Estimados, creo que el enfoque que le están dando al relato es absolutamente contrario a lo que debiera ser, y muy negativo de ser usado en forma frecuente.
El trabajo del autor es convencernos de la verosimilitud de los hechos, con una mínima coherencia, y evitando estupidizar a los personajes, no podemos caer en reducir nuestro estándar con tal o cual autor para ser más aceptables sus historias.
Si en el relato hay una asesinato, una violación, o una infidelidad, lo más sano es que usemos los mismos criterios que acostumbramos en la vida real para criticarlos y evaluarlos, nuestra capacidad de tolerancia no puede estar supeditada a la capacidad del autor para presentarnos esos hechos.
Si hay un beso, un morreo, sexo oral, o follada, según un contexto de coacción, drogas o alcohol, cada uno tendrá su opinión para considerarlo un acto infiel, de traición o de deslealtad, y obviamente a partir de ahí veremos si nos ponemos de acuerdo en algo..
No creo que Seneka se refiera a que hagamos "la vista gorda" ante algunos hechos para salvar el relato, más creo que lo suyo es en relación a los personajes, a la necesidad que él tiene de que los entendamos tal como él los ideó, que nos sumerjamos en la profundidad de sus personalidades para comprender las motivaciones que les llevan a cometer lo del relato.