Reencuentro con Elena

Una relación sexual o sentimental entre dos adultos, es aceptable siempre que los dos se encuentren en situación de igualdad de uno respecto al otro.
Si por debilidad emocional, mental, económica, social o la que sea... Una de las partes se encuentra en situación de poder sobre la otra. La relación se convierte en tóxica y por lo tanto, uno está abusando del otro.
Por mucho que Javi advierta a Noelia: Él no deja de buscarla para su disfrute, aprovechándose que ella es una chica con evidentes problemas emocionales y psicológicos.
Si de verdad no quisiera hacerle daño, no continuaría con ella.
De entrada, nunca, jamás se da esa situación de igualdad. Y se trata precisamente de eso, de ser consciente, de que la intimidad compartida permita percibir las diferencias de la situación en la que se encuentra cada uno y las diferencias de cómo vive esa situación cada uno, y de comprometerse con el otro teniéndolas en cuenta para desplegar una pasión plena para los dos ... o los tres.
Lo otro es buscar la propia satisfacción, como la buscas en un videojuego o comiendo cheetos. Que es lo que hace Javi con Noelia. El mejor momento que han vivido estos dos fue cuando Javi "la tuvo en cuenta" en el cumpleaños de Noelia, y eso hasta Javi lo sabe, y le jode.
 
De entrada, nunca, jamás se da esa situación de igualdad. Y se trata precisamente de eso, de ser consciente, de que la intimidad compartida permita percibir las diferencias de la situación en la que se encuentra cada uno y las diferencias de cómo vive esa situación cada uno, y de comprometerse con el otro teniéndolas en cuenta para desplegar una pasión plena para los dos ... o los tres.
Lo otro es buscar la propia satisfacción, como la buscas en un videojuego o comiendo cheetos. Que es lo que hace Javi con Noelia. El mejor momento que han vivido estos dos fue cuando Javi "la tuvo en cuenta" en el cumpleaños de Noelia, y eso hasta Javi lo sabe, y le jode.
Seguramente no me he expresado bien.
Tú hablas de diferencias de personalidad, de percepción, de ideas... Ésas son enriquecedoras y dan consistencia a la relación, si se aprende a convertirlas en algo positivo.
Yo me refiero a la igual capacidad para aceptar lo que estás viviendo como una decisión tuya. Es decir, que no esté influenciada por un problema mental o emocional, algún tipo de coacción (relaciones forzadas), o una inmadurez que no te permita ser dueño de tus decisiones.
En éste relato: Javi sabe perfectamente que Noelia no está bien mentalmente. Y sin embargo la ha convertido en su juguete sexual, o en su saco de boxeo, según sus apetencias. Está claro que Noelia no es totalmente dueña de si misma ni de sus acciones, Javi lo sabe y es a ratos cruel y despiadado con ella.
 
Seguramente no me he expresado bien.
Tú hablas de diferencias de personalidad, de percepción, de ideas... Ésas son enriquecedoras y dan consistencia a la relación, si se aprende a convertirlas en algo positivo.
Yo me refiero a la igual capacidad para aceptar lo que estás viviendo como una decisión tuya. Es decir, que no esté influenciada por un problema mental o emocional, algún tipo de coacción (relaciones forzadas), o una inmadurez que no te permita ser dueño de tus decisiones.
En éste relato: Javi sabe perfectamente que Noelia no está bien mentalmente. Y sin embargo la ha convertido en su juguete sexual, o en su saco de boxeo, según sus apetencias. Está claro que Noelia no es totalmente dueña de si misma ni de sus acciones, Javi lo sabe y es a ratos cruel y despiadado con ella.
Sí, claro que te has expresado bien, y yo también. Y no me refiero a ningún aspecto concreto, ni diferencias de personalidad, ni de ideas, me refiero exactamente a que dos personas ni son iguales ni viven igual la misma experiencia. Así de claro. Por ejemplo pueden llegar a un acuerdo, pero hay uno que propone y el otro que acepta, esa ya es una diferente posición.
Dicho esto, creo que estamos básicamente de acuerdo en lo que afecta a Javi ... de lo otro, tal vez también lo estemos sin saberlo, jeje
 
¿Monótonas? ... Pero si está a punto de estrenarle el "culito" ... ... aunque sí, falta un poco más de mano dura.
Pues yo prefiero esta etapa a la que tuvo con valentina 🤷🏽‍♂️

Me refiero a la repetitiva dinámica que se ha dado con Noelia, lo que ha dominado la narrativa bastante rato ya, pierde morbo creo yo.

