¿Cuál ha sido tu paja más arriesgada?

Uff yo me acuerdo que con 16 años o así que estaba en plena pubertad y salidisimo pajeándome cada media hora un día fui a la biblioteca.

Yo solía ir mucho a la biblioteca de mi barrio puesto que siempre he sido un devorador de libros y allí pasaba muchas tardes leyendo en la sección juvenil, que era una sala separada del resto por unas cristaleras.

La bibliotecaria de entonces era una chica de unos 35 años, delgadita con gafas, buenas tetas pero siempre muy recatada a la hora de vestir por lo cual nunca me había llamado la atención.


Pero este día fue algo distinto. Normalmente en mi ciudad, Pamplona, el verano era alto corto y no muy caluroso, máximo un mes de calor y tampoco temperaturas altas como tenemos ahora. Pero esos días habíamos tenido mucho calor, por lo que supongo que sería el detonante de su vestimenta.

Al llegar a la biblioteca, lo primero que hice fue entrar a la oficina de la bibliotecaria, que era como un pequeño despacho con una mesa, a devolver los libros. Cuál fue mi sorpresa al dárselos que vi que llevaba un jersey como de punto, de estos que tienen bien de huecos entre la tela y mis ojos se salieron de las órbitas al ver que no llevaba nada debajo y se le veían perfectamente las aureolas y los pezones.
Tener que esperar 5 minutos a que comprobase los libros y apuntase en el ordenador que los había devuelto fueron los más largos de mi vida. Yo no podía dejar de mirar sus tetas fijamente y estoy seguro que se me marcaba la polla en el pantalón.

Cuando acabo de rellenar todo y me dijo que ya estaba, fue la primera vez que la mire a la cara desde que había entrado en la oficina. No tenía cara de estar molesta, pero yo me puse rojo al darme cuenta que le había estado mirando tan descaradamente.

Después pase a la sala de lectura, donde como era habitual, estaba yo solo. No podía dejar de pensar en sus pezones y mi polla estaba a reventar. Así que ni corto ni perezoso, mientras hacía como que leía un libro en una de las mesas, me metí la mano en el pantalón y me empecé a tocar.

No dure ni 60 segundos creo yo.

Después con la mano pringosa me levanté para ir a baño a limpiarme y vi que la bibliotecaria me estaba mirando desde su oficina. No me había dado cuenta que desde la otra sala de lectura no había problema porque no podían verme, pero la oficina de ella estaba justo detrás y se veía todo por la cristalera.

El morbo de pensar que me había visto hizo que al llegar al baño a limpiarme me hiciese otra paja más.

Después al acabar el día de lectura e ir a llevarme libros, ya vi que se había colocado una chaqueta por encima del jersey y ya no se le veía nada más.

Creo que estuve como 1 año haciendo pajas pensando en esa paja con ella mirandome.

Supongo que por eso hoy en día me gusta la exhibición jajajaja


Esa es la más arriesgada que recuerdo
 
Soy veterinaria y tenia que rehabilitar un perro pero los dueños querían que fuera en su casa.
Por lo que llene la. Bañera y hice lo mío cuando termine saque al perrito y lo deje con una toalla en un tapete, pero yo estaba caliente , estaba ovulando traía varias verga paradas con mis fotos así que estaba qué quemaba y con la regadera qué tiene como manguera me masturbe y me corrí deli 😅
También en la bici en una avenida principal me corrí 😈
 
Hace años estuve hablando con mi cuñada de sexo y temas picantes. Estaba en el pueblo y cuando se fue, coji la bici y me fui a dar un paseo solo. Supongo que por el calentón de la conversación llego un momento en el que me aparte del camino entre los arboles, me saque la polla y recordándola me hice una buena paja en su honor. Me corrí en mitad del campo bien a gusto. Ni me fije si podía pasar alguien. Es normal que pudiese pasear alguien por ahí.
 
Ha sido por encima de la falda, despacio y suave sentada en mi mesa

Y aparte de estar tocándote ¿hacías algo más? ¿Estabas callada o hablabas en clase?
Porque cuando llegases al orgasmo es difícil mantener la compostura (el tono de voz, moverte, el rostro).
 
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