Despuès de 2 años en Senegal, volvimos a Paris. Llegamos en junio, el ejercito nos habia asignado un piso con parking dentro de la ciudad y mientras venian nuestras cosas, estuvimos unas semanas en nuestras familias.
El primer dia de julio, ya estaba en el puesto que me toco. A pesar de ser militar, fui destinado al ministerio de asuntos exteriores, un puesto tranquilo, sin uniforme, horarios ‘normales’. Ella encontro en un ayutamiento cerca de donde trabajaba. Estabamos a 5 minutos el uno del otro y para casa, unos diez minutos en metro.
Enseguida, cogimos el ritmo, nos encontrabamos a mediodia para comer juntos o a veces estar tranquilos en un parque al lado. Empezamos a salir de noche y a contactar por anuncios a hombres. El 14 de julio es fiesta nacional en Francia, no se trabaja. El dia ese, nos levantamos tarde, hacia un buen dia. Nos hemos quedado en casa, andabamos desnudos, nos excitabamos pero sin llegar a follar ; hacia las 6 de la tarde, se habia bajado en calor y salimos, los dos ligeritos de ropa, todavia con el frescor del agua de la ducha en la piel. Ella con vestido de verano, muy ligero, corto, se abrochaba en la parte delantera ; zapatos de tacon alto, nada debajo. Tenia ella 22 y ya mucha experiencia en el sexo. Paseamos por las calles cercanas, sin rumbo fijo. Vimos la entrada del cine por casualidad, estaba metida entre dos edificios, era un pasillo largo, ancho, al final una taquilla. Ella me miro.
- Vamos ?
Y entramos. Pedimos dos entradas pero el cajero solo nos cobro una… La sonrio y dijo que en este lugar, cada mujer estaba invitada. Ademàs de la entrada, el vendia refrescos, unas golosinas, condones… Pedi una caja de 12. Su sonrisa fue otra, la miro a ella de los pies a la cabeza y nos dijo :
- Pasadlo bien
La entrada de la sala estaba un poco màs lejos, habia una puerta doble, en frente unos servicios y lavabos y derecho el pasillo se estrechaba y habia cabinas individuales. La pregunte donde queria ir, me dijo que al cine pero primero queria ir a refrescarse un poco. La dije que yo entraba en el cine pero que me quedaba en la puerta.
Abri. Primero no vi nada ; tenia la pantalla por la izquierda y el resto era bastante oscuro. Me acostumbré rapido. Entonces, vi mejor. Delante de la pantalla, butacas, varias filas separadas por un pasillo en el medio. Habia un centenar de plazas, era realmente un cine, no una pequeña sala. Seguia con la puerta en la espalda. Delante de mi, una zona sin butacas, a la derecha, tres filas de butacas, esta vez sin pasillo en el medio y en la pared opuesta a la puerta, unas 20 butacas, 4 filas de 5 ; habia unos 25/30 hombres, unos diez perdidos entre el centenar de plazas delante de la pantalla, el resto estaba a la derecha, repartidos en las butacas. Eran maduros, unos negros, unos magrebies… Algunos estaban con el rabo fuera, otro se acariciaban de forma màs discreta y en la ultima fila, se notaba claramente que algunos estaban en plena accion.
Cuando entro ella, yo veia muy bien. Vi la miradas, el interes que ella suscito. Ella me dijo que no veia nada, la cogi de la mano y fuimos hacia las butacas contra la pared delante de nosotros, pasamos delante de todos, y me dio morbo pensar todo lo que ya se estaban imaginando. Nos pusimos en medio de todo, teniamos asientos delante, detràs y por los lados. Estaba sentada a mi izquierda. En la pantalla, una chica rubia, joven, recibia los asaltos de dos machones peludos y pollones. Ella no era muy guapa pero tenia algo de vicio en la cara. La tipica peli porno de los 70.
Fue ella que ataco. Me sussuro que estaba muy nerviosa pero muy excitaba. Empezo a tocarme a travès del pantalon. Yo la besaba el cuello, la boca. A la vez podia observar que nos miraban mucho. Fue ella que empezo a abrir los botones, primero hasta la mitad, suficiente para que pueda acceder a sus pechos. Tenia entonces tetas tirando a pequeña, un 85b pero con pezones muy salidos. Cuando termino con los botones suyos, se ocupo de los mios. Me saco la polla y empezo a jugar con ella.
