cargada de fortaleza. El echo que puedas ceder el control en un contexto así demuestra una gran confianza en ti misma.
Después de leerlo reflexione sobre el privilegio que es leer tus respuestas.
Saludos y abrazos 💋💋💋.
 
Bueno...parece que esperas que te describa el momento... A ver que te parece:

Podría ser un viernes por la noche. Yo había dejado atrás el día como quien cierra un capítulo lleno de responsabilidades. Llego puntual al lugar que habías elegido. Visto un sencillo pero elegante vestido negro. Al cruzar la puerta, mis ojos te buscan, ahí estás, de pie, observándome con una intensidad que desarma.

Sin palabras, me ofreces tu mano. La tomo, dejando en ese gesto toda mi voluntad. Camino tras de ti como si los minutos de esa noche te pertenecieran únicamente a ti. Subimos al ascensor, y el aire entre los dos se llena de tensión. No hay necesidad de preguntas ni de explicaciones. Ambos sabemos lo que yo busco: el descanso, la entrega, el placer de no decidir, aunque solo sea por unas horas.

Al entrar en la habitación, todo es diferente. La habitación está cuidadosamente iluminada por velas estratégicamente colocadas. El olor a madera y vainilla envuelve el ambiente. Te colocas detrás de mi, y con un movimiento lento deslizas tus dedos por mi espalda, acariciando la piel que quedaba al descubierto al bajar la cremallera de mi vestido.

—Hoy, olvídate de todo. Solo escucha. Solo siente. -Me susurras al oído.

Asiento, sin mediar palabra, y cierro los ojos. El peso de las decisiones se esfuma en el aire. Mi única tarea es obedecer, disfrutar, dejar que tú me guies. Cada caricia, cada susurro, cada gesto es una invitación a perderme en ese espacio donde no había prisas ni preocupaciones.

Me ordenas que no me mueva, que me quede quieta mientras tu das vueltas a mi alrededor observándome como un lobo hambriento. Me siento vulnerable, estoy expuesta ante ti, pero me da igual, hago lo que me dices sin dudar. Entonces, noto cómo tus manos exploran mi cuello, mis hombros, mi pecho, mis brazos, como si leyeras en mi piel los días de esfuerzo acumulados.

Tu boca comienza a dibujar líneas invisibles sobre mi cuerpo, y con cada beso, me siento más ligera, más libre, más viva.

Y entonces, en un instante de absoluta calma, me dices al oído:
—Eres mía esta noche, pero tú decides cómo termina.

Sonrío, con la tranquilidad de saber que el verdadero poder sigue siendo mio, pero con el delicioso placer de no usarlo.
Entonces, dejas caer el vestido al suelo con un movimiento suave y vuelves a observarme, sin prisa, como quien admira una obra de arte. No hay urgencia en tus movimientos.

Me guías hasta la cama con la delicadeza de quien sabe que lo importante no es el destino, sino el trayecto. Yo me dejó llevar. Me siento sobre el colchón con las piernas abiertas hacia tí. Arrodillándote frente a mí, no con sumisión, sino con una veneración que me hace sentir que, por una vez, ser vulnerable es mi mayor fortaleza, me quitas los tacones uno a uno.

