Pues estos días otoñales se va echando de menos el verano, donde la capacidad de morbosear está más al alcance de la mano dado que los modelitos de mi mujer facilitan bastante el juego exhibicionista en público.
En cualquier caso, debido a que aquí por el norte las temperaturas aún se mantienen bastante suaves, el otro día salimos a dar un agradable paseo por la zona costera y, para nuestra sorpresa nos encontramos con bastante afluencia en una de nuestras playas más grandes. y frecuentada por surferos.
Mi esposa llevaba un vestidito muy vaporoso, con botones por la parte delantera y durante nuestro paseo comenzó a jugar desabotonando algunos de ellos y dejando a la vista, como por descuido, bastante paisaje de su piel cuando nos íbamos cruzando con chicos y, por supuesto, sin ninguna prenda de ropa interior como casi siempre.
Al final, consciente de la excitación que estaba provocando en mi, decidió dar un paseo totalmente desnuda hasta el mar para que nada de ropa se interpusiera en las miradas.
Fue para mi una situación tremendamente morbosa y agradable.
Os dejo unas fotos que describen gráficamente un poco lo que os acabo de relatar. Ojalá os gusten tanto como a mi.
PDT. Este mini relato tendría cabida también en "gente de la zona norte".