MachoVelludo
Miembro activo
Los días siguiente en casa transcurrieron de manera natural, todos hacíamos nuestra marcha normal y como siempre estaba mi madre no podíamos aprovechar para comentar mi padre y yo grandes cosas.
A veces nos hacíamos miradas de complicidad pero sin más como de alguna manera reafirmando que nos parecía bien lo que hacíamos.
Un dia de los siguientes mi madre tenía una comida con las amigas y se pasó todo el día fuera y mi padre y yo nos quedaríamos solos en casa (si digo que no tenía expectación por si pasaba algo mentiría)
Buenos días colega -me dijo mi padre
Buenos días papá- le contesté
Cómo se nota que no está tu madre en casa, menuda ereccion llevas ahí eh cabronazo?
A ver, alguna ventaja tenía que tener que mamá no estuviera no?
-le solté yo
Claro que si cabroncete jeje -me dijo mi padre
Tocará desayunar un poco -le dije
No creo que desayunes leche de brik no? Tú ya tienes leche de sobra en esa polla -me soltó
Papá tío
-le dije entre risas
Joder esque menuda corrida el otro día colega, como no quieres que te suelte eso.
Hablando de este tema notaba que a mi padre se le ponía morcillona la polla y se le iba notando cada vez más un buen bulto.
Ey, que se te está poniendo tocha papá -le solté
Ya sabes que es hablar de cualquier cosa de sexo y me pongo como un toro hijo- me dijo
Después de decirme eso mi padre se bajó los pantalones sin esperar que fuera a hacer eso. Madre mía, si en erección ya era la hostia morcillona tampoco iba mal. (Decir que que los dos seamos de polla de sangre ayuda bastante)
Cuando vi el panorama le solté un ¡Papá tío! (En plan, que haces?) ya que como digo no lo esperaba
Va, no me seas ahora un monje eh? O te tengo que recordar el pedazo lefazo que soltamos el otro día? Mira como crece la polla de tu padre mira, mira…
Mientras me decía eso me señalaba con el dedo su polla y como estaba creciendo, su erección ya iba marcando las venas del rabo, su prepucio, y su poca curvatura hacia arriba, bien gorda como siempre.
Y aquí está polla de toro preparada
-me día señalando con dos dedos de sus manos al rabo
Al ver todo eso yo ya tenía una erección considerable y se me iban a romper las costuras de los calzoncillos
Bájate los calzoncillos anda -me soltó mi padre
Papá que…
Que te bajes los calzoncillos hostias -me soltó firme y contundente
No me dio tiempo a terminar la frase y reconozco que esa autoridad me daba bastante morbo. Deje lo que tenía en las manos para desayunar y obedeci bajándome los calzoncillos y quitándomelos enteros
Vaya dos pollas de toro eh? -me soltó. Venga, vamos a darle caña colega.
Así que sin más obedecí y empezamos a pajearnos juntos otra vez como aquella noche en la que empezamos las pajas de padre e hijo.
Así así, dale cabronazo bien fuerte -me soltaba.
Los dos empezamos un ritmo bastante frenético en las pajas y si seguíamos a ese ritmo íbamos a terminar bastante rápido, aunque mi padre aceleró bastante el proceso el cabronazo.
Sabes que estoy imaginando mientras le damos? -me solto- en que nos calzamos los dos a una tía, padre e hijo reventando los dos a una buena guarra, abriéndole bien todos los agujeros y dejando que disfruten bien de nuestro rabo.
Uffff, joder papá para que con esas cosas me correre rapido -le solté
Que si tío que si, yo puedo abrirle bien el coño primero de habérselo comido y te puedo dejar el camino abierto para que mi hijo se la clave, bien fuerte y duro como hay que dar y más tarde se la clavo yo, nos vamos alternando tío, te molaría? -me decía entre jadeos y sonidos de su punta de la polla lubricada
Me encantaría papá, me encantaría joder -le soltaba yo también entre jadeos
Luego de haberle dado bien lo suyo ponemos a la tía en el medio y la llenamos bien de leche, proteína pura de macho hijo.
