La noche que cambió a Carmen

onatrapse dijo:
Aunque nada explícito ha quedado de lo sucedido esa primera noche que Carmen se atrevió a ser y hacer "algo diferente"en Barcelona, el relato está lleno de referencias que nos pintan el cuadro general de una tórrida noche junto a Javier, allí partió su transformación anunciada antes de conocerle.
Esa es "La noche que cambió a Carmen", su actitud hacia la vida sufrió un cambió radical, a partir de ahí lograr su felicidad plena se convirtió en su afán, capaz de derribar todo obstáculo moral que lo impidiese, sin importar que cada momento de placer que la acercase a ese logro se convirtiera en más daño hacia quienes dijo alguna vez amar. :rolleyes::cool:
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Perdone que le corrija, tal vez quiso decir usted: "... lograr su satisfacción plena se convirtió en su afán".
Entiendo que si buscase su felicidad plena, al afán de lograr su satisfacción le sumaría la eliminación de cualquier obstáculo que le impidiera conseguir que esa satisfacción que ahora parece puntual pase a ser permanente, paso necesario para acercarse al anhelo de lograr su felicidad. Me refiero concretamente a eliminar ese viejo mueble del recibidor que decora la vida de Carmen y que atiende al nombre de Luis.
 
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Carlos Sevillista dijo:
Prefiero un viejo mueble del recibidor que el tiempo ha demostrado que fue una buena compra, que un mueble nuevo recién comprado y que no parece que vaya a durar mucho.
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Un buen planteamiento. Vivimos tiempos en que el compromiso está devaluado frente a la búsqueda de la satisfacción permanente fruto de un apetito insaciable alimentado por el comercio.
Yo me compré una cazadora hace 20 años que aún llevo ahora. Evidentemente acusa el paso del tiempo, no tiene el lustre de las prendas nuevas que lucen en el maniquí de un escaparate, pero cuando me la pongo me siento satisfecho con aquella compra y quienes me ven llegar con ella me reconocen inmediatamente. Evidentemente la cuido, no la dejo tirada en cualquier lado y estoy pendiente de que no sufra daños.
Mi hija no para de comprarse chaquetas y cazadoras, ha gastado en 5 años más de lo que me costó mi cazadora, todo le deslumbra a primera vista y sucumbe a la presión de la última moda, y lo peor de todo es que no parece satisfecha, y por mucho que persiga esa satisfacción con nuevos estímulos, estos son solo destellos que apaga un nuevo estímulo.

Javier parece que sea para Carmen como ese estímulo comercial que te incita a gastar en busca de satisfacción, no de felicidad. Lo que no tengo tan claro es lo que Carmen es para Javier. Y para Luis, Carmen parece como esa cazadora que yo tengo, pero tal vez Luis la ha tenido un poco olvidada en el armario, ahora tal vez teme que la prenda se haya echado a perder porque haya descuidado su cuidado.
 
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Pero es que no es un ejemplo que le venga bien a esta situación.
Uno puede tener varias prendas de ropa y utilizarlas con mayor o menor asiduidad pero no sirve de ejemplo. Eso sería si la poligamia fuera una cosa habitual.
A mí lo que haga o deje de hacer con Javier me da igual siempre que antes rompa su relación con Luis.
Lo que no puede ser es lo que está haciendo a sus espaldas, y sin embargo aquí se le han dado palos a Ana cuando es la única que le ha hecho abrir los ojos
 
Siguiendo con el simil. Luis es ese mueble viejo, fuerte, robusto, que durante un montón de años ha dado comodidad, estabilidad y buen servicio, que ha fuerza de verlo a diario ha perdido protagonismo, se ha descuidado y ha cogido polvo. Javier es el mueble nuevo, de diseño, pero hecho con materiales baratos, que de tanto utilizarlo y cargarlo con peso, se rompe más pronto que tarde. Al mueble viejo le limpias el polvo, le das un poco de cariño y lo tienes listo para para otro montón de años. Al mueble nuevo no te queda más remedio que sustituirle por otro.
 
Carlos Sevillista dijo:
Pero es que no es un ejemplo que le venga bien a esta situación.
Uno puede tener varias prendas de ropa y utilizarlas con mayor o menor asiduidad pero no sirve de ejemplo. Eso sería si la poligamia fuera una cosa habitual.
A mí lo que haga o deje de hacer con Javier me da igual siempre que antes rompa su relación con Luis.
Lo que no puede ser es lo que está haciendo a sus espaldas, y sin embargo aquí se le han dado palos a Ana cuando es la única que le ha hecho abrir los ojos
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Es que yo solo tengo una cazadora. Bueno y un abrigo para cuando hace más frío.
 
Además aquí lo que no entiendo es cuáles son las verdaderas intenciones de Carmen, porque no parece que se plantee dejar a Luis y a Javier solo lo ve como un amante. Eso no tiene pinta de que vaya a ir muy lejos.
Y ahora que Luis está sobre aviso, si se quiere a si mismo no debe seguir con ella.
 
elherdau dijo:
Siguiendo con el simil. Luis es ese mueble viejo, fuerte, robusto, que durante un montón de años ha dado comodidad, estabilidad y buen servicio, que ha fuerza de verlo a diario ha perdido protagonismo, se ha descuidado y ha cogido polvo. Javier es el mueble nuevo, de diseño, pero hecho con materiales baratos, que de tanto utilizarlo y cargarlo con peso, se rompe más pronto que tarde. Al mueble viejo le limpias el polvo, le das un poco de cariño y lo tienes listo para para otro montón de años. Al mueble nuevo no te queda más remedio que sustituirle por otro.
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Eso es, con el mueble viejo adquiriste un compromiso y lo mantienes, con el nuevo no adquieres compromiso alguno, en el fondo tiene menos valor y sabes que lo sustituirás por otro en cuanto no te satisfaga, porque sustituirlo es fácil de forma práctica y emocional.
 
Carlos Sevillista dijo:
Además aquí lo que no entiendo es cuáles son las verdaderas intenciones de Carmen, porque no parece que se plantee dejar a Luis y a Javier solo lo ve como un amante. Eso no tiene pinta de que vaya a ir muy lejos.
Y ahora que Luis está sobre aviso, si se quiere a si mismo no debe seguir con ella.
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Ya, por dignidad, imagino.
Aquí está la variable Ana. No es lo mismo sospechar o descubrir uno mismo que tu pareja encuentra más satisfacción fuera que dentro de casa, y que nadie más lo sepa. A que sepas que alguien más lo sabe. Algo que en la intimidad de la pareja tiene una dimensión, cuando traspasa esa intimidad a otros círculos, adquiere otra dimensión diferente.
 
Carlos Sevillista dijo:
Además aquí lo que no entiendo es cuáles son las verdaderas intenciones de Carmen, porque no parece que se plantee dejar a Luis y a Javier solo lo ve como un amante. Eso no tiene pinta de que vaya a ir muy lejos.
Y ahora que Luis está sobre aviso, si se quiere a si mismo no debe seguir con ella.
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Ahira mismo Carmen no sabe lo que quiere, por eso no se decide a actuar.
Es pronto para creer que está enamorada de Javier y que decida dejarlo todo por él. Pero, si la relación continúa por donde va, ese será el camino.
No veo a Carmen llevando una relación paralela de por vida.
O deja a Luis, o ella piensa que su infidelidad es pasajera y no contempla a Javier como pareja.
Aunque, por la forma en que lo llama (ya le apoda "nene") y como espera sus llamadas y encuentros, creo que está en proceso deenamoramiento.
Como ya he comentado muchas veces, Luis está en desventaja. Ahora mismo luchan la rutina contra la novedad y la aventura.
Es difícil que la monotonía le gane a lo espontaneo.
Al menos a corto plazo.
Por eso pienso que Carmen podría arrepentirse en poco tiempo, si se marcha con Javier.
 
Bonanit dijo:
Ahira mismo Carmen no sabe lo que quiere, por eso no se decide a actuar.
Es pronto para creer que está enamorada de Javier y que decida dejarlo todo por él. Pero, si la relación continúa por donde va, ese será el camino.
No veo a Carmen llevando una relación paralela de por vida.
O deja a Luis, o ella piensa que su infidelidad es pasajera y no contempla a Javier como pareja.
Aunque, por la forma en que lo llama (ya le apoda "nene") y como espera sus llamadas y encuentros, creo que está en proceso deenamoramiento.
Como ya he comentado muchas veces, Luis está en desventaja. Ahora mismo luchan la rutina contra la novedad y la aventura.
Es difícil que la monotonía le gane a lo espontaneo.
Al menos a corto plazo.
Por eso pienso que Carmen podría arrepentirse en poco tiempo, si se marcha con Javier.
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Luis ahora que lo sabe, debería tener la decisión tomada de divorciarse de ella.
Yo no estaría con una persona que no me ama y la dejaría libre. Es lo mejor para el.
Que va a ser duro es seguro, pero que creo que Ana lo va a ayudar a olvidarla, también.
Y no me refiero necesariamente a qué tengan una relación amorosa, pero si apoyarlo en estos momentos difíciles y que vea que tiene en ella una amiga y si el tiempo da para algo más, mejor. Siempre y cuando que ella no esté casada ni tenga pareja.
 
A mí me preocupa Luis. Tanto tiempo sin dar señales de vida, desde que se enteró que su mujer le es infiel.
Anda, que si está preparando artefactos explosivos para darles una " sorpresa ", a los amantes 😱😱.
Yo de Carmen, miraría el Audi bien antes de subirme 🤔🤔
 
oteador dijo:
Sólo pongo el mensaje, para que os emocionéis pensando que se ha publicado algo nuevo 😈😈😈... Pura maldad 🤣 🤣
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diabolic.jpg
 
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