No es muy claro que los une, Javier parece arrepentirse cada vez luego que se la folla, y ella cree ganárselo un poco más cada vez que lo complace, parecen universos distintos donde cada uno vive. :unsure:
 
Me refiero a la repetitiva dinámica que se ha dado con Noelia, lo que ha dominado la narrativa bastante rato ya, pierde morbo creo yo.

No es muy claro que los une, Javier parece arrepentirse cada vez luego que se la folla, y ella cree ganárselo un poco más cada vez que lo complace, parecen universos distintos donde cada uno vive. :unsure:
¡Qué bien expresado! ¡Qué poético! ... Dos universos distintos que inexorablemente se van acercando, uno incapaz de alejarse del otro, y el otro cada vez más atraído por el uno ¿Qué puede pasar si esos dos universos llegan a compartir espacio, tiempo y algo más?

¿Alguien puede llegar a imaginarse el Big Bang que se produciría si esos universos se uniesen y, de repente, apareciese ese agujero negro errante que todos conocemos, y del que tenemos noticias de su existencia pero no de su trayectoria?
 
Última edición:
Capítulo 738

Estuvimos callados durante un buen rato hasta que ella me volvió a preguntar si me gustaba la cena, respondiendo yo afirmativamente. Ella me pidió que no me moviera, que se encargaba de recogerlo todo y de traer el postre. El vino que estuvimos bebiendo se me subió un poco y se le pusieron unas chapetas que acompañaban a sus risas bajitas. Se escudaba diciendo que ya no bebía casi nada y que con nada que tomaba cogía el punto rápidamente. Preparó un volcán de chocolate para cada uno y volvió en poco tiempo, sentándose a mi lado esta vez para enlazar uno de sus brazos con uno de los míos. Tampoco duró mucho el momento, porque nos lo acabamos rápido al ser pequeños, volviendo ella a recogerlo todo para sentarnos en el sofá, trayendo las copas de vino. La verdad es que estaba bastante guapa, con un vestido de lana de color gris, el cual realzaba mucho sus curvas. También tenía una pequeña apertura que hacía de escote, acompañando con unas medias negras muy tupidas y unos botines de color parecido al vestido.

Entre risas se sentó a mi lado en el sofá, empezando a acariciar mi cuerpo, especialmente metiendo su mano por dentro de mi ropa. Sus ojos estaban un poco entornados y ella no hacía más que mirarme a los ojos y a los labios. Intentó besarme en varias ocasiones, pero le decía que no quería por aquello de que parecía que tenía un poco de infección. También le dije que no debería haber tomado nada de alcohol, pero tampoco tomé demasiado, quedando un rato aún para tomarme el antibiótico que me tocaba. Ella se tapó la boca con la mano, pidiéndome perdón al habérsele pasado aquello, pero intentó solucionarlo al entrelazar sus dedos con los míos mientras me decía que estaba muy guapo, piropo que yo recibí como si tal cosa. No conforme con mi reacción, Noelia se subió encima de mí, con una pierna a cada lado para agarrar mi cara y mirarme, pegando nuestras narices y empezando a darme besitos por toda la cara.

