El Fruto Prohibido. ( Continuación - 346 )
Tras esos discursos nos pasaron a otro salón donde solían celebrar las bodas y otros eventos, y allí habían montado una barra con pequeñas mesas y sillas, y una música ambiente. Una vez allí se fueron montando pequeños grupos en los que se alternaba conversando y riendo en medio de bromas y comentarios graciosos, tomando alguna que otra bebida.
Así fue que en un momento dado, David y yo nos encontrábamos en la barra tomando una bebida y comentando nuestro parecer sobre como estaba saliendo todo y que en lineas generales pensábamos que esta idea de Celia había sido muy positiva...

Y fue Celia quien se acercó para unirse a nosotros:
----- Bueno que... ¿ Que os parece como está saliendo todo ?
Yo hice un gesto positivo

mientras daba un trago a mi vaso, a la vez que David la agarraba por la cintura y la apretaba mientras le decía:
----- Hay que felicitarte mi amor, te has superado.
Yo hice un gesto cómplice y le dije:
----- Tuviste una genial idea...
Celia sonrió con satisfacción y propuso:
----- Esto habrá que repetirlo más veces... ¿ no ?
David se encogió de hombros y le respondió:
----- Ya se verá.
----- ¿ Como que ya se verá ? Hay que hacerlo más veces... ----- dijo Celia.
----- Siempre que se pueda. ----- respondió David.
Y Celia argumentó:
----- Hay que hacer por poder; creo que es importante tener este tipo de detalles con nuestra gente si queremos ganárnoslos y que estén implicados en sacar el proyecto adelante.
Agarré a Celia del brazo y sonriendo le dije:
----- Déjale, ya sabes el cuento.
----- ¿ Que cuento ? ----- me preguntó.
Hice un gesto de evidencia y le respondí:
----- El poli malo, tu y yo polis buenos.
Ambos nos reímos...



mientras que David me recriminaba:
----- Cabrón, eres todo un cabrón; escocés tenías que ser.
----- Y cántabro. ----- añadí.
----- Eso, escocés y cantabrón... ----- me respondió.
Los tres nos reímos...




cuando se nos acercó toda sonriente Rosa, que venía de la mano de su marido:
----- Hola... ¿ interrumpimos ? ----- nos dijo.
----- Noooo... que va. ----- le respondió Celia.
Y a continuación le aclaró:
----- Estos dos que a veces se llevan como el perro y el gato, pero al final no pueden estar el uno sin el otro.
Las dos se rieron...



mientras que David y yo nos mirábamos poniendo caras de circunstancia...


