Hace unos días al chico con el que estoy quedando. Estuvimos teniendo sexo en su cama un rato por la mañana. Son de estos polvos mañaneros que te pilla el calentón y es imposible resistirse.
Me metí en su cama para "seguir durmiendo", pero le puse el culo en pompa durmiendo en cucharita. Y me quité la parte de arriba "porque hacía calor". Noté cómo me manoseaba las tetas estando ambos de lado, y apreté más el culo contra él. Me bajó los pantalones cortos y sin mediar palabra, me la metió. Yo estaba tan húmeda que entró sola.
Al poco tiempo empecé a moverme yo, estando aún de lado y dijo que no podía aguantarse. Normalmente aprieto las paredes vaginales a voluntad para que me digan que se corren. Eso me gusta mucho. Asi que me la saqué, esperé unos segundos y volví a metérmela. Me dijo que no aguantaría mucho. Volví a sacármela, cambié de postura y me puse encima. Me gusta moverme lento y haciendo movimientos de cadera suaves para dar más placer. Me volvió a advertir que no iba a aguantar.
Asi que bajé y estando él tumbado, me la metí suavemente en la boca. Primero la humedezco mucho (truco para las chicas) y escupo sin fuerza. Al estar muy húmeda es más sencillo que todo sea fluido y no haya sequedad. Que corta el rollo. Y succioné con firmeza y suavidad la cabeza del pene. Mientras tanto con la mano le masturbaba. Suelo apretar bastante, sin hacer daño. A él le gusta así. Y noté cómo empezaba a gemir. Le pasé la lengua repetidamente y de manera suave pero insistente por el frenillo. Le vuelve loco. Y le tocaba los huevos a ratos.
A veces bajaba hasta abajo y notaba el pene en la campanilla. Y volvía a succionar la cabeza con firmeza mientras le masturbaba con la mano. Hasta que me dijo que no podía mas y se corrió dentro de mi boca. He de decir que su semen es de los mejores que he probado jamás. Ni te enteras que acaba de correrse. No sabe a nada. Es espectacular. Casi siempre que se la chupo (no sé cuántas mamadas le habré hecho en medio año, pero sin exagerar habrán sido 200 porque es algo que me fascina) me recalca que nunca antes se la habían mamado con tanta ansia y mimo. Y es algo que siempre que lo escucho no puedo evitar sentir una punzada de orgullo y aumento del ego.