Con unos susurros algo temblorosos me dijo que no podía esperar más y que necesitaba que nos fuéramos a la habitación para poder empezar cuanto antes. Así que nos levantamos y ella me llevó de la mano, moviendo su culo sensualmente hasta que llegamos a mi habitación. Allí, ella me sentó sobre la cama y me dio un abrazo, con varios besos más por toda la cara. Luego me empezó a desnudar hasta que lo hizo por completo, mirándome con mucho deseo. Tras eso, se empezó a desnudar a ella misma, echándome yo hacía atrás para apoyarme sobre mis codos y ver cómo lo hacía. De manera lenta y sin apartar su mirada hacia mí, se fue despojado de cada una de sus prendas, empezando por sentarse en la silla de mi escritorio para quitarse esos botines que llevaba, levantándose después para quitarse el vestido y quedar con su ropa interior y esos panties negros que llevaba, cosa que fue la siguiente en quitarse.

Ya estando solo con su ropa interior se me quedó mirando, dándose una vuelta para que viera que llevaba un tanga. En esta ocasión, tanto su sujetador como su tenga eran de color blanco. Hasta se puso en pompa para menear su culo, ganándose un azote por mi parte que hizo que riera. Tiré de ella para que se pegara a mí, encargándome yo de quitarle el resto de su ropa. Lo hice con su sujetador primero, aprovechando para agarrar sus tetas y manosearlas bien. Rápidamente, sus pezones se pusieron duros y ella empezaba a gemir de manera mimosa, acariciando mi cara. Después puse mis manos en su culo mientras nos mirábamos, susurrándome ella que me quería. Se lo bajé del tirón y la tumbé sobre la cama, poniéndome yo a su lado. Le empecé a acariciar el cuerpo, yendo rápidamente hasta su pubis para acariciarlo, empezando ella a estremecerse. Aunque no le duró mucho aquello, pues a los pocos segundos pasé a su rajita.

La encontré muy húmeda y se la empecé a acariciar. Noelia lanzaba gemidos muy tiernos y buscaba contacto con mi cuerpo, dirigiendo sus manos por diferentes partes de él. Estuve jugando con ella unos minutos, estimulándola de diferentes formas y procurando que no se corriera, llegando a estar muy cerca de hacerlo en dos ocasiones, pero paré a tiempo. Me acomodé sobre la cama para que ella se pusiera entre mis piernas y me la comiera, cosa que hizo durante un buen rato, aunque tuve que pararle en un par de ocasiones con un firme tirón de pelo por ir ella con mucha prisa. Le indiqué que lo hiciera despacio, disfrutándolo ella mucho más de esa manera por los gemidos que lanzaba. También le advertí que no gritara ni que se emocionara, porque ya me habían llamado la atención un par de veces por su culpa y no quería que volviera a pasar. Noelia continuó chupando mientras pensaba que era toda una putada no poder hacerle yo sexo oral, porque tenía muchas ganas, pero teniendo la boca en ese estado, prefería aguantar unos días para no correr riesgos.

Por eso me decidí a follarla, porque necesitaba ir un poco más allá y de esa manera estaría bien. La puse bocarriba y se la metí del tirón, gimiendo ella de la impresión. Lo tenía empapado y aún no habíamos hecho gran cosa. La empecé a follar a buen ritmo, aunque trataba de que no llegara hasta el final, pero en menos de 10 minutos se acabó corriendo por mucho cuidado que tuve. Pero eso no hizo que la cosa fuera a menos, porque se puso muy cachonda. Esa cara que tenía lo decía todo y ahora fue ella la que me colocó bocarriba en la cama, para darme la espalda mientras me montaba, haciendo subir y bajar su culazo. Yo le soltaba algún azote, gimiendo ella más fuerte en esos momentos y haciéndolo de manera uniforme y no muy alta entre medias. Le dije que me mirara y así lo hizo, follándome ahora como más me gustaba. Me gustaba bastante ver cómo su piel se enrojecía por algunas zonas, además de ver sus mejillas muy encendidas. Tiré de ella para pegar nuestros cuerpos y puse mis manos en su culo. Después le llevé un dedo a la boca para mojarlo y luego lo llevé hasta su culo, para acariciar su ano.

