Señor que se toca con fotos de mi novia

Hola! La vida me tiene bastante ocupado últimamente, tengo un capítulo prácticamente terminado, mañana creo que lo termino y lo publico… que ganas de poder publicar mas de seguido, en breve podré!!!
 
daniijnrcd25 dijo:
Hola! La vida me tiene bastante ocupado últimamente, tengo un capítulo prácticamente terminado, mañana creo que lo termino y lo publico… que ganas de poder publicar mas de seguido, en breve podré!!!
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Ganas ya de morbo
 
daniijnrcd25 dijo:
Hola! La vida me tiene bastante ocupado últimamente, tengo un capítulo prácticamente terminado, mañana creo que lo termino y lo publico… que ganas de poder publicar mas de seguido, en breve podré!!!
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Muchas gracias crack! Aqui esperamos
 
daniijnrcd25 dijo:
Siempre me ha vuelto loco la idea de mi novia siendo mirada, manoseada, rozada, follada y todo lo demás por otros hombres.
No me atrevo a decírselo pero me encanta tirarle indirectas y ver si le da por decir algo que me de indicios de que se acostaría con otros, sin demasiada suerte hasta ahora.
De momento me conformo con tocarme imaginando como otros hombres mas fuertes que yo le dan lo suyo y la follan mucho mejor que yo.
Me imagino que a ellos les hace cosas que a mi no me deja hacer, que se vuelve super guarra al estar con ellos. Que vaya a las citas vestida como una autentica putita.
Hace un tiempo entrando en unos chats me dio por contarle a un señor como era ella, y como me pondría que otro la follara. El hacía comentarios que me ponian a mil. Era un tío bastante morboso y cerdo. Hablábamos bastante a menudo y ya se podía decir que eramos casi hasta coleguillas, hablando no solo de mi preciosa novia si no de cosas de la vida.
Un día que yo venía muy borracho de fiesta le escribí y le propuse quedar no se muy bien con que intención, en el fondo sí, algo que yo trataba de no sacar a la luz pero con el alcohol me salía.
El estaba madrugando, yo no había dormido, le dije que le iba a enseñar por fin una foto de mi novia, fotos normales, claro.
Quedamos en que pasaba a buscarme con el coche e ibamos a tomar un café, a ambos nos iba a venir bien. De camino a un café paró el coche a un lado en una calle tranquila y me dijo "va, enséñame una foto de María ya, no puedo esperar más".
Yo accedí y le enseñé una de las últimas fotos, era una que le hice en una visita a un pueblito cercano unos días antes, en la que ella estaba super guapa, vestida con unos botines con un pelín de tacón, vestido no muy largo tampoco, medias negras y con labios pintados de rojo.
Le dejé el móvil para que pudiera ampliar y dijo "joderrrr, sabía que iba a estar buenísima, me encanta". Todo esto sin cortarse ni un pelo. Tampoco se cortó cuando se llevo la otra mano al paquete para acariciarsela mientras miraba de cerca la foto de mi novia.
En ese momento a mi me explotaba la cabeza y también la polla, creo que jamás me había puesto tan tan duro de manera tan rápida. Tampoco pude evitar llevarme la mano a la entrepierna.
El se rió y me dijo que le enseñara alguna más. Mientras le buscaba otra se desabrochó la bragueta y siguió acariciándosela. Yo estaba poniéndome a mil. Ese hombre tocándose con la imagen de mi novia, en mis narices...
Le puse otra de ella en la que estábamos en la playa, ella en bikini tanga, con esa maravilla de culito que tiene, visto de perfil y con una parte de arriba que dejaba poco a la imaginación viéndose parte de sus grandes tetas por todos los extremos.
Podéis imaginar cuando le puse esta foto delante. "Joder, que diosa!!!!" dijo mientras se sacó la polla y empezó a pajearse.
Puso su polla justo delante de la pantalla y me decía "mira, mira mi polla en la cara de María. Te gusta que se la ponga así??".
Yo tampoco podía aguantar y me tuve que sacar la polla para tocarme.
El se rió y siguió haciendo comentarios sobre lo rica que estaba mi novia, sobre cuantísimo le gustaría follarla.
Me dijo que le fuera mostrando más fotos mientras el se pajeaba y yo sujetaba el móvil y le hacía zoom cuando me decía.
Tras unos minutos así me dijo que le pajeara yo, que para ser un buen cornudo como yo quería ser tenía que empezar por hacerles pajas a los hombres que deseaban follarla.
No lo veía muy claro porque yo quería ser cornudo, no marica, pero ufff sabía donde darme con ese comentaría de ser buen cornudo. El morbo de esa humillación me pudo y comencé a pajearle mientras el veia las fotos ahora con las manos libres.
Era muy rara esa sensación, coger una polla que no era la mía, era como si fuera totalmente distinta, una sensación muy rara.
Me sentí muy humillado y cachondo, el lo sintió y me dijo "ven, ponte aquí en el hueco de los pedales bajo el volante y pajéame desde aquí".
Así hice, estar de rodillas lo hizo aun mas humillante y yo estaba a mil, pajeándolo y tocándome yo con la otra mano.
En una de esas me cogió y me acerco a su polla y me dijo que si no se la quería comer. Mi respuesta instintiva fue decir "no" y dos segundos después morderme el labio inferior. Los dos sabíamos que era que si y así hice. Me lancé a hacerle una mamada a ese hombre, mientras veía las fotos de mi novia que tengo en la galería del móvil.
No sabía bien como se chupa una polla y tampoco era capaz de tragarla muy hasta dentro pero intenté ponerle un poco de ritmo y unos minutos después en los que me recree lamiéndole incluso los huevos, el empezó a gemir y a decirme que se iba a correr, fui a quitarme y me dijo que no, que me imaginara que yo era mi novia. "Qué te gustaría que hiciera tu novia si me la estuviera chupando, quitarse o tragarselo?". Yo estaba de lo más cachondo y ahí seguí, mamandosela hasta que me llenó la boca de leche.
Abrí la puerta y escupí ese semen en la calle. Nos vestimos y me acercó a donde le dije.
Al llegar a casa me hice la paja más brutal de mi vida. Y justo después de eso fui a escribirle para no se muy bien que decirle y vi que el muy capullo se había enviado montones de fotos de mi novia mientras le comía la polla. Y lo peor de todo, se había enviado un video que me grabó de unos 15 segundos comiéndole polla y huevos.
También se había enviado pantallazos del número de teléfono de ella y de su Ig.
Quería ponerle muy verde, quería decirle de todo por hacer tal cosa pero igual ahora no me interesaba llevarme mal teniendo esa información.