Tras ello, Rosa miró a su marido y nos dijo:
----- Aquí os le traigo para que le habléis sobre como lleváis la gestión y la dirección de vuestro negocio.
Entonces Celia agarró del brazo a Rosa mientras le decía:
----- Mejor les dejamos solos, y mientras hablan tu y yo nos vamos a tomar algo juntas... ¿ Te parece ?
----- Me parece genial... ----- le respondió sonriendo.
----- Así charlamos de cosas femeninas que es más divertido... ----- añadió Celia.
En cuanto ambas se fueron, David miró a Jorge y le dijo:
----- ¿ Te tomas algo ?
----- Un whisky con hielo.
Luego me miró a mi y me preguntó:
----- ¿ Y tu ?
----- Otra tónica.
David me miró sorprendido y me dijo:
----- Joder, hoy vas de abstemio.
Entonces saqué del bolsillo las llaves del coche y le respondí:
----- Por esto.
Jorge sonrió y nos comentó:
----- Si yo me paso, conduce mi mujer.
Hice un gesto y le respondí:
----- Que suerte tienes, porque la mía nunca agarró un volante.
----- ¿ No conduce ?
Le respondí con un gesto negativo, mientras David sonreía, y poniendo su mano en mi hombro le aclaró:
----- Es motera, pero aquí al amigo le acojonan las motos.
Le aparté y le dije:
----- Anda mamoncete, no me hagas hablar, porque a ti la tuya no te deja acercarte a una moto.
Jorge nos miraba, y sin dejar su semblante serio nos comentó:
----- Veo que os lleváis bien.
David hizo un gesto de evidencia y le respondió:
----- Como tiene que ser. Si somos socios tiene que haber confianza y complicidad entre ambos; es una condición básica para sacar adelante el negocio.
Y yo añadí:
----- Unos socios deben complementarse en todo momento; nosotros tenemos la ventaja que nos conocemos de hace bastante tiempo y prácticamente comenzamos juntos nuestra labor profesional cuando coincidimos en una academia como profesores y así fue surgiendo nuestra amistad.
----- Ya veo, ya...
Y proseguí:
----- Otra condición importante es que vayas creando confianza con tu equipo y con la gente que tienes a tu cargo en el proyecto; es necesario que se impliqué y que de alguna manera también lo sientan suyo, y que en todo momento se sientan parte del mismo.
Me miraba sin estar convencido, y me respondió:
----- Bueno si, todo eso es muy bonito. Pero yo pienso que tampoco hay que dar demasiada confianza,
David y yo nos miramos, y tras un gesto le respondí:
----- Ni mucha ni poca, solo hay que dar la suficiente, porque es muy importante que exista confianza entre tus empleados y tu.
----- Y saber que es lo que piensan y lo que sienten... ----- añadió David.
Nos miraba sin inmutarse a la vez que escuchaba, mientras que yo continué:
----- Para que el negocio funcione de manera correcta debe crearse un buen ambiente de trabajo, que fluya la colaboración como si fuésemos una familia, y eso solo se consigue con confianza.
----- Hoy por ejemplo, esta cena es como un reconocimiento a la gran labor que están llevando a cabo. ----- apuntó David.
----- Y a su implicación y compromiso. ----- añadí yo.
Nos miró como dudando si decir lo que nos quería decir, pero tras unos segundos respondió:
----- Si, si... eso está muy bien, y es todo muy bonito. Pero el jefe debe hacerse respetar, digo yo, sobre todo para que no haya confusiones.
David y yo nos miramos de nuevo, y tras encogerme de hombros le respondí:
----- Bueno, ese es tu punto de vista. Pero puedo asegurarte que aquí nadie ha faltado al respeto ni se ha salido de su sitio.
----- Pero también tendrás que hacer ver y dejar claro que eres el jefe y que tienes tu autoridad... ¿ No ?
Sonreí de nuevo y le respondí:
----- Las cosas salen mejor pidiéndolas por favor que ordenándolas, créeme.
----- ¿ Tan seguro estás ?
----- Totalmente seguro, te lo digo por experiencia. Eso hace que a parte de jefe te vean como un compañero más, con autoridad si. Pero un compañero más en el que poder confiar y al que poder plantear todo tipo de problemas y puntos de vista.
David sonreía mientras escuchaba, a la vez que añadía:
----- Nosotros tenemos bien definidos nuestros papeles; si en un momento dado hay que ponerse serio intervengo yo, y si hay que abrir la mano, aquí se encarga mi socio.
Le notábamos incómodo al hablar con nosotros; estaba claro que quería ganarnos la partida convenciéndonos de que estábamos equivocados y que era él quien estaba en lo cierto, pero no lo conseguía y eso comenzaba a incomodarle; así fue que poco a poco comenzamos a notar que iba sacando esa arrogancia de la que Rosa me había hablado...



Nos miró con cierto aire de superioridad y nos dijo:
----- No se que deciros, porque yo tengo experiencia en dirección y gestión de departamentos, y creo que de esto se algo, porque a parte de mi carrera también tengo un par de masters en estos temas por una universidad de aquí y en otra universidad británica, y ambos los saque con calificación brillante.
Hice un gesto como pensando

" Y así te ha ido... "
David a su vez le respondió:
----- No lo pongo en duda; nosotros solo te estamos comentando como gestionamos nuestro negocio y que por el momento nos va bastante bien con esta gestión.
----- Estamos en continuo crecimiento y ampliando nuestra cartera de clientes. ----- añadí.
Y con cierta sorna nos respondió:
----- Vaya, cuanto me alegro. Os felicito.
Entonces le aclaré:
----- Mira, actualmente somos cinco socios, cada uno con su nivel de participación conforme al capital invertido. El peso de la gestión la llevamos tres de esos socios; David y yo por un lado que nos encargamos de los contratos, más los servicios y atención a los clientes, porque ante todo hay que tener contentos y satisfechos a los clientes; de no ser así estamos perdidos, por eso debemos empatizar con ellos. Por otro lado Celia, su esposa y socia, se encarga de la administración y de la parte contable. Y los tres formamos un equipo de dirección que es un núcleo muy coordinado en el que nadie es más que nadie...
----- ¿ Y que hacen los otros dos socios ? ----- me interrumpió.
----- Pues una dirige la academia de idiomas con mi mujer, y el quinto dirige el nuevo departamento de informática que estamos iniciando y que es su terreno profesional. ----- le respondió David.
Hizo un gesto y comentó:
----- Lo tenéis todo muy organizado.
----- Claro, de no ser así sería imposible sacar adelante este proyecto. ----- le respondí.
----- Aquí siempre tomamos todas las decisiones lo más consensuadas que nos es posible... ----- le aclaró David.
Alzó la mirada torciendo el gesto...

