Yo últimamente no paro de imaginar a mi mujer arrodillada, casi desnuda, solo con las medias y el tanga. Delante de ella un tío desnudo, de pie, que le acerca la polla. Ver cómo juega con ella, como la lame y la va poniendo más dura, y que el tío le empiece a dar pollazos en la cara, la boca, que ella termina abriendo para chupársela entera, sin manos.
Después de un rato el tío le daría la vuelta, la pondría a cuatro patas, apartando el tanga, acercando la polla para notar lo mojada que está; y entrando despacio, abriéndola, ver su cara y oír sus gemidos mientras la van llenando de polla.
Que le dé un par de azotes, la sujete por la cadera y empiece a empujar, a metérsela entera, a empotrarla, sus tetas moviéndose a cada embestida y sus gritos al correrse, y después que sea el quien se corre, en sus nalgas, sus tetas y otra vez en su boca..