El Fruto Prohibido. ( Continuación - 385 )
Así estuvimos un rato más en la barra terminando aquellas bebidas que habíamos pedido; y tras pagarlas, que las pagó Mario después de mucho insistir en que nos invitaba él, fue que pasamos al comedor donde ocupamos la mesa que teníamos reservada. Esta era redonda como para cuatro, pero nosotros eramos tres.
Y tras tomar asiento, Sole comentó:
----- Este sitio está genial, seguro que os gusta.
Y haciendo gestos de aprobación 
fue que le dije:
----- Tiene buena pinta, si.
Mário a su vez comentó:
----- Yo ya lo conocía.
----- Ah, si... ----- le dijo Sole.
Y haciendo gestos afirmativos le aclaró:
----- Unas tres o cuatro veces habré comido aquí.
----- ¿ Y que tal ?
Mário le respondió haciendo unos gestos positivos... 
------ La verdad que muy bien...
Sole sonrió con la satisfacción de haber acertado.
Enseguida nos trajeron las cartas, que enseguida nos pusimos a mirar, y que para mi sorpresa también estaban escritas en inglés

y

francés.
Después de un minuto, Sole nos comentó:
----- Hoy tienen marmitako.
----- Seguro que está bueno. ----- dijo Mário.
----- Yo lo comí una vez y estaba superior... ----- comentó Sole.
Los dos me miraron y Sole me preguntó:
----- ¿ Te apetece ?
Hice un gesto encogiendo los hombros y respondí:
----- A ver, el pescado no es mi fuerte; pero si me lo recomendáis... vamos con ello.
Y sonriendo, Sole nos dijo:
----- Pues tres marmitakos y no se hable más.
Entonces Mário nos preguntó:
----- ¿ Y que más pedimos ?
Y mirando la carta sugerí:
----- Aquí tienen una bandeja de quesos y embutidos ibéricos con muy buena pinta.
Y haciendo gestos de aprobación...



Mário comentó:
----- Pues no estaría mal como entrante; pedimos una y la compartimos.
----- Vamos a ello. ----- dijo Sole.
----- Falta el beber... ----- dijo Mário ----- ¿ Que pedimos ?
Hice un gesto y sugerí:
----- Para los ibéricos yo pediría un Rioja; para el marmitako como es pescado, diría que un blanco...
Entonces Mário comentó:
----- La última vez que vine por aquí tenían un txakolí estupendo.
Y haciendo un gesto de aprobación


fue que le dije:
----- No estaría mal.
Tras una seña de Sole fue que vinieron a tomarnos nota; y una vez que la tomaron y mientras esperábamos, nos pusimos a hablar de lo que cada uno habíamos hecho en estas casi dios décadas desde que salimos del instituto... Sole y yo ya nos habíamos puesto un tanto al día la noche anterior en ese bar de copas donde trabajaba y donde nos encontramos; y ellos dos también lo estaba ya que como supe después se veían de vez en cuando.
Mário me indicó para que empezase yo, y así le fui haciendo un resumen de mi vida, obra y milagros desde que dejé el instituto; y en cuanto terminé, fue que le dije:
----- Y más o menos esto es todo.
Me miró con cierta admiración


y me dijo:
----- Joder tío, te felicito... Eres un hombre de éxito.
Y con una expresión un tanto incrédula, fue que le dije:
----- ¿ Un hombre de éxito ? ¿ Y que es el éxito ?
Sole sonrió y me dijo:
----- Anda Danny, no vayas de modesto.
La miré y le dije:
----- Pero que modesto, si a fin de cuentas no he hecho nada extraordinario y que no pueda hacer cualquiera.
----- Tío, eres empresario... ----- me dijo Mário.
Le miré con cierta sorpresa...