Continuará... maybe
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Que morbazoooo uffff ojalá quedar contigo
 
Te echamos de menos. Esperamos con paciencia el siguiente te capítulo.
 
Todos queremos que continúe!!! A ver si no se olvida de nosotros....
 
Que bueno leer estos comentarios… desde luego animan mucho a buscar tiempo para seguir con el hilo. De hecho el relato no ha hecho más que comenzar pero la vida me tiene muy muuuuy ocupado últimamente… voy a intentar sacar un poco de tiempo este finde. Gracias por vuestras palabras.
 
daniijnrcd25 dijo:
Que bueno leer estos comentarios… desde luego animan mucho a buscar tiempo para seguir con el hilo. De hecho el relato no ha hecho más que comenzar pero la vida me tiene muy muuuuy ocupado últimamente… voy a intentar sacar un poco de tiempo este finde. Gracias por vuestras palabras.
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Gracias a ti siempre
 
daniijnrcd25 dijo:
Que bueno leer estos comentarios… desde luego animan mucho a buscar tiempo para seguir con el hilo. De hecho el relato no ha hecho más que comenzar pero la vida me tiene muy muuuuy ocupado últimamente… voy a intentar sacar un poco de tiempo este finde. Gracias por vuestras palabras.
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animo!!
 
MCysusumiso dijo:
Un morbazo de la hostia!!!! Yo frecuento un sex shop que tiene zona liberal y voy con un tanga sucio y oloroso de mi mujer puesto bajo el pantalón. Como mola y como nos pone pajear y comer a un tío mientras ve fotos de mi mujer y me cuenta lo que le haría.
Es espectacular la experiencia
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Qué morbazo probar algo así. Disfrútalo.
 
C.11.

María escribe a Mario, le dice que acaba de llamarle su novio y que ya hablarán...
María: "perdona, cariño, estaba escribiendo a una compañera".
Juan le pregunta que tal el día y le cuenta que se siente algo mejor y que le apetece estar con ella. Quedan en verse al día siguiente y cenar en casa de el.
Siente una gran alegría de que Juan comience a sentirse mejor y piensa que igual todo vuelve a la normalidad. Tras ello, se siente mal y un poco egoísta por todo este tonteo con Mario solo porque Juan no haya querido tocarla unas cuantas semanas.
Escribe a Mario pidiéndole perdón por lo de antes y diciéndole que no puede ser. "Quiero mucho a mi novio, no estamos pasando por un buen momento y se me han mezclado muchas cosas las cuales me han hecho estar super insegura a la vez que necesitada y justo te cruzaste. Eres un tío maravilloso pero no va a pasar nada entre nosotros, perdón por lo de antes, de verdad".
María envía el mensaje sintiéndose un poco avergonzada pero sintiendo que hace lo correcto.
Mario contesta: "Te entiendo perfectamente, María, no tienes que pedir disculpas. Yo también tengo bastante culpa en esto. Me encantas pero prometo que no me entrometeré más. Te deseo lo mejor y bueno, si algún día necesitas algo aquí estoy".
"Qué tío más majo" se dice para si.