Aun arrodillado, en un momento tan íntimo, levantas la vista, entierras tu cara entre mis piernas y aspiras el aroma de mi sexo a través del tanga que aun llevo puesto.
Ese gesto me hace estremecer, estoy totalmente expuesta ante ti y ahora sé que a tu merced. Mi respiración se acelera y mi sexo se contrae por lo sensual del momento, por la expectación de lo que va a seguir….
Sientes como comienzo a acariciar tus piernas lo hago suave sin dejar de mirarte, mis manos van del tobillo hasta tus inglés, tan solo las rozo con mis dedos. Pronto mis labios recorren tus piernas, y sientes mi aliento por tus muslos internos, se lo que más deseas, pero también se que lo mejor es recorrer el camino completo para que llegado el momento lo experimentes más intenso y durante más tiempo.
Sientes mis labios más cercanos subiendo por tus inglés, justo cuando están por encima de tu tanguita durante unos segundos me detengo, siento como tú respiración se acelera en ese momento, esperando el contacto, alargó unos segundos ese momento, hasta que sientes como te beso por encima de la tela, el sonido de mis besos es el necesario para transmitirte que me encanta donde estoy, sentir mi aliento justo por encima de tu clítoris te excita y por momentos odias la tela de tu tanguita por privarte de la sensación completa, tu espalda se tensa por las sensaciones y la excitación.
Pero yo deseo jugar más en el filo de esa entrega del control, quiero que realmente lo desees con todas tus fuerzas que sientas que estoy seduciendo tu cuerpo y tu mente en este momento. Me incorporo besando cada mm de tu piel, colocándome a tu espalda, acaricio tus hombros y tú cuello y sientes como beso tu nuca, mis manos acarician tus hombros y brazos, beso tu cuello, sientes como esos besos y esas caricias poco a poco te seducen, sigo besándote, descubriendo esas zonas que te hacen vibrar, sientes como el sujetador cae de tu cuero y como mis manos acarician tú pecho, van desde tus clavículas bajando por el centro del pecho, hasta que en un momento circular las envuelvo, sientes como uno de mis dedos da círculos sobre tus aureolas, lo hago suave y sin prisa.
En ese momento sientes mi frente en tus hombros y como suspiro.
-No te imaginas cuánto te necesito. Te susurro al oído.
Esa demostración de mi debilidad hacia ti, hace que tus manos busquen las mías para apretarlas en tu pecho, para sentirme más cercano aún y para hacerme saber que estás conmigo.
Te acomodo en la cama, acompañando con mis manos tu espalda hasta que estás completamente tumbada en la cama, boca arriba, después estiró tus brazos suavemente hacia el cabezal de la cama, te miro a los ojos y en tu mirada siente la pasión y la confianza, me sonríes de forma desafiante mientras ato tus muñecas al cabezal de la cama con una suave tela de terciopelo, sin dejar de mirarme sientes como ajusto los nudos, son suaves pero firmes a la vez. Compruebas que están firmementes atadas, y ahora sí te sientes totalmente a mí merced, por un momento sientes algo de vergüenza pero sientes más excitación, el día a día, el estrés diario, los nervios y las vivencias de la rutina ya no existen para ti, solo deseas seguir con este desafío. Sientes el roce de mis manos recorriendo tu cuerpo que ahora está más expuesto que nunca, beso tu pecho, tu ombligo y tu cintura, sientes que estoy decidido a ganarme tu entrega dando lo máximo de mi.
Me miras con una mirada llena de pasión, empiezas a impacientarse, deseas sentirme completamente, pero mis intenciones son otras, quiero que lo desees tanto, quiero que desees tanto darme tu entrega que en tu mente solo este la fantasía de hacerlo realidad.
Ves como saco una cinta de tela negra beso tus labios, nos besamos de forma pasional, en besos interminables, húmedos y sensuales, mientras coloco la tela en tus ojos, ahora sí que te sientes totalmente expuesta y a mí merced, seguimos besándonos mientras mis manos recorren tu cuerpo en todas las direcciones y poco a poco me separo de ti, sientes mis pasos y mi respiración, te estoy observando, escuchas el roce de la tela desliza dose por mi cuerpo, intuyes que me estoy desnudando, vuelves a sentirte expuesta con algo de apuro, pero sientes que en tu interior está creciendo un calor que no puedes explicar. Esa espera te excita, no saber por dónde voy a aparecer te excita más y no poder mover tus manos hace que empieces a sentir humedad.
En ese momento, sientes como mis manos abren tus piernas suavemente pero con gran firmeza, las abren al máximo, y al momento sientes mis labios por encima de tu tanga, mientras mis manos suben y bajan por tu torso.........un gran suspiro sale de tu boca, pues cada vez tienes más ganas de sentirme completamente.....
 
