Al principio me excitaba escuchando a mi mujer como me contaba detalladamente sus encuentros sexuales pasados, especialmente con sus ex y con algunos conocidos, hasta que me decidí a dar el paso de enviar a mi mujer a una misión sexual con un compañero de su trabajo que le gustaba bastante y luego escuché todos los detalles jugosos cuando llego a casa bien usada y rellenita. Mas tarde logré llevar las cosas más lejos y he participado en varios encuentros, en club liberales y en nuestra casa, para convertirme en un buen cornudo y disfrutar de mis cuernos en directo.