Después de decirme eso mi padre se acercó a mí y volvió a poner su brazo en mi hombro como aquella primera noche, antes de eso tiró una balleta de estas típicas de limpiar al suelo cerca de nosotros.
Imagínate que el objetivo es esa balleta, esa guarra a la que tenemos que complacer con nuestra leche, hay que lefarla enterita. -me dijo con su voz morbosa y autoritaria.
Si papá si -le soltaba yo entre más jadeos
Venga así así, vamos a darle leche colega, yo estoy que me corro ya eh? -me soltó
Y yo también papá (porque literalmente no aguantaba ya más)
Mi padre se juntó todo lo que pudo de las caderas quedando las dos pollas bastante juntas y a la misma altura.
Toma leche de toro zorra, me corro -soltó mi padre
Me corro yo también, me corro, me corro -solté yo
Y como cosa del destino se sincronizaron nuestras pollas para empezar a soltar leche al unísono. Lefazos por doquier que caían en la balleta (imaginando que era alguna tía) lefazos que caían fuera y otros salpicando muebles de la cocina.
Temblando, jadeando y exhaustos y estábamos dándole hasta la última gota.
Joder que bien rindes tío -me dijo mi padre. Las tienes que tener contentas eh? He pensado que algún día nuestras fantasías podrían de dejar de ser fantasías sabes? Calzarnos los dos a una tía de verdad, juntos.
No esperaba para nada que mi padre me soltara eso, que me estuviera proponiendo que los dos nos follaramos juntos a una tía.
Pero que estás diciendo papá? Reconozco que mi primera impresión fue de asombro y de extrañeza.
Bueno perdona que no quería incomodarte eh? -me dijo
Joder no no es eso pero me ha bloqueado bastante el tema, no es como pedirle sal al vecino sabes?
Bueno bueno tío, relax vale? No tensemos el tema y vamos a olvidar el asunto.
Una vez que acabamos de hablar le solté:
Cambiando de tema, más vale que limpiemos esto que como venga mamá y vea el olor a lefa que hay en la cocina sí que vamos a correr bien si…
Igual podéis pensar que en ese momento la cosa se cago o algo pero entended que para mí fue un choque fuerte en la que entraron en juego muchos sentimientos.
Espero que tengáis ganas de ver cómo continúa el tema
A veces nos hacíamos miradas de complicidad pero sin más como de alguna manera reafirmando que nos parecía bien lo que hacíamos.
Un dia de los siguientes mi madre tenía una comida con las amigas y se pasó todo el día fuera y mi padre y yo nos quedaríamos solos en casa (si digo que no tenía expectación por si pasaba algo mentiría)
Buenos días colega -me dijo mi padre
Buenos días papá- le contesté
Cómo se nota que no está tu madre en casa, menuda ereccion llevas ahí eh cabronazo?
A ver, alguna ventaja tenía que tener que mamá no estuviera no?
Claro que si cabroncete jeje -me dijo mi padre
Tocará desayunar un poco -le dije
No creo que desayunes leche de brik no? Tú ya tienes leche de sobra en esa polla -me soltó
Papá tío
Joder esque menuda corrida el otro día colega, como no quieres que te suelte eso.
Hablando de este tema notaba que a mi padre se le ponía morcillona la polla y se le iba notando cada vez más un buen bulto.
Ey, que se te está poniendo tocha papá -le solté
Ya sabes que es hablar de cualquier cosa de sexo y me pongo como un toro hijo- me dijo
Después de decirme eso mi padre se bajó los pantalones sin esperar que fuera a hacer eso. Madre mía, si en erección ya era la hostia morcillona tampoco iba mal. (Decir que que los dos seamos de polla de sangre ayuda bastante)
Cuando vi el panorama le solté un ¡Papá tío! (En plan, que haces?) ya que como digo no lo esperaba
Va, no me seas ahora un monje eh? O te tengo que recordar el pedazo lefazo que soltamos el otro día? Mira como crece la polla de tu padre mira, mira…
Mientras me decía eso me señalaba con el dedo su polla y como estaba creciendo, su erección ya iba marcando las venas del rabo, su prepucio, y su poca curvatura hacia arriba, bien gorda como siempre.