Buenas tardes ViginiaXX,
Antes de nada, quiero agradecerte que hayas compartido todas estas emociones, tu relato no solo es sensual, si no, que además es profundamente humano. Logras plasmar la emociones que hacen que parezca que este justo en frente de ti.
Me gusta como muestras que la entrega no es una perdida de poder si no una decisión cargada de fortaleza. El echo que puedas ceder el control en un contexto así demuestra una gran confianza en ti misma.
Después de leerlo reflexione sobre el privilegio que es leer tus respuestas.
Saludos y abrazos 💋💋💋.
💋💋💋
 
Buenos días preciosa 😘😘😘😘😘
Uuuuuuuuuuuffffff menudos relatos...como habéis hecho volar mi imaginación y como me habéis puesto 😏😏🔥🔥🔥
Espero que tengáis un magnífico día 😘😘
 
Tres besos… No uno, ni dos, sino tres. ¿Casualidad o un lenguaje que solo los instintos comprenden? El primero es la invitación, el segundo la insinuación… ¿y el tercero?.....

Los besos no se envían en vano, menos cuando vienen de una mujer que sabe lo que hace. ¿Tres besos para tentar, para retar o para provocar? O quizás, simplemente, para ver si alguien entiende el mensaje oculto en ellos.

Déjame confesarte algo: hay besos que se quedan en el aire, y hay otros que encuentran su camino. Y yo… tengo la sospecha de que estos tres saben exactamente a dónde quieren llegar.

P.D. igual tienes un tic en el dedo y por eso le distes tres veces....😵‍💫😵‍💫😵‍💫😵‍💫
 
Última edición:
Tres besos… No uno, ni dos, sino tres. ¿Casualidad o un lenguaje que solo los instintos comprenden? El primero es la invitación, el segundo la insinuación… ¿y el tercero?.....

Los besos no se envían en vano, menos cuando vienen de una mujer que sabe lo que hace. ¿Tres besos para tentar, para retar o para provocar? O quizás, simplemente, para ver si alguien entiende el mensaje oculto en ellos.

Déjame confesarte algo: hay besos que se quedan en el aire, y hay otros que encuentran su camino. Y yo… tengo la sospecha de que estos tres saben exactamente a dónde quieren llegar.

P.D. igual tienes un tic en el dedo y por eso le distes tres veces....😵‍💫😵‍💫😵‍💫😵‍💫
Tres besos... muy observador.
Tres besos… no uno, ni dos, sino tres. Como una llave que solo abre la puerta adecuada.

💋 El primero roza la piel, tibio como una caricia contenida.

💋 El segundo es un desafío, un roce que insinúa sin prometer.

💋 el tercero… ummm, el tercero es el que arde, el que deja huella, el que espera una respuesta igual de audaz.

Y si estos besos saben a dónde quieren llegar… por supuesto. Una mujer como yo tiene muy claras sus preferencias y siempre son reclamados y bienvenidos💋💋💋
 
Tres besos... muy observador.
Tres besos… no uno, ni dos, sino tres. Como una llave que solo abre la puerta adecuada.

💋 El primero roza la piel, tibio como una caricia contenida.

💋 El segundo es un desafío, un roce que insinúa sin prometer.

💋 el tercero… ummm, el tercero es el que arde, el que deja huella, el que espera una respuesta igual de audaz.

Y si estos besos saben a dónde quieren llegar… por supuesto. Una mujer como yo tiene muy claras sus preferencias y siempre son reclamados y bienvenidos💋💋💋
Al principio, creí que eran solo besos de una contestación normal como un reflejo espontáneo sin intención. Pero luego pensé que una mujer como tú seguro que no dejaba nada al azar, que tenía delante mío un enigma en el que pensar " tres besos", pensando en que no los repartidas a la ligera.

¿Que pasaría con el cuarto beso?
Ese que llega por sorpresa cuando menos lo esperas, ese beso que es directo y profundo, tan profundo que besa tu mente y sacude tu mundo interior. Es el beso que no está escrito, ese beso que hace que te sientas el centro del universo.

Ese beso que es capaz de sacar a la niña buena, a esa parte de ti que desea seguir jugando y seduciendo, que haga que tus labios se muerdan tan solo de recordarlo...

Tal vez el cuarto beso no se da… se provoca. Se queda flotando en el aire, esperando a que alguien lo reclame con la misma seguridad con la que los otros fueron entregados.

¿eres de las que esperan a que llegue, o de las que lo toman cuando saben que les pertenece?
 