Al día siguiente Juan se despierta con una llamada Manuel. Coge el teléfono medio dormido. Manuel le dice que va de camino a su casa, que se duche y se vista bien putita para recibirle.
Juan le dice que tiene que irse a trabajar. Manuel le dice que llame y diga que está malo y que no se le ocurra poner quejas.
Juan obedece, se ducha, se pone lencería, medias, y demás para recibir a Manuel.
Mientras está preparándose un cafe, llaman a la puerta, es Manuel que aparece con una bolsa de farmacia.
Manuel: "bueno, bueno, mírala ella que putita, como tienes el culito? ya no te duele".
Juan: "Un poco aun, señor".
Manuel: "Luego me encargo de que te vuelva a doler un poquito más, que estás muy apetecible con esa faldita de cuero y esos taconazos... eres toda una zorrita!... Ponte de rodillas, que quiero que me la comas mientras te cuento el siguiente plan".
Manuel saca una caja de pastillas de la bolsa.
Manuel: "te vas a tomar esto cada día, es para que no se te ponga dura y puedas intimar con María sin complacerla y así llevarla a estar un poquito más frustrada y conseguir que algún día te haga cornudo".
Juan: "Pero señor!! ¿Cómo voy a tomar pastillas para eso??"
Manuel: "déjame terminar, cojones!! No son hormonas ni nada raro, son unos relajantes que hacen que te sea mucho más difícil conseguir una erección y por supuesto no es permanente".
Juan: "¿Seguro?"
Manuel: "Por supuesto, puedes leer el prospecto si quieres. Además cada día antes de ir a ver a María vas a estar obligado a masturbarte mucho, viéndolo yo para asegurarme que te sea absolutamente imposible tener una erección con ella".
Juan: "Pero..."
Manuel: "Eso o la jaula, ¿Qué prefieres?
Juan: "Creo que está un poco harta y necesita que me acueste con ella, señor, si no, me va a mandar a la mierda. A veces me contesta borde, cosa que nunca había hecho y es normal... Hoy hemos quedado y quería poder acostarme con ella, y bueno los siguientes días si quiere pues puedo tener gatillazos".
Manuel: "No, eso no va a funcionar así, si hoy te la follas nos cargamos todo el plan. Qué estoy seguro que con el calentón que llevará ya encima, estará mirando a más de uno con ganas de lanzarse a su cuello. Además, si te quiere no te va a dejar porque no te la folles unos pocos meses".
Manuel: "Vamos ponte de rodillas y hazme una mamada como quisieras que me la hiciera ella a mi..."
Juan suspira y sin gastar energías en quejarse hace lo que le ordenan.
Se esmera en ello, tiene un gran cúmulo de emociones pero disfruta mucho de estar así, feminizado, arrodillado y mamándole la polla al señor que tanto le putea, definitivamente ama ser humillado. Además nota lo increíblemente empalmado que se pone, ahora que no tiene jaula, solo mamando una polla y se pregunta si no se estará volviendo completamente marica.
Sin acabar la mamada comienza a gemir y a sentir como un gran orgasmo se forma en su interior. No da crédito a ello, jamás había sentido semejante calentón, sin ni siquiera tocare ni rozarse con nada. Se entrega a mamar esa polla como si la vida le fuera en ello, así hasta que se corre de gusto absoluto y gime como la más zorra con toda la polla de Manuel en la boca.
Manuel: "Joder, cada día me sorprendes más. Sabía que eras maricón pero no tanto."
Juan: "Sí, señor, creo que lo soy mucho"
Manuel: "Me la comes con más ansia que muchos gays reconocidos".
Juan siente un morbo tremendo al oír eso y verse así, habiéndose corrido sobre sus braguitas de encaje y sigue mamándola hasta hacerle correr a Manuel quien explota con una gran corrida que inunda la boca.
Tras correrse, le pone una pastilla en la boca de las que le van a impedir empalmarse y le hacer tragársela con toda la corrida.
Manuel: "Ahora vamos a hacer que te corras otras dos veces antes de irte a ver a María".
 
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