A. Seneka
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Gracias a ti, mi desconocido amigo. Tus palabras me alegran sobremanera.Ayer lo acabé!!!....aún sigo en shock!!!!!
Este puto Libro me ha trastocado. Mira que he leido historias de dolor por infidelidad no consentida.
Lo reconozco esta historia me ha marcado!!!.
Buaaaa Dani!!!!!! LE QUIERO!!!!!!....pero a Alba... también!!!!.
Admitirlo compañeros...Alba es para matarla y despellejarla, pero tiene algo que la abrazarias, la empotrarias y reirias con ella.
Siento que todos queremos a Alba por muchoS deseos encontrados de machacarla por cabrona!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Ha de asimilar esto.
Vuestros comentarios son magistrales de verdad y es un placer seguiros a todos atentamente.
A las tantas de la madrugada cuando lo acabé...me quede ....choffff de ánimos. Sensación agridulce.
Ahora recordando partes del libro, comienzo a saborearlo mejor.
Dani y Alba son para mi ya todo un referente.
Alba es para ir al spicólogo!!! y Dani es un rompedor de mujeres pero con su autoestima por los suelos y no se da cuenta de ello. Alba lo sabe muy bien por eso lo mantiene así de atado y haciendo que sea como un micropene con patas!!!. Ella ha de estar siempre por encima de todos.
Cristina ya se lo dijo.....Dani, la tienes NORMAL, ¿me has entendido?, N O R M A L!!!
La escena del vaso de colacao...........pegué un grito de alegria a mitad de la noche y con mi mujer durmiendo al lado!!!
La escenas de como va liquidando uno a uno en la casa del puto Anibal...sobérbio!!!!...........
Me estoy desahogando!!!! perdonad
me bulle la cabeza!!!
maestro Seneka!!!.........................una pasada de obra, GRÀCIES!!!
Me encanta que destaques lo del colacao porque esa escena la disfruté mucho escribiéndola (y porque no se me ocurrieron más putadas inteligentes para ese niñato que si no...)
Lo de la noche más oscura donde va ajustando cuentas con cada uno en su búsqueda... estoy muy orgulloso de ella. Lástima que el final parece que ha eclipsado a esa parte, porque era con la que más ilusión esperaba oír cosas de ella.
Tus palabras me reconfortan mucho mucho. No me ves, pero estoy golpeándome el pecho, enchido de alegría, mientras lanzó un grito de tarzán.
(Ya luego, si eso, me tomo la pastilla antipsicótica).
En serio, gracias por destacar esas partes del relato que están pasando casi desapercibidas y que eran el punto fuerte de la novela (para mí, claro).