La continuación es libre y permite más autores….💋💋Feliz semana guapo
Buenos días preciosa 😘😘😘
Pues me voy a sumar a la historia...
Jos está subiendo y bajando las manos por tu torso mientras tú estás estás disfrutando de está situación...
En ese momento, dos golpes secos golpean la puerta de la habitación... Todo se congela y Jos se acerca a tu oído y te recuerda.

- Hoy eres mía pero tú decides como se acaba, así que tienes que decidir si acabamos 2 o a acabamos 3. Y tranquila que lo conoces...

En ese momento el morbo, los nervios, la incertidumbre, la excitación envuelve tu cuerpo...tras unos segundos de reflexionar le dices que puede abrir la puerta.
En ese momento te levanta de la cama y te deja de pie de espaldas a la puerta. Y te dice:

- Tienes prohibido girarte hasta que te lo digamos

Se dirige a la puerta y la abre para dejarme entrar.
Tu estás excitada y pensando quién podrá ser el que entre por la puerta.
Poco a poco me acerco mientras tu oyes mis pasos y tu piel se eriza.
Una vez cerca de ti empiezo a acariciarte la espalda, beso tu cuello. Entonces cojo una de tus manos para que recorras mi cuerpo vestido y toques mi cara...en ese momento me acerco y te susurro

- Sabes quién soy?

Por supuesto, tu no tienes ni idea porque no me has escuchado nunca mi voz ni nos hemos visto.
Entonces yo te susurro.

- Yo sí que se quién eres Virginia, diosa del foro

En ese momento tu piel se eriza con el morbo de ver qué la otra persona sí que te conoce.
En ese momento te doy otro beso en el cuello y te volvería a susurrar.

- Tu tranquila y disfruta, nosotros solo nos debemos a tu disfrute y como te ha comentado antes Jos, tu decides como va ir avanzando y como acaba

En es momento aprovecho para darte otro beso en el cuello y decirte.

- Te puedes girar

Te giras y nos encuentras a Jos desnudo y a mí aún vestido.
Entonces los dos empezamos a dar vueltas alrededor tuyo en sentido opuesto.
Mientras yo me voy desnudando te vamos acariciando tu cuerpo... Y una vez que estoy desnudo me acerco a ti y te susurro mi nombre. Al oír mi nombre abres los ojos como platos y te me quedas mirando porque es la primera vez que nos vemos en directo, me haces un repaso que acaba en mi cara y los dos nos hacemos una sonrisa de aprobación.
Aquí, Jos y yo te cogemos uno por cada mano y te acercamos otra vez a la cama.
Te ayudamos a estírate y nos quedamos los dos de pie contemplando la obra de arte que tenemos delante.
Tú disfrutas de ver como nosotros te miramos con esa mezcla entre devoción y admiración.
Al cabo de unos segundos, Jos vuelve a abrirte las piernas con suavidad y firmeza y vuelve a poner sus labios en tu tanga mientras yo acerco mi boca a tu cuello y empiezo a besarlo.
Los brazos de Jos y el mio se entrelazan mientras acariciamos tu torso y tu cuerpo empieza a contonearse de placer...
Si quieres y te ha gustado continuará 😏
Que tengas un gran viernes y finde 😘😘
 
Al principio, creí que eran solo besos de una contestación normal como un reflejo espontáneo sin intención. Pero luego pensé que una mujer como tú seguro que no dejaba nada al azar, que tenía delante mío un enigma en el que pensar " tres besos", pensando en que no los repartidas a la ligera.

¿Que pasaría con el cuarto beso?
Ese que llega por sorpresa cuando menos lo esperas, ese beso que es directo y profundo, tan profundo que besa tu mente y sacude tu mundo interior. Es el beso que no está escrito, ese beso que hace que te sientas el centro del universo.

Ese beso que es capaz de sacar a la niña buena, a esa parte de ti que desea seguir jugando y seduciendo, que haga que tus labios se muerdan tan solo de recordarlo...

Tal vez el cuarto beso no se da… se provoca. Se queda flotando en el aire, esperando a que alguien lo reclame con la misma seguridad con la que los otros fueron entregados.

