Desde que hab铆a entrado a la tienda le hab铆a echado el ojo.
Aunque cada vez es m谩s frecuente encontrar chicos en tiendas de lencer铆a, siempre me produce un morbo especial imaginarlos tocando esos tejidos y eligiendo alg煤n conjuntito sexy para regalar.
Y aquel no era un hombre, era el HOMBRE
.
Me hice la tonta y me puse a mirar cosas a su lado, necesitaba verlo m谩s de cerca. Ol铆a a un perfume que no hab铆a olido antes pero que me fascin贸.
Ten铆a las manos m谩s sexys que hab铆a visto en mi vida (s铆, lo reconozco, las manos de un hombre son mi debilidad), y un culo que har铆a perder la raz贸n a cualquier mujer.
Nos miramos y por cortes铆a me sonri贸, le devolv铆 la sonrisa y me puse tan nerviosa que todo lo que ten铆a en las manos se me cay贸 al suelo. R谩pidamente me agach茅 para recogerlo y cuando me quise dar cuenta 茅l estaba agachado al lado m铆a ayud谩ndome.
Me encanta provocar, no puedo evitarlo, as铆 que me apoy茅 sobre su muslo delicadamente al mismo tiempo que me inclinaba ligeramente hacia delante dej谩ndole ver mi escote.
Creo que caus茅 el efecto deseado pues carraspe贸 y r谩pidamente me dio las prendas que hab铆a recogido del suelo.
Nuestros dedos se rozaron mil茅simas de segundo y un escalofr铆o recorri贸 todo mi cuerpo haciendo que mis pezones se endurecieran y mi cl铆toris se pusiera en alerta.
Le di las gracias y volvimos a lo nuestro, pero durante varios minutos nuestras miradas no dejaban de encontrarse.
Eleg铆 un conjunto negro de encaje con unas tiras que pasaban sobre los pechos y se cog铆a alrededor del cuello, el tanga era tipo arn茅s y dejaba muy poco por descubrir. Era un conjunto que dec铆a "ven y hazme el amor ya!"
Tengo que decir a estas alturas del relato, y para que entend谩is mi excitaci贸n en ese momento, que una de mis mayores fantas铆as es que un desconocido me quite las braguitas en un lugar p煤blico (por ejemplo un probador...) Y mientras lo miro, 茅l se masturbe para m铆, hasta dejar las braguitas impregnadas con su semen.
Entr茅 en uno de los probadores y empec茅 a quitarme la ropa, dejando la cortina entre abierta, ya que no pod铆a evitar seguir los movimientos del desconocido.
Me prob茅 el conjunto y para m铆 desilusi贸n era un poco grande, pero como no hay mal que por bien no venga, se me ocurri贸 una calenturienta idea.
Mir茅 por la rendija de la cortina y el desconocido me estaba mirando fijamente, al cruzarse nuestras miradas baj贸 la vista r谩pidamente, pero ya no hab铆a marcha atr谩s, as铆 que decidida lo llam茅 sacando un poco la cabeza por la cortina.
- Perdona, te importar铆a ayudarme?
- Si claro - dice mientras se va acercando al probador.
- Te importar铆a traerme una 95 de este conjunto, por favor - y al mismo tiempo que le digo 茅sto, descorro la cortina para que pueda verlo, ( y verme
) y siento como me come con los ojos, est谩 terriblemente sexy con esa mirada lujuriosa. Nene hoy no te escapas....
Tarda a penas dos minutos en volver al probador con el conjunto que le hab铆a pedido, pero no le doy opci贸n a marcharse, le cojo de la mano y lo meto dentro del probador.
No le dejo hablar y pongo mi boca sobre la suya, su lengua marca un ritmo fren茅tico que hace que mi xoxito se ponga tenso y el flujo empiece a resbalar entre los muslos. Sab铆a despu茅s de ver esa boca que no me iba a defraudar.
Me coge por el culo, elev谩ndome sobre su pelvis, y apoy谩ndome contra la pared me devora el cuello y la boca como si fuera un ser hambriento, y yo le correspondo con la misma intensidad.