Fui yo que termine de abrir los botones que quedaban, cuando no hubo màs, ella abrio el vestido y a la vez, abrio las piernas. Durante un tiempo, estuvimos los dos como aislados de todo y de todos, nos besabamos, nos tocabamos, yo acariciaba su vulva ya muy mojada, chupaba sus pezones, besaba sus pechos, su boca. Ella agarraba mi pene, acariciaba mi glande. Fue cuando se inclino para chuparme que vi que habia hombres mirandonos. Ella, para chuparme comoda, se habia puesto de lado, una pie apoyado en la butaca, la vulva expuesta a la miradas. Eran 5, la polla en la mano, masturbandose mirando. Ella los vio tambien. No nos asustamos, no protestamos, se acercaron.
Uno se puso detràs de nosotros, era un magrebi, unos 45/50. Estaba acariciando su pollon, lo tenia potente, circuncidado, con un movimiento de cabeza, me pidio permiso. Para que ? En el momento, he hecho un movimiento afirmativo con la cabeza, para que la pueda tocar, acariciar. Empezo por tocarla el culo, acariciaba, ella miro, vio que pasaba, se dejo. El tio siguio con sus pechos, jugaba con sus pezones, manoseaba sus tetas. Ahora con dos manos, la toco la vulva, primero el pubis peludo, luego bajo, tenia ella la vulva afeitada, estaba mojando mucho, muy excitada. Ella se puso derecha, sentada en la butaca, las piernas en los apoyabrazos, abierta, disponible. El moro seguia detràs, acariciando su melena larga. Ella giro un poco la cabeza y se encontro con el pene del magrebi… Le cogio con la mano y se lo llevo a la boca. Entendi entonces que las cosas iban a ser muy calientes y que yo tenia que vigilar para que ella se lo pase lo mejor posible. Me subi el pantalon y enseguida se presento otro macho. Negro, diria del caribe, se planto delante de ella, la polla ya dura. Ella le agarro mientras chupaba el otro y en unos segundos probo el pene negro. Veniamos de dos años en Senegal y ella habia sido embrujada con el tema de la pollas negras. Se paso de uno a otro mientras un tercero ya se atrevio a acercarse y acariciar sus pechos. Ella se levanto y se metio de rodillas encima de la butaca, ofreciedose. Di un condon al caribeño. Vi que estaba un poco reacio en ponerlo pero le dijé que sin goma, nada. Asi que lo puso, ella seguia jugando con el pene del magrebi, y el magrebi miraba con interes lo que estaba pasando con el caribeño que acababa de ponerse la goma. Por seguridad, lo comprobé. No habia moviles que hagan linterna, y seguia todo bastante oscuro por donde estabamos. La unica solucion que vi es meter mano. Noté que el tio lo tenia puesto y que estaba muy excitado. Se la metio despacito, el se bajo un poco, ella se arqueo un poco para levantar el culo. Cuando estuvo dentro, se acabo el despacito. La empotro fuerte, metiendosela hasta los huevos antes de salir casi de todo y volver otra vez. Ella se movia en ritmo, casi la tiraba de cabeza a cada empujon. Estaba clavada por delante y por detràs, tragando la polla del magrebi por un lado, invadida por la del caribeño por otro. Por suerte, no duro mucho, se corrio, lleno el condon y salio. Lamentaba no haber aguantado màs. El magrebi dio la vuelta y vino enseguida, el sitio que dejo libre fue ocupado enseguida por un tio maduro y otro negro, esta vez bien africano. Por supuesto se tiro al pollon negro mientras el maduro frotaba su pene en la cara de ella y le envolvia con su melena morena. El magrebi me pidio condon y se lo puso, comprobe y el me dijo : guiame ! Meteme en ella ! Lo hice y mientras la estaba metiendo, se agarraba a sus nalgas, abriendolas… Al contrario del otro, se la follo despacio, disfrutaba. Ella tambien. Vi como cogia el jugo de ella, abriendola el culito despacio, ella se dejaba, muy ocupada con la dos pollas que chupaba, un tercero se habia metido delante y la habia cogido la mano para que ella le masturbe. El magrebi queria escupirla en el culo para lubrificar pero le dije que no, me agache y soy yo que ademàs de lamer el orificio, deje saliva, cogio su polla en la mano, apunto el ano y apoyo despacio. Su ano empezo a reacionar, se aflojo, se abrio… No habia milagro, solo era el resultado de 5 años de enculadas, casi diarias. Yo tenia adiccion a su culo, ella era aficionada a las enculadas. La metio su pollon sin problemas, la follo despacio, cada vez se lo metia profundo y se notaba que ella estaba muy receptiva. De los que chupaba y pajeaba, el maduro se corrio gimiendo. El que tenia en la mano quiso su boca, ella se nego, el tio se fue sin màs mientras otro venia, otro maduro magrebi y otro que presumia de un pollon enorme. El enculador me dijo que se iba a correr y si podia hacerlo encima del culo de ella. Le dije que no teniamos con que limpiar y me enseño un paquete de pañuelos de papel. Saco su pollon, arranco el condon y la dejo un monton de lefa encima de las nalgas… Necesito dos pañuelos para recoger todo. Esta vez, fue el negro que ella habia chupado que vino. Misma rutina, le di un condon, comprobé que estaba bien puesto. Pensé que la iba a encular directamente pero se tomo un tiempo follandola el coño. Ella goteaba de placer. El moro que ella tenia en la boca estaba diciendola de todo en arabe, estaba viendo como ella se comia el pene, le chupaba con ganas. Cuando vi el tio levantar los ojos al cielo, adiviné que se estaba corriendo, que la llenaba la boca. Mientras, el negro se habia metido dentro de su culo y ella reacionaba bastante. La cosa es que me explico màs tarde que al recibir la corrida en la boca teniendo el pollon taladrandola el culito, se habia corrido. Fuerte. Sus orgasmos solian ser breves pero muy intensos. Este era muy intenso pero a la vez muy largo, ya la habia pasado unas veces. En el momento no me pudo contar nada. Los tios venian, cuando el negro termino con ella, estaba ya cansada. Se volvio a sentar, dos que estaban detràs de ella se metieron por cada lado de su cara y ella siguio pasando de uno a otro mientras la acariciaban los pechos. Se presento un tercer magrebi. Este era màs joven, tendria 30, igual menos. Y vaya tranca que tenia. Primero estuvo de pie delante de ella, y cuando ella vio esto, se tiro encima. Luego, le diun condon pero el me enseño que tenia de los suyos porque uno como el mio hubiera reventado. Se lo metio, y no lo tuve que comprobar porque fue ella que le vino a dar una chupadas màs con el condon puesto. Luego se arrodillo, ella se puso al borde del asiento y se dejo llenar. Casi se la metio entera. Ella soplaba, gemia, se habia puesto otra vez la cabeza hacia atràs y los dos tios habian vuelto a solicitarla para que se la chupen pero estaba tan exultante que ni se preocupaba de ellos. El tio la agarro las piernas y empezo a ir y venir dentro de ella, cada vez que entraba, ella gemia y cada vez que se retiraba, ella suspiraba. No se veia mucho pero solo verla la cara por la luz de la pantalla era suficiente para comprobar que estaba gozando fuerte. Estaba con los ojos cerrados, la boca entrabierta, de vez en cuando daba une lamida al pene que tenia por un lado, chupaba un poco el otro… El magrebi la seguia follando, aunque no parecia, daba fuerte y casi se la metia entera. Pidio correrse en su pubis y fue ella enseguida que dijo que si, yo tenia todavia los pañuelos. Saco su pollon, y empezo a frotarse contra su vulva, ella le guiaba con la mano y a la vez le acariciaba. Cuando el empezo a echar los chorros, ella tambien se corrio. Se llenaron sus pelitos negros y rizados de la lefa espesa, habia mucho, salpico su clitoris, su vulva. Los dos que estaban detràs de ella echaron la lefa casi juntos, saltaron gotas y chorros en su melena, su pecho, su cara.
Decidimos parar a ese momento, ademàs de los que actuaron, habia un monton mirando. Ella quito lo que podia de lefa en su melena con los pocos pañuelos que quedaban, se levanto, estaba desnuda, solo tenia sus tacones. Y se vistio sin prisas. A otro lado de la sala, se habia formado un grupo. Fuimos a ver que pasaba. Primero pensamos que era tia pero era un hombre, muy fino, llevaba medias de rejilla, tacones, y una peluca rubia. La verdad es que podia pasar bien por una mujer. Le estaban follando a pelo, paso uno, luego otro, y otro y cada uno se corria dentro. El ultimo magrebi que se la follo, el del pollon, vino a hablarnos y el dijo que en este cine, unos venian para hombres o travesties y otros para mujeres. Nos pregunto si ibamos a volver y quedamos con el para el sabado siguiente.