Noelia dio un respingo, pero se dejó hacer. La notaba bastante nerviosa cuando empecé a jugar por esa zona, comentándole que me apetecía empezar ya, porque no quería que se nos hiciera muy tarde. Estuve un rato jugando con su culo, usando también lubricante. Me habría encantado comérselo, pero pasaba lo mismo de antes. No quería correr riesgos, así que me dediqué a masturbarla con mis dedos cubiertos en lubricante. Con lo nerviosa que estaba de primeras no esperaba que fuera a comportarse de la manera en la que lo hizo, pues estuvo muy participativa y parecía disfrutarlo. Con lo bien que iba todo y lo excitada que la veía, pensé que ya estaba preparada. Y cuando fue a dar el paso se volvió a poner nerviosa, aunque no se echó para atrás. Me eché mucho lubricante en la polla y empecé a acariciarle la zona con ella, haciendo algo de presión de vez en cuando, irguiendo ella su espalda como respuesta.

No quería esperar más y le avisé de que iba a entrar, pidiéndome ella que llevara cuidado y que no le hiciera daño. No fue tan lenta la cosa como esperaba al ser su primera vez y al tenerlo tan pequeñito y cerrado. Costó un poco que entrara, pero su culo rápidamente se adaptó a mi polla, aunque no hacía más que meter el glande y un poco más. Le pregunté qué sentía, diciendo ella que era algo bastante raro, pero que podía seguir si yo quería. Y vaya que si lo hice, porque la empecé a follar, metiendo progresivamente mi polla cada vez más hasta que se la metí por completo. Noelia resoplaba y se quejaba de vez en cuando, pero no me decía que parara en ningún momento. Hasta se animaba a empujar con su culo en algunas ocasiones. Habiéndola metido ya por completo, empecé a follarla de manera más contundente, agarrándola de las caderas, pero sin apretar mucho, porque era su primera vez y pensaba que no podía venirme muy arriba.

-¿Quieres que te rompa el culo, guarra? -le pregunté muy excitado después de estar fallándola durante un rato y ver lo bien que ella aguantaba.
-Síiiiiii... -respondió en forma de gemido.

Ahora sí que la empecé a follar más duro, aguantando ella muy bien, cosa que me incitaba a aumentar más el ritmo. Al final la acabé reventando, sonando bastante cuando nuestras carnes se encontraban. Noelia hacía rato que tenía su cabeza hincada en la almohada para ahogar sus gemidos. Me notaba muy cerca, por lo que le dije que se tocara el coño, apurando yo lo máximo que pude hasta que me corrí, llegando hasta a gemir yo también. Descargué dentro de su culo y a ella le empezaron a temblar las piernas de manera muy exagerada. Me vencí con ella para quedar los dos de lado sobre la cama, respirando rápida y pesadamente hasta que a mí se me pasó el efecto de mi orgasmo, cogiendo papel para taparle a ella y yendo al baño para lavarme, dándome una ducha rápida. Cuando volví le dije a ella que hiciera lo mismo y fue al instante, yendo yo a tomarme el antibiótico y volviendo a la habitación.

Estaba muy adormilado cuando Noelia volvió completamente desnuda y con su pelo recogido con una goma. El medicamento me dejaba muy somnoliento y ella se sentó en la cama, preguntándome si se podía quedar a dormir conmigo, porque ya era tarde y además, llovía. Hice un sonido para responderle, pero ni yo mismo lo entendí. Supongo que ella lo entendería como una afirmación, porque se puso su tanga y cogió una de mis sudaderas para ponérsela y meterse en la cama conmigo, abrazándome y dándome las buenas noches, besándome en la mejilla, aunque luego lo hizo también en los labios. La verdad es que había sido una noche divertida y también estuvo bien el momento de la cena, la cual disfruté al estar muy buena, pero sabía que había sido cosa de Andrea, porque estaba todo demasiado bueno y ya había probado esos platos anteriormente de ella misma. No pude pensar en nada más, porque caí redondo por el antibiótico.
 
