Dibujos de tríos y cuernos

Con el calentón del momento, ella contesto que si que querría vivir lo mismo...
 

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Aquello, termino de convencerla,mientras ella seguía excitada dijo que estaría dispuesta a probar,pese al vértigo que al mismo tiempo sentía por lo que pudiese suceder,pero al ser su marido tan persuasivo,disipo las dudas.
 

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Con la aquiescencia de su querida esposa,el deseoso marido,se pone masno a la obra a ver si consigue verla como a su vecina Karen bien empalada,y para ello contacta con el responsable de "entretenimiento" comentándole que se lo habían recomendado.
 

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La anfitriona que ya se había desprendido de su Top azul mostraba sus majestuosos pechos a Ángelo que por su parte empezó a lamer los pezones que está le acercaba a su boca. Sus pechos eran de una talla 95 similar a la de mi mujer, pero con unas aureolas mucho más pequeñas que las galletas María que lucen en las tetas de ella.

Vixen ya no aguantó más la espera y disipó rápidamente la duda que su entrepierna ya intuía abriendo de sopetón la cremallera del chándal de Marco. Allí duro asomaba una polla algo mayor que la mía, pero muchísimo menor de lo que ella se había imaginado.

Menuda desilusión se llevó, se giró hacia Sara y le recriminó entre risas que le había dado gato por liebre. Ángelo aprovechó la situación y sacó a relucir su enorme pollon evidenciando la diferencia de rabos ante el asombro de Sara y el desconsuelo de mi mujer que se relamía al ver la gran polla que iba a disfrutar su amiga.

Vixen se levantó del sofá y empezó a desnudarse deshaciéndose también de su top y de esas mallas cameltoe de topos azules que tan bien marcan los labios de su coño y que luce habitualmente en el gimnasio, cogió de la mano a Marco y se dirigieron hacía el otro extremo del sofá dónde estaba la otra pareja, allí Marco boquiabierto no recordaba que ese rabo fuese tan enormemente grande cuando lo había visto en las duchas del gimnasio y ante el consuelo de mi mujer contemplaba la monstruosidad del rabo que tenía el niño mientras veía como su pareja empezaba ya a pajearlo preparando lo que ansiosa ya deseaba catar.
 

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La anfitriona que ya se había desprendido de su Top azul mostraba sus majestuosos pechos a Ángelo que por su parte empezó a lamer los pezones que está le acercaba a su boca. Sus pechos eran de una talla 95 similar a la de mi mujer, pero con unas aureolas mucho más pequeñas que las galletas María que lucen en las tetas de ella.

Vixen ya no aguantó más la espera y disipó rápidamente la duda que su entrepierna ya intuía abriendo de sopetón la cremallera del chándal de Marco. Allí duro asomaba una polla algo mayor que la mía, pero muchísimo menor de lo que ella se había imaginado.

Menuda desilusión se llevó, se giró hacia Sara y le recriminó entre risas que le había dado gato por liebre. Ángelo aprovechó la situación y sacó a relucir su enorme pollon evidenciando la diferencia de rabos ante el asombro de Sara y el desconsuelo de mi mujer que se relamía al ver la gran polla que iba a disfrutar su amiga.

Vixen se levantó del sofá y empezó a desnudarse deshaciéndose también de su top y de esas mallas cameltoe de topos azules que tan bien marcan los labios de su coño y que luce habitualmente en el gimnasio, cogió de la mano a Marco y se dirigieron hacía el otro extremo del sofá dónde estaba la otra pareja, allí Marco boquiabierto no recordaba que ese rabo fuese tan enormemente grande cuando lo había visto en las duchas del gimnasio y ante el consuelo de mi mujer contemplaba la monstruosidad del rabo que tenía el niño mientras veía como su pareja empezaba ya a pajearlo preparando lo que ansiosa ya deseaba catar.
👏👏👏👏👏👏👏🥹
 
El masaje transcurre plácidamente y deleitandola a ella,hasta el punto de preguntarle por como era el "especial"
ël entonces les explicó que era un masaje integral donde se perseguía dar el máximo placer y una clara interacción entre "terapeuta" y "paciente" sin ningún tipo de limitación a la obtención mutua de ese placer relajante que se perseguía.
 

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Tras la aceptación de ella ´´el le pidió que se colocase boca arriba,luciendo su esplendorosa desnudez a su vista,y no pudiendo evitar estremecerse por el placer que sentía ante lo que pudiese ocurrir,e inevitablemente,el masajista no podía disimular su excitación.
 

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Ángelo reclamó enseguida las atenciones de Vixen y esta relevó a Sara agachándose y poniéndose de rodillas en medio de ambos chicos empezó a pajear las dos pollas al unísono entretanto la anfitriona se deshacía de su minishort acabando de desnudarse completamente.

Cuando ya tenía ante ella las dos pollas bien duras le indicó a ella que hoy había ganado con el cambio mientras sostenía cada una con una mano evidenciando la abrumadora diferencia de tamaños en las vergas y provocando nuevamente las risas todos.

Entre risas Sara le respondió que, aunque no la creyera Marco tenía una polla mucho más grande que la de su ex marido y que uno de los motivos de su divorcio fue porque este la sorprendió cabalgándolo en su propia cama, y aclarándole que salvo el pollon de Fabi el resto las pollas que se había follado a espaldas de su ex marido eran más bien del tamaño de Marco.

Vixen asintió con su cabeza porque la entendía perfectamente ya que como les había contado ella sabía muy lo que era tener una polla pequeña en casa y que ciertamente Marco la tenía más grande que la mía.
 

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Habiendo constatado la perfecta disposición existente, y con la complicidad silenciosa del marido, se bajo las mallas luciendo ante aquella tímida esposa su polla y se dirigieron a la habitación donde la sentó en el filo de la cama y le acerco la polla a escasos centímetros de su cara...
 

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La orgía proseguía y en un momento ambas ya desnudas se abalanzaron hacía el joven semental abrazándolo desesperadas y empezaron a manosearlo, tocando y palpando lujuriosamente su cuerpo, una agitaba su enorme rabo erguido y la otra frotaba aquellos grandes huevos que colgaban debajo de su pollón, a la vez que con sus lenguas lamían y chupaban sin descanso los pezones del joven como si de las novias de Drácula se tratará mientras miraban lascivamente a Marco que atentamente y sentado en el Chester blanco contemplaba trempado el espectáculo X que estaba presenciando y por lo que parecía ya estaba acostumbrado.
 

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