Baños públicos

De adolescente iba mucho con los amigos a mirar tiendas de discos en un centro comercial de la ciudad. Muchas veces teníamos que ir a los lavabos y nos llamaba mucho la atención ver que la gente se dedicaba a perforar las paredes para hacer gloryholes caseros. Cuando la empresa que se ocupaba del centro los tapaba poco tardaban en haber abiertos otros. Era excitante verlos y saber para qué eran usados pero por aquella época nunca me hubiese atrevido a hacer nada. Mi única vez en un lavabo fue en una discoteca años después. Un hombre más mayor que yo, bajito y regordete, me hizo proposiciones. No me gustaba pero tampoco me desagradaba (y era muy educado, eso me decidió) y la situación me ponía a mil así que acepté. Me llevó a uno de los servicios y estuvo un buen rato mamando. El tío quería chupar a saco pero con la particularidad de que no quería lubricarme con su saliva sino con la mía así que yo le escupía en la boca y el se dedicaba a mi polla. Una cerdada pero muy morbosa y no voy a ponerme a juzgar los gustos de los demás, sobre todo si los tengo de rodillas delante. No recuerdo si me corrí en su boca o en el suelo. Lo más excitante fue que se dejó la puerta abierta y ninguno decidimos cerrarla así que cada vez que entraba alguien a orinar se encontraba con el espectáculo. Ya no he vuelto a repetir en ese tipo de sitios aunque sí en público.
 
De adolescente iba mucho con los amigos a mirar tiendas de discos en un centro comercial de la ciudad. Muchas veces teníamos que ir a los lavabos y nos llamaba mucho la atención ver que la gente se dedicaba a perforar las paredes para hacer gloryholes caseros. Cuando la empresa que se ocupaba del centro los tapaba poco tardaban en haber abiertos otros. Era excitante verlos y saber para qué eran usados pero por aquella época nunca me hubiese atrevido a hacer nada. Mi única vez en un lavabo fue en una discoteca años después. Un hombre más mayor que yo, bajito y regordete, me hizo proposiciones. No me gustaba pero tampoco me desagradaba (y era muy educado, eso me decidió) y la situación me ponía a mil así que acepté. Me llevó a uno de los servicios y estuvo un buen rato mamando. El tío quería chupar a saco pero con la particularidad de que no quería lubricarme con su saliva sino con la mía así que yo le escupía en la boca y el se dedicaba a mi polla. Una cerdada pero muy morbosa y no voy a ponerme a juzgar los gustos de los demás, sobre todo si los tengo de rodillas delante. No recuerdo si me corrí en su boca o en el suelo. Lo más excitante fue que se dejó la puerta abierta y ninguno decidimos cerrarla así que cada vez que entraba alguien a orinar se encontraba con el espectáculo. Ya no he vuelto a repetir en ese tipo de sitios aunque sí en público.
Mmmmmmmm que rico
 
Nadie se anima a contar sus experiencias incluso mandar video como algun compañero?
 
Yo he ido en alguna ocasión a los baños del centro comercial Alcalá Norte, donde suele haber movimiento
 
Yo en mi caso destacaría el morbazo que me da ponérmela morcillona para mear y que los de al lao me echen un vistazo de reojo. Además, si al vérmela se empiezan a empalmar ya es lo más.
El exhibicionismo en los WC públicos me pone burrísimo. Ver como los heteros curiosean con las pollas de los demás, o cómo disfrutan enseñándose sin pudor es la caña
 
Nadie se anima a contar sus experiencias incluso mandar video como algun compañero?
Ya nos gustaría que hubiese abundante material espía de wcs, pero para llegar a poder captar esas miradas de reojo a la morcillona del de al lao hay que jugársela y mucho, además de echarle valor
 
Nadie se anima a contar sus experiencias incluso mandar video como algun compañero?
Eso! Eso! animarse a compartir las experiencias, que con lo viciosos que sois seguramente que tenéis historias como para escribir un libro jajajaja
 
Yo también cada vez que puedo me paso por algún baño, a ver qué se cuece... y si no hay espero a que entren... lo mejor es los urinarios de pared, y si esta libre, pilla de los de enmedio..
Tú eres de los míos jejeje.
EL morbazo de poder exhibir tu nabo morcillón y que se vea lo más grande y gordo posible sin que se empalme, y sobre todo, saber que estas siendo mirado de reojo por el de al lao, que encima notas que se le está poniendo contenta al verte... son unos de los pocos placeres que dan los wc públicos jejeje.
 
Ayer fui a unos baños de barcelona con 6 urinarios de pares, 4 a un lado y 2 de espaldas a los otros, solo habia libre uno de los dos, me puse alli, me la saque y cuando me gire un poco la cabeza vi que las 6 personas que estabamos estabamos a lo mismo y nos pajeamos mirandonos entre todos, que morboso. Hoy volvere a ir a ver si se puede hacer algo mas!
 
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