Así es coincido tanto con Gamber , como con Perez Reverte, y también contigo. Son muy peligrosos. Diría que hasta tienen un ingenio desbocado y especial. En algunos .su tontería llega a no tener fin.«A los tontos hay que ignorarlos», dijo José Manuel. Pero no estuve de acuerdo. Eso, respondí, los hace más peligrosos. Un tonto fuera de control es letal. Se empeñan en estar ahí aunque los ignores, tropezando en tus piernas. Con ellos no hay cordón sanitario posible, pues no hay tonto sin alguna habilidad. Hasta en la RAE tenemos alguno. El caso es que la vida acaba poniéndotelos delante. Y como dije alguna vez, juntas a un malvado con mil tontos y tienes en el acto mil y un malvados».
Arturo Pérez-Reverte (fragmento).
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