Avances en las astas .

Supongo que todo lo que decís es siempre contando con un corneador habitual, yo en mi caso siempre he intentado que mi mujer diese el paso de tener sexo con otros hombres, dado que conmigo supongo que por tantos años que llevamos juntos la chispa que hubo ya no está, pero tampoco he conseguido convencerla ni siquiera un poquito. Es más mi fantasía que la suya, desde luego, a mi me encantaría verla disfrutar del sexo en la vertiente que fuera e incluso sin mi, pero ya me he dado por vencido. No voy a forzarlo más, ella sabe que mi sexualidad en éste momento es muy diferente a la suya y los dos lo tenemos asumido.
Así que el tema sexual en mi pareja va en dos líneas paralelas que raramente se juntan, y a pesar de todo funcionamos.
Mis morbos se alimentan de leer las vivencias de los que si lo habéis conseguido y lo disfrutáis. Y de tener mis aventuras esporádicas de vez en cuando.
Que tengáis suertecita.
 
Supongo que todo lo que decís es siempre contando con un corneador habitual, yo en mi caso siempre he intentado que mi mujer diese el paso de tener sexo con otros hombres, dado que conmigo supongo que por tantos años que llevamos juntos la chispa que hubo ya no está, pero tampoco he conseguido convencerla ni siquiera un poquito. Es más mi fantasía que la suya, desde luego, a mi me encantaría verla disfrutar del sexo en la vertiente que fuera e incluso sin mi, pero ya me he dado por vencido. No voy a forzarlo más, ella sabe que mi sexualidad en éste momento es muy diferente a la suya y los dos lo tenemos asumido.
Así que el tema sexual en mi pareja va en dos líneas paralelas que raramente se juntan, y a pesar de todo funcionamos.
Mis morbos se alimentan de leer las vivencias de los que si lo habéis conseguido y lo disfrutáis. Y de tener mis aventuras esporádicas de vez en cuando.
Que tengáis suertecita.
En mi caso, de forma natural, tras ver que después de la primera experiencia salió todo bien y después de sopesarlo con mi mujer decidí planteárselo al tercero lo de que fuera algo habitual
 
Creo que ya he contado algo de mis experiencias, pero lo resumo aquí. Yo lo tuve muy fácil porque a mi mujer actual le encantan las pollas. Ya no solemos quedar con nadie (cosas de la edad), pero, cuando nos conocimos, fue una maravilla el pervertirla poco a poco proponiéndole mil guarrerías, aprovechando siempre sus momentos de mayor excitación. Con mis otras parejas no tuve tanta suerte. La primera, por falta de interés. No había nada que hacer. La segunda, por celos. Quizás se hubiera dejado follar por otro en mi presencia, pero no consentía la posibilidad de verme follar con otra, en el caso de que hubiéramos quedado con otras parejas. Con la tercera no hubo problema: teníamos tanta complicidad y era tan morbosa que le encantó, por ejemplo, que una vez le abriera el culo, estando a gatas, para que otro se la empotrara mas profundamente. El problema era que estaba casada... y que encontré a mi pareja actual. Como decía, la fui pervirtiendo poco a poco con mis fantasías. Primero accedió a quedar con un amigo para jugar y hacer un trio de sexo suave, sin penetración. Ella disfrutó mucho poniéndole la polla durísima, lamiéndola y frotándosela por su coñito. Y yo viéndola. Aquello salió bien y pasamos a mas: contactamos con otro chico y, por fin, hubo penetración. Y fuerte. No sabéis como se excita cuando tiene cerca una polla bien dura. O dos o tres. Llegamos a contactar con varios chicos y también con otras parejas como nosotros. Le encantaba tener un macho encima follándola sin contemplaciones. Terminamos haciéndolo a pelo y comprobé que la leche en su coño le excitaba aún mas que las pollas. Yo no tenía un papel pasivo y participaba como el que mas, dándole placer hasta decir basta. Por mi parte no hubo bajón alguno. La veía disfrutar tanto que me excitaba como nunca. Supongo que eso del bajón que nombráis se produce cuando solo es una fantasía o si no se tienen las ideas claras. Yo nací así de pervertido... En la foto, una de nuestras quedadas con un amigo, hace ya algunos años.
 

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Creo que ya he contado algo de mis experiencias, pero lo resumo aquí. Yo lo tuve muy fácil porque a mi mujer actual le encantan las pollas. Ya no solemos quedar con nadie (cosas de la edad), pero, cuando nos conocimos, fue una maravilla el pervertirla poco a poco proponiéndole mil guarrerías, aprovechando siempre sus momentos de mayor excitación. Con mis otras parejas no tuve tanta suerte. La primera, por falta de interés. No había nada que hacer. La segunda, por celos. Quizás se hubiera dejado follar por otro en mi presencia, pero no consentía la posibilidad de verme follar con otra, en el caso de que hubiéramos quedado con otras parejas. Con la tercera no hubo problema: teníamos tanta complicidad y era tan morbosa que le encantó, por ejemplo, que una vez le abriera el culo, estando a gatas, para que otro se la empotrara mas profundamente. El problema era que estaba casada... y que encontré a mi pareja actual. Como decía, la fui pervirtiendo poco a poco con mis fantasías. Primero accedió a quedar con un amigo para jugar y hacer un trio de sexo suave, sin penetración. Ella disfrutó mucho poniéndole la polla durísima, lamiéndola y frotándosela por su coñito. Y yo viéndola. Aquello salió bien y pasamos a mas: contactamos con otro chico y, por fin, hubo penetración. Y fuerte. No sabéis como se excita cuando tiene cerca una polla bien dura. O dos o tres. Llegamos a contactar con varios chicos y también con otras parejas como nosotros. Le encantaba tener un macho encima follándola sin contemplaciones. Terminamos haciéndolo a pelo y comprobé que la leche en su coño le excitaba aún mas que las pollas. Yo no tenía un papel pasivo y participaba como el que mas, dándole placer hasta decir basta. Por mi parte no hubo bajón alguno. La veía disfrutar tanto que me excitaba como nunca. Supongo que eso del bajón que nombráis se produce cuando solo es una fantasía o si no se tienen las ideas claras. Yo nací así de pervertido... En la foto, una de nuestras quedadas con un amigo, hace ya algunos años.
Que mal repartido está el mundo. O que suerte os ha tocado a algunos.
 
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