Hay algo más morboso, que un macho corneador, mientras se folla a tu hembra fuerte y tú tienes el rabo duro de lo morboso que te pone verlo y de lo cornudo que eres... hay algo más morboso en esa situación, que el propio corneador, el macho de tu hembra, te ofrezca con sus propias manos, sus tetas, para que si quieres, las chupes???
Ha tomado tanta posesión de ella, que te ofrece durante un rato y porque a él le da la gana, las tetas de tu hembra, que ahora es suya, y que si no te deja chuparlas, no las chupas.
"Venga, cornudo, si estás muy cachondo, te dejo que le chupes las tetas a tu hembra, pero solo un rato. Luego ya sigo yo con ella, y tú pajeándote mientras lo hago". Mirad el rabo tieso del cornudo.