UtopiaHorny
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Otra anécdota que tengo fue un día que fuimos a jugar al rugby en educación física con el instituto y antes de nada he de decir una cosa: las mallas apretadas en las chicas son una bendición para nosotros.
Ya había alguna chica en clase que llevaba mallas demasiado pequeñas porque las iban reutilizando demasiado porque fuera de clase no hacían otro tipo de ejercicio, entonces sus madres no les iban comprar otras mallas solo para clase. A alguna se le metía la malla casi hasta el fondo del coño y se le dibujaban perfectamente los labios, que empalmada llevaba yo con alguna.
Pero la anécdota es el día de rugby. Hicieron un ejemplo para toda la clase y para la paridad presentaron a un chico y una chica que tenían que hacer el saque de rugby y meter la cabeza debajo de los brazos de unos muñecos. Pues la chica que se presentó ya para empezar hacía gimnasia rítmica y era súper flexible, llevaba unas mallas bien apretadas, se agachó metió la cabeza entre los brazos de los muñecos y nosotros desde atrás viendo el ejemplo se le distinguían en las mallas todo el coñito abierto, pero cada labio interno se le distinguía casi eh, os juro que nunca vi tanta nitidez a través de una malla y suponemos que un tanga o algo. Se le notaba cada centímetro. Era tan exagerado y debíamos estar todos los tíos tan boquiabiertos mirando ese tremendo espectáculo que una compañera se tuvo que poner en medio para taparnos todo. Pero estoy seguro que la mayoría de día nos la cascamos pensando en ese culazo, y lo bien que se distinguía todo.
Ya había alguna chica en clase que llevaba mallas demasiado pequeñas porque las iban reutilizando demasiado porque fuera de clase no hacían otro tipo de ejercicio, entonces sus madres no les iban comprar otras mallas solo para clase. A alguna se le metía la malla casi hasta el fondo del coño y se le dibujaban perfectamente los labios, que empalmada llevaba yo con alguna.
Pero la anécdota es el día de rugby. Hicieron un ejemplo para toda la clase y para la paridad presentaron a un chico y una chica que tenían que hacer el saque de rugby y meter la cabeza debajo de los brazos de unos muñecos. Pues la chica que se presentó ya para empezar hacía gimnasia rítmica y era súper flexible, llevaba unas mallas bien apretadas, se agachó metió la cabeza entre los brazos de los muñecos y nosotros desde atrás viendo el ejemplo se le distinguían en las mallas todo el coñito abierto, pero cada labio interno se le distinguía casi eh, os juro que nunca vi tanta nitidez a través de una malla y suponemos que un tanga o algo. Se le notaba cada centímetro. Era tan exagerado y debíamos estar todos los tíos tan boquiabiertos mirando ese tremendo espectáculo que una compañera se tuvo que poner en medio para taparnos todo. Pero estoy seguro que la mayoría de día nos la cascamos pensando en ese culazo, y lo bien que se distinguía todo.