y respondió:
----- Yo por el contrario, pienso que siempre deber haber una persona que esté por encima y que lleve el peso de las decisiones.
----- Ese es tu punto de vista que no coincide con el nuestro. ----- le aclaré.
----- ¿ Cuanto hace que no llevas una gestión de dirección ? ----- le preguntó David.
Miró con expresión molesta...


y le respondió:
----- ¿ Y eso que importa ?
----- Pues si que importa, porque lo que tu planteas hace ya tiempo que no se funciona así en el mundo empresarial; porque hoy generalmente se dirige con otras pautas muy diferentes a las que tu expones.
Ya nos miró molesto y respondió:
----- ¿ Que pretendéis ? ¿ Darme lecciones ?
Otra vez nos miramos David y yo, y tras sonreír le respondió:
----- Aquí no queremos dar lección alguna, solo exponemos nuestro método y nuestra experiencia.
----- Para llevar una gestión con éxito es necesario empatizar con tus empleados. ----- añadí
Y con una sonrisa irónica respondió con prepotencia:
----- El jefe coleguilla, verdad... Supongo que vuestros empleados os tutean.
Nuevamente David y yo nos miramos sonriendo, y le respondí:
----- En mi caso si, y yo mismo lo pido; no quiero que me traten de usted las personas con las que paso un montón de horas todos los días.
----- A mi hay algunos que aún me tratan de usted; pero como muchas veces hablamos en inglés, ya sabes que no hay diferencia entre el tu y el usted de vuestra lengua.
Estaba visto que no podía con nosotros, y que a todos su argumentos encontrábamos respuesta con que rebatirselos, y eso hacía que se sintiese derrotado, lo cual no podía soportar.
Agarró su vaso y de un trago bebió el whisky que aún le quedaba; y según lo terminó, nos miró torciendo el gesto y con una expresión molesta, y nos dijo:
----- Dejo esta conversación... Vivimos realidades diferentes y no nos vamos a poner de acuerdo... Además me molesta le gente que sabe de todo.
David y yo nos miramos sorprendidos porque no nos esperábamos una salida como esta.
Según se retiraba, nos dijo secamente:
----- Buenas noches.
En cuanto se fue , David y yo nos miramos un tanto perplejos.
----- Buuufffff... Vaya personaje... ----- me dijo David.
----- Este nunca trabajará con nosotros. ----- le respondí.
----- No, desde luego que no.
Y mientras negaba con gestos argumenté:
----- Este menda debe tener algún trauma que no consigue superar.
David me hizo un gesto como de estar de acuerdo y me dijo:
----- Seguramente que si porque se le nota mucha frustración, y se ve que no soporta el que a otros les vaya bien y a él no.
Hice un gesto y le argumenté:
----- El incomprendido de todo el mundo está conspirando contra mí.
----- Exacto.
----- El síndrome de Calimero.
David se rió...



y me dio una palmada...
----- Vaya toxicidad que exhibe. ----- le dije.
----- Que siga así... ----- respondió David.
Miramos hacia la sala, y en un lateral le vimos con Rosa; parecía como que discutían por algo, y seguramente que era por nosotros... Jennifer y Celia que estaban al lado se mostraban sorprendidas...


Nosotros nos manteníamos observando en la distancia, hasta que poco después vimos como Rosa le entregaba algo y el tipo se daba media vuelta marchándose sin despedirse de nadie; a la vez que Rosa se quedaba siendo animada por Jennifer y Celia.
Continuará...........................................................................