Me vienen dos a la mente, la primera fue en un bar/pizzería al que íbamos mucho siendo jóvenes, tenía un baño al fondo, si alguien venía, lo veías, por lo que era relativamente fácil hacer algo o rectificar en caso necesario, pues eso, llegó una chica que estaba tremenda, jamona jamona, como a mi me gustan y bueno, me fui para el baño y la puerta casi cerrada le di al manubrio... La otra fue en el coche, de repente veo a una tía que siempre me encantó (vivo en un pueblo pequeño) también estaba bien jamona, di la vuelta hasta que veo que estaba en una zona de aparcamientos, no lo dudé, allí mismo me puse a darle, eso sí, la tía me vio, aunque espero que no se diera cuenta de lo que estaba haciendo....