¿eres de las que esperan a que llegue, o de las que lo toman cuando saben que les pertenece?
El cuarto beso…, ese es el beso que no se envía, el que no se deja caer al azar. Es el que desafía, el que no se regala, sino que se reclama.

No es un beso cualquiera, porque no se da en cualquier momento ni a cualquiera. Es un beso que flota en el aire, como una tentación esperándo a ser tomada. Es el que no se deja en palabras, sino en piel; el que no se olvida, sino que se graba en la memoria como un eco imposible de silenciar.

No soy de las que esperan, porque un beso como ese no se mendiga… se reclama con la certeza de que pertenece.
No soy de las que dudan, porque cuando unos labios saben dónde quieren estar, no necesitan permiso para llegar.

Dices que tal vez el cuarto beso no se da… sino que se provoca. Y dime… ¿serías capaz de provocarlo hasta hacerlo inevitable? Porque si ese beso me pertenece, no lo esperaré. Lo tomaré. Y créeme… sabrás exactamente el momento en el que lo haga. 💋🔥
 
Buenos días preciosa 😘😘😘
Pues me voy a sumar a la historia...
Jos está subiendo y bajando las manos por tu torso mientras tú estás estás disfrutando de está situación...
En ese momento, dos golpes secos golpean la puerta de la habitación... Todo se congela y Jos se acerca a tu oído y te recuerda.

- Hoy eres mía pero tú decides como se acaba, así que tienes que decidir si acabamos 2 o a acabamos 3. Y tranquila que lo conoces...

En ese momento el morbo, los nervios, la incertidumbre, la excitación envuelve tu cuerpo...tras unos segundos de reflexionar le dices que puede abrir la puerta.
En ese momento te levanta de la cama y te deja de pie de espaldas a la puerta. Y te dice:

- Tienes prohibido girarte hasta que te lo digamos

Se dirige a la puerta y la abre para dejarme entrar.
Tu estás excitada y pensando quién podrá ser el que entre por la puerta.
Poco a poco me acerco mientras tu oyes mis pasos y tu piel se eriza.
Una vez cerca de ti empiezo a acariciarte la espalda, beso tu cuello. Entonces cojo una de tus manos para que recorras mi cuerpo vestido y toques mi cara...en ese momento me acerco y te susurro

- Sabes quién soy?

Por supuesto, tu no tienes ni idea porque no me has escuchado nunca mi voz ni nos hemos visto.
Entonces yo te susurro.

- Yo sí que se quién eres Virginia, diosa del foro

En ese momento tu piel se eriza con el morbo de ver qué la otra persona sí que te conoce.
En ese momento te doy otro beso en el cuello y te volvería a susurrar.

- Tu tranquila y disfruta, nosotros solo nos debemos a tu disfrute y como te ha comentado antes Jos, tu decides como va ir avanzando y como acaba

En es momento aprovecho para darte otro beso en el cuello y decirte.

- Te puedes girar

Te giras y nos encuentras a Jos desnudo y a mí aún vestido.
Entonces los dos empezamos a dar vueltas alrededor tuyo en sentido opuesto.
Mientras yo me voy desnudando te vamos acariciando tu cuerpo... Y una vez que estoy desnudo me acerco a ti y te susurro mi nombre. Al oír mi nombre abres los ojos como platos y te me quedas mirando porque es la primera vez que nos vemos en directo, me haces un repaso que acaba en mi cara y los dos nos hacemos una sonrisa de aprobación.
Aquí, Jos y yo te cogemos uno por cada mano y te acercamos otra vez a la cama.
Te ayudamos a estírate y nos quedamos los dos de pie contemplando la obra de arte que tenemos delante.
Tú disfrutas de ver como nosotros te miramos con esa mezcla entre devoción y admiración.
Al cabo de unos segundos, Jos vuelve a abrirte las piernas con suavidad y firmeza y vuelve a poner sus labios en tu tanga mientras yo acerco mi boca a tu cuello y empiezo a besarlo.
Los brazos de Jos y el mio se entrelazan mientras acariciamos tu torso y tu cuerpo empieza a contonearse de placer...
Si quieres y te ha gustado continuará 😏
Que tengas un gran viernes y finde 😘😘
El aire en la habitación es denso, cargado de anticipación. Siento vuestras miradas recorriendo mi cuerpo, vuestro deseo contenido como una corriente eléctrica que me eriza la piel. Cada caricia es un trazo deliberado, un mapa que se dibuja sobre mí con una paciencia deliciosa. Me siento el centro de todo, y esa sensación me embriaga.