Última edición:
Me dan tanta pena Noelia. Entiendo que ella lo hizo mal hace un año, que jodió la relación de la hermana y todo eso. Pero lo que esta haciendo Javi ya rosa lo mal tipo. Se esta aprovechando de una chica que esta loca por el, a sabiendas del daño que le va a causar.
Igual, lo admiro tremendamente. Aparte de ser el mayor semental del que leí en estos relatos, en esta oportunidad, le hizo la cola a Noelia, sin necesidad de dilatar lentamente, de relajar con una lamida ni nada por el estilo. Solo un poco de lubricante y pa adelante. La cabeza adentro y a meterle que no se rompe. Y ella, no sufrio absolutamente nada, sino que al contrario, se corrió de lo lindo, hasta con las piernitas temblando...
 
Capítulo 739

Horas después me desperté por los besos que Noelia no paraba de darme por la cara estando sobre mi cuerpo. La aparté de mí, moviéndome para ponerme de lado y darle así la espalda. Estaba muy somnoliento y me apetecía dormir un poco más, pero ella no paraba de abrazarme y acariciar mi pecho al colar su brazo entre el mío y mi torso. También me besaba la cara al incorporarse y jugaba con mi pelo usando sus dedos. Al final me desveló y se volvió a abrazar con fuerza a mí una vez me puse bocarriba. Le pedí que me dejara tranquilo, pero ella lo hacía caso y no se dedicaba a otra cosa que a besarme la cara o los labios, haciendo de vez en cuando un sonido infantil cuando me daba un beso en la cara, apretando mucho. Estuvo durante un rato hablando entre susurros al ser muy temprano, comentando que la noche anterior quedó reventada, literalmente. Por eso se acabó durmiendo enseguida, porque no podía más. También me confesó que le dolía un poco el culo, diciendo que era normal con lo que tenía entre las piernas mientras reía.

Pero igualmente, decía que le había parecido increíble y que le había encantado que yo hubiera sido el primero en hacérselo de esa manera. No le pedí explicación ninguna, pero ella se acomodó para contarme lo que sintió en el momento. Empezó diciendo que de primeras lo sentía muy raro y no le terminaba de gustar, llegándole a doler un poco, aunque pensaba que el vino que había tomado en la cena le había ayudado a relajarse. Me contaba que estaba segura de que de no ser por haber bebido un poco no lo habría disfrutado igual. También me contó que al verme a mí tan excitado, empezó a disfrutarlo más, excitándose ella mucho también al verme así y al notar cómo me estaba gustando romperle el culo. Y el remate fue cuando se empezó a tocar para poder llegar más rápido. Ahí sí que lo disfrutó de verdad y llegó a tener un orgasmo tan intenso como para haber acabado dormida. Me dijo que lo podíamos hacer cuando yo quisiera, pero que pensaba que necesitaba un día o dos para volver a hacerlo, porque sentía un poco de malestar, pero que quitando eso, podríamos repetir, pidiéndome que le avisara para que se pudiera preparar y demás.

Tras unos momentos en los que ella no paraba de hacerme cariñitos, me preguntó si podía darse una ducha antes de irse a la universidad, diciéndole que me daba igual, así que se levantó después de darme otro abrazo y un beso muy tierno en los labios, aunque sin usar su lengua. Oí la ducha correr y ya sin ella en la cama, me acomodé, estando bastante a gusto y calentito, pareciendo que me iba a dormir de nuevo, pero de repente, Noelia me despertó, fastidiándome bastante ese momento, pero lo hizo para traerme el antibiótico. Me dijo que sabía de sobra que a esas horas no tenía nunca nada de hambre, pero que no podía tomármelo con el estómago vacío, así que me trajo un poco de yogur líquido y un bollito para que pudiera comer algo y poder así tomármelo. Lo acabé haciendo para que no se pusiera más pesada, diciéndome ella que descansara un poco más, arropándome cuando me volví a tumbar. Me dio unos cuantos besos más y se marchó, deseándome que tuviera un buen día.