y le respondí:
----- ¿ Pero que dices ? ¿ Empresario yo ? Para nada...
----- Como que no...
----- Pues no... lo único que tengo es un negocio con cuatro socios.
----- Ya, pero eso comparado conmigo... Que quieres que te diga.
----- ¿ Y que pasa contigo ? ----- le pregunté.
----- Joder, tu fuiste a la universidad y te sacaste tu carrera, has trabajado en España y en Inglaterra, te has montado un negocio y vives sin mayores problemas... ¿ Que más quieres ?
Me reí...




y le dije:
----- Ufffff....!!!! si tu supieras los problemas que se nos presentan con los clientes.
----- Ya, supongo que no todo es color de rosa...
----- No, no lo es...
----- Y de una manera o de otra todos tenemos problemas, porque el trabajo es un continuo problema.
----- Exacto, así es.
Nos quedamos unos segundos en silencio, y tras mirar a Mário le dije:
----- Te toca... ¿ Que ha sido de ti en estos años ?
----- Buuuffff...!!!! un desastre.
Me reí



y le dije:
----- No será para tanto.
Suspiró y tras mirarme dijo:
----- Na extraordinario que contar.
----- Pero algo habrá... ----- le insistí.
Me miró unos segundos, y me dijo:
----- Solo coincidimos un año en el instituto.
----- ¿ Solo un año ? ----- dije con cierta sorpresa.
----- Si, fue el primer año; los empollones pasasteis, pero yo tuve que repetir.
----- No recuerdo eso... ----- le dije.
----- Pues si, repetí porque era muy vainas, y solo el primer año coincidimos en el mismo grupo... Al año siguiente pasé a duras penas, yo creo que más por compasión que por méritos propios, y ya iba retrasado.
Justo en ese momento nos servían aquella bandeja con quesos e ibéricos que íbamos a compartir, y que la verdad tenían una pinta estupenda. A continuación nos sirvieron las copas de vino y comenzamos a dar cuenta de aquellos manjares.
Y tras comentar y aprobar aquello que estábamos degustando, fue que pedí a Mário que continuase...
----- Bueno, quedaste en que pasaste al segundo años después de repetir.
----- Si, así fue.
----- ¿ Y que tal te fue en el nuevo nivel ?
----- Buaaahhh... otro desastre, y tuve que repetir otra vez.
----- Pero bueno...
----- Que no tío, que lo de estudiar no era lo mio... Mientras vosotros ibais con la promoción, yo iba cada vez más retrasado y con gente dos o tres años más jovenes que yo, y en esas edades se nota esa diferencia.
----- ¿ Y tras esa segunda repetición ?
----- Pues se acabó mi vida académica porque tampoco conseguí pasar y a mi viejo se le acabó la paciencia y me sacó del instituto para ponerme a trabajar.
----- Pues vaya...
----- Mi viejo tenía un taller familiar con mis tíos, así que con dieciocho años me puso a currar con ellos.
----- ¿ En el taller familiar ?
----- Si claro, mi abuelo fue quien lo montó allá por Hoznayo y luego se lo dejó a los hijos.
----- Y te hiciste mecánico... ----- le dije.
----- Pues no... ----- me respondió.
----- Ah, no... ----- dije con cierta sorpresa.
Y a continuación le pregunté:
----- ¿ Que fue lo que pasó ?
----- Solo duré un año.
----- Pues porque ya era tarde para ser aprendiz, y a mi tampoco me iba ese curro... y no puse interés, la verdad. Así que pasado un año, ya con diecinueve me fui a ejército ha hacer la mili voluntario, y allí aprendí a conducir camiones y otros vehículos pesados.
----- Ah, pues eso está bien.
----- Cuando me licencié, convalidé algunos carnets y me saqué otros en la autoescuela, y así comencé a trabajar en agencias de reparto con furgonetas y pequeños camiones. Pero no se ganaba pasta, y a penas llegaba justo a fin de mes.
----- ¿ Y que hiciste ?
----- A través de un colega me fui a navegar en la mercante, sacamos juntos la cartilla de navegación y estuve como cuatro años navegando y ganando buen dinero.
----- Pues genial entonces, y además viste mundo.
----- Si, algo vi. La Costa Este Norteamericana, y algo de Canada; también parte de Europa y Africa... Pero visitas relámpago y trabajando porque en un barco siempre hay tareas que hacer; no había días libres para hacer turismo.
----- ¿ En que barcos navegaste ?
----- Cargueros principalmente, y también un par de petroleros.
----- ¿ Y al final ?
----- Pues cuando ya tuve una buena cantidad de dinero me quedé en tierra y me puse a currar con mi cuñado que tenía un camión y me hice su socio; y así juntos recorrimos media Europa.
----- Pues tendrás batallas que contar con tanto viaje... ----- le dije.
----- No te creas, estábamos en muchos sitios pero era verlo y no verlo. Era llegar, descargar, dormir, tomar nueva carga y a otro sitio. Así durante tres años.
----- ¿ Y pasado sesos tres años ?
----- Por fin pude comprarme mi propio camión y me hice autónomo.
----- pues no te iría mal si compraste tu propio camión.
----- Pues la verdad que no puedo quejarme, gané buena pasta con la que pude pagar algunos créditos en que me metí... Un día conocí a una chica que me encandiló y campanas de boda.
Sole y yo nos reímos...