Jos mantiene su boca donde sabe que la espera es parte del placer, jugando con la certeza de que cada segundo retenido aviva más mi ansia. Sus manos exploran mi piel con una firmeza calculada, deslizándose con el conocimiento de quien ya ha leído cada una de mis reacciones.

Mientras tanto, tú, tomas una suave tela de raso y tapas mis ojos. Luego, siento como tu boca recorre mi cuello, tu aliento cálido contrastando con los escalofríos que deja en su recorrido me hacen estremecer. Tus labios trazan un sendero tortuoso, jugando con el límite entre la provocación y la rendición. Tu cuerpo se mezcla con el mío, y por un instante, todo lo demás se desvanece.

Y entonces, cuando creo haberme acostumbrado a vuestro ritmo, algo nuevo me sacude. Unas uñas deslizándose con lentitud por el interior de mi muslo, apenas rozando, apenas presionando… pero suficiente para hacer que mi cuerpo reaccione de forma involuntaria. Cierro los ojos, a pesar de estar tapados, y dejo escapar un suspiro, atrapada en un juego donde las reglas las dicta mi deseo.

El tiempo se desdibuja. No sé cuánto llevo aquí, solo sé que cada roce, cada susurro, me arrastra más hondo. Justo cuando creo que tengo el control, una voz grave y segura me devuelve al presente, murmurando en mi oído:

— Aún no hemos empezado de verdad…

Y entonces, todo se intensifica. Caricias, besos húmedos. Tres cuerpos desnudos que se rozan, se frotan. Ahora siento una rigidez en mi boca y un sabor salado delicioso que me embriaga, que saboreo y chupo con fruición....🔥🔥🔥🔥

Feliz sábado, guapo 💋💋💋
 
El aire en la habitación es denso, cargado de anticipación. Siento vuestras miradas recorriendo mi cuerpo, vuestro deseo contenido como una corriente eléctrica que me eriza la piel. Cada caricia es un trazo deliberado, un mapa que se dibuja sobre mí con una paciencia deliciosa. Me siento el centro de todo, y esa sensación me embriaga.

Jos mantiene su boca donde sabe que la espera es parte del placer, jugando con la certeza de que cada segundo retenido aviva más mi ansia. Sus manos exploran mi piel con una firmeza calculada, deslizándose con el conocimiento de quien ya ha leído cada una de mis reacciones.

Mientras tanto, tú, tomas una suave tela de raso y tapas mis ojos. Luego, siento como tu boca recorre mi cuello, tu aliento cálido contrastando con los escalofríos que deja en su recorrido me hacen estremecer. Tus labios trazan un sendero tortuoso, jugando con el límite entre la provocación y la rendición. Tu cuerpo se mezcla con el mío, y por un instante, todo lo demás se desvanece.

Y entonces, cuando creo haberme acostumbrado a vuestro ritmo, algo nuevo me sacude. Unas uñas deslizándose con lentitud por el interior de mi muslo, apenas rozando, apenas presionando… pero suficiente para hacer que mi cuerpo reaccione de forma involuntaria. Cierro los ojos, a pesar de estar tapados, y dejo escapar un suspiro, atrapada en un juego donde las reglas las dicta mi deseo.