Al final sí que conseguí dormir un poco más, pero no me dormí ni nada por el estilo para ir al trabajo. Lo que no hice fue salir a correr ni nada de aquello tampoco. No me apetecía mucho y estaba bastante a gusto en casa. Hacía mucho frío y la verdad es que me apetecía mucho estar en casa tapado y entretenido con otras cosas. Pero tenía que ir a la academia para continuar con el trabajo, aunque iba con otro ánimo, porque esa semana iba a ser la última en la que íbamos a dar clase hasta la vuelta de Navidad. Me esperaban 3 buenas semanas de vacaciones en las que en realidad no tenía ningún plan, pero me apetecía hacer algo y tenía que pensar el qué. Aunque también es verdad que esas ganas se me iban y venían constantemente al pensar que no tenía muchas opciones de compartir tanto tiempo libre, por no decir que no tenía a nadie, ya que la cosa con mi círculo más íntimo no estaba muy allá y con los demás que tenía trato, pues se marchaban a sus pueblos o también se iban con otras amistades, como era el caso de los amigos de la tienda en la que jugábamos, que aun así nos veríamos, pero no tanto como yo imaginaba que lo podríamos hacer al estar en vacaciones.

Me extrañó bastante no encontrarme a Noelia cuando Andrea volvió de la universidad, sobre todo con lo cercana que estaba cada vez más conmigo a pesar de las veces que le advertía de que luego lo iba a pasar mal. Tampoco es que me preocupara, ni mucho menos, porque estaba muy tranquilo sin que ella estuviera allí. Se ponía muy pesada estando todo el tiempo encima de mí y preguntándome cosas sin parar, siendo muy agobiante, lo que desembocaba en que me enfadara bastante con ella. Sobre todo, cuando veía que hablaba o interactuaba con otra chica. Eso la ponía como en alerta y llegaba a ponerse hasta algo histérica. Pero por suerte, no tendría que aguantar nada de eso, pudiendo preparar entre mi compañera de piso y yo la comida y luego poder disfrutar de ella tranquilamente, sobre todo ahora que había vuelto la cosa entre nosotros a la normalidad.

-Noelia se ha ido a casa un poco temprano -dijo sacando tema de conversación.
-Ah...
-Tenía un poco de mala cara hoy cuando la he visto. Se movía mucho en su silla cuando estábamos desayunando todas en la cafetería.
-Estará mala o algo, yo qué sé...
-Ya, jajajaja.
-¿Qué pasa? -pregunté oliéndome que Noelia le podía haber contado por qué se encontraba mal.
-Nada, nada.
-¿Y esa risa?
-Es que... En fin... Jajajaja.
-¿Por qué no me cuentas lo que pasa y nos reímos los dos?
-Nada, es que veo normal que estuviera así esta mañana.
-Ah, ¿sí? ¿Por qué?
-Con los gritos que pegaba anoche... Pues normal que esté así. Si es que eres muy bruto, jajajaja.
-Ah, que anoche estabas aquí...
-Pues claro, vivo aquí, jajajaja.
-¿No me digas? -dije con ironía- Joder, es que creía que no estabas.
-¿Y dónde iba a estar entonces?
-Como anoche Noelia preparó ese plan, pues pensaba que tú habías dormido en su casa.
-Pues no, jajajaja. Dormí en mi habitación. Me estuvo contando que iba a ser una noche especial y le pareció buena idea preparar una cena y tal. Le eché una mano y cené temprano para irme a mi habitación y dejaros intimidad.
-Vamos, que lo escuchaste todo.
-Pues sí, jajajaja. Pero no te preocupes...
-¿No? ¿Por qué?
-Porque no es la primera vez que te escucho. Ni la segunda, ni la tercera... Jajajaja.
-Ya...
-Es que... ¿Qué quieres que te diga? Imagino que en el tema se te olvida que no vives solo, yo qué sé... Jajajaja. Pero tranquilo, que no me importa que hagas ruido. A ver, si es muy tarde, pues sí, sobre todo si tengo clase al día siguiente, pero bueno... Jajajaja.
-Te hace mucha gracia, ¿no?
-Jajajaja, pues un poco. Pero ya paro.
-La verdad es que sí, se me va un poco la cabeza a veces. Pero no soy al único al que le pasa.
-¿No? Bueno, imagino que con lo que he escuchado de las chicas que se van contigo, pues les pasará lo mismo que a ti, jajajaja.
-¿Y a ti? ¿No te pasa?
-¿Eh? -dijo mientras se le iba la risa.
-Pues que yo también te he escuchado. Y no solo una vez. De hecho, ahora que lo pienso, me sorprende un poco no haberlo hecho antes. La primera vez fue hace varios días, que vaya meneo teníais tu novio y yo para que sonara así la cama... La otra fue hace no mucho, aunque no se oía la cama, pero sí a ti.
-¿Cómo...? -dijo poniéndose roja a rabiar.
-No creo que alguien se colara en tu habitación, ¿no? Pues debías ser tú.
-Pero...
-No te preocupes tú tampoco, ¿vale? Que no me importa nada, jajajaja.
-Javi, yo... Qué vergüenza...
-Joder, ¿te ríes de lo mío y ahora te pones así? Aunque es verdad que tus gemidos son divertidos. Me hacen gracia cuando los haces así tan agudos.
-Pfff... -decía avergonzada, tapándose la cara con las manos.
-No te pongas así, mujer, que no es para tanto. Tiene que ser divertido irse contigo a la cama con esos gemidos -dije mientras recogía lo mío para llevarlo a la cocina y empezar a fregarlo al haber acabado de comer-. Estaría bien probar... Es broma, jajajaja. O no... -dije entre dientes entrando ya en la cocina.
 