a la vez que le dije:
----- Pues mira, eso no lo hice yo.
Me miró con el gesto torcido y me dijo:
----- Fuiste más inteligente.
Le miré un tanto sorprendido...


y le dije:
----- ¿ Tu crees ?
Con un gesto afirmativo me respondió:
----- La vida en el camión es muy nómada y no es la adecuada para vivir con una pareja, porque la mayoría del tiempo estás lejos de casa, de un lado para otro; como mucho dos o tres veces al mes estás en casa dos o tres días. Y así es imposible hacer vida en pareja.
----- Intuyo que te separaste... ----- le dije.
Hizo un gesto afirmativo y me respondió:
----- A los cinco años... eso ya fue insostenible.
----- ¿ Que pasó ?
----- Pues reconozco que fui muy golfo y me lo pasé muy bien y gastando dinero.
----- Yaaa... y ella se enteró.
Suspiró y me respondió:
----- Ella se enteró de mi y yo de ella, porque durante mis ausencias no se estuvo quieta y también se lo pasó bien ea mis espaldas.
Y sonriendo, apuntó Sole:
----- Tal para cual.
----- Más o menos... ----- dijo Mário.
Y a continuaciónn, tras mirarme, apuntó:
----- Además de no haber pegado golpe, se gastaba una buena parte del dinero que dejaba en casa.
----- Vaya culebrón... ----- apunté.
----- Pero culebrón del bueno... ----- apuntó Mário.
----- Pues como lo siento... ----- le dije.
Me miró sorprendido


y me dijo:
----- ¿ Por que ? Si fue lo mejor que me pudo pasar.
Hice un gesto y le pregunté:
----- Y al final... ¿que ?
----- Ella por su camino y yo por el mio; pero antes la muy hija de puta me sacó una buena tajada con la que me libré de ella y la perdí de vista. Y no he querido volverme a comprometer con nadie en serio... Así que agarré de nuevo el camión, me metí en la carretera de un lado para otro evitando el venir por aquí y haciendo vida en el camión; a fin de cuentas ya estaba libre del todo porque por suerte no tuvimos hijos, que si no.
----- Si no esas aventurillas que tuviste no las habrías podido tener... ----- le dijo Sole en tono pícaro.
Nos reímos los tres...





----- No me seas malvada... ----- le dijo Mário.
----- ¿ Y como te va hoy ? ----- le pregunté
Hizo un gesto y me respondió:
----- Pues no me puedo quejar; digamos que con hacer un par de viajes a la semana o tres como mucho, me es suficiente para ir tirando.
----- Bueno, siendo así... estarás satisfecho.
----- Si, puedo decir que si.
Entonces le miré y le dije:
----- A tu manera también has triunfado.
Hizo otro gesto y dijo:
----- Visto así.
----- Pues claro que has triunfado. ----- le dijo Sole.
Continuará..........................................................