Me desabrocha el sujetador y besa uno de mis pezones, despu茅s lo lame, sigue con un mordisco para terminar meti茅ndoselo todo en la boca (茅sto me hace soltar un gemido que, a m铆 parecer, ha debido sonar en toda la tienda).
El desconocido me tapa la boca con su mano mientras me deja de pie en el suelo.
Entonces se arrodilla y lentamente va bajando el tanga que llevaba, noto el tacto abrasador de sus manos sobre mi piel y por dentro yo rezo "no pares ahora por favor".
Las braguitas se van enrollando a lo largo de mis piernas y sus manos se deslizan por mis muslos.
Cuando las braguitas llegan a los tobillos, me coge los pies alternativamente para quitarlas del todo y sorprendentemente se las mete en el bolsillo de detr谩s ( pensaba comprar las braguitas que yo hab铆a llevado puestas?), Esto hace que mi cl铆toris est茅 dolorido de las ganas de tener un orgasmo inmediato.
Se pone de rodillas y empuj谩ndome contra la pared coloca una de mis piernas sobre su hombro, mientras la sujeta con sus alucinantes manos.
Mir谩ndome fijamente creo que las piernas no me van a sostener, tiene los ojos verdes m谩s hipn贸ticos que he visto nunca y un fuego en la mirada que s贸lo me hace pensar en correrme. Y vaya que si lo consigue... hunde su cabeza en mi humedad y no para hasta hab茅rselo comido todo, hasta que descargo una corrida en su boca y nota las contracciones de mi xoxito en su lengua.
Entonces se levanta r谩pidamente y me besa, est谩 vez con calma y ternura. El sabor a sexo en su boca me despierta las ganas y sin poder evitarlo le quito el cintur贸n y le bajo los pantalones.
Lleva unos slips rojos de tira el谩stica ancha y puedo comprobar que est谩n completamente empapados.
S铆 nene, est谩s como a mi me gusta, cachondo y dispuesto
Bajo los slips de un tir贸n, metiendo esa deliciosa y perfecta polla en mi boca. Est谩s de pie en el centro del probador y yo de rodillas haci茅ndote una mamada de las que te fuera dif铆cil olvidar. Con tanto juego de espejos te puedo ver en diferentes 谩ngulos desde donde yo estoy y t煤 cara me est谩 pidiendo m谩s.
Me sujetas la cabeza siendo t煤 el que llevas el ritmo, y cuando siento el m谩gico sabor del semen en mi boca, me detengo y te siento en el banco del probador.
Me siento a horcajadas sobre t铆, de frente (no quiero perderme un detalle de esa mirada lujuriosa), y empiezo a moverme arriba y abajo mientras me coges el culo con las dos manos y lo aprietas m谩s y m谩s a t铆, parec铆a que nos 铆bamos a fundir en una sola persona, (al igual que la escultura del hermafrodita yacente).
Intensificamos el ritmo al mismo tiempo que nos comemos uno al otro, un lamet贸n aqu铆, un mordisco all谩 y besos....un mill贸n de ellos.
Empiezas a respirar cada vez m谩s r谩pido y a m铆 me pasa lo mismo.
Siento tu mano caliente sobre mi culo, aumentando el ritmo de las embestidas y la otra me coge por el cuello y me aprieta. Ya me da igual todo y s贸lo pienso en llevarnos a los dos al orgasmo.
Te cojo el cuello con las dos manos y al mismo tiempo que nos besamos, noto como te corres dentro de mi, sintiendo las contracciones de tu cuerpo, entonces ya no puedo demorarlo m谩s y tengo el orgasmo m谩s intenso que he tenido nunca.
Durante unos breves segundos nos quedamos as铆 inm贸viles ... despu茅s poco a poco nos vamos separando y la timidez vuelve a nosotros. Observo c贸mo te vistes mientras te doy las gracias. Me miras y te r铆es...
Te acercas y me dejas un beso en los labios mientras me dices "hasta la pr贸xima".
Sales del probador y entre la cortina y la pared veo c贸mo vas a la l铆nea de cajas y est谩s comprando el tanga que me acabas de quitar.
Sonr铆o y me prometo a m铆 misma que volveremos a coincidir, mientras me relamo al pensar que ma帽ana voy a estar sintiendo c贸mo tu semen vuelve a salir, poco a poco, de mi cuerpo.