Me esperaban 3 buenas semanas de vacaciones en las que en realidad no tenía ningún plan, pero me apetecía hacer algo y tenía que pensar el qué. Aunque también es verdad que esas ganas se me iban y venían constantemente al pensar que no tenía muchas opciones de compartir tanto tiempo libre, por no decir que no tenía a nadie ...
A Ángela ya ni la nombra.
 
Se ponía muy pesada estando todo el tiempo encima de mí y preguntándome cosas sin parar, siendo muy agobiante, lo que desembocaba en que me enfadara bastante con ella. Sobre todo, cuando veía que hablaba o interactuaba con otra chica. Eso la ponía como en alerta y llegaba a ponerse hasta algo histérica. Pero por suerte, no tendría que aguantar nada de eso, pudiendo preparar entre mi compañera de piso y yo la comida y luego poder disfrutar de ella tranquilamente, sobre todo ahora que había vuelto la cosa entre nosotros a la normalidad.
-No te pongas así, mujer, que no es para tanto. Tiene que ser divertido irse contigo a la cama con esos gemidos -dije mientras recogía lo mío para llevarlo a la cocina y empezar a fregarlo al haber acabado de comer-. Estaría bien probar... Es broma, jajajaja. O no... -dije entre dientes entrando ya en la cocina.

El bueno de @Keranos tal vez nos esté invitando a imaginar una escena de pelea de gatas por el macho del lugar, no sé, por malpensar algo. O no ...
 
Yo creo que es porque se ha centrado más estos últimos capítulos en Noelia.
Por cierto, ahora vamos a salir de dudas.
Si los Gemidos de Andrea, como yo creo era porque estaba acompañada, o más bien sola, que es lo que yo creo.
Concretamente sola y pensando en las veces que escucha a Javi. A ver si en esta confesión en la que están los dos acaban confesándose la de veces que se han corrido pensando en el otro, ya puestos a sincerarse.
 
Sé que Javi es irresistible para cualquier fémina e incluso para Mario y Hugo.

Pero que Andrea se meta con él ya sería demasiado turbio. Ella de primera mano sabe lo que su amiga siente por él, por todo lo que ha pasado, por como se ha involucrado, así que traicionarla así sería como adoptar otra personalidad de la nada. Trastocaría los límites, incluso los de esta historia.
 
Atrás
Top