Y aquí está polla de toro preparada
Al ver todo eso yo ya tenía una erección considerable y se me iban a romper las costuras de los calzoncillos
Bájate los calzoncillos anda -me soltó mi padre
Papá que…
Que te bajes los calzoncillos hostias -me soltó firme y contundente
No me dio tiempo a terminar la frase y reconozco que esa autoridad me daba bastante morbo. Deje lo que tenía en las manos para desayunar y obedeci bajándome los calzoncillos y quitándomelos enteros
Vaya dos pollas de toro eh? -me soltó. Venga, vamos a darle caña colega.
Así que sin más obedecí y empezamos a pajearnos juntos otra vez como aquella noche en la que empezamos las pajas de padre e hijo.
Así así, dale cabronazo bien fuerte -me soltaba.
Los dos empezamos un ritmo bastante frenético en las pajas y si seguíamos a ese ritmo íbamos a terminar bastante rápido, aunque mi padre aceleró bastante el proceso el cabronazo.
Sabes que estoy imaginando mientras le damos? -me solto- en que nos calzamos los dos a una tía, padre e hijo reventando los dos a una buena guarra, abriéndole bien todos los agujeros y dejando que disfruten bien de nuestro rabo.
Uffff, joder papá para que con esas cosas me correre rapido -le solté
Que si tío que si, yo puedo abrirle bien el coño primero de habérselo comido y te puedo dejar el camino abierto para que mi hijo se la clave, bien fuerte y duro como hay que dar y más tarde se la clavo yo, nos vamos alternando tío, te molaría? -me decía entre jadeos y sonidos de su punta de la polla lubricada
Me encantaría papá, me encantaría joder -le soltaba yo también entre jadeos
Luego de haberle dado bien lo suyo ponemos a la tía en el medio y la llenamos bien de leche, proteína pura de macho hijo.
Después de decirme eso mi padre se acercó a mí y volvió a poner su brazo en mi hombro como aquella primera noche, antes de eso tiró una balleta de estas típicas de limpiar al suelo cerca de nosotros.
Imagínate que el objetivo es esa balleta, esa guarra a la que tenemos que complacer con nuestra leche, hay que lefarla enterita. -me dijo con su voz morbosa y autoritaria.
Si papá si -le soltaba yo entre más jadeos
Venga así así, vamos a darle leche colega, yo estoy que me corro ya eh? -me soltó
Y yo también papá (porque literalmente no aguantaba ya más)
Mi padre se juntó todo lo que pudo de las caderas quedando las dos pollas bastante juntas y a la misma altura.
Toma leche de toro zorra, me corro -soltó mi padre
Me corro yo también, me corro, me corro -solté yo
Y como cosa del destino se sincronizaron nuestras pollas para empezar a soltar leche al unísono. Lefazos por doquier que caían en la balleta (imaginando que era alguna tía) lefazos que caían fuera y otros salpicando muebles de la cocina.
Temblando, jadeando y exhaustos y estábamos dándole hasta la última gota.
Joder que bien rindes tío -me dijo mi padre. Las tienes que tener contentas eh? He pensado que algún día nuestras fantasías podrían de dejar de ser fantasías sabes? Calzarnos los dos a una tía de verdad, juntos.
No esperaba para nada que mi padre me soltara eso, que me estuviera proponiendo que los dos nos follaramos juntos a una tía.
Pero que estás diciendo papá? Reconozco que mi primera impresión fue de asombro y de extrañeza.
Bueno perdona que no quería incomodarte eh? -me dijo
Joder no no es eso pero me ha bloqueado bastante el tema, no es como pedirle sal al vecino sabes?
Bueno bueno tío, relax vale? No tensemos el tema y vamos a olvidar el asunto.
Una vez que acabamos de hablar le solté:
Cambiando de tema, más vale que limpiemos esto que como venga mamá y vea el olor a lefa que hay en la cocina sí que vamos a correr bien si…
Igual podéis pensar que en ese momento la cosa se cago o algo pero entended que para mí fue un choque fuerte en la que entraron en juego muchos sentimientos.
Espero que tengáis ganas de ver cómo continúa el tema