El tiempo se desdibuja. No sé cuánto llevo aquí, solo sé que cada roce, cada susurro, me arrastra más hondo. Justo cuando creo que tengo el control, una voz grave y segura me devuelve al presente, murmurando en mi oído:

— Aún no hemos empezado de verdad…

Y entonces, todo se intensifica. Caricias, besos húmedos. Tres cuerpos desnudos que se rozan, se frotan. Ahora siento una rigidez en mi boca y un sabor salado delicioso que me embriaga, que saboreo y chupo con fruición....🔥🔥🔥🔥

Feliz sábado, guapo 💋💋💋
Buenos días preciosa 😘😘😘
Espero que hayáis pasado un gran finde 😘😘😘
Mientras empiezas a saborear y chupar mi erecto pene, Jos, que te ha quitado tu tanguita, empieza a lamer tus labios y abrirlos con su lengua. Cada vez que su lengua recorre tu coñito tu cuerpo reacciona con contoneos y se escapan suspiros de tu boca llena.
Jos va lamiendo tu coñito de abajo a arriba jugando también con tu clítoris.
Yo, instalado en el paraíso con el placer que me estás dando, me tiro hacia delante para poder llegar a tus pechos, allí empiezo a chupar suavemente tus pezones, también juego con mi lengua y le hago mordisquitos suaves.
Veo que te gusta porque tus suspiros y gemidos van en aumento, incluso a veces tienes que parar para poder demostrar lo que estás disfrutando 😏🔥
Jos va aumentando también el ritmo y se nota como tú respiración va en aumento pero por supuesto, queremos hacerte disfrutar hasta hacerte llegar al paraíso y que sea duradero.
En un momento determinado Jos y yo nos miramos y paramos de golpe así como me retiro de tu boca.
Tú en ese momento estás tan encendida que tú cuerpo sigue contoneándose y sigues suspirando/gimiendo. Además como sigues con los ojos tapados no sabes muy bien que ha pasado y esto, por un lado te encanta pero por el otro ves que no tienes el control. Como lo sabemos Jos se acerca a tu oído y te dice
- Tranquila que solo queremos disfrutar más de nuestra diosa y sigues estando al mano.
Esas palabras te tranquilizan y hacen que tú piel se erize con el placer de saber que eres nuestra admirada diosa.
Te empezamos a acariciar y te empiezo a besar mientras voy bajando por tu cuerpo mientras Jos hace lo mismo en sentido contrario.
En el momento que llego a la zona de tu entre pierna empiezo a mordisquear el interior de tus piernas mientras lo combino con lamento es y besos. Jos por su parte ha pasado por tu cuello y ha llegado a tus labios y los besa apasionadamente. Tú por supuesto, disfrutas del beso de Jos y de los juegos que empiezo hacer en tu entrepierna. Aunque al decir verdad te imaginas lo que está pasando porque no ves nada solo puedes deducirlo por sensaciones y el tacto.
Entonces Jos se levantaría y notarias como otra tensión se apodera de tu boca con un sabor también salado pero seguramente distinto aquí es donde tendrías la certeza de que se han cambiado las tornas.
Yo también me enfocaría en tu coñito para empezar a lamerlo y chuparlo con alegría para que empezarás otra vez a contonearte y a emitir esos suspiros y gemidos.
Yo seguirá saboreandolo recorriendo todo los rincones y ayudándome de mis dedos para explorar el interior de ti mientras tú sigues disfrutando de Jos.
Miro a Jos y se ve como está disfrutando, con la cabeza tirada hacia atrás y los ojos cerrados. Esto aún me hace acelerar más para que disfrutes al mismo nivel que él.
Otra vez tú respiración se acelera, tus contoneos y movimientos son más fuertes, notamos como el placer, la excitación y el clímax esta invadiendo todo tu cuerpo y es entonces cuando otra mirada entre ambos hace que paremos en seco.
Nos quedamos contemplando y admirando como tú cuerpo sigue mostrando muestras de placer.
Es entonces cuando José coge tus brazos y te levanta para que te reincorpores y te quita la venda de los ojos. Y nos encuentras a los dos con ojos de fascinación y admiración hacia ti como si lo que estamos viviendo es un sueño. Está fascinación hacia ti, el ver cómo dos hombres te adoran y te admiran hace que te excites y te calientes aún más.
Jos y yo nos acercamos para besar tus labios, tú empiezas darnos besos a los dos mientras nuestras manos recorren nuestros cuerpos desnudos.
De repente yo me voy hacia el cabecero de la cama y me estiró, mientras Jos te acompaña para que te pongas encima de mi...
Continuará?
Que tengáis un magnífico inicio de semana 😘😘😘😘
 
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