Será un placer
No hace mucho de ello, este mismo año. Con esta madura he batido mi récord y es difícil que pueda superarlo porque a esa edad pocas mujeres encuentro de mi gusto disponibles.
La señora es una viuda vecina mía, ahora mismo mientras escribo puedo escucharla en el piso de arriba.
Yo no tenía mucho trato con ella, salvo los saludos en el portal y el ascensor. De hecho tampoco me había fijado demasiado en sus atributos. Una señora mayor del piso de arriba...
Hasta que falleció su marido y mi actual mujer, que si trataba bastante con ella, me dijo que fuéramos a cenar todos juntos a un restaurante Argentino (ella es argentina) para hacerle compañía.
Esa noche si me fijé en sus atributos, llevaba un escote generoso que le marcaban los pezones. Estaba claro que no tenía puesto el sujetador.
El tamaño de sus tetas me atrajo de forma inmediata. Enormes, como me gustan en las maduras.
Ella es bajita y algo regordeta, pero no demasiado, tiene el culo "de pato" como me gustan, grande, pero bien puesto.
Mientras cenamos yo me hice el simpático, para que fuera ganando confianza conmigo. Bebimos varias botellas de vino del bueno y acabamos tomando unos Manhattan en un Pub los tres.
Al habérmela ganado, cada vez que nos veíamos por el patio, nos dábamos dos besos y nos poníamos a hablar un rato.
Quedamos varias veces los tres para cenar, hasta que una vez, mi mujer no pudo acompañarnos porque tenía una cita que no podía cambiar con una amiga suya del trabajo y se quedaba en su casa a dormir.
Nosotros quedamos igualmente, solos, no había problema por parte de nadie.
Mi mujer lo último que pensaría es que a mí me atraía sexualmente esta mujer... lo cual venia de perlas
Pues eso, nos fuimos a cenar y esta vez quise más vino de lo normal. Ella me acompañó y terminó muy contenta...
Nos fuimos al Pub para tomar los Manhattan y allí le saque temas que me dieron juego para sondear si podía o no follarmela
Le dije que si pensaba conocer a alguien, aunque fuera solo para pasarlo bien. Ella dijo que no lo descartaba, aunque le costaría mucho porque tenía en mente a su marido fallecido y bla bla bla...
Conseguí que el tema del sexo fuera recurrente mientras charlábamos y llegó un momento dado en el que noté que empezaba a dejarse llevar mucho por el alcohol y a ser muy picantona con el asunto del sexo
El Pub cerró y como vivíamos en el mismo edificio, le dije que si quería podíamos seguir hablando en su casa o en la mía. Si no tenía inconveniente claro.
Ella aceptó y de forma inmediata me dio un abrazo fuerte estrujando sus tetas sobre mi... diciendo "gracias por ayudarme, lo necesitaba"
Al final fuimos a su casa, allí tenía cosas más interesantes que yo para seguir bebiendo y quería enseñarme su casa.
Cuando entramos me llevó hasta el salón comedor, que lo tenía muy bien amueblado, todo muy clásico. Dijo que si le importaba quería cambiarse y ponerse cómoda.
Cuando llegó, tenía puesto un camisón y un pijama como pantalón, pero en la parte de arriba no llevaba nada, se notaban sus tetas muchísimo, hasta el punto de verse casi transparente.
Trajo una botella de vino cara, la abrió y cuando se agachó para encender una lámpara pequeña, apoyó su mano en mi muslo, muy cerca de mis partes.
Yo vi el percal y automáticamente pensé que podía ir al grano ya y dejarme de tonterías. Estaba muy salido y necesitaba enganchar esas tetazas lo antes posible. Así que sin más rodeos le puse la mano en la cadera y la empuje hacia mí para morrearla. Ella se alejó al principio, me miró y quitándose el camisón, con todas las tetas al aire se lanzó sobre mi morreandome como una posesa, de una forma que me pareció tan exagerada que en parte me hizo gracia.
Tire una mano a sus tetas y otra a su culo. Se bajó el pantalón y no llevaba bragas. Empezó muy nerviosa a desvestirme y enseguida se lanzó a chuparme todo lo que pudo de mi cuerpo hasta que le lleve la cabeza a mi nabo, el cual engulló como si no hubiera un mañana...
Follamos en un sillón y después de unos cuantos orgasmos por su parte, me llevó a la cama de matrimonio de su habitación. Pero antes de tumbarme en ella, saque de mi vista la foto del marido fallecido que parecía estar mirándome de mala hostia...
Cómo notas curiosas que seguro queréis saber, le comí el coño mucho y también el culo, la penetre por el ojete con varios dedos y ella me dijo que por el culo no... a mi, a un enculador nato. Respeté su voluntad entendiendo que ese sería mi siguiente reto.
Me corrí dos veces una dentro del coño y la segunda mientras me la chupaba.
La verdad es que disfruté como un cabron con ella.
Hemos quedado más veces, una de ellas con mi mujer en el piso de abajo.
He conseguido encularla, pero ella termina pidiendo que la saqué antes de correrme, que es lo que aún me falta.
Ahora mismo es una de mis amantes, la más cercana sin lugar a dudas...
A veces quedamos directamente para hablar y tomar un café. Tenemos relaciones entre una y dos veces al mes.
Hace unas cubanas perfectas, chupar la chupa mal, hay que ayudarla con la mano para correrse.
A ver si termino de encularla bien con relleno incluido. Su culo es muy deseable.
A las maduras les suele gustar el sexo anal, pero está se me resiste.
Mi mujer de vez en cuando se toma una café con ella en la cafetería de abajo. Si supiera... pero bueno, si supiera no solo eso